tag:blogger.com,1999:blog-49453911513808549532024-03-13T14:25:37.191-07:00FRAGMENTALIaJanhttp://www.blogger.com/profile/10112360698804083485noreply@blogger.comBlogger252125tag:blogger.com,1999:blog-4945391151380854953.post-1489426880549343382017-01-05T23:53:00.000-08:002017-01-05T23:53:50.595-08:00El Castillo del Amor<span style="font-size: large;"><br /></span>
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiX99X16rptW5QbpvmS6i0gs4WdqUQFoboZ3uA0_Xwi7O7U2TKMgLB9MLtjadfMhWX3UTsUVWoUQnnbQ-uJvIEcNVZIw4nbLAPvdRqP0Fc_C8HQRMxvb9w5E-iiA1kYINthadRvBP9WLxDM/s1600/castillo+2.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiX99X16rptW5QbpvmS6i0gs4WdqUQFoboZ3uA0_Xwi7O7U2TKMgLB9MLtjadfMhWX3UTsUVWoUQnnbQ-uJvIEcNVZIw4nbLAPvdRqP0Fc_C8HQRMxvb9w5E-iiA1kYINthadRvBP9WLxDM/s400/castillo+2.jpg" width="386" /></a></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
Arriba en el centro, el Dios Amor celebra su victoria tras el asedio del castillo. Parte posterior de espejo en marfíl, Renania o París s. XIV.</div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<br />
<span style="font-size: large;"><br /></span>
<span style="font-size: large;">El siguiente texto es un extracto del primero de los artículos que aparece publicado en el número 16 de Revista Digital de Iconografía Medieval. </span><br />
<br />
<br />
<br />
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;"><b><span style="font-size: large;">El <i>Castillo de Amor </i>en las artes figurativas tardomedievales</span></b></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;">(fragmentos)</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;">por</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;"><span style="font-size: large;">Ana Pérez González</span></span></div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">La fórmula iconográfica tradicionalmente denominada
<i>Castillo del Amor</i>
se define
por la distribución de un conjunto de mujeres en lo más alto
de un castillo, las cuales, de
forma cooperativa, interactúan con los hombres que se encuentran
en el exterior, bien para
defenderse de su ataque arrojando flores o,
tras una breve lucha
más o menos violenta
entre ambos sexos, invitarles
a acceder al castillo donde en
ocasiones encontramos a las
parejas ya reunidas. En algunas piezas datadas
a finales del siglo XIV,
el dios alado Amor
preside la escena.
Creemos que el significado de esta imagen,
tradicionalmente interpretada desde el
punto de vista del cortejo amoroso cortesano, debió tener en un principio un propósito
muy diferente del que terminó poseyendo, y que
estaría más en la dirección del poder de
las mujeres en la salvaguarda de su integridad física sexual cuando estas actúan en comunidad. Por ello creemos que quizá el título que correspondería a esta iconografía
sería el <i>
Asalto al castillo de las damas</i>
y proponemos que únicamente en el caso de las
representaciones en las que el dios Amor preside la escena y las parejas de amantes están
unidas, es cuando propiamente
podríamos denominar la escena
<i>Castillo del Amor.</i></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;"><b>Fuentes escritas </b></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">La búsqueda incesante de un
texto o fuente literaria directa que pudiera justificar
esta iconografía, llevada a cabo por parte de
los distintos investigadores, hizo que se
relacionara tradicionalmente con el <i>
Roman de la Rose</i>, obra poética de Guillaume de
Lorris y de Jean de Meung, pero los intentos
de hacer coincidir ambos relatos han sido
infructuosos. Por lo tanto, a día de hoy, consideramos que de haber existido ese relato
que ilustrara o justificara fielmente el asunto iconográfico que aquí
analizamos, hoy por
hoy estaría perdido o inédito. Nosotros, considerando que los esfuerzos frustrados de los
investigadores en la búsqueda de dicha fuente
solo consiguieron lastrar su estudio, hemos
propuesto una revisión del tema, apreciando sus valores formales y asumiendo que ante la
falta de texto que justifique su lectura, su
interpretación dependería de
la variación de los
distintos elementos que la componen.
El primero de los investigadores dedicado al estudio del tema fue el profesor
Loomis. Sus estudios apuntaron la posibilidad de
que esta representación derivara de
algún episodio histórico de la vida real o, en todo caso, de representaciones teatrales,
como las recogidas por las crónicas en varias cortes europeas. La más antigua de la que se
tiene conocimiento tuvo lugar en 1214, en el
festival de Treviso, y fue recogida por
Rolandinus Patavinus. Este autor relata la
costumbre de las doncellas de la villa de
construir, a modo de juego, un castillo. Desde él, las jóvenes se defendían del ataque de
sus atacantes arrojando tartas, peras,
membrillos, rosas, lilas y violetas.</span><br />
<table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: left; margin-right: 1em; text-align: left;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhyIz4cOFgNu27XAzpAFqxZ0Xhwq9v-is8BiFYJhYu-Kin5DMa9nSQm09SybOarznNQ5DGESjQM1wZBOMNbEv9JZZX3zEH7k-cktBw7udgQEAHX6PfHtUfQ5_3qaywT3bqxAbR4rkrKxWDE/s1600/castillo+4.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhyIz4cOFgNu27XAzpAFqxZ0Xhwq9v-is8BiFYJhYu-Kin5DMa9nSQm09SybOarznNQ5DGESjQM1wZBOMNbEv9JZZX3zEH7k-cktBw7udgQEAHX6PfHtUfQ5_3qaywT3bqxAbR4rkrKxWDE/s400/castillo+4.jpg" width="270" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Salterio de Peterborough</td><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><br /></td></tr>
</tbody></table>
<span style="color: #9fc5e8;">Koechlin menciona como posible fuente
para esta iconografía
la costumbre que
existía en el País de Vaud,
un cantón de Suiza, de elevar un castillo defendido por las
mujeres del lugar que tiraban rosas por las
ventanas, mientras que fuera los jóvenes
cantaban y recogían las rosas
en sus sombreros. Una vez que
el castillo era tomado, las
muchachas formaban cortejo con los jóvenes.
Van Marle considera dentro de
los Pasatiempos
medievales “el combate por el
asalto del castillo de amor” como un marco ante
el cual tiene lugar el combate entre los
caballeros armados con lanzas. También en
el capítulo de su estudio dedicado a
<i>El amor</i>,
vuelve a hacer referencia “al castillo o fortaleza del amor”,
e identifica la conquista del
corazón de la amada con la fortaleza que
ha de ser conquistada por el caballero.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">El estudio de Greene
aportó noticias históricas sobre la práctica
teatral
celebrada en
las cortes europeas bajomedievales con motivo de enlaces matrimoniales, en los que se
erigían castillos de madera que
debían ser defendidos por las
damas</span> <span style="color: #9fc5e8;">de la corte ante el
ataque de los caballeros. El autor de este estudio menciona
la recepción y banquete
celebrado en el Palacio de Westminster en 1501 en honor de la futura reina de Inglaterra,
Catalina de Aragón, prometida con el príncipe
Arturo de Gales. Las crónicas mencionan
que fue el compositor, dramaturgo y actor William Cornish el
que promovió la erección
de un castillo de madera, que se colocó sobre una plataforma con ruedas, que en su
interior transportaba a ocho doncellas. Los caballeros, desde otra carroza, procedieron a
asaltar el castillo de las damas,
consiguiendo su rendición por
la fuerza, para concluir el
espectáculo con un baile entre los asaltantes y
las damas, vestidos la
mitad de ellos a la
moda inglesa y la otra mitad a la moda española, como demostración final de la armonía
entre los sexos y las naciones. (...)</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;"><b>Extensión geográfica y cronológica </b></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">El
Castillo del Amor fue una fórmula iconográfica profana que debió gozar de
cierto éxito en la sociedad europea de la
segunda mitad del sigl
o XIV, sobre todo en
territorio francés, si atendemos al número
de piezas localizadas que presentan esta
iconografía o alguna de sus variantes.
Podemos constatar que las más antiguas
representaciones de dicho tema aparecier
on, en cambio, asociadas a libros miniados
procedentes de Inglaterra
hacia el 1300. Además, hemos podido confirmar que el tema
iconográfico del
<i>Castillo del Amor</i>
siguió estando presente
en determinados libros
miniados procedentes del Sacro Imperio
en la primera mitad del siglo XV.</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgJHrOTg280QUI9ewPQ5KTt7ItJynftMgi_7Ny0DnH_WrAoEveoNTAmhZPx3MtupKiLSES279IzIodmQ-1BjetZ6bM_ENmouiXmpzbRlbWQZc0pHY2XGHlyWC-XT2eFImnkQCBOKEsP69ti/s1600/castillo+1.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="318" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgJHrOTg280QUI9ewPQ5KTt7ItJynftMgi_7Ny0DnH_WrAoEveoNTAmhZPx3MtupKiLSES279IzIodmQ-1BjetZ6bM_ENmouiXmpzbRlbWQZc0pHY2XGHlyWC-XT2eFImnkQCBOKEsP69ti/s320/castillo+1.jpg" width="320" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Valva de espejo en marfíl, Francia s. XIV</div>
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">Sabemos que las piezas de marfil que recogen dicha iconografía fueron producidas
desde principios del siglo XIV hasta el sigl
o XV en los talleres de París asociados a la
corte para surtir de piezas a los reyes, los
duques de Borgoña, la condesa de Artois, el
duque de Berry, los de la Trémoille y cualquiera que pudiera
pagar el elevado precio de
las piezas que producían. Como sabemos, estos artículos no solo eran utilizados por los
parisinos, sino que era un objeto demandado por
los viajeros que llegaban a la ciudad.
Estos, quienes probablemente solicitasen estos objetos por su profundo impacto visual y
su rico mensaje simbólico
relacionado, quizá, con las virtudes caballerescas, pudieron
haber contribuido a la difusión y a la popularización del modelo iconográfico del
<i>Castillo
del Amor</i>.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;"><b>Atributos y formas
de representación </b></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">Quizá el carácter de irrealidad que esta
escena plantea –en la lucha imposible entre
mujeres, que por lo general esgrimen flores, contra guerreros armados con espadas–, no
respaldada por un texto que le dé sentido
o explicación inequívoca, es lo que haya
suscitado tanto interés y a la
vez tanta inquietud entre los expertos. Esta hermosa antítesis
surgió en el contexto social de la Baja Edad
Media, en el cual la guerra era una actividad
pública, eminentemente masculina, en la que
las mujeres no tenían la
obligación legal de
tomar parte, razón por la que esta imagen tan impactante pudo alcanzar una amplia
difusión. Por ello, resulta curioso observar la iconografía del
<i>Castillo del Amor</i>
en relación
con la definición del término
amor cortés, que estableció el medievalista Georges Duby,
al considerar que
haría referencia a
“la actuación del hombre joven [...] que asedia, con
intención de tomarla, a una dama, es decir, una mujer casada,
en consecuencia inaccesible,
inexpugnable, una mujer rodeada, protegida por las prohibiciones más estrictas [...] que
consideraban el adulterio de la esposa como la peor de las subversiones”.</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh5UYWaRf9tcpNQydYjv7MOrzuQWTLCjQz24ug1EuSn2bWuB4EW42S834ufnR9d0-yKQtaZkyHXCkIPvDqk4l-Be4vzk9iskwai9GetBKJ-owQdJpiELblHLIihWn3F3-_CNVNllMf2qJh3/s1600/castillo+6.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="306" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh5UYWaRf9tcpNQydYjv7MOrzuQWTLCjQz24ug1EuSn2bWuB4EW42S834ufnR9d0-yKQtaZkyHXCkIPvDqk4l-Be4vzk9iskwai9GetBKJ-owQdJpiELblHLIihWn3F3-_CNVNllMf2qJh3/s400/castillo+6.jpg" width="400" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
<i> Salterio de Luttrell</i> s. XIV</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">De modo que
podemos llegar a entender que la representación iconográfica del castillo, en relación a las
damas que defienden su integridad
desde lo más alto de una estructura fortificada, vendría
a convertirse, de esta manera, en la imagen
visual de un concepto firmemente aceptado y
difundido en la Baja Edad Media.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">Analizaremos los tres elementos formal
es que, en nuestra opinión, articulados
simultáneamente, definen y
nos permiten identificar la
fórmula iconográfica del
<i>Castillo
del Amor</i>. Estos son el castillo de las damas,
las damas guerreras y las flores.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">El castillo de las damas</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">Dentro de la iconografía del amor cortés
propia del gótico europeo es habitual la
representación de damas situadas en lo alto
de un castillo, mientras que los caballeros se
presentan ante ellas. Esta imagen podría relacionarse con la llamada sublimación de la
mujer, según la cual la torre vendría a ser el
recinto protector que asegura cobijo a la mujer, estableciendo un paralelismo entre esta
y un objeto precioso o de valor incalculable
que es importante preservar. Por otro lado, el
castillo o la torre en
el ideario gótico actúan
de pedestal sobre el cual se erige y se eleva
la mujer, en una clara asociación de esta con
los ídolos y el deseo que experimenta el hombre por este, como una forma de idolatría.
En cambio, lo determinante y contradictorio respecto a la iconografía del
<i>Asalto al
Castillo de las damas</i>, es que son un conjunto de mujeres las que lejos
de suscitar la
reverencia de los caballeros, se
ven obligadas a defender la fortaleza ante su despiadado
ataque. De este modo, las
damas, asociadas con un mismo objetivo, colaboran en la
defensa de la fortaleza que las cobija, ocupando
todos aquellos lugares de la construcción
que son susceptibles de ser vulnerados por los atacantes, así como aquellos desde los
cuales es más efectivo el ataque, es
decir, las barbacanas y torres.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">Las damas guerreras</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">Creemos que, quizá, lo más relevante de este tema iconográfico
sea el protagonismo
que adquieren las mujeres en una escena de
acción, las cuales, sobre todo en las
representaciones iconográficas más
tempranas del tema, como la del
Salterio de
Peterborough,
parecen mostrar una postura belicosa
y abiertamente hostil. Las damas se
muestran, por tanto, como individuos fuertes dotados de virtudes e iniciativa propia, que
deciden protegerse en comunidad y no dudan en
utilizar la violencia para conseguirlo.</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiZMumAzpRRdbJHAkBmxLVDNF8hiYifXrzy_kbKFyIiImO5a4v4JD85t3T58NbC7-HZn0ixrU_19b8jQlgcv5uyw-MnUx2rdn5G-ywkx0xRyYwcxY-955WgWC6BDr4dTRFMYw0AxdoJu-jp/s1600/castillo+5.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="371" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiZMumAzpRRdbJHAkBmxLVDNF8hiYifXrzy_kbKFyIiImO5a4v4JD85t3T58NbC7-HZn0ixrU_19b8jQlgcv5uyw-MnUx2rdn5G-ywkx0xRyYwcxY-955WgWC6BDr4dTRFMYw0AxdoJu-jp/s400/castillo+5.jpg" width="400" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
<i> Decretales de Gregorio IX</i>, s. XIII</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">Si pensamos en el antecedente más inmediato de esta idea, un grupo organizado de
mujeres que batalla contra hombres, encontramos una fuerte
referencia tanto literaria
como iconográfica en el mito
grecolatino de las amazonas
o, mejor dicho, el concepto
medieval un tanto exótico que
los escritores, ya sean clérigos o laicos, tenían de las
doncellas guerreras, derivado de los textos
de la antigüedad clásica y adaptados según el
gusto cortesano del momento. Las amazonas
fueron un pueblo de mujeres guerreras,
descendientes de Ares y de la diosa Harmonía, que habitaban una región indefinida,
cercana al Cáucaso, la Capadocia o al Danubio,
según las distintas fuentes, que vivían en
comunidades en las que no existían varones, por lo que tenían que unirse a extranjeros
para procrear, tras lo cual
criaban únicamente a las niñas. (...)</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">Lo cierto es que el mito de
las mujeres guerreras propio
de la literatura grecolatina
entraría en la literatura de
aventuras europea del siglo XII, cuando las novelas francesas incorporaron el mito de<i>
Roman d’Eneas</i>, el
<i>Roman de Troie</i>
y el<i>
Roman de Alexandre</i>. A
través de dichos textos se habría adaptado el mito de las amazonas humanizándolo y
dotándolo de un carácter plenamente cortés, de
modo que las características más agresivas
o masculinas quedaron totalmente diluidas,
a la vez que se acentuaban sus virtudes
femeninas, como <i>
fortitudo,
sapientia
</i> y <i>
pulchritudo</i>, convirtiéndolas en “amazonas
cortesanas”, originales y ejemplares.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">Las flores</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">En todos los ejemplos analizados
que presentan la iconografía del <i>
Castillo del Amor</i>
las mujeres sostienen en sus
manos invariablemente flores, que son arrojadas, como
sustitutivos de proyectiles, sirviéndose de arcos y ballestas.</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjiLxo39vxn3P5akXjHr1UDDnH_UG788PPiv7QzvdN1h6NAwQs2OpbvJEG4E7zmSxGaPOohcU6TNhe6zpFNyhC6O_EsyZBOBW9cn2IncKGNisvzZIRl95ihBxJmJKDvXre9_4aRzx8jvCk2/s1600/castillo+4.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="250" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjiLxo39vxn3P5akXjHr1UDDnH_UG788PPiv7QzvdN1h6NAwQs2OpbvJEG4E7zmSxGaPOohcU6TNhe6zpFNyhC6O_EsyZBOBW9cn2IncKGNisvzZIRl95ihBxJmJKDvXre9_4aRzx8jvCk2/s400/castillo+4.jpg" width="400" /></a></div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">En algunas ocasiones son los
caballeros los que abandonan sus espadas para catapultar bombas florales desde el exterior
de los castillos que tratan de asediar u ofrecen ramos floridos a las damas que acosan, lo
que nos lleva a pensar en la importancia de este elemento iconográfico.
Las flores, en el contexto simbólico del
arte profano medieval, por su naturaleza
hacen referencia a la fugacidad de las cosas y, por tanto,
las encontramos asociadas a la
primavera y a la belleza. (...)</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">En el Medievo el mes de
abril era el mes en que se
producían las celebraciones
nupciales, y ya entonces, al igual que ahora,
estaban íntimamente relacionadas con la
existencia de abundantes adornos florales, hecho que tradicionalmente se suele vincular
con la fecundidad de la naturaleza en relación con la posibilidad de procreación que
imponía el matrimonio. Pero, por otro lado, mucho menos poético, no tenemos que
olvidar que las flores tendrían una utilidad
práctica. A pesar de que los enlaces
matrimoniales se celebraban justo al finalizar
el invierno, cuando se imponía el necesario
baño anual, las flores con su aroma ayudarían a suavizar los fuertes olores de las personas
congregadas para tal celebración.</span><br />
<table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: left; margin-right: 1em; text-align: left;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjKHdsO-HpRqGsdvKr-itnCvjHE2zCjWRw6sG7WXkwvG0jAacNQrkI98fInY8MdxAoxN5cLJY7zIe-eD4GBrd8hRiWvGOZuX1GX6aQw11-1p0f5U4oTCzKGJa_WoEHNmT94Povf0XIECOPh/s1600/castillo+7.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjKHdsO-HpRqGsdvKr-itnCvjHE2zCjWRw6sG7WXkwvG0jAacNQrkI98fInY8MdxAoxN5cLJY7zIe-eD4GBrd8hRiWvGOZuX1GX6aQw11-1p0f5U4oTCzKGJa_WoEHNmT94Povf0XIECOPh/s320/castillo+7.jpg" width="264" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Valva de espejo en marfil (detalle) s. XIV</td></tr>
</tbody></table>
<span style="color: #9fc5e8;">Por todo ello, creemos que es posible que la iconografía del<i>
Castillo del Amor</i>
estuviera relacionada en su gestación, por un lado, con los festejos primaverales de origen
pagano, en los que hombres y mujeres jóvenes recogían flores o ramas floridas para
celebrar la llegada de la primavera y, por otro lado, con las
celebraciones matrimoniales a
las que estos juegos solían preceder. Esto reforzaría la teoría
de la derivación de este tema
en una escena galante y no belicosa. Además debemos recordar en este punto el texto que
publicara Loomis mencionando el dato histórico del festival de Treviso en 1214, lo que
nos invita a contextualizar este hecho no solo
en la primavera, sino también en el ámbito
de las celebraciones prenupciales.
De tal manera, habría que contemplar la posibilidad de
que el modelo iconográfico
del
<i>Castillo del Amor</i>
tenga su origen en la plasmación
de una escena derivada de la vida
cotidiana, relacionada más con los festejos agrarios populares que con el amor cortés
burgués en el que se terminó convirtiendo,
heredada de la tradición popular pagana
grecolatina, tanto en la representación de
las damas guerreras como de los ritos
prenupciales.</span><br />
<br />
<br />
<br />
El texto completo se puede leer en el<a href="https://www.ucm.es/data/cont/media/www/pag-41505/n%C2%BA%2016%20(2016).pdf"> número 16 de REVISTA DIGITAL DE ICONOGRAFÍA MEDIEVAL</a><br />
<br />
<br />
Entradas relacionadas:<br />
<br />
<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2016/10/la-piedra-de-la-locura.html">La piedra de la locura</a><br />
<br />
<br />
.Janhttp://www.blogger.com/profile/10112360698804083485noreply@blogger.com6tag:blogger.com,1999:blog-4945391151380854953.post-43444523740976636062016-11-06T05:40:00.000-08:002016-11-06T05:40:16.104-08:00Guárdame un secreto...<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg35cfNf5gGYpm6wXcT6YIghOFRJbZ2JC1bL1XtxuKYAqzal1lah8ib0tbsQG9htKwaFJAxUlzUlaYYVXg86-GupFwf1l49zp2TwrTHkAdzwcnUI1FIyHeaNvgrDk6zLMzeKmjXEnYugDMl/s1600/candado+10.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg35cfNf5gGYpm6wXcT6YIghOFRJbZ2JC1bL1XtxuKYAqzal1lah8ib0tbsQG9htKwaFJAxUlzUlaYYVXg86-GupFwf1l49zp2TwrTHkAdzwcnUI1FIyHeaNvgrDk6zLMzeKmjXEnYugDMl/s400/candado+10.jpg" width="340" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
TUTAE CUSTODIBUS ISTIS (Por estos se custodian todas las cosas)</div>
<div style="text-align: center;">
Jacob Bosch, <i>Symbolographia sive de arte Symbolica</i> (1701) </div>
<br />
<br />
<br />
<span style="font-size: large;">Autores que durante el Renacimiento escribieron tratados sobre las normas que
debían regir el arte de los emblemas, recomendaban la creación de
imágenes enigmáticas que despertaran la curiosidad pero sin llegar a un
nivel de dificultad que impidiese desvelar su significado. La complejidad
tenía que ser calculada para que el lector culto tuviera la satisfacción
de resolverla, convirtiéndose en el medio visual por el que obtenía una lección de índole moral o la revelación de una verdad última. El candado de combinación, compuesto por varios anillos
con letras grabadas que sólo se abría al formar la palabra correcta, fue
uno de los objetos que se adecuaban muy bien a esos requisitos,
atrayendo a muchos emblemistas que lo utilizaron para diferentes significados. Veamos algunos de ellos.</span><br />
<br />
<br />
<br />
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;"><span style="font-size: large;"><b><i>¡Guárdame un secreto... O deséame suerte!</i></b></span></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;"><span style="font-size: large;"><b><i>Posibilidades emblemáticas de </i></b></span></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;"><span style="font-size: large;"><b><i>un ingenioso artefacto</i></b></span></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;">(fragmentos) </span><br />
<span style="color: #3d85c6;">por</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;"><span style="font-size: large;">José Javier Azanza López</span></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;">Universidad de Navarra</span></div>
<br />
<br />
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">EL CANDADO COMO DEPOSITARIO DE UN SECRETO</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">Por la dificultad que ofrece la apertura de su mecanismo y la seguridad con que protege los objetos cuya custodia le son confiados, el candado de combinación ha simbolizado la idea del secreto que debe guardarse, aplicándose en muy diferentes ámbitos. Uno de ellos es el religioso-moral, como podemos comprobar en <i>Lux Evangelica</i>, obra del jesuita Enricus Engelgrave en la que los misterios evangélicos se transforman en enigmas simbólicos ilustrados con emblemas, acomodados a los distintos momentos de la liturgia (Engelgrave, 1655: 215-227). El emblema XVII muestra en su pictura una estancia con una mesa cubierta por un rico tapete, sobre la que se dispone un arca sellada con un candado de combinación. </span><br />
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjQUdNao8yvQdABLokVzSGNXSsSpzaswyDQgc8kJb_JnMXIYSa5KtnL3nzYcfnQsZZuakM_efM1QcIo_WXFK7NuTEfgzbQaQ1BeXbj-GO0aAFlDOIdTQgIws6mWJccRNjM_m0xMBX3edbX3/s1600/candado+1.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjQUdNao8yvQdABLokVzSGNXSsSpzaswyDQgc8kJb_JnMXIYSa5KtnL3nzYcfnQsZZuakM_efM1QcIo_WXFK7NuTEfgzbQaQ1BeXbj-GO0aAFlDOIdTQgIws6mWJccRNjM_m0xMBX3edbX3/s400/candado+1.jpg" width="246" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Enricus Engelgrave, <i>Lux Evangelica </i>(1665)<i><br /></i></div>
<div style="text-align: center;">
Emb. XVII</div>
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">En la parte superior figura una breve sentencia evangélica: <i>«Nemini dixeritis»</i> (No contéis a nadie), correspondiente al acontecimiento de la Transfiguración
del Señor en el Tabor, cuando ordenó a
Pedro, Santiago y Juan que mantuvieran
en secreto la visión que habían contemplado hasta que no resucitase el Hijo de
Dios. El mandato divino se ejemplifica
así mediante el candado de combinación que custodia el valioso contenido
del baúl. En la parte inferior queda una
nueva frase,
<i>«Pandit secreta loquendo»</i> (Hablando se descubre el secreto), que antecede al domingo en el que se proclama el
evangelio, y a una explicación que relaciona éste con la imagen emblemática y
con la enseñanza moral que Engelgrave
pretende extraer de todo ello: «Sobre el
secreto que hay que guardar. Para que la
lengua de un candado de ruedas no divulgue nunca las cosas secretas que hay
que mantener en lo más oculto de nuestro interior».(...)</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">Pero el candado como símbolo del secreto se extiende igualmente a otros ámbitos
como el amatorio, si bien no exento de connotaciones moralistas. Así queda de manifiesto en
<i>Sinnepoppen</i>
(1614), colección de pequeñas piezas de contenido moral que se convirtió en el libro de emblemas más popular del Siglo de Oro neerlandés, obra
de Roemer Visscher. Los 183 emblemas de
<i>Sinnepoppen</i>
se distribuyen en tres partes,
llamadas
<i>Schocken</i>,
y en su configuración definitiva intervino su hija Anna, quien a
partir de la segunda edición (1620) añadió a cada grabado el pequeño epigrama que
figura a los pies de la
pictura
(Schama, 1991: 408-410; Van Vaeck, 2005: 203-223).
Llama nuestra atención el emblema XXIX del primer
Schocken
que, con el lema
<i>«Zy weet ‘tsecreet»
</i> (Ella sabe el secreto), muestra, sobre un fondo paisajístico, un candado de combinación sostenido por una cinta, cuyas letras componen la palabra
ISRAE L, dejando un espacio libre entre los dos últimos caracteres (Visscher, 1614:
29).</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjVidGLyVprFEjrjRlgqiEHmqCQw2WjW1gvkEjsiXMTIYG_AopWmGHZBFHHnXA33LgK_vmHXu7JzTzfDrUORqlDhKZscRrzSaoMQJJtBID5WHRvtyWPIGbmnwy8uCRPs_CKML6bzciOUfSC/s1600/candado+2.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjVidGLyVprFEjrjRlgqiEHmqCQw2WjW1gvkEjsiXMTIYG_AopWmGHZBFHHnXA33LgK_vmHXu7JzTzfDrUORqlDhKZscRrzSaoMQJJtBID5WHRvtyWPIGbmnwy8uCRPs_CKML6bzciOUfSC/s400/candado+2.jpg" width="283" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Roemer Visscher, <i>Sinnepoppen
</i> (1614), embl. XXIX</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">Como resulta característico de su obra, Visscher recurre a un objeto de
la vida cotidiana holandesa –S. Sebastián (1995) ha aludido a
Sinnepoppen
como diccionario iconográfico que bien pudo convertirse en apoyo literario para multitud
de composiciones pictóricas contemporáneas a la obra–, en este caso un candado de
letras, que según dice en su explicación podía verse a diario protegiendo los abastos en puertos y mercados. Afirma el autor holandés que el candado es símbolo de
aquellos enamorados que esconden su amor y lo mantienen en secreto, de manera
que a menudo prefieren morir antes que darlo a conocer; por tal motivo, su sentimiento puede convertirse en una enfermedad de la que es necesario sanar, si no se
quiere acabar siendo esclavo del amor. (...)</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">EL CANDADO, ENTRE LA FORTUNA Y EL TRABAJO</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">(...) El candado de combinación asociado
a la idea de fortuna o trabajo trascendió
el ámbito de la literatura emblemática
italiana en fechas tempranas. En 1612,
Henry Peacham publicaba <i>
Minerva Britanna</i>, considerado como el más im-
portante libro de emblemas compuesto
en Inglaterra (Bath, 1994;
<i>The English
Emblem Tradition
</i>, 1998). Se trata de una
colección de 206 emblemas divididos
en dos partes (100 y 106 emblemas respectivamente), en los que mote y
pictura
se acompañan de un texto moralizante
en verso, convirtiéndose en un manual
de comportamiento. Entre las diversas
influencias que pueden rastrearse en la
obra se encuentran las
Imprese illustri
de
Camilli, como ha puesto de manifiesto
Höltgen (1986: 98-102) a propósito del
emblema 67 (
<i>«Mihi conscia recti»
</i>), incluido en la primera parte. Podemos constatar igualmente la relación entre ambas en el emblema 180 de la segunda parte, que
muestra el candado de combinación sobre un fondo paisajístico, acompañado de una
filacteria que repite el lema
<i>«Sorte, aut Labore»</i>.</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj4HsS07RDfM-AjqwRRyManIS3mxkDWQ47vxm9_BJvgeOhcYb-3NIo_sbJwakQKiIfJgQoE0yHeUeaamJ02odieIm1pR6nLcIgGafT8n9kypaMkcgThE6xJQzxVRe69I5AZeO1IjWeaf65n/s1600/candado+9.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="297" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj4HsS07RDfM-AjqwRRyManIS3mxkDWQ47vxm9_BJvgeOhcYb-3NIo_sbJwakQKiIfJgQoE0yHeUeaamJ02odieIm1pR6nLcIgGafT8n9kypaMkcgThE6xJQzxVRe69I5AZeO1IjWeaf65n/s400/candado+9.jpg" width="400" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Henry Peacha, <i>
Minerva Britanna.</i></div>
<div style="text-align: center;">
Segunda parte embl. 180 </div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">El significado se explicita en la
breve composición poética, que en este caso no queda personalizada en Honorio de
Belli, sino que se extiende en una consideración moral en torno a la necesidad del
trabajo en la vida. Significa Peacham que quien no ha sido bendecido, por nacimiento
o por fortuna, con los medios necesarios para poder vivir, debe procurar su bienestar
mediante el trabajo; pues aunque muchos han sido elevados cuando menos lo espe-
raban, los bienes conseguidos fácilmente a menudo desaparecen con la misma rapidez
con que se han recibido, mientras que todo cuanto se logra con esfuerzo cuenta con
la bendición de Dios (Peacham, 1612: 180).
</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">LECTURA E INTERPRETACIÓN DEL CANDADO EN CLAVE TEOLÓGICA</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">(...) No deja de resultar sorprendente la
aplicación de un objeto mecánico para tratar de explicar de forma sencilla y cercana
algunas verdades de la fe que entrañan suma complejidad.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">Una de ellas es la virginidad perpetua de María, que fue Madre de Cristo
sin perder su pureza. De nuevo se cruza
en nuestro camino Silvestre Pietrasanta,
considerado uno de los pioneros en la difusión de la teoría de las empresas fuera
de Italia. En su obra
<i>De symbolis heroicis</i>,
los ejemplos se organizan a lo largo de
una nueva ordenación jerárquica según
la cual las empresas de gobernantes y
guerreros van precedidas de las sagradas,
cuyo propósito es poner de manifiesto
los misterios de la fe. En consecuencia, el
Libro Primero se inicia con la serie de los
<i>Divorum
Symbola</i>
dedicados a los personajes sagrados, en particular a la Virgen María,
a quien corresponde la primera empresa, compuesta por el lema
«<i>Uni patet Verbo</i>»
(Una sola Palabra lo abre), la
pictura
, que muestra un candado de cilindros giratorios,
y un breve epigrama que contribuye a esclarecer el significado de la yuxtaposición
verbo-visual, dado que mote e imagen, por sí solos, resultarían ambiguos.</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjDLBld7M-WDlfrZ74FYkdtk7dLHjmSdfsSvKd_Fj_ZWcW87YkQ3rkFOSxSxQMJF4p1rqrmcfq74PVF2qy5siuxZu4tIilrp6YGmNun2YTP380cQ97uMVwOPdZcQJmeJfP9t7CHuxVHZ2XN/s1600/candado+3.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="282" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjDLBld7M-WDlfrZ74FYkdtk7dLHjmSdfsSvKd_Fj_ZWcW87YkQ3rkFOSxSxQMJF4p1rqrmcfq74PVF2qy5siuxZu4tIilrp6YGmNun2YTP380cQ97uMVwOPdZcQJmeJfP9t7CHuxVHZ2XN/s400/candado+3.jpg" width="400" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Silvestre Pietrasanta,
<i>De symbolis heroicis</i></div>
<div style="text-align: center;">
Libro primero, empresa primera</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">Apoyándose en Jn 1,14 («Y la Palabra se hizo carne, y acampó entre nosotros»), explica el jesuita italiano que mediante el candado se representa a la gran heroína a la
que el Ángel del Señor llamó Madre, y a la vez conservó intacta su virginidad; pues
al igual que aquél tan sólo se abre cuando las letras forman una palabra particular,
así también el vientre virginal de María se abrió únicamente para acoger la Palabra
Divina (Pietrasanta, 1634: 3).</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">El texto conecta así el misterio de la Encarnación con un objeto de uso cotidiano,
un candado, que recibe un nuevo y trascendental significado mediante un discurso
pedagógico y un proceso de metamorfosis asombrosamente capaz de unir lo humilde
y lo sublime (Catellani, 2008: 39-51). Como significa G. Arbizzoni (2007: 20-21), la
capacidad expresiva de los símbolos parece alcanzar un punto culminante en este tipo
de empresas en las que por medio de un ejemplo de comprensión humana resulta
posible acercarse a la verdad divina, gracias a la línea seguida por los tratados involu-
crados en la vinculación de empresas al antiguo lenguaje de los jeroglíficos.
A partir de la empresa de Pietrasanta, la imagen del candado de combinación
alcanzó cierta difusión en el ámbito de la literatura emblemática de la Compañía de
Jesús. (...)</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">En ocasiones toda una
empresa de Pietrasanta –lema y
pictura
–
vuelve a aparecer en
Imago;
en otras sin embargo se trata únicamente de semejanzas o
conexiones más sutiles, como la que nos ocupa. La empresa
<i>«Ratio conscientiae Superiori
ad nutum reddenda»</i>
(Rendimiento de conciencia que se debe a los superiores), con
el mote
«Tantum opus est verbo»
(Tan bella es la palabra), representa un gran corazón
cerrado por medio de un candado de combinación.</span><br />
<br />
<div style="text-align: center;">
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgD3zmUfLt9mo8w0KMlRhbjq3IgWqrZ6pElsAT22_u1fgVdDYMKrJW4c9BztMJSECdsFFKRBJdoTiKjMDilVOMYKjl9uzujX7CHDlNltXX2su_Ij48dyL_pkcR420AeKnT2ndTWYnbZleBW/s1600/candado+11.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgD3zmUfLt9mo8w0KMlRhbjq3IgWqrZ6pElsAT22_u1fgVdDYMKrJW4c9BztMJSECdsFFKRBJdoTiKjMDilVOMYKjl9uzujX7CHDlNltXX2su_Ij48dyL_pkcR420AeKnT2ndTWYnbZleBW/s400/candado+11.jpg" width="393" /></a></div>
<i>Imago Primi Saeculi, </i>1640</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">La empresa explica cómo
el corazón de los novicios sólo puede ser abierto por las palabras adecuadas y sinceras
del Superior, que deben entenderse como la combinación del candado. En esta ocasión, en Pietrasanta se encuentra únicamente la fuente iconográfica, el candado, por
cuanto el mote y el sentido final varían (
Imago Primi Saeculi
, 1640: 202). (...)</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">Un nuevo significado del candado en clave teológica es propuesto por el teatino
Paolo Aresi en
<i>Delle sacre imprese</i>,
obra en seis libros compuestos entre 1615 y 1635, en cada uno de los cuales aborda de ma-
nera secuencial asuntos relacionados con
la Divinidad, los santos, las virtudes y los
vicios. Aresi concibe la empresa 34 del
Libro Cuarto (primera parte) en elogio
y alabanza del Santísimo Nombre de
Jesús. Protagoniza la
pictura
un candado
de combinación –buena muestra del in-terés del autor por aquellos objetos que
contienen un mecanismo–, acompañado
en esta ocasión del lema <i>
«Eruditus in verbo
reperiet»</i>
(Al que atiende a la palabra le irá
bien), extraído de los Proverbios 16, 20.</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg8gWDiCrvNp1PUfqWNsnUPYr6qnbENSeaL-SXaCHveXCYVjUacMmG63wcSs34G24dv2tfrlzV0jHs5O9z8_vmruVhf4KxxqiLECIThVhKObAyxS44oGafgRyvrCPTIPCDjjPDEKchIdcoG/s1600/candado+7.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="325" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg8gWDiCrvNp1PUfqWNsnUPYr6qnbENSeaL-SXaCHveXCYVjUacMmG63wcSs34G24dv2tfrlzV0jHs5O9z8_vmruVhf4KxxqiLECIThVhKObAyxS44oGafgRyvrCPTIPCDjjPDEKchIdcoG/s400/candado+7.jpg" width="400" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Polo Aresi,
<i>Delle sacre imprese</i> (1630)</div>
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">La octava real que precede a la
extensa
subscriptio
resume el sentido de la misma, al significar que en los círculos del
candado se esconde y da vueltas, como si de un laberinto se tratara, el nombre que
posibilita su apertura; pero el Padre Eterno no quiere que permanezca oculto a los
hombres aquel gran Nombre con el que se abren los cielos. El Nombre de Jesús es
Divina Elocuencia, y en Él debemos depositar nuestra confianza para alcanzar la vida
eterna (Aresi, 1630: 61-81). (...)</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">EL CANDADO COMO DIVISA PERSONAL E INSTITUCIONAL </span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">(...) Asimismo, el candado de combinación puede adaptarse como empresa de
una institución. La
<i>Accademia dei Raffrontati</i>
de la ciudad italiana de Fermo, instituida en 1594 por Girolamo Alberti,
tenía por empresa un candado formado
por varios anillos, en cada uno de los
cuales figuraban grabadas diferentes letras
del alfabeto, con el mote:
«Rite junctis»
(Debidamente unidos). El motivo de tal
elección se encuentra en el propio término
<i>raffrontare</i>
(comparar, cotejar) pues, al
igual que el candado se abre con facilidad
al colocarse correctamente sus letras unas junto a otras, así también el mérito y la fama
de la Academia se lograrán de la unión y esfuerzo intelectual de todos sus miembros.
El candado como divisa <i>
dei Raffrontati</i>
es recogido por Giovanni Ferro en su
<i>Teatro
d’Imprese</i>
(Ferro, 1623: 455-456), y de ello se harán eco más adelante autores
como Picinelli o Bosch.</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiC7I5dYhpqXsSJgah5YdLtHXfKrrjhDTB_1b_cbF9chAJpV335q7Fn0SSJhwq3dONjRDowwdDqgxGJ1-ENHs_D84MbQc1Ho-kx3pHXMY7Zvu9BHeJeH6sA9z7mRE-o2aVGeD5a5OK8sShx/s1600/candado++12.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiC7I5dYhpqXsSJgah5YdLtHXfKrrjhDTB_1b_cbF9chAJpV335q7Fn0SSJhwq3dONjRDowwdDqgxGJ1-ENHs_D84MbQc1Ho-kx3pHXMY7Zvu9BHeJeH6sA9z7mRE-o2aVGeD5a5OK8sShx/s400/candado++12.jpg" width="356" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Giovanni Ferro, <i>Teatro d'imprese</i> (1623)<br />
<br />
************************<br />
<br />
<br />
<div style="text-align: left;">
<a href="http://www.emblematica.es/index.php/publicaciones/anejos-de-imago/anejo-2"> Lectura completa del artículo en Anejos de "Imago", 2</a></div>
<div style="text-align: left;">
<br /></div>
<div style="text-align: left;">
<br /></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="font-size: large;">Recuerdo a los lectores de Fragmentalia, que en mi <a href="https://www.facebook.com/joaquin.huertastamayo">Facebok</a> estoy publicando regularmente emblemas con comentarios. </span></div>
<div style="text-align: left;">
<br /></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="font-size: large;">. </span> </div>
</div>
Janhttp://www.blogger.com/profile/10112360698804083485noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-4945391151380854953.post-24040587214165568062016-10-24T08:43:00.000-07:002016-10-24T08:43:04.690-07:00"Gryllas"<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgOkHST94qFJBK7W4sW4TVXgloUZxGTAtBNHsvKPV9o7mzIKNyHA9Mx72nOxU3V-ZgV7yRo2UtyMzVxseE98JtHqtQHveyTFjcjlCGlc81NnN2X5dkUBgg-QAmer_GsW8TRJbbYZJwj7N_t/s1600/gryllas+1.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgOkHST94qFJBK7W4sW4TVXgloUZxGTAtBNHsvKPV9o7mzIKNyHA9Mx72nOxU3V-ZgV7yRo2UtyMzVxseE98JtHqtQHveyTFjcjlCGlc81NnN2X5dkUBgg-QAmer_GsW8TRJbbYZJwj7N_t/s640/gryllas+1.jpg" width="388" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Marten de Vos, <i>La tentación de San Antonio</i> (detalle)</div>
<br />
<br />
<span style="color: #ffe599;">"Sí, el mundo de los monstruos está con
nosotros. Nos persigue; forma, acaso, las raíces más profundas de
nuestra civilizaciónl. Más aún, nos es consustancial. Nos atreveríamos a
decir que, el <i>Mare Tenebrarum</i> (Mar Tenebroso), lo llevamos todos dentro del alma… O, aún más, si queréis: el monstruo somos nosotros mismos."</span><br />
<br />
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #f1c232;"><b>Guillermo Diaz-Plaja</b>, <i>Los monstruos y otras literaturas </i></span></div>
<br />
<br />
<br />
<span style="font-size: large;">En esta entrada dos textos que se introducen en el mundo de las "gryllas" (o "<i>grylles</i>" en lengua francesa), término con el que son conocidos los seres grotescos y monstruosos que pueblan tantas obras de arte a lo largo de la historia, centrándose en esta ocasión en el período que va del gótico al Renacimiento. El primero es básicamente una escueta revisión de estas representaciones en la obra de El Bosco. Le sigue a continuación un inspirado e inquietante fragmento de una de las obras del filósofo francés Michel Foucault, para quien esas enigmáticas y fascinantes representaciones en su más diabólica expresión, revelan al hombre aspectos de su propia verdad.</span><br />
<br />
<br />
<br />
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;"><i><b><span style="font-size: large;">Las gryllas al final de la Edad Media</span></b></i></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;">por</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;"><span style="font-size: large;">Jurgis Baltrusaitis</span></span></div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhTHksYYMT9dFvY8Y_KbXkTPh98ceX9UvNWlmv7zt4a5DOgnZjl0ENEApZc3qTlxjtqUcNYVFxqDpfz3rFd9uqLZoMcAq0o9Vxht_5zypWrA1JBhXDB5i-npxUkm2H9j76Fr-7mIkdAzK8G/s1600/gryllas+1.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhTHksYYMT9dFvY8Y_KbXkTPh98ceX9UvNWlmv7zt4a5DOgnZjl0ENEApZc3qTlxjtqUcNYVFxqDpfz3rFd9uqLZoMcAq0o9Vxht_5zypWrA1JBhXDB5i-npxUkm2H9j76Fr-7mIkdAzK8G/s1600/gryllas+1.jpg" /></a></div>
<span style="color: #9fc5e8;">Dos elementos caracterizan el último estadio de la grylla gótica: por una parte, una descomposición; por otra, una vida todavía más intensa e impetuosa. A menudo el ser descompuesto se descompone en las inicales y viñetas de los siglos XV y XVI. Las cabezas, las caras y las cimeras se separan unas de otras. Los trazos o la curva de una letra dividen las máscaras de una cara doble. La cabeza de un animal ya no se suelda detras de la cabeza humana, sino que simplemete se yuxtapone. A veces, el cuello del pájaro que sale de cráneo está como desgarrado. Todas las partes quedan en su lugar, pero sin formar un organismo. En la decoración de los libros, se desmonta la bestia. Pero esta evolución es secundaria. En líneas generales, ésta se caracteriza durante este periodo por un realismo brutal y desbordante. Nadie como El Bosco definió al monstruo con tanta precisión en sus detalles ni inverosimilitud en su conjunto.</span><br />
<table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: right; margin-left: 1em; text-align: right;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjBVMJbz1NsJT1JJavusuxROrCOyvqjCAHUGKLw6-BoQvPvSwrpPMNxuqssXiThp1tb_3pD7T9A_kVdWlsk2X675UMNbmBOPvsWRSD8SwDTDSJJqs2JjlaM2RCXri5zy0IScDrZg5aW94TF/s1600/gryllas+1.jpg" imageanchor="1" style="clear: right; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjBVMJbz1NsJT1JJavusuxROrCOyvqjCAHUGKLw6-BoQvPvSwrpPMNxuqssXiThp1tb_3pD7T9A_kVdWlsk2X675UMNbmBOPvsWRSD8SwDTDSJJqs2JjlaM2RCXri5zy0IScDrZg5aW94TF/s320/gryllas+1.jpg" width="228" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><i>Jardín de las delicias</i> (detalle)</td></tr>
</tbody></table>
<span style="color: #9fc5e8;">En El Bosco, las gryllas son numerosísimas y toman todas las formas: la grylla-pájaro, la grylla-insecto con una cara humana sobre el tórax como algunas moscas de las gemas antiguas, caras dobles, personajes con una nariz sobre la espalda, acéfalos, cabezas con piernas, esta últimas especialmente numerosas. Ya no se trataba de nobles máscaras grecorromanas ni de figuras grotescas de extravagancias marginales, sino de verdaderos retratos.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">Caras abotargadas de pesado mentón y ojos inexpresivos, caras huesudas crispadas por la angustia, cabezas sonrientes de vividores y de personajes burlescos, circulan libremente ajustadas a las patas. Su natural es todavía más desconcertante que si fuesen caras monstruosas. En el <i>Retablo de los Eremitas</i> (Venecia, Palacio Ducal), sobre el panel izquierdo y en primer plano, una cabeza de mujer con botas mira de modo severo y casi patético.</span><br />
<table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: left; margin-right: 1em; text-align: left;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgDLycnOCH6AO82opcGv4OdfOuPe46cec71j8n_Ssz4aNYChxo4JkeDxZKh5EN7GhneV98B0xSa5rI58efU-7bqH7jugw9ZjfZlY-4er4LnMPxMGiZn_L3YDwoxz4n-GCtRvAqO1mi1XYr2/s1600/gryllas+1.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgDLycnOCH6AO82opcGv4OdfOuPe46cec71j8n_Ssz4aNYChxo4JkeDxZKh5EN7GhneV98B0xSa5rI58efU-7bqH7jugw9ZjfZlY-4er4LnMPxMGiZn_L3YDwoxz4n-GCtRvAqO1mi1XYr2/s320/gryllas+1.jpg" width="224" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Retablo de los eremitas (detalle)</td></tr>
</tbody></table>
<span style="color: #9fc5e8;">Según la moda de la época, está rodeada por un velo blanco, pero, encima, se alza un buho en su nido, como una cimera ornitoforme.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">En El Bosco, los cascos se convierten muchas veces en seres animados enteramente independientes. En un croquis de Oxford, un yelmo brinca como una rana; otro, llevado por su cimera alada, vuela. Se parecen a los monstruos de Grünberg escapados de su guardarropa.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">En el <i>Juicio Final</i> de Viena, que quizá es sólo una réplica, pero que Lucas Cranach copió igualmente durante su estancia en los Paises Bajos, estas criaturas surgen por todas partes: a la izquierda, sobre el techo de la casa, una cabeza barbuda con patas, está cubierta con una mirada bizantina; más abajo, una cabeza humana con casco cabalga sobre un pájaro fantástico; otra cabeza de enormes pies se aproxima tras un grupo de monstruos; entre ambas, un acéfalo blande un arma; más lejos, la cabeza con piernas está en un huevo. La grylla es uno de los principales actores del último acto de la historia del mundo.</span><br />
<table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: right; margin-left: 1em; text-align: right;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi8W0CUr5b3cZhoCqXaR5j7jOwKnM9QUGk15QczmYZRbYTZ9peRXue20F_7zWZPRfCWWfwTDhTKRzlr-s5AS-DttjzZF2yareChmTk-THQhIEGeQy0hdoNdJCUeddB5mmWnkkec2sZgFzPe/s1600/gryllas+1.jpg" imageanchor="1" style="clear: right; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi8W0CUr5b3cZhoCqXaR5j7jOwKnM9QUGk15QczmYZRbYTZ9peRXue20F_7zWZPRfCWWfwTDhTKRzlr-s5AS-DttjzZF2yareChmTk-THQhIEGeQy0hdoNdJCUeddB5mmWnkkec2sZgFzPe/s320/gryllas+1.jpg" width="316" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><i>La tentación</i>... (detalle)</td></tr>
</tbody></table>
<span style="color: #9fc5e8;">En la <i>Tentación de Lisboa</i>, también ocupa un puesto importante. Sobre el panel derecho, una figura de Baubô con un puñal en el vientre, está sentada en el suelo. Sobre el panel central, una grylla se agita en una canoa. A la izquierda, las fauces de un unicornio circulan sobre una grupa de asno. Sin embargo, la escena más enigmática la encontramos en el centro del cuadro: una cabeza con piernas cubierta con un turbante oscuro se sienta con desenvoltura frente al eremita. San Antonio la ve y se vuelve. Todo está en su sitio en este perfil de rasgos groseros aunque regulares. Las musculosas piernas, calzadas con botas sobre un calzón ceñido, son de un extraordinario realismo. Es esta normalidad dentro de lo imposible, lo único que parece asustar al santo en medio de los diablos desencadenados. La cabeza le mira insistentemente. Parece iniciarse un diálogo.</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjvELKvIjS2EDotUn6s_WLW4ScIOR8Fw1QfLwMOtSPHbtMBWIv-XMe6RVgG2xdzuCNON4L92XPUoz9Ten_lC_T2c-hgExIrGG7lZcJsbTn2CgPfj5bTKNT_XDb6EarIDrsLkn_5NCa16DS8/s1600/gryllas+1.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="345" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjvELKvIjS2EDotUn6s_WLW4ScIOR8Fw1QfLwMOtSPHbtMBWIv-XMe6RVgG2xdzuCNON4L92XPUoz9Ten_lC_T2c-hgExIrGG7lZcJsbTn2CgPfj5bTKNT_XDb6EarIDrsLkn_5NCa16DS8/s400/gryllas+1.jpg" width="400" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
<i>La tentación de San Antonio </i>(detalle)</div>
<br />
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<span style="color: #9fc5e8;">Toda la visión se despliega alrededor de esta conversación muda entre la grylla y el santo. Se ha querido ver en esta figura un autoretrato del Bosco. Por su actitud, anatomía y rasgos, está muy cercana del monstruo grabado sobre el falso sello antiguo de Raoul Aubry, juez de Lille (hacia 1320).</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">Toda la pintura de temas diabólicos, retoma y multiplica estos seres fantásticos. Los volvemos a encontrar en los cuadros más o menos asociados al arte del maestro de Bois-le-Duc, en Jean Mandyn, Henry Met de Blès, Pieter Huys, Brueghel, así como numerosos pintores secundarios. Los protagonistas de una <i>Tentación</i> de Berlín son, una vez más, una cabeza de animal con patas, una cabeza humana sobre grandes pies y una grylla en un huevo rematado por un brazo armado.</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhixQfd1sZMk43LG7-kdvn2Pa2-Qb-wUin4Rdh3ybyymYDrf9SAoqZIIp0yxgyuEjrBIrbnphyakRCifgzGjthWZ1hBrJOHxOsEOXQFUx4qPdRuu1jvXmhV_Q0RIBmSwQFE4X_Wt9lRU3t2/s1600/gryllas+2.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhixQfd1sZMk43LG7-kdvn2Pa2-Qb-wUin4Rdh3ybyymYDrf9SAoqZIIp0yxgyuEjrBIrbnphyakRCifgzGjthWZ1hBrJOHxOsEOXQFUx4qPdRuu1jvXmhV_Q0RIBmSwQFE4X_Wt9lRU3t2/s400/gryllas+2.jpg" width="386" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
El Bosco, <i>Cristo en los infiernos </i></div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<span style="color: #9fc5e8;">En un Infierno de Viena, el Leviatán está representado no tanto por una fauces con patas, como por un estetocéfalo completo con un oscuro orificio sobre el vientre que él mismo estira con sus manos. Brueghel da como cómplices a Hermógenes, el charlatán que desafió a Santiago, a un acróbata con cara sobre el pecho, pero vuelta, los ojos hacia abajo, a una cabeza de cuatro patas, a una cabeza bifronte con dos brazos que lleva un largo gorro de noche y a una cabeza de asno con piernas. La grylla figura también en las alegorías de la Paciencia, la Cólera, la Avaricia y la Lujuria. La Cimera de la Glotonería está hecha con una taza y una cuchara.</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEikyz2mD70Qg_Htg-Y7BhSNDCeBQvCkE_jFUJSXX-4r2pvYWqBDBcv4IZgJzcauC2SQlxROj-6IXyARa98L51H2qGDg-PtX-8neHhyphenhyphenlDMZz-0dvaHlvfWJkrcHRDlvi5FUb7xIEfhXHSS45/s1600/gryllas+1.jpeg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEikyz2mD70Qg_Htg-Y7BhSNDCeBQvCkE_jFUJSXX-4r2pvYWqBDBcv4IZgJzcauC2SQlxROj-6IXyARa98L51H2qGDg-PtX-8neHhyphenhyphenlDMZz-0dvaHlvfWJkrcHRDlvi5FUb7xIEfhXHSS45/s320/gryllas+1.jpeg" width="310" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Brueghel el Viejo, detalle de la Gula perteneciente a la serie <i>Lo</i>s <i>Siete Pecados Capitales</i> (1557)</div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<br />
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;"><i><b><span style="font-size: large;">Historia de la locura en la épòca clásica</span></b></i></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;">(1ª parte, pags. 17-19)</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;">por</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;"><span style="font-size: large;">Michel Foucault</span></span></div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">Existe una conversión fundamental del mundo de las imágenes: el
constreñimiento de un sentido multiplicado lo libera del orden de las formas. Se
insertan tantas significaciones diversas bajo la superficie de la imagen, que ésta
termina por no ofrecer al espectador más que un rostro enigmático.</span><br />
<div style="text-align: left;">
</div>
<table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: left; margin-right: 1em; text-align: left;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh7z6QVwq0UvWk84M1nWJEp9jGMtpZe7iKw84Y0JqqxldYmIE1fBkHSIkOF4N64aMWKaJkorIh2BaY2ubbTJCn_6UMo3YYpr7qtwIoeWnmwipVW4QOkRs9aDg9gdWrEc6g0tfb1WjymvJKx/s1600/gryllas+1.png" imageanchor="1" style="clear: left; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh7z6QVwq0UvWk84M1nWJEp9jGMtpZe7iKw84Y0JqqxldYmIE1fBkHSIkOF4N64aMWKaJkorIh2BaY2ubbTJCn_6UMo3YYpr7qtwIoeWnmwipVW4QOkRs9aDg9gdWrEc6g0tfb1WjymvJKx/s320/gryllas+1.png" width="238" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><i>Libro de horas</i>, British Library</td></tr>
</tbody></table>
<span style="color: #9fc5e8;">Su poder no es ya de enseñanza sino de fascinación. Es característica la
evolución del
grylle,
famoso tema, familiar desde la Edad Media, que
encontramos en los salterios ingleses, en Chartres y en Bourges. Enseñaba
entonces que el hombre que vivía para satisfacer sus deseos, transformaba su
alma en prisionera de la bestia; aquellos rostros grotescos, en el vientre de los
monstruos, pertenecían al mundo de la gran metáfora platónica, y sirven para
demostrar el envilecimiento del espíritu en la locura del pecado. Pero he aquí que en
el siglo XV, el
grylle,
imagen de la locura humana, llega a ser una de las figuras
privilegiadas de las innumerables "Tentaciones". La tranquilidad del eremita no se ve
turbada por los objetos del deseo; son formas dementes, que encierran un secreto,
que han surgido de un sueño y permanecen en la superficie de un mundo,
silenciosas y furtivas. En la "Tentación" de Lisboa, enfrente de San Antonio está
sentada una de estas figuras nacidas de la locura, de su soledad, de su penitencia,
de sus privaciones; una débil sonrisa ilumina ese rostro sin cuerpo, pura presencia
de la inquietud que aparece como una mueca ágil. Ahora </span><br />
<table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: right; margin-left: 1em; text-align: right;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiRerGoO2o3AefaoMiiiYMMqH73eOcU8Vhq7pHaprLdKO08jJZgD2PmnwbBR0rQJQ9l5UTxbS_YJKQIDO6zZR2zt8bT_d6tjDv_zFonjZB6g9rIObYlg2MzkvvjcTpUaGzWyDVnyewrWV1U/s1600/gryllas+1.jpg" imageanchor="1" style="clear: right; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="200" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiRerGoO2o3AefaoMiiiYMMqH73eOcU8Vhq7pHaprLdKO08jJZgD2PmnwbBR0rQJQ9l5UTxbS_YJKQIDO6zZR2zt8bT_d6tjDv_zFonjZB6g9rIObYlg2MzkvvjcTpUaGzWyDVnyewrWV1U/s200/gryllas+1.jpg" width="190" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><i>La tentación</i>...(detalle)</td></tr>
</tbody></table>
<span style="color: #9fc5e8;">bien, esta silueta de
pesadilla es a la vez sujeto y objeto de la tentación; es ella la que fascina la mirada
del asceta; ambos permanecen prisioneros de una especie de interrogación
especular, indefinidamente sin respuesta, en un silencio habitado solamente por el
hormigueo inmundo que los rodea. El
grylle
ya no recuerda al hombre, bajo una
forma satírica, su vocación espiritual, olvidada en la locura del deseo. Ahora es la
locura convertida en Tentación; todo lo
que hay de imposible, de fantástico, de
inhumano, todo lo que indica la presencia insensata de algo que va contra la
naturaleza, presencia inmensa que hormiguea
sobre la faz de la Tierra, todo eso, precisamente, le da su extraño poder.</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjtFmKoFyhMzg8gmuw-m8ihYzoYXV85ra-BmytxSusAK9foWcPdjfEllFAGVAkYjT2G-TgteVV2p6iRQER7YvnSMtcSLaFNzZ7WZUJBZym9hwj-LGOQalSLJyj13ZWlUvyGggotHmLhJV5y/s1600/gryllas+1.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjtFmKoFyhMzg8gmuw-m8ihYzoYXV85ra-BmytxSusAK9foWcPdjfEllFAGVAkYjT2G-TgteVV2p6iRQER7YvnSMtcSLaFNzZ7WZUJBZym9hwj-LGOQalSLJyj13ZWlUvyGggotHmLhJV5y/s640/gryllas+1.jpg" width="411" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
El Bosco,<i> La tentación de San Antonio</i> (detalle del panel central)</div>
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">La
libertad de sus sueños —que en ocasiones,
es horrible—, los fantasmas de su locura tienen, para el hombre del siglo XV, mayor
poder de atracción que la deseable realidad de la carne.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">¿Cuál es, pues, el poder de fascinación, que en esta época se ejerce a través de
las imágenes de la locura?</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">En primer lugar, el hombre descubre, en esas figuras fantásticas, uno de los
secretos y una vocación de su naturaleza. En el pensamiento medieval, las
legiones de animales, a las que había dado Adán nombre para siempre,
representaban simbólicamente los valores de la humanidad. Pero al principio
del Renacimiento las relaciones con la animalidad se invierten; la bestia se
libera; escapa del mundo de la leyenda y de la ilustración moral para adquirir
algo fantástico, que le es propio.</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjZqN-D43mG6Jw9m8sc_cWOUbsm4RudnrdyBpHaMhJG3pyxFKa1jDKdRXN3HyAQq0rzBVPnm6UZ6PFjq_-KsRIqdYzapR-0nMIeynLM_8NiuJHFgnEzw6nQsWiYbzd4v9xr2yapNT1QdjuY/s1600/gryllas+1.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjZqN-D43mG6Jw9m8sc_cWOUbsm4RudnrdyBpHaMhJG3pyxFKa1jDKdRXN3HyAQq0rzBVPnm6UZ6PFjq_-KsRIqdYzapR-0nMIeynLM_8NiuJHFgnEzw6nQsWiYbzd4v9xr2yapNT1QdjuY/s640/gryllas+1.jpg" width="308" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Thierry Bouts, <i>Infierno</i></div>
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">Y por una sorprendente inversión, va a ser
ahora el animal, el que acechará al hombre, se apoderará de él, y le revelará su
propia verdad. Los animales imposibles, surgidos de una loca imaginación, se
han vuelto la secreta naturaleza del hombre; y cuando, el último día, el hombre
pecador aparece en su horrible desnudez, se da uno cuenta de que tiene la
forma monstruosa de un animal delirante: son esos gatos cuyos cuerpos de
sapos se mezclan en el "Infierno" de Thierry Bouts con la desnudez de los
condenados; son, según los imagina Stefan Lochner, insectos alados con cabeza
de gatos, esfinges con élitros de escarabajo, pájaros con alas inquietas y ávidas,
como manos; es el gran animal rapaz, con dedos nudosos, que aparece en la
"Tentación" de Grünewald.</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj-diri1_SEI4wZHyNq-tEcgyQS7itu_33IZKtDXlfbQdpHdfUKxs_SIjLtY1xMrAnpcdL1H_9TKWRe9Pr-1llppcISt5lylCRQ0hx16g2BjNWqP1UNTrmM1ZXr9YMw2dYzl6efik0mkfLs/s1600/gryllas+1.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj-diri1_SEI4wZHyNq-tEcgyQS7itu_33IZKtDXlfbQdpHdfUKxs_SIjLtY1xMrAnpcdL1H_9TKWRe9Pr-1llppcISt5lylCRQ0hx16g2BjNWqP1UNTrmM1ZXr9YMw2dYzl6efik0mkfLs/s400/gryllas+1.jpg" width="375" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Grünewald, <i>La tentación de San Antonio</i> (1512-1516)</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">La animalidad ha escapado de la domesticación de los
valores y símbolos humanos; es ahora ella la que fascina al hombre por su
desorden, su furor, su riqueza en monstruosas imposibilidades, es ella la que
revela la rabia oscura, la locura infecunda que existe en el corazón de los
hombres.</span><br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<span style="color: #9fc5e8;"></span></div>
<span style="color: #9fc5e8;">En el polo opuesto a esta naturaleza de tinieblas, la locura fascina porque es
saber. Es saber, ante todo, porque todas esas figuras absurdas son en realidad
los elementos de un conocimiento difícil, cerrado y esotérico. Estas formas
extrañas se colocan, todas, en el espacio del gran secreto, y el San Antonio que
es tentado por ellas no está sometido a la violencia del deseo, sino al aguijón,
mucho más insidioso, de la curiosidad; es tentado por ese saber, tan próximo y
tan lejano, que se le ofrece y lo esquiva al mismo tiempo, por la sonrisa del
grylle;
el movimiento de retroceso del santo no indica más que su negativa de
franquear los límites permitidos del saber; sabe ya —y ésa es su tentación— lo
que Cardano dirá más tarde: "La Sabiduría, como las otras materias preciosas,
debe ser arrancada a las entrañas de la Tierra. "</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiVJ0yiauNU0g34i2kqpsDNKIDjUMBgi53UvAK3xVgkYNssOmodFm_9NV4yAuDhaOT_kR_OY1k8k77MrSCyFyu8XnXpIqYqxJNAsPJK9J-K5qJEg3LYzrnQUw0nNubv-U-uiLcNatyTlOeO/s1600/gryllas+3.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiVJ0yiauNU0g34i2kqpsDNKIDjUMBgi53UvAK3xVgkYNssOmodFm_9NV4yAuDhaOT_kR_OY1k8k77MrSCyFyu8XnXpIqYqxJNAsPJK9J-K5qJEg3LYzrnQUw0nNubv-U-uiLcNatyTlOeO/s640/gryllas+3.jpg" width="432" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
El Bosco, <i>La Tentación de San Antonio</i> (detalle panel derecho)</div>
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">Este saber, tan temible e
inaccesible, lo posee el Loco en su inocente bobería.</span><br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<span style="color: #9fc5e8;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg9df5921Yw8fCHPcxFR019axWew9DuWeF4QJqwnXl569jyWE-dkbrIyni7NwhT0wQmnK1OJnLVpnmFuz4LdX_5FCqMsKczLedOlxU_yGzw-EuLbXZRw_wgfSzSuyg5t-KLNn085s4QosBy/s1600/la+nave+de+los+locos+2.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="140" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg9df5921Yw8fCHPcxFR019axWew9DuWeF4QJqwnXl569jyWE-dkbrIyni7NwhT0wQmnK1OJnLVpnmFuz4LdX_5FCqMsKczLedOlxU_yGzw-EuLbXZRw_wgfSzSuyg5t-KLNn085s4QosBy/s200/la+nave+de+los+locos+2.jpg" width="200" /></a></span></div>
<span style="color: #9fc5e8;">En tanto que el hombre
razonable y prudente no percibe sino figuras fragmentarias —por lo mismo más
inquietantes— el Loco abarca todo en una esfera intacta: esta bola de cristal,
que para todos nosotros está vacía, está, a sus ojos, llena de un espeso e
invisible saber, Brueghel se burla del inválido que intenta penetrar en la esfera
de cristal (imagen de arriba, detalle de <i>Proverbios Flamencos</i>); es esta burbuja irisada del saber la que se balancea, sin romperse
jamás —linterna irrisoria, pero infinitamente preciosa—, en el extremo de la
pértiga que lleva al hombro Margot la Folie. Es ella también la que aparece en el
reverso del "Jardín de las Delicias".</span><br />
<br />
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiLVyiRibZKZ21zcHivgcXMrSbDnwyd40SMcYjyorWEskNW0omeFVaG3YX_J9n2gC9Q7xmj2c0zJnezfZZ8rjruQI2xKiSmC2fdpCYym_GBg-7JkPe3psQWmQE6BnTNM4SBbwYGnTusfinO/s1600/la+nave+de+los+locos+2.png" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiLVyiRibZKZ21zcHivgcXMrSbDnwyd40SMcYjyorWEskNW0omeFVaG3YX_J9n2gC9Q7xmj2c0zJnezfZZ8rjruQI2xKiSmC2fdpCYym_GBg-7JkPe3psQWmQE6BnTNM4SBbwYGnTusfinO/s400/la+nave+de+los+locos+2.png" width="375" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
El Bosco, tríptico cerrado de <i>El jardín de las Delicias</i></div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">Otro símbolo del saber, el árbol (el árbol
prohibido, el árbol de la inmortalidad prometida y del pecado), antaño plantado
en el corazón del Paraíso Terrenal, ha sido arrancado y es ahora el mástil del navío de los locos, como puede verse en el grabado que ilustra las <i>
Stultiferae naviculae</i>
de
Josse Bade; es él sin duda el que se balancea encima de la "Nave de los locos" de
Bosco.</span><br />
<table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: left; margin-right: 1em; text-align: left;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiUaagdoj2IoUPbLJh7Bn0Vx_CCR_bvkabnZixSlpRWj6-PoJxd0VK2wuAh-PHmMjn9C9ct20ohQbGgyHJH2nTTZQb6cE0_4Alzcb2BS02hwg0ZmgjE_PZdKvmWW_IPRMKviMieeE3t-GIv/s1600/la+nave+de+los+locos+2.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiUaagdoj2IoUPbLJh7Bn0Vx_CCR_bvkabnZixSlpRWj6-PoJxd0VK2wuAh-PHmMjn9C9ct20ohQbGgyHJH2nTTZQb6cE0_4Alzcb2BS02hwg0ZmgjE_PZdKvmWW_IPRMKviMieeE3t-GIv/s640/la+nave+de+los+locos+2.jpg" width="264" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Brueghel, El Triunfo de la Muerte (detalle)</td></tr>
</tbody></table>
<span style="color: #9fc5e8;">¿Qué anuncia el saber de los locos? Puesto que es el saber prohibido, sin duda
predice a la vez el reino de Satán y el fin del mundo; la última felicidad es el
supremo castigo; la omnipotencia sobre la Tierra y la caída infernal. La "Nave de
los locos" se desliza por un paisaje delicioso, donde todo se ofrece al deseo, una
especie de Paraíso renovado, puesto que el hombre no conoce ya ni el
sufrimiento ni la necesidad; y sin embargo, no ha recobrado la inocencia. Esta
falsa felicidad constituye el triunfo diabólico del Anticristo, y es el Fin, próximo
ya. Es cierto que los sueños del Apocalipsis no son una novedad en el siglo XV;
pero son muy diferentes de los sueños de antaño. La iconografía dulcemente
caprichosa del siglo XIV, donde los castillos están caídos como si fueran dados,
donde la Bestia es siempre el Dragón tradicional, mantenido a distancia por la
Virgen, donde —en una palabra— el orden de Dios y su próxima victoria son
siempre visibles, es sustituida por una visión del mundo donde toda sabiduría
está aniquilada. Es el gran
<i>sabbat</i>
de la naturaleza; las montañas se derrumban
y se vuelven planicies, la tierra vomita los muertos, y los huesos asoman sobre
las tumbas; las estrellas caen, la tierra se
incendia, toda vida se seca y muere. El fin no tiene valor de tránsito o promesa; es la llegada de una noche que
devora la vieja razón del mundo. Es suficiente mirar a los caballeros del
<i>Apocalipsis</i>, de Durero, enviado por Dios mismo: no son los ángeles del Triunfo y
de la reconciliación, ni los heraldos de la justicia serena; son los guerreros
desmelenados de la loca venganza. El mundo zozobra en el Furor universal. La
victoria no es ni de Dios ni del Diablo; es de la Locura.</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhmdrJIeK9d3RHJWQYOA7SRWgO7zNpccuCC6mVW87mP61pS_yenjn6z_WQR7ILNkGVqfoOEnh2t8c36b3SfTXx8NbxZtscCOJrALuGWa77UfLS_usxS47KmLHoQ7Hkk3my4d42ELsUAvGzq/s1600/la+nave+de+los+locos+2.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhmdrJIeK9d3RHJWQYOA7SRWgO7zNpccuCC6mVW87mP61pS_yenjn6z_WQR7ILNkGVqfoOEnh2t8c36b3SfTXx8NbxZtscCOJrALuGWa77UfLS_usxS47KmLHoQ7Hkk3my4d42ELsUAvGzq/s1600/la+nave+de+los+locos+2.jpg" /></a></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
Alberto Durero, <i>Los jinetes del Apocalipsis</i> (detalle)</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">Por todos lados, la locura fascina al hombre. Las imágenes fantásticas que hace
nacer no son apariencias fugitivas que desaparecen rápidamente de la superficie
de las cosas. Por una extraña paradoja, lo que nace en el más singular de los
delirios, se hallaba ya escondido, como un secreto, como una verdad inaccesible,
en las entrañas del mundo. </span><br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<span style="color: #9fc5e8;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjl8nfda23-skvIcbFHGxo_8NsQ_QWqVvEbbr7fQhGWDWxI5jogU_nw3o3djYmbjNyxvRTK9NBTVdoZAW-eEp-NGmErIMuI-PVB6C94rLgpUx2XXzitFSVbpszfUoy483Kghz3CD69XlQK2/s1600/la+nave+de+los+locos+2.jpg" imageanchor="1" style="clear: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em;"><img border="0" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjl8nfda23-skvIcbFHGxo_8NsQ_QWqVvEbbr7fQhGWDWxI5jogU_nw3o3djYmbjNyxvRTK9NBTVdoZAW-eEp-NGmErIMuI-PVB6C94rLgpUx2XXzitFSVbpszfUoy483Kghz3CD69XlQK2/s640/la+nave+de+los+locos+2.jpg" width="211" /></a></span></div>
<span style="color: #9fc5e8;">Cuando el hombre despliega la arbitrariedad de su
locura, encuentra la oscura necesidad del mundo; el animal que acecha en sus
pesadillas, en sus noches de privación, es su propia naturaleza, la que descubrirá
la despiadada verdad del infierno; las imágenes vanas de la ciega bobería forman
el gran saber del mundo; y ya, en este desorden, en este universo enloquecido,
se adivina lo que será la crueldad del final. En muchas imágenes el Renacimiento
ha expresado lo que presentía de las amenazas y de los secretos del mundo, y es
esto sin duda lo que les da esa gravedad, lo que dota a su fantasía de coherencia
tan grande.</span><br />
<br />
<br />
<br />
<br />
Imagen derecha: <span class="irc_su" dir="ltr" style="text-align: left;">Hans Memling, panel derecho del tríptico<i> El juicio Final </i>(1467-1471)</span><br />
<span class="irc_su" dir="ltr" style="text-align: left;"><br /></span>
<span class="irc_su" dir="ltr" style="text-align: left;"><br /></span>
<span class="irc_su" dir="ltr" style="text-align: left;"><br /></span>
<span class="irc_su" dir="ltr" style="text-align: left;"><br /></span>
<span class="irc_su" dir="ltr" style="text-align: left;">Lecturas: </span><br />
<span class="irc_su" dir="ltr" style="text-align: left;"><br /></span>
<span class="irc_su" dir="ltr" style="text-align: left;">Jurgis Baltrusaitis, <i>La Edad Media fantástica</i>. Ediciones Cátedra 1983</span><br />
<br />
<span class="irc_su" dir="ltr" style="text-align: left;">Michel Foucault, <i>La locura en la época clásica</i>. FCE 1998</span><br />
<span class="irc_su" dir="ltr" style="text-align: left;"><br /></span>
<span class="irc_su" dir="ltr" style="text-align: left;"><br />Entradas relacionadas:</span><br />
<br />
<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2012/04/el-carro-de-heno-y-el-triunfo-de-la.html"><span class="irc_su" dir="ltr" style="text-align: left;"> El Carro de Heno y el Triunfo de la Muerte</span></a><br />
<br />
<span class="irc_su" dir="ltr" style="text-align: left;"><a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2013/08/la-naturaleza-animada.html">La naturaleza animada </a></span><br />
<span class="irc_su" dir="ltr" style="text-align: left;"><br /></span>
<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2014/03/locos.html"><span class="irc_su" dir="ltr" style="text-align: left;">Locos</span></a><br />
<span class="irc_su" dir="ltr" style="text-align: left;"><br /></span>
<span class="irc_su" dir="ltr" style="text-align: left;"><a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2014/10/naturaleza-fantastica.html">Naturaleza fantástica</a></span><br />
<span class="irc_su" dir="ltr" style="text-align: left;"><br /></span>
<span class="irc_su" dir="ltr" style="text-align: left;"><br /></span>
<span class="irc_su" dir="ltr" style="text-align: left;"><br />.</span>Janhttp://www.blogger.com/profile/10112360698804083485noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-4945391151380854953.post-45655844802215560142016-10-13T01:45:00.000-07:002016-10-13T01:45:11.193-07:00La piedra de la locura<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhJvrAdxHeKPD6h_zQOmSWjxK_tNBZF8IWHOGoVO-ItIS9QQVs2u1u-H9rtbbxsuNokU8cXngMZt0yn3_liTo_4mTS3VCG29ReZT7rnoTd3F4-1pqCrXPw566Y3F5scpAgq8Nbngg1EipUs/s1600/la+piedra+1.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhJvrAdxHeKPD6h_zQOmSWjxK_tNBZF8IWHOGoVO-ItIS9QQVs2u1u-H9rtbbxsuNokU8cXngMZt0yn3_liTo_4mTS3VCG29ReZT7rnoTd3F4-1pqCrXPw566Y3F5scpAgq8Nbngg1EipUs/s400/la+piedra+1.jpg" width="367" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Jan Sanders Van Hemessen,<i> El cirujano</i> (1550) </div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<br />
<br />
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;"><i><b><span style="font-size: large;">La piedra de la locura</span></b></i></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;">(Fragmentos)</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;">por </span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;"><span style="font-size: large;">Irene González Hernando</span></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;">(Universidad Complutense de Madrid)</span></div>
<br />
<br />
<br />
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;"><b><span style="font-size: large;">Estudio iconográfico</span> </b></span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;"><b>Atributos y formas de representación</b></span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span></div>
<span style="color: #9fc5e8;">En las pinturas que tratan de la “extracción de la
piedra de la locura”, un hombre que
ejerce la medicina, sea persona conocedora de los tratados y formada en la universidad (y por
tanto merecedor del calificativo de “médico”), sea
alguien que ha adquirido su conocimiento
profesional a través de la práctica y la enseñanza
oral (y por tanto susceptible de ser
considerado un “charlatán”), hace una incisión en el cráneo del paciente y extrae un cuerpo
extraño, generalmente una piedra, aunque también puede ser una flor, como ocurre en el caso
de El Bosco. </span><br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgGXV6KSn34QJ2WGO2IC4ai5TB7Na_4QRW8pSsw_tsaVpa02qyMfieOGoQwniiKEteRD8g8MIPDlRO3z6Aj6p3f2VIhxnAX00S73hoD8oHC7UIuCJFxoBxl7XXhRE9ASwe68ZhjLNgLxj1c/s1600/la+piedra+2.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="200" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgGXV6KSn34QJ2WGO2IC4ai5TB7Na_4QRW8pSsw_tsaVpa02qyMfieOGoQwniiKEteRD8g8MIPDlRO3z6Aj6p3f2VIhxnAX00S73hoD8oHC7UIuCJFxoBxl7XXhRE9ASwe68ZhjLNgLxj1c/s200/la+piedra+2.jpg" width="200" /></a></div>
<span style="color: #9fc5e8;">(A la izquierda detalle de "<i>La extracción de la piedra de la locura</i>" de El Bosco). Sea piedra o flor, extraída verdaderamente del cráneo del paciente u oculta en la
mano del falso médico, esta es presentada como la causa de desorden mental o locura.
El paciente puede ser tachado de
loco
por diferentes causas, tantas como connotaciones
tuvo la palabra
locura
desde fines del siglo XV, y que recoge muy bien J.
F. Broux (1999) en la
introducción de su disertación. Explica Broux que el término
loco
era, a fines de la Edad
Media, inclusive más impreciso que en la actualidad. Con la palabra
loco
se designa, en
principio, a toda aquella persona que tiene una actitud que no corresponde con la regla social
establecida y que, por eso mismo, se convierte en marginado, más aún en peligroso. No
obstante, se podrían distinguir al menos tres categorías o tres tipos de locos. La primera sería el
enfermo mental con un problema psiquiátrico de gran
gravedad. La segunda sería el bufón, es
decir el que divierte y entretiene a los demás, y que suele tener algún tipo de discapacidad
mental y/o física, aunque de menor calado. La tercera sería el enamorado o el que se deja
llevar por el impulso sexual o la lujuria, por extensión el que se deja arrastrar por el pecado.
Justamente, en función de estas connotaciones de la
locura, han surgido dos grandes
líneas interpretativas: por un lado, la que defiende que la extracción de la piedra de la locura
es una trepanación terapéutica que tiene como objeto curar o causar una mejoría en un
paciente que sufre algún tipo de dolencia mental (migraña, cefalea, epilepsia, tumor, etc.);
por otro lado, la que defiende que la extracción de
la piedra no es más que una puesta en
escena en la que un hombre, que ha caído presa de la lujuria, es reintegrado en los cauces
sociales, anulando su deseo sexual e inclusive castrándolo.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">En la serie de la piedra de la locura hay varios personajes que no faltan. En una
posición central hallamos al cirujano, caracterizado de distintas formas: dignificado y con
anteojos, como en el cuadro de Jan Sanders Van Hemessen, o ridiculizado y con un embudo
sobre la cabeza como en la tabla de El Bosco, llevando a cabo la incisión, extrayendo la
formación calcárea, o cosiendo la piel de la frente. Junto a él, el paciente, sentado,
inmovilizado, y sujeto al sillón por una tela blanca que rodea su torso y uno de los brazos, que
hace todo lo posible para resistir estoicamente la
operación. Y alrededor de ambos, y en
número variable, hombres y mujeres que asisten al médico, o curiosos que se congregan para
ver qué ocurre, o pacientes que esperan a ser intervenidos.</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgBv3X_CUILhdRsoFp2UiENg0GPo0fudknL7Z_fykeh0ocgFC7Yk2qtt6vO7NL1aK1pDf3q7h6d1CgEnIQSbn49Jdjf5a9IlV41FkU9Dpdxz61Q1hOQHX45cDVbqZJC9zcdY4Ogxuc2gNdj/s1600/la+piedra+10.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="307" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgBv3X_CUILhdRsoFp2UiENg0GPo0fudknL7Z_fykeh0ocgFC7Yk2qtt6vO7NL1aK1pDf3q7h6d1CgEnIQSbn49Jdjf5a9IlV41FkU9Dpdxz61Q1hOQHX45cDVbqZJC9zcdY4Ogxuc2gNdj/s400/la+piedra+10.jpg" width="400" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
El Bosco, <i>Extracción de la piedra de la locura </i>(1475-1480)</div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">La cirugía se desarrolla
normalmente en un interior en el que pueden aparecer libros (como en la obra de Pieter Huys)
o las propias piedras extraídas a los pacientes y colgadas de un cordel (como en la pintura de
Van Hemessen), y que servirían por tanto de carta de presentación del médico. La escena se
convierte así en una suerte de cuadro de género u obra costumbrista que se hace eco de la vida
cotidiana de su época.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;"><b>Fuentes escritas</b></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">Entre las fuentes medievales deberíamos señalar en
primer lugar los escritos de
Rhazes, médico persa (c. 854-925/935) que habría denunciado “a los charlatanes que
pretendían curar la epilepsia haciendo una incisión
en la frente y aparentando extraer algo que
llevaban escondido en la mano”. Lo que estaba describiendo Rhazes es una
<i>cirugía placebo</i>,
es decir una operación que no era tal, pero que resultaba totalmente inocua y hacía creer al
enfermo, y a sus familiares, que este había mejorado de una dolencia mental. En definitiva,
una simulación de trepanación que consolaba a aquellos que ya habían probado sin éxito
distintos remedios para curarse de una disfunción psíquica.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">Por otra parte, es interesante resaltar entre las fuentes escritas una mucho más tardía,
aunque coetánea a la primera tabla conocida de la serie de la piedra de la locura –la obra de El
Bosco localizada en el Museo del Prado. Se trata de
<i>El barco de los locos</i>
(
<i>Das Narrenschiff</i>
)
de Sébastian Brant, publicada en 1494 y que plantea
una concepción de la locura como
pecado, concepción que hunde sus raíces en la Baja
Edad Media y triunfa en la Europa del
Norte.</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgLIF4mnzyssIb9hg77t60GWPABjCOhQtZeNQX7YoEv4uAvQ8hYFA7qRpE22yUzoypIYGZJi02mSL-wCEfkHUobsinq3gRzOyREHhyGq4369d5lE3SNxrGltaKDlVhWwx1Zg9cZjnO-NjOS/s1600/la+piedra+6.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="230" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgLIF4mnzyssIb9hg77t60GWPABjCOhQtZeNQX7YoEv4uAvQ8hYFA7qRpE22yUzoypIYGZJi02mSL-wCEfkHUobsinq3gRzOyREHhyGq4369d5lE3SNxrGltaKDlVhWwx1Zg9cZjnO-NjOS/s400/la+piedra+6.jpg" width="400" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Ilustración de Alberto Durero para <i>Das Narrenschiff </i></div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">Fue esta una de las obras más traducidas y de mayor difusión en el siglo XVI. En ella
Sébastian Brant describe a la humanidad perdida por
sus vicios. Analiza todos los tipos
posibles de locura, asimilando los actos derivados
de la locura y el pecado. Así el ebrio, el
mentiroso, el charlatán, el adúltero, etc. son locos y pecadores. Su obra fue ilustrada por
Alberto Durero.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">El propio Bosco conoció de cerca este libro; de hecho realizó en 1490 una
pequeña tabla con el tema de la
nave de los locos
, en la que muestra una barca a la deriva con
doce personajes en su interior, los cuales están entregados al pecado o a los placeres
sensuales. La borrachera, la glotonería, la lujuria, se han adueñado de los personajes aquí
representados.</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj8YHW55wd1JBrYnra4OhLUdU-orONTr3GTrtrIY5BzFYJD8-Gl5L-XleRqbLRloRyoF9EjDzqjmrwPVe662SmJrwqIS9s8scArp4qUeTaLi7-UydKDSi7mX5BZnvLE653m9TFWsGw5GRZ4/s1600/la+piedra+3.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj8YHW55wd1JBrYnra4OhLUdU-orONTr3GTrtrIY5BzFYJD8-Gl5L-XleRqbLRloRyoF9EjDzqjmrwPVe662SmJrwqIS9s8scArp4qUeTaLi7-UydKDSi7mX5BZnvLE653m9TFWsGw5GRZ4/s640/la+piedra+3.jpg" width="342" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
El Bosco,<i> La nave de los locos</i> (1503-1504)</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">Por ello no resulta raro pensar que los escritos
de Brant hubieran reforzado la
asociación entre piedra de la locura, pecado y lujuria, que sería el trasfondo de la iconografía
que estamos comentando.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">(...)</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;"><b>Precedentes, transformaciones y proyección</b></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">No se conocen precedentes de esta iconografía en la
Antigüedad. Por tanto podríamos
considerarlo un tema creado
ex novo
a fines de la Edad Media tomando como fuentes las
prácticas de trepanación conocidas desde antiguo y
el deseo de reflejar la progresiva
regulación de la actividad médica con un sentido crítico. El tema tiene una gran proyección en
la Edad Moderna, alcanzado éxito en el mundo flamenco, donde se repiten una serie de
personajes (cirujano, paciente, asistentes, curiosos, enfermos) aunque ubicándolos de modos
diferentes y actuando de modo distinto, en función
de aquello en lo que se quiera insistir. </span><br />
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiw2fCPCXYuQjMDq5jLGLLAnbzTKxO0EiIlNrbztqprl7BaLINCl6faFqvHSXqrLGjGMU4-8Innpfe9sGxF3gC_WUeLjzfGdYyAdRBp2YvT8JCkaSLrga-3SscM__Jf9zKq2oNUZKHTbg4o/s1600/la+piedra+7.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="277" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiw2fCPCXYuQjMDq5jLGLLAnbzTKxO0EiIlNrbztqprl7BaLINCl6faFqvHSXqrLGjGMU4-8Innpfe9sGxF3gC_WUeLjzfGdYyAdRBp2YvT8JCkaSLrga-3SscM__Jf9zKq2oNUZKHTbg4o/s400/la+piedra+7.jpg" width="400" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Van Hemessen, <i>El cirujano </i>(1550)</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">Así
en
<i>El cirujano </i>
de Van Hemessen (1550, óleo sobre tabla, Museo Nacional del Prado) destaca
el médico con anteojos, el cordel con las piedras de la locura, las dos mujeres que lo asisten, y
el hombre que espera, un paciente tal vez, en estado de éxtasis, con la cabeza vuelta al cielo.</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgBYeCBrmgN3yByBayCQFb9liOJ92iR67tWhiKAfeH_XAqf-vb16dZdjDeHgOoy4VtqVUQHAP_z5aZlP1p-vlGh1Ia5Eme3DMwOYOBUkXF2ARrQLZuBxYYhoWpTt6N58_huOpkLZzMNXPGa/s1600/la+piedra+8.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="272" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgBYeCBrmgN3yByBayCQFb9liOJ92iR67tWhiKAfeH_XAqf-vb16dZdjDeHgOoy4VtqVUQHAP_z5aZlP1p-vlGh1Ia5Eme3DMwOYOBUkXF2ARrQLZuBxYYhoWpTt6N58_huOpkLZzMNXPGa/s400/la+piedra+8.jpg" width="400" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Copia de Pieter Brueghel el Viejo, <i>Extracción de la Piedra de la Locura</i></div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">En <i>
La extracción de la piedra de la locura</i>
de Pieter Brueghel el Viejo (1550, Musée de l’Hôtel
Sandelin) la escena se desarrolla en una suerte de
consulta médica psiquiátrica, donde otros
enfermos, en total desorden, esperan a ser atendidos o están siendo intervenidos.</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgY9aMHipu9sz9vMEIGr_XhuOhaWgUvRvdbaR4dORlcJZCh5ZEm9t0IILQ8NRnKzTKbBqqV6K61uRD1JT28lctE8WnXekJpPgBr4AlUAXs45UylAJhskJtConmVZclt09coRSNKzcgZRVDR/s1600/la+piedra+5.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="321" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgY9aMHipu9sz9vMEIGr_XhuOhaWgUvRvdbaR4dORlcJZCh5ZEm9t0IILQ8NRnKzTKbBqqV6K61uRD1JT28lctE8WnXekJpPgBr4AlUAXs45UylAJhskJtConmVZclt09coRSNKzcgZRVDR/s400/la+piedra+5.jpg" width="400" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Pieter Huys, <i>Extracción de la piedra de la locura</i>, 1561</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">En la<i>
Extracción de la piedra de la locura</i>
de Pieter Huys (1561, Musée du Perigord), el ambiente es más sosegado, y el médico parece estar, bien marcando el lugar en que hacer la incisión,
bien cosiendo el lugar por donde se extrajo la piedra.</span><br />
<div style="text-align: center;">
</div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjE21wrdi_5DfYYvsRc-0ae9AEixrpYDnijnak72n-BsZ5WxCejiP7puqn0vJAHwh1_DcIbtOS3f0Q6GOE62NwST_4Sx1O7yvoJvI6dUceTLK-2_og2rzdGLN7ht4lLHToUPkwWQnu24z0R/s1600/la+piedra+9.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjE21wrdi_5DfYYvsRc-0ae9AEixrpYDnijnak72n-BsZ5WxCejiP7puqn0vJAHwh1_DcIbtOS3f0Q6GOE62NwST_4Sx1O7yvoJvI6dUceTLK-2_og2rzdGLN7ht4lLHToUPkwWQnu24z0R/s400/la+piedra+9.jpg" width="322" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Jan Steen, <i>Extracción de la piedra de la locura</i> (1670)</div>
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">En la
<i>Extracción de la piedra</i>
de Jan
Steen (1670, Museum Vojimans Van Beuningen, Rotterdam) vuelve a subir la tensión
dramática de la escena, y mientras el médico con anteojos opera al paciente, que se retuerce
de dolor, una mujer anciana coloca un platillo bajo
su cabeza para recoger las concreciones
calcáreas, y un grupo de curiosos se asoma a la ventana.</span><br />
<br />
<br />
Para leer el artículo completo:<a href="https://www.ucm.es/data/cont/docs/621-2013-11-21-PIEDRA%20DE%20LA%20LOCURA.%20Irene%20Gonz%C3%A1lez%20Hernando.pdf"> REVISTA DIGITAL DE ICONOGRAFÍA MEDIEVAL</a><br />
<br />
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<br />
<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2014/03/locos.html">Locos</a><br />
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<br />
<br />
.Janhttp://www.blogger.com/profile/10112360698804083485noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4945391151380854953.post-33326126836279981562016-10-01T00:36:00.000-07:002016-10-01T01:33:45.131-07:00El Paraíso en el Islam<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhHkUzgh4v9Z5wE2O6ibLZ7ywRa8fqXByF2lfZffyGEaYK4O5n2BaHd_MdAi3NygOkptb4PYZDiLkFRdEjX3srHblP6omCMC2vgXqZV1coSbFpGuip-ArCGtfOha3ctm15PvBO-N0ShL_9-/s1600/islam+paraiso+5.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhHkUzgh4v9Z5wE2O6ibLZ7ywRa8fqXByF2lfZffyGEaYK4O5n2BaHd_MdAi3NygOkptb4PYZDiLkFRdEjX3srHblP6omCMC2vgXqZV1coSbFpGuip-ArCGtfOha3ctm15PvBO-N0ShL_9-/s400/islam+paraiso+5.jpg" width="305" /></a></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<div style="text-align: center;">
Panel decorativo en marfil. Arte Omeya s. XI</div>
<br />
<br />
<span style="color: #ffe599;">"A los que creen y hacen buenas obras, les haremos entrar en jardines, debajo de los cuales fluirán ríos, eternamente para ellos; tendrán en ellos esposas purificadas. Los haré entrar en la sombra umbrosa".</span><br />
<span style="color: #ffe599;"><br /></span>
<span style="color: #f1c232;"><i>Corán</i>, IV, 56</span><br />
<br />
<br />
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;"><i><b><span style="font-size: large;">El Paraíso en el Islam</span></b></i></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;">(fragmentos)</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;">por</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;"><span style="font-size: large;">Noelia Silva-Santacruz</span></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;">Universidad Complutense de Madrid</span></div>
<br />
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><b><span style="font-size: large;">ESTUDIO ICONOGRÁFICO</span></b></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><b><br /></b></span>
<span style="color: #9fc5e8;"><b>Atributos y formas de representación</b></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">El Paraíso, compendio de todos los placeres a los que el hombre puede aspirar y
máxima promesa de felicidad para el musulmán honorable y piadoso, se interpreta en el
pensamiento islámico como un lugar idílico situado
en el «Más allá», y se representa
tradicionalmente como un frondoso jardín recorrido
por ríos y arroyos de aguas limpias,
plagado de fuentes, en el que crecen flores aromáticas, así como toda clase de árboles que
proporcionan prolongada y permanente sombra, rebosantes de deliciosos frutos de toda
estación carentes de espinas, que se inclinan hasta
el suelo y pueden ser siempre alcanzados
sin dificultad, asegurando la subsistencia de sus moradores. Ofrece así una noción antitética
del paisaje desértico predominante en la Península
Arábiga, cuna de la civilización
musulmana. Para los habitantes de este territorio,
a menudo privados de alimento y agua,
conviviendo con un clima de gran dureza, la descripción de estos goces ultraterrenos
equivaldría al cumplimiento de sus sueños insatisfechos.</span><br />
<br />
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhBx-B6Y71zIwlnEUcuDLNv-uv5tCCCO8SxH40hYhdchHwnvb3xuoCwmLRM9kTWxAPKtgxzZEpiYSDY5uRUlxDnOxyo4_rZTDRDgY9AReK7u8jfKiNxnZD6xybyTU-idniMZ0pu_JDwdc2z/s1600/islam+paraiso+8.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhBx-B6Y71zIwlnEUcuDLNv-uv5tCCCO8SxH40hYhdchHwnvb3xuoCwmLRM9kTWxAPKtgxzZEpiYSDY5uRUlxDnOxyo4_rZTDRDgY9AReK7u8jfKiNxnZD6xybyTU-idniMZ0pu_JDwdc2z/s1600/islam+paraiso+8.jpg" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Mosaico de la Gran Mezquita de Damasco s. VIII</div>
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">La desaprobación teológica del arte figurativo, acompañada por una propensión del
Islam hacia lo simbólico, dio lugar a que la mayoría de las imágenes asociadas al Paraíso en la
Edad Media adoptaran una fórmula representativa de
carácter básicamente conceptual. En
construcciones religiosas y en algunos espacios representativos vinculados al poder, se
recurrió a la evocación del jardín celestial a través de la figuración de “una parte por el todo”,
es decir, apelando a una sinécdoque visual en la que la presencia de composiciones vegetales
aisladas pretendía recrear el jardín celestial en su conjunto. Tal significado trascendente, que
excede la mera intención ornamental, se ha atribuido con frecuencia por los estudiosos a los
mosaicos de la Gran Mezquita de Damasco, datados en
el siglo VIII, que muestran paisajes
idealizados acompañados por recreaciones arquitectónicas o, dentro del ámbito andalusí, a las
decoraciones de la bóveda central de la
maqsura
de la mezquita de Córdoba, aquella que
precede a la entrada del mihrab; a los zócalos del salón del trono o salón de recepciones
denominado Salón Rico de la ciudad palatina de
Madīnat al Zahrā’ o a los muros del
oratorio poligonal del palacio taifa de la Aljaferí
a de Zaragoza, todos ellos con superficies de
abigarrado ataurique conformado por un sinfín de hojas, flores y frutos bajo los que subyace
una estricta simetría.</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhmMAt_Gc49PAh9ho9JzwojG_dgY4efbG4JtaSCP7oS2YZ17L5L7nDpMaRa1sEabRM7WXYUY-8YieGh55WgXDlfNrgQPYuw5X0T_E4ztoSHmBD_KRjAwpj5Zerq0puwaa6kmSZ8gcxuNOAZ/s1600/islam+paraiso+3.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhmMAt_Gc49PAh9ho9JzwojG_dgY4efbG4JtaSCP7oS2YZ17L5L7nDpMaRa1sEabRM7WXYUY-8YieGh55WgXDlfNrgQPYuw5X0T_E4ztoSHmBD_KRjAwpj5Zerq0puwaa6kmSZ8gcxuNOAZ/s400/islam+paraiso+3.jpg" width="307" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Zócalo de marmol en ataurique en
Madīnat al Zahrā’</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">Incluso se ha querido ver este mismo significado en los árboles que
adornan las enjutas del arco de entrada al Salón de
Comares de la Alhambra de Granada. Esta
concepción abreviada del Paraíso triunfó también y
paralelamente en objetos diversos de artes
suntuarias, tanto de uso litúrgico, como palatino o
doméstico.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">A diferencia de las metafóricas o conceptuales, las
representaciones literales del jardín
celestial son mucho más escasas dentro del Islam medieval, localizándose por lo general en
trabajos artísticos a pequeña escala, restringidos
al ámbito privado y vinculados
fundamentalmente con el patronazgo regio o principesco. Ejemplos excepcionales de esta
forma de expresión visual lo constituyen algunas piezas de eboraria andalusí de época califal.
La vida supraterrena se concibe igualmente como trasunto o imitación de la vida de la corte,
por lo que ciertas escenas de iconografía áulica incorporadas en marfiles, pueden ser
asimismo interpretadas como escenas paradisíacas, especialmente aquellas en las que se
representa la imagen impersonal del soberano rodead
o por músicos y cortesanos, situando el
hom
o árbol de la vida como eje de simetría. </span><br />
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgUmN5SYvFoMeWGEHNwbuBXxr9NQJZbu8Zq7RiJkcB-NW-xbP_XgSzioy9gjNwO0eKDZTu4FIaOzUX9CitG94ga8ekTxqwp2kbz_o8OfHpiscJ4wG9FEZLwqTc6ZsMWvw1thkp6ungy_Yc2/s1600/islam+paraiso+4.JPG" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="302" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgUmN5SYvFoMeWGEHNwbuBXxr9NQJZbu8Zq7RiJkcB-NW-xbP_XgSzioy9gjNwO0eKDZTu4FIaOzUX9CitG94ga8ekTxqwp2kbz_o8OfHpiscJ4wG9FEZLwqTc6ZsMWvw1thkp6ungy_Yc2/s320/islam+paraiso+4.JPG" width="320" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Panel central de la Arqueta de Leyre en marfil. Arte Omeya s, XI</div>
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">Con todo,
la variante descriptiva alcanzó su
máxima expresión en aquellos manuscritos iluminados
en los que se visualiza el jardín
celestial con todo lujo de detalles. Desafortunadamente solo conservamos códices con esta
temática a partir del período tardomedieval, como la copia del
Mi’raj nama
de Mir Haydar,
iluminada en el siglo XV en Herat para el príncipe
timurida Shah Rukh, hoy en la Biblioteca
Nacional de París, y que está ilustrada con miniaturas que reproducen con gran minuciosidad
los jardines del Paraíso, incluyendo la puerta de entrada, sus ríos e incluso los juegos de las
huríes.</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgYpFS3nGmu3n2GvBXoFDS_RjV-F9_Z5zR5wjtoxRl_g86bqyNAgl9-gKaAO_pAtTigZzRWEWRTYzfCqzOYbQ-AnDu70aQtZISMM9MtdkmkPFr5Rr_RaQgJBHHYympm9GqYbiApyITCRbha/s1600/islam+paraiso+2.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="398" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgYpFS3nGmu3n2GvBXoFDS_RjV-F9_Z5zR5wjtoxRl_g86bqyNAgl9-gKaAO_pAtTigZzRWEWRTYzfCqzOYbQ-AnDu70aQtZISMM9MtdkmkPFr5Rr_RaQgJBHHYympm9GqYbiApyITCRbha/s400/islam+paraiso+2.jpg" width="400" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
El profeta Muhammad llega en su cabalgadura guiado por el arcángel Gabriel al paraíso donde encuentra a las huríes. Folio 24 del Mira'j-nameh, s. XV</div>
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">Asimismo, la propia concepción del jardín islámico
asociado a la residencia regia o a
la arquitectura doméstica tiene mucho que ver con la evocación nostálgica del Paraíso
celestial y debe entenderse como una interpretación escenogr
áfica y descriptiva de su iconografía. Como señala Rustomji, el paralelismo entre esta última morada y los jardines
terrenales islámicos es enorme. Muestra de ello es su proliferación, destacando ejemplos en
al Andalus en forma de jardines de crucero desde época califal, como el Jardín Alto de la
ciudad palatina de Madīnat al Zahrā’ o, ya en época
nazarí, el Patio de los Leones de la
Alhambra de Granada.</span><br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><b>Fuentes escritas</b></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">El Corán, el libro sagrado de los musulmanes, hace
hincapié en la certeza de una vida
futura, de una recompensa final para los piadosos,
materializada en la promesa de alcanzar el
Paraíso eterno a través de cuantiosas referencias al mismo dispersas en numerosas suras, por
lo que es, sin duda, la fuente escrita principal que ha alimentado a lo largo de los siglos la
construcción del dogma y de la imagen visual del «Más allá» islámico. El texto revelado no
ofrece descripciones sistemáticas, sino visiones fugaces de un mundo de dicha y confort,
alentando una interpretación en la que se conjuga espiritualidad, con una manifestación
esencialmente materialista, sensorial e incluso en
ciertas ocasiones sensual de la última
morada. (...)</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">Tan solo en un pasaje (sura 47,16 17), el Corán define con precisión la naturaleza de
los ríos que lo recorren, aunque no su número, indicando que serán de agua, leche, vino y
miel. También especifica que las fuentes estarán aromatizadas con alcanfor o jengibre (76,5 6
y 17-18). Las especies vegetales que lo pueblan, con frecuencia apenas detalladas, se
describen ocasionalmente como parras, palmeras y granados (sura 55,68).</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">Según el libro sagrado, a los bienaventurados les aguardan de igual forma en este
Paraíso selectos goces permanentes vinculados con la pompa regia, como el disfrute de
excelentes moradas en forma de pabellones (suras 58
,12; 13,24 y 19,73), la posesión de
suntuosas joyas, espléndidas vestimentas de seda o
el uso de delicados perfumes (suras 18,31
/ 22,23 / 35,33 / 44,53 y 74,12).</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjPWl9fsBNoSAD9lJvwxB31JSIeZUg4hpeWSWL4-6mTy_fFnYCAg4C0ebQSkZqP2U-FuY-8N8oQkv-GTK0jbStvYD9ugoNRjOSJr7RvYqJUT5caonzkkicoKMME3y5AMXcN5QZgMyLuAZEc/s1600/islam+paraiso+9.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjPWl9fsBNoSAD9lJvwxB31JSIeZUg4hpeWSWL4-6mTy_fFnYCAg4C0ebQSkZqP2U-FuY-8N8oQkv-GTK0jbStvYD9ugoNRjOSJr7RvYqJUT5caonzkkicoKMME3y5AMXcN5QZgMyLuAZEc/s640/islam+paraiso+9.jpg" width="360" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Miniatura persa</div>
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">La vida paradisiaca se describe como una recepción cortesana,
acompañada de conciertos y danzas. Se hace hincapié
en la celebración de elegantes
banquetes en los que se degustarán vino y licores presentados en magníficos recipientes:
copas, vasos y cráteras de vidrio o metales preciosos (suras 52, 20 24/ 56,17/ 76,19 21)
servidos por efebos (12,17; 16,10) y bellas muchachas, y también se hace alusión a otros
placeres de carácter más sensual, como el insinuado
disfrute de esposas puras o huríes, es
decir, jóvenes vírgenes que se ofrecerán para el deleite carnal de los elegidos (suras 2,25 /
3,15 / 4,57 / 38,52/ 43,70 / 44,54 56 / 55,72 y 70
72/ 78,33). Los habitantes del Edén estarán
sentados en tronos (sura 15,44), acostados en divanes (18,30), o bien reclinados en sofás o
estrados (86 y 52,20) con frecuencia acomodados sobre cojines o tapices (55,45 o 56,10).</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">Los placeres del Paraíso estimularán todos los sentidos y el aire que se respirará en
este ámbito tendrá olor a almizcle (83,23 28, 35);
alcanfor (76,5 22) y jengibre (52,19).</span><br />
<br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjlD3_Zt3EP-j9X5EzqOEkSF-0EhvFZpCiG4_VJLbiLhMmXW1eDPi2weSSekyhX4-S6uONSu4LHO32mYJwAw0G2HDxtIFjdw9XK0uGe8b7eyy-xRkJqvi7Pkyg3QWKAFsoYtOb1x4Q-cv_8/s1600/islam+paraiso+10.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjlD3_Zt3EP-j9X5EzqOEkSF-0EhvFZpCiG4_VJLbiLhMmXW1eDPi2weSSekyhX4-S6uONSu4LHO32mYJwAw0G2HDxtIFjdw9XK0uGe8b7eyy-xRkJqvi7Pkyg3QWKAFsoYtOb1x4Q-cv_8/s640/islam+paraiso+10.jpg" width="386" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Miniatura Mughal, s. XVI</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">Junto a las satisfacciones de orden material, los bienaventurados encontrarán en el
Paraíso otros disfrutes de carácter espiritual. Vivirán allí una vida feliz, en paz, sin odio, ni
dolor ni cansancio, ni pena, ni miedo ni vergüenza.
Incluso en algunos pasajes se vislumbra la
insinuación a un goce superior reservado a ciertos
elegidos, relacionado con la fijación del
alma en la contemplación eterna de Dios (9,72).</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">En el Oriente araboislámico, las numerosas referencias coránicas estimularon la
aparición ya desde el siglo I de la Hégira (siglo V
II de nuestra era), de numerosos hadices
(
hadīths)
‒
recopilaciones de los hechos y dichos del Profeta
‒
dedicados a describir el Paraíso y
su vida en él, de los que se realizaron diferentes
compilaciones en siglos sucesivos, como la
llevada a cabo por el andalusí ‘Abd al Malik b. Hab
īb (h. 852) bajo el título
Kitāb waf al
Firdaws
(Libro de la descripción del Paraíso) o la reunida por el cordobés Ibn Waddāh (h.
900). Muy significativo resulta también el ciclo
atribuido a Ibn ‘Abbās, pariente de Mahoma,
que fue titulado
Corte de la Santidad, en cuyos pasajes se describe la vida en el Más allá como
una fiesta cortesana, acompañada de música y bailes. Precisamente un
hadīth
muy divulgado
de este autor organizaba jerárquicamente el Paraíso
en siete u ocho mansiones o moradas
celestiales, en las que se distribuía a las diferentes categorías de elegidos según sus méritos, en
antítesis simétrica con los siete pisos infernales.
Cada uno de estos jardines poseía un nombre
distinto, que variaba, al igual que su número, en las distintas redacciones del texto. Algunos
hadīths
llegaban a prometer incluso extraordinarias satisfacciones espirituales a los creyentes,
como la contemplación de la faz divina, aunque ello
contradiga la tradición según la cual los
hombres son incapaces de soportar incluso el simple
reflejo de su luz.</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgcOgR63RI-KiHALgE8-F2FhdvGQTTFLh7svPXBg5yRTolhrJ8yTygm__A-PWL9QEfo4Q8acdRsin4bug__tBrOO4IQG7D-jNCsOWmRILidDJsKQxTaFybz_NojH05xlDlm1P2KK8m-LBc7/s1600/islam+paraiso+1.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgcOgR63RI-KiHALgE8-F2FhdvGQTTFLh7svPXBg5yRTolhrJ8yTygm__A-PWL9QEfo4Q8acdRsin4bug__tBrOO4IQG7D-jNCsOWmRILidDJsKQxTaFybz_NojH05xlDlm1P2KK8m-LBc7/s400/islam+paraiso+1.jpg" width="343" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
El profeta Muhammad en el Paraíso durante su Ascensión.</div>
<div style="text-align: center;">
Folio 23 del <i>Mira'j-nameh</i>, s. XV</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">Precisamente este conjunto de tradiciones proféticas alentaron el surgimiento de la
célebre leyenda de la Ascensión o Escala de Mahoma
(
Mi’rāŷ
), de la que existen varias
versiones, en la que el Profeta narra en primera persona su viaje una noche a Jerusalén (
Isrā'
)
y su ascensión al Más Allá (
Mi’rāŷ
). Un periplo que le permitirá recorrer los siete cielos,
hasta llegar al octavo, donde se describe la existencia de siete Paraísos diferenciados, cada
uno con nombre propio, todos ajardinados y cercados
por un muro de materiales preciosos y
gemas, cada uno más espléndido que el anterior, siendo el último la casa Dios, es decir, el
espacio reservado para los mejores y más piadosos creyentes. (...)<b><br /></b></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;"><b>Precedentes, transformaciones y proyección </b></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">La imagen del Paraíso como jardín es una idea muy extendida entre los pueblos
orientales desde los tiempos primitivos de la humanidad. En la literatura de la creación
sumeria, por ejemplo, el edén “Dilmun” es concebido
como un rico y fértil paraíso.
Igualmente se advierte este concepto en la Antigüedad pagana, recreada con frecuencia en la
literatura clásica bajo la noción de
l<i>ocus amoenus</i>
e incluso identificada en la mitología con
un lugar llamado Campos Elísios. Se trata además de una creencia común asimilada en la
escatología de las otras dos religiones del Libro,
Cristianismo y Judaísmo, que servirán en
buena medida de inspiración para el Islamismo.</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgf-dYqZ9q5AqXFTIjy0U4USyf6vrqHjJmxQidGUVgHOi1ohxS4b0DBoa2ahceHu7qSVH_7lV1DabISznVplGU2PKej3pKSp2YpdfU9JoP-vilLcBrRvDnEuiJm_7IODkc-JFsOoTVQkfxr/s1600/islam+paraiso+12.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgf-dYqZ9q5AqXFTIjy0U4USyf6vrqHjJmxQidGUVgHOi1ohxS4b0DBoa2ahceHu7qSVH_7lV1DabISznVplGU2PKej3pKSp2YpdfU9JoP-vilLcBrRvDnEuiJm_7IODkc-JFsOoTVQkfxr/s640/islam+paraiso+12.jpg" width="311" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Alfombra con jardin del paraíso en su diseño. Persia, s. 18</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">Es, por tanto, difícil determinar el origen de la imagen coránica del jardín celestial.
Debió estar influida sin duda por descripciones judeocristianas, a las que se agregaron las
propias tradiciones locales árabes y la herencia persa. Como también sucedió con sus
manifestaciones culturales, artísticas o científicas, la civilización islámica fue capaz de
fusionar elementos específicos de otras tradiciones, recreándolos de forma novedosa y
dotándolos de una impronta propia y original.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">En la Arabia preislámica existía una tradición autóctona pagana de jardines sagrados.
Por ejemplo, se sabe que la diosa Al Uzza tenía un
jardín sagrado en el oasis de Nakla y que
el sumo sacerdote Maslamah de Yamama, un monoteísta
que rendía culto al “Dios único” (al
Rahmān), era propietario del denominado Hadiqat al
Rahmān (Jardín de El Misericordioso).
Incluso este concepto se retrotrae aún más atrás en
el tiempo, a la civilización persa, pues el
capítulo II del libro
Vendidad
del <i>Zend Avesta </i>ya describe el Paraíso primordial,
construido
por Yima siguiendo las órdenes de Ahura Mazda, como
un vergel. No hay que olvidar además que la palabra paraíso significa “jardín rodeado de muros”, derivando
etimológicamente de los términos persas
<i>pairi</i>
(alrededor) y
<i>daeza</i>
(muro).</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">La concepción musulmana del jardín del Paraíso y muchos de sus rasgos descriptivos
se proyectarán en Occidente en época medieval y contaminarán con frecuencia las
manifestaciones iconográficas cristianas del Más Allá, asociadas habitualmente con el tema
del Juicio Final, gracias a los intercambios culturales con el mundo islámico. El relato de
La
escala de Mahoma
fue conocido en la Europa cristiana a partir del s
iglo IX, propiciando en
gran medida la aparición de leyendas en verso, como
por ejemplo el poema titulado
<i>Le
vergier du paradis</i>
, publicado por Jubinal
o la obra lírica de un anónimo trovador provenzal
denominada
<i>Cour du paradis</i>, ambas datadas en el siglo XIII, que alentarán las
representaciones visuales. (...)</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhvOv7v0N1mR7clrwIC8FXeQYE_6R3QhJa2jSCYbTfjx_sLB6PR0ESVwdCYeL5G5iXiMS58AX6DQ9jF125X3Q2mBtyXtfcCHtADErDYAHljVskAl3ug0pjzugR4TGcYxFheWbb5D3hc8dbD/s1600/islam+paraiso+11.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhvOv7v0N1mR7clrwIC8FXeQYE_6R3QhJa2jSCYbTfjx_sLB6PR0ESVwdCYeL5G5iXiMS58AX6DQ9jF125X3Q2mBtyXtfcCHtADErDYAHljVskAl3ug0pjzugR4TGcYxFheWbb5D3hc8dbD/s400/islam+paraiso+11.jpg" width="373" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
El amante y su dama en el jardín (Hortus Conclusus)</div>
<div style="text-align: center;">
Manuscrito Harley, <span class="" id="result_box" lang="es"><span class="">British Library</span></span></div>
<br />
<br />
<br />
Para leer el artículo completo: <a href="https://www.ucm.es/data/cont/docs/621-2013-11-21-6.%20Para%C3%ADso%20en%20el%20Islam.pdf">REVISTA DIGITAL DE ICONOGRAFÍA MEDIEVAL</a><br />
<br />
Entradas relacionadas:<br />
<br />
<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2010/10/jardines-del-paraiso.html">Jardines del Paraíso </a><br />
<br />
G<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2011/07/geometria-del-espiritu.html">eometría del Espíritu</a><br />
<br />
<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2012/12/la-rebelion-de-satan.html">La rebelión de Satán</a><br />
<br />
<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2013/07/fascinacion-por-oriente-en-la-edad-media.html">Fascinación por Oriente en la Edad Media</a><br />
<br />
<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2015/10/alquimia-de-la-luz.html">La Alquimia de la Luz</a><br />
<br />
<br />
.Janhttp://www.blogger.com/profile/10112360698804083485noreply@blogger.com4tag:blogger.com,1999:blog-4945391151380854953.post-7944779264846904852016-09-18T05:20:00.000-07:002016-09-18T05:20:11.496-07:00El jardín platónico<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgu_0q4kRZk2wc7UVzUdwXFapkY5htOv2-p1Ge-nqW7FAWSRAI74laPjLciAbmPw_A0byCeAbiT5J42Q1jIOLNPXFzhlcwsfC0-xHZK_km6IT1RwUCTWpucEY7iQWNRtlO1SR-ohBfCwHmO/s1600/el+jardin+platonico+1.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgu_0q4kRZk2wc7UVzUdwXFapkY5htOv2-p1Ge-nqW7FAWSRAI74laPjLciAbmPw_A0byCeAbiT5J42Q1jIOLNPXFzhlcwsfC0-xHZK_km6IT1RwUCTWpucEY7iQWNRtlO1SR-ohBfCwHmO/s400/el+jardin+platonico+1.jpg" width="250" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
J. W. Waterhouse, <i>Psique abriendo la puerta al Jardin de Cupido</i> (1904)</div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #ffe599;">"Y como la vida se ha manifestado y cunde perennemente entre los seres, por eso se dice que los dioses celebran un festín, como gozando de una dicha parecida a la de un festín. Y así es como éste, el Amor, comenzó a existir necesariamente y por siempre, nacido de la aspiración del Alma a lo superior y al Bien, y así es como existió por siempre desde que el alma existe".</span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #f1c232;"><br /></span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #f1c232;">Plotino, <i>Enéadas</i> (III, 5) </span></div>
<div style="text-align: left;">
<br /></div>
<div style="text-align: left;">
<b><i><br /></i></b>
<br />
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;"><b><i><span style="font-size: large;">Interpretaciones platónicas del jardín</span></i></b></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;"><span style="font-size: small;">(fragmento) </span></span><br />
<span style="color: #3d85c6;"><span style="font-size: small;">por </span></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;"><b><span style="font-size: large;">Francisco Fonseca Martín</span></b></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;"><span style="font-size: small;">(Universidad del País Vasco)</span></span></div>
<br />
<br />
<br />
<br /></div>
<span style="color: #9fc5e8;">En los textos de
Platón aparece en algunas ocasiones la metáfora del jardín, se
menciona el jardín de Zeus y el de
Eros. Queremos entender por qué
Platón recurrió a tal imagen y qué significa.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">Para entenderlo buscamos en los textos de
Platón, y también, especialmente a
los de
Plotino (s.III d.
C
.) y Ficino (s.XV) que desglosaron algunos de los textos
que citamos y atendieron la cuestión con detenimiento.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">Respecto a quien es Zeus, y qué simboliza, lo más próximo que encontramos a
una definición del estatus de Zeus lo hallamos en el Filebo de
Platón, cuando dice:
«en la naturaleza de Zeus hay un alma de rey y un intelecto de rey».
En Fedro lo
denomina: «poderoso señor de los cielos, conduciendo su alado carro, marcha en
cabeza, ordenándolo todo y de todo ocupándose».</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgLn4Kq41CX4GyYBMG3nMVLPq0l5qDqbeDYFnUx54f50VxBAU4eZKoSKLwag8R50dWZQQ-94pBEhs2ynJfhyphenhyphen1Au1ui14f00RdTDCgrX0h0_QDuGGw8zciTbC0nZcdstFZjcC5QDXMACoegf/s1600/el+jardin+platonico+7.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgLn4Kq41CX4GyYBMG3nMVLPq0l5qDqbeDYFnUx54f50VxBAU4eZKoSKLwag8R50dWZQQ-94pBEhs2ynJfhyphenhyphen1Au1ui14f00RdTDCgrX0h0_QDuGGw8zciTbC0nZcdstFZjcC5QDXMACoegf/s400/el+jardin+platonico+7.jpg" width="331" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Recreación de la estatua de Zeus en el templo de Olimpia</div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">Vemos que Zeus parece regentar el lugar más alto de la jerarquía entre los dioses, y representa el más elevado grado del saber.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">Plotino, cuando estudió las definiciones de
Platón respecto a Zeus dedujo que:
«Zeus ha de ser idéntico a la Inteligencia, mientras que
Afrodita, que es su hija, nacida de él y con él habrá de ser identificada con el
Alma (...)
Afrodita se identificará
con el alma de Zeus».</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">Platón se refería del siguiente modo al nacimiento de
Afrodita: «
Cuando nació
Afrodita, los dioses celebraron un banquete y, entre otros, estaba también
Poros, el
hijo de
Metis. (...)
Poros embriagado entró en el
jardín de Zeus
y entorpecido por la embriaguez se durmió. (..)
Poros se acostó a
su lado y concibió a
Eros».</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">De modo que por un lado Zeus, representa la Inteligencia, conoce la verdad
porque la contempla directamente de las ideas supracelestiales.
Por otro lado esa
misma inteligencia conocedora de la verdad, —que es única, según el sistema
platónico— genera (en la mente de los hombres) el deseo de conocimiento, que
aparece figurado por
Afrodita.</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiLMdMw_YKvHMmld-ONjeo-eQM5CtphGTdgLUtvHmpH9ggoesSaZTV8k5Sph34AhyphenhyphenfaKg5M14U-dQW_5VCHCNTEBTFP0NhxzNaiR6qUT3-oigWAKrAaWd-XxPoumcZ22815RduOv0tCdMcV/s1600/el+jardin+platonico+1.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiLMdMw_YKvHMmld-ONjeo-eQM5CtphGTdgLUtvHmpH9ggoesSaZTV8k5Sph34AhyphenhyphenfaKg5M14U-dQW_5VCHCNTEBTFP0NhxzNaiR6qUT3-oigWAKrAaWd-XxPoumcZ22815RduOv0tCdMcV/s640/el+jardin+platonico+1.jpg" width="355" /></a></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
Venus-Afrodita bajo Eros-Cupido en La Primavera de Botticelli</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><b>Respecto al jardín de Zeus y Eros </b></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">Como hemos visto, según el texto de
Platón,
Afrodita nació en el jardín de
Zeus, y el jardín ¿qué simboliza?
Platón es escueto al respecto, pero
Plotino se extiende en ello y lo explica del siguiente modo:</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #cfe2f3;"> ...todo jardín es un engalanamiento y un lujo de riqueza.
Más la finca de Zeus está
engalanada con una razón, y su lujo son las galas transmitidas al
Alma por la Inteligencia
en sí. ¿O
qué otra cosa puede ser el jardín de Zeus sino sus estatuas y sus galas? Y sus galas
y sus adornos ¿qué pueden ser sino las razones emanadas de él? Y el conjunto de razones
es
Poros, la profusión y la riqueza de cosas bellas hechas ya patentes. Y en esto consigue
el embriagarse de néctar.
Porque ¿qué es el néctar para los dioses sino lo que la divinidad
toma?
Ahora bien, lo que toma la divinidad sita bajo la Inteligencia es una razón. (...) la
Razón es prole de la Inteligencia. (<i>Enéadas</i>, III, 9, 5-2) </span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">Ficino se lo explica del siguiente modo: «
Por el jardín de
Júpiter se entiende la
fecundidad de la vida angélica, en la cual cuando desciende
Poro, o sea, el rayo de
Dios, unido a
Penia, esto es, la indigencia que antes había en éste, crea el amor». </span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgp3OsMnOyD83JVPT15iI3XktB-14Kbch8nl5SoAbCTkglayqGpp56E5qL7-7hjpkeLAA6xAb1BQ_QQgTEEDoVP7-L3Cp4ZwHmXQbO6uVtAJtELzh9pf8oKZxTI5KtilWhEO8hUO6Nyr_4X/s1600/el+jardin+platonico+2.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgp3OsMnOyD83JVPT15iI3XktB-14Kbch8nl5SoAbCTkglayqGpp56E5qL7-7hjpkeLAA6xAb1BQ_QQgTEEDoVP7-L3Cp4ZwHmXQbO6uVtAJtELzh9pf8oKZxTI5KtilWhEO8hUO6Nyr_4X/s400/el+jardin+platonico+2.jpg" width="394" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Ilustración de Le Roman de la Rose</div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">De todo ello podemos deducir que el jardín se nos presenta, sobre todo como
algo grato y fecundo, esa fecundidad no es otra que la inteligencia, que a su vez
engendra el deseo de verdad, y este deseo es una forma de amor.
Dicho de otra
manera es inherente a la inteligencia el amor, porque nada da frutos más jugosos
y provechosos que el descubrimiento de la verdad, que es una forma de amor, la
más elevada.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">Hay que entender el nacimiento de
Afrodita en el jardín de Zeus, como un
fruto de ese jardín fecundo, y el jardín
como una metáfora de los dones de la
inteligencia.
El
Uno se prodigó para
comunicar al mundo sublunar, es decir
a las cosas y a los hombres su «divina
influencia», Ficino incluso dijo que el
amor nació (en el jardín de
Júpiter),
«engendrado a la sombra de la vida,
puesto que el deseo de entender nace
inmediatamente después del vigor de
la vida».
Afirmando así que vivir verdaderamente significa buscar el saber,
desear la verdad.
Aunque la sola razón
resulta insuficiente para alcanzarla; en
ocasiones, los que se aplican intensamente a tal búsqueda, alcanzan un temporal éxtasis místico que les permite
vislumbrarla, y es ésta, precisamente, la
más plena actividad de la inteligencia.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">Y, ¿cómo entender el jardín en el que suele aparecer
Eros?
Los
Eros o amores,
son hijos de
Afrodita; pues cada forma de la belleza despierta o engendra uno de
esos amores.
Esa multitud
Eros o de deseos que la belleza despierta, deseos que
mueven el mundo, que generan la actividad del mundo y que constituyen el estímulo de la vida, suelen aparecer representados en los jardines, pues sugieren la idea
de fertilidad, prodigalidad y abundancia.
A
unque, como sabemos, dentro de esos
deseos hay una distinción entre los más terrenales, los dirigidos a la belleza de los
cuerpos, y, otros —considerados por los platónicos más elevados, y finalidad última
de todo saber— los que buscan la belleza de lo imperecedero, o el conocimiento
de la verdad.
Aplicarse a la búsqueda de este conocimiento, sería la manifestación
del amor más elevado.</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjlUe1MTq6wxjXtLe5wyClCqqapiNggaY8x7dfdmTbxCfoNWzZLmfo9k3mH8lFv4hsdScWC1HN4slNi2CvtenOLYfQk9vom8LvdU-GVQguzR_5mfMM59uVcut9cPCmagNsZIevxPzGa28XU/s1600/el+jardin+platonico+5.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjlUe1MTq6wxjXtLe5wyClCqqapiNggaY8x7dfdmTbxCfoNWzZLmfo9k3mH8lFv4hsdScWC1HN4slNi2CvtenOLYfQk9vom8LvdU-GVQguzR_5mfMM59uVcut9cPCmagNsZIevxPzGa28XU/s400/el+jardin+platonico+5.jpg" width="307" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Hermes elevando a Psique hacia el Olimpo, Loggia di Psiche, Villa Farnesina<br />
<br />
<br />
<br /></div>
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<br />
<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2010/06/sobre-la-belleza.html">Sobre la Belleza</a><br />
<br />
<br />
.Janhttp://www.blogger.com/profile/10112360698804083485noreply@blogger.com6tag:blogger.com,1999:blog-4945391151380854953.post-55231721278063262602016-07-11T09:05:00.000-07:002016-07-11T09:05:31.401-07:00El bestiario astronómico<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgpQt70CMnjsa2SPHQGz_8MxTnalwiwzDYnB80hzVhplI1sFt4y_IfHq4xdn0C9lVtWXlYaPfCVV88oubKDFpsT30cwlunokLB6_dzePwOsQzIqrVEzFmEkYQilBGArjT1JTDox-hLkro9W/s1600/bestiario.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgpQt70CMnjsa2SPHQGz_8MxTnalwiwzDYnB80hzVhplI1sFt4y_IfHq4xdn0C9lVtWXlYaPfCVV88oubKDFpsT30cwlunokLB6_dzePwOsQzIqrVEzFmEkYQilBGArjT1JTDox-hLkro9W/s400/bestiario.jpg" width="370" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Ignace Gaston Pardies, <i>Globi Coelestis... </i>(1674)<i>, </i>detalle de la constelación de Cetus.<br />
<br />
<br />
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #ffe599;"><br /></span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #ffe599;">"...y mientas los demás animales están naturalmente inclinados mirando a la tierra, dio al hombre un rostro levantado disponiendo que mirase al cielo y que llevase el semblante erguido hacia las estrellas."</span></div>
<br />
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #f1c232;">Ovidio, <i>Metamorfosis</i>, Libro I</span></div>
<br />
<br />
<br />
<span style="color: #3d85c6;"><b><i><span style="font-size: large;">El bestiario astronómico</span></i></b></span><br />
<span style="color: #3d85c6;"><b><i><span style="font-size: large;">Los motivos animalísticos en los mapas celestes de la edad moderna</span></i></b></span><br />
<span style="color: #3d85c6;">por</span><br />
<span style="color: #3d85c6;"><span style="font-size: large;">José Julio García Arranz</span></span><br />
<br />
<br />
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;"><b>Los orígenes</b></span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;">Si bien la vida urbana de nuestros días nos está condenando a perder el
contacto con el firmamento estrellado, parece obvio que en todas las
sociedades preindustriales la oscuridad de la noche ocupó una buena
parte de la existencia del hombre. Resulta lógico que en estas culturas se alcanzara un conocimiento de los cielos nocturnos que llegó a ser incluso más preciso que el del mundo en que vivían. No sabemos cuando se empezó a
poner orden en la inmensa bóveda celeste agrupando las estrellas en
constelaciones, pero parece que ya desde tiempos remotos el hombre
inventó reglas mnemotécnicas para reconocer las agrupaciones,
identificándolas con animales, personajes y elementos característicos de
sus relatos míticos y tradición simbólica. Es la necesidad de establecer en el cielo puntos de referencia y dirección, y, sobre todo, de regular y controlar el paso del tiempo, lo que impulsó tan tempranamente a cartografiarlo.</span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;">Se viene considerando que la franja del firmamento por la que el sol se "desplaza" fue la primera en ser codificada astrológicamente, tal vez por la importancia que el hombre concedió desde los primeros tiempos al supuesto movimiento del astro rey como elemento regulador de la vida. Las estrellas comprendidas dentro de esta franja se dividieron en doce constelaciones, denominadas genéricamente Zodíaco. El sol completa un circuito completo de su trayectoria -la eclíptica o circuito zodiacal- en un año, pasando a través de una constelación específica de cada mes.</span></div>
<div style="text-align: left;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjS21Hq-WcZy41ncMBDJN828Nkz6sNnlg8PNX89r5Sh_kwDcw81KVpZHkGNR55S9VM7XT9viGcq6wvC9WKG6smzr2BvJi3jHSMA6z7JCzFAz9OqvLlnTBXKzsGBg8aMuymh_jwBoR1JULU7/s1600/bestiario+10.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjS21Hq-WcZy41ncMBDJN828Nkz6sNnlg8PNX89r5Sh_kwDcw81KVpZHkGNR55S9VM7XT9viGcq6wvC9WKG6smzr2BvJi3jHSMA6z7JCzFAz9OqvLlnTBXKzsGBg8aMuymh_jwBoR1JULU7/s400/bestiario+10.jpg" width="392" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
El carro solar en el centro rodeado por el círculo zodiacal. </div>
<div style="text-align: center;">
Mosaico romano del s. III<br />
</div>
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;">A excepción de <i>Libra</i>, la Balanza, que fue añadida con posterioridad, en los signos del Zodiaco originales se observa una tendencia que se repetirá en la plasmación gráfica de muchas de las restantes constelaciones: se trata de criaturas vivas, alegorizaciones o animales, ya sean reales o imaginarios. De hecho el término "Zodiaco" procede de la palabra griega "animales" (<i>zódia</i>).</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">Las constelaciones zodiaclaes fueron diseñadas en Babilonia en un momento no bien establecido del primer milenio a. C., tal vez con anterioridad, y parece que en siglo IV antes de nuestra era pasaron a la India y Egipto, posiblemente como consecuencia de la conquista persa de la antigua región babilónica y formación del Imperio Aqueménida. A juzgar por ciertas informaciones de Herodoto, el Zodíaco fue conocido finalmente en Grecia a través de su versión egipcia.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">Las estrellas que componen los grupos zodiacales pueden contemplarse desde cualquier punto de la tierra a lo largo del año. La visión de las restantes constelaciones más meridionales o septentrionales dependerá de nuestra situación respecto al Ecuador terrestre. En relación con este hecho, la principal aportación de los griegos al ámbito de la cartografía celeste fue la de codificar un sistema de contelaciones del área estelar situada mas al norte de la franja zodiacal, sometiéndolas a la forma clásica de latitud celestial tal y como hoy la entendemos gracias a la emergencia en aquellos momentos de las reglas de la geometría esférica.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">Eodoxo de Cnido construyó hacia el año 400 a. C. el primer globo estelar del que se tiene noticia. Hizo acopio de las observaciones realizadas hasta entonces, fijando el sistema de constelaciones clásicas, incluido el Zodíaco babilónico, en un globo o esfera, y su diseño influyó en otros globos celestes griegos, como demuestra el famoso Atlas Farnesio.</span><br />
<br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhJ7oNAPF43Vf9GvgyD3cLt5WCqdjQo1ZEU-JnTw28XSH6xcjucmrT89DlErN9u5jD9u6DZd9TaU-JqqhEWU-rf2kZed5UKFEK0dEmuyy2bO1bg1O55Ap21ul1RT2EQHTl5aqvAmckXVZmB/s1600/bestiario+10.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="266" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhJ7oNAPF43Vf9GvgyD3cLt5WCqdjQo1ZEU-JnTw28XSH6xcjucmrT89DlErN9u5jD9u6DZd9TaU-JqqhEWU-rf2kZed5UKFEK0dEmuyy2bO1bg1O55Ap21ul1RT2EQHTl5aqvAmckXVZmB/s400/bestiario+10.jpg" width="400" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Atlas Farnesio. <span class="irc_su" dir="ltr" style="text-align: left;">De izquierda a derecha: Andrómeda, Piscis, Aries y Tauro. Debajo de Tauro se aprecia Cetus (el Monstruo Marino) y encima Auriga.</span></div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;"><span class="irc_su" dir="ltr" style="text-align: left;">Su esfera, el más antiguo ejemplar superviviente y uno de los escasos mapas estelares procedente de la antigüedad grecorromana, nos muestra, en efecto, muchas de las constelaciones reunidas por el científico griego.</span></span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;"><span class="irc_su" dir="ltr" style="text-align: left;">Si bien el texto de Eodoxo se ha perdido, hacia el año 275 a. C. Arato compuso una versión poética de aquél -los <i>Fenómenos</i>-, en la que se describen sistemáticamente 47 constelaciones con leves alusiones a su trasfondo mítico.</span></span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;"><b><span class="irc_su" dir="ltr" style="text-align: left;"><br /></span></b></span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;"><b><span class="irc_su" dir="ltr" style="text-align: left;">Las constelaciones animalísticas ptolemaicas</span></b></span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;"><span class="irc_su" dir="ltr" style="text-align: left;"><br /></span></span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;"><span class="irc_su" dir="ltr" style="text-align: left;">Sin embargo, el sistema de constelaciones que sentará las bases del actual fue el propuesto por el astrónomo alejandrino Claudius Ptolemaus -Ptolomeo, activo entre 130-160 a. C.- en su <i>Almagesto</i>, destinado a convertirse en uno de los libros más significativos de la historia de la Astronomía. Es un manual en el que se recopilan todos los conocimientos astronómicos del mundo antiguo, presentando una relación de más de 1.000 estrellas agrupadas en 48 constelaciones, las 12 del Zodíaco más otras 21 al norte y 15 al sur de la eclíptica. Éstas no fueron creadas por Ptolomeo, sino recogidas de una antigua tradición y de los primeros catálogos estelares, como el realizado por Hiparco en el s. II a. C.. La recopilación ptolemaica supondrá el texto básico en materia de Astronomía hasta inicios del s. XVII.</span></span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiSwwZYkhMbUmZ_83yhrU3td2opYkltIW6NkSGoOdeLKJbsYSwtwYiVxgiINEvLw59wprcmclfQWoxNOXHHbPGXLxpIOMSfBSjdus8BLD64j26ifxev73pwGiIPR_9DZayH4tLC2-O4azP1/s1600/bestiario+20.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiSwwZYkhMbUmZ_83yhrU3td2opYkltIW6NkSGoOdeLKJbsYSwtwYiVxgiINEvLw59wprcmclfQWoxNOXHHbPGXLxpIOMSfBSjdus8BLD64j26ifxev73pwGiIPR_9DZayH4tLC2-O4azP1/s1600/bestiario+20.jpg" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
<span class="irc_su" dir="ltr" style="text-align: left;"> Grabado de una edición del <i>Almagesto </i>de Ptolomeo. S. XV</span></div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span class="irc_su" dir="ltr" style="text-align: left;">Los astrónomos europeos e islámicos de los siglos medievales simplemente limitaron sus observaciones a las estrellas presentadas por Ptolomeo, modificando levemente sus datos a fin de satisfacer sus necesidades: así sucedió con catálogos tan importantes como el de Al Sufi, en el s. X, o las<i> Tablas Alfonsíes</i>, en el XIII. </span></span><br />
<br />
<span class="irc_su" dir="ltr" style="text-align: left;"></span><br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<span class="irc_su" dir="ltr" style="text-align: left;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiayZF0MPO5rPe4j4vxBlxBj8pK54Sfe1dz2218zXVEw5vyV-ewuPaLBqDvqQV_rQQFv6Kts9hKFiRNzIKUSWhGzfR-oFNx7EXr9SPXdu88faMDi_9S5aY1YyBUrKebM-xMeHJkzI1driyL/s1600/bestiario+10.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiayZF0MPO5rPe4j4vxBlxBj8pK54Sfe1dz2218zXVEw5vyV-ewuPaLBqDvqQV_rQQFv6Kts9hKFiRNzIKUSWhGzfR-oFNx7EXr9SPXdu88faMDi_9S5aY1YyBUrKebM-xMeHJkzI1driyL/s400/bestiario+10.jpg" width="283" /></a></span></div>
</div>
<div style="text-align: left;">
</div>
<div style="text-align: left;">
</div>
<div style="text-align: left;">
<div style="text-align: center;">
<span class="irc_su" dir="ltr" style="text-align: left;"><i> Tablas alfonsíes</i> s. XIII</span></div>
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;"><span class="irc_su" dir="ltr" style="text-align: left;">Fue a partir de finales del siglo XVI cuando los astrónomos empezaron a trazar de forma masiva nuevas constelaciones que ya no se correspondían con las ptolemaicas.</span></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">Las 48 constelaciones de Ptolomeo, perpetuando la larga tradición zodiacal, adquieren nombres de animales o personajes relacionados con determinados relatos míticos como recurso para memorizar con más facilidad los sistemas astrales. Pero, pese a esa identificación mitológica de las constelaciones, predominan en los escritos ptolemaicos el afán científico frente a la preocupación por desvelar las fábulas que sirven de origen o trasfondo, y justifican la morfología o temática de estas constelaciones. Este tipo de información "literaria" fue proporcionado fundamentalmente por historiadores -Hesiodo-, mitógrafos -Apolodoro, Ovidio-, u otros autores que no dudaron en proporcionar una mayor carga poética a la descripción de los astros -el propio Arato, Cayo Julio Higinio en su <i>Astronomía</i>, o, muy especialmente, Eratóstenes a través de sus <i>Cataterismos</i>.</span></div>
</div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;">Los dibujos sobreimpuestos a las constelaciones ptolemaicas que han llegado hasta nosotros son, por tanto, motivos y personajes de la mitología griega. Unas veces se encuentran aislados en el firmamento -signos zodiacales-; en otras ocasiones, constelaciones situadas muy cerca pueden estar implicadas en la misma leyenda, o en otra similar. Así sucede, por ejemplo, en las constelaciones Cefeo y Casioipea, reyes de Etiopía, que permanecen cerca de su hija Andrómeda rescatada por Perseo del cercano monstruo marino -<i>Cetus</i>-. O con otras asociaciones, tales como la conjunción de Cuervo, Copa e Hidra, o del Boyero con la Osa mayor, todas ellas relacionadas mediante las correspondientes fábulas míticas que reseñaremos más adelante. El carácter mnemónico de estas "escenas estelares" parece evidente.</span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;"> En el caso del Zodiaco, una vez conocido el origen prehelénico de la mayoría de los signos, puede hablarse con seguridad de una readaptación de su morfología y contenido simbólico originales, adecuándose a determinados personajes y fábulas de la mitología griega. Esto parece evidenciado por las distintas versiones de los pasajes míticos que respaldan la existencia de los distintos zoomorfos zodiacales, lo que demuestra la adopción de un contenido mitológico a posteriori. A continuación revisaremos las fábulas que las fuentes grecorromanas asocian al primitivo bestiario zodiacal:</span></div>
<div style="text-align: left;">
<br /></div>
<div style="text-align: left;">
<table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: left; margin-right: 1em; text-align: left;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEisWYlnkxQWnENdLGd4LQ89wlTT2FTagIqXAAJdaffbMxjMBU_FIfoMlKu1fWim9e7lLZNNTMKYQ988grkkQkuNEWeH_4JkpDUV3Un4Pmn-oDSVL1y2KAwCy1DHeDr0VDwSyqvJocWf087u/s1600/bestiario+7.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="140" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEisWYlnkxQWnENdLGd4LQ89wlTT2FTagIqXAAJdaffbMxjMBU_FIfoMlKu1fWim9e7lLZNNTMKYQ988grkkQkuNEWeH_4JkpDUV3Un4Pmn-oDSVL1y2KAwCy1DHeDr0VDwSyqvJocWf087u/s200/bestiario+7.jpg" width="200" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Urania's Mirror (1824)</td></tr>
</tbody></table>
<span style="color: #9fc5e8;"><b>Cabra-pez </b>(<i>Capricornus</i>): Hijo de Pan que se crió con Zeus, a quien ayudó en la Titanomaquia con una caracola que, al sonar, ahuyentó a los Titanes. También se le identificó con el propio Pan; según Higinio Pan se sirvió de su forma híbrida para ocultarse del gigante Tifón.</span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;"><b>Cangrejo</b> (<i>Cancer</i>): Crustaceo gigantesco enviado por Hera contra Heracles cuando éste luchaba con la hidra. Heracles lo aplastó con el pie, siendo catasterizado por Hera.</span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;"><b>Carnero</b> (<i>Aries</i>): Carnero de piel de oro que fue desollado y sacrificado a Zeus por Frixo. El Vellocino de oro fue objeto de la expedición de los Argonautas, capitaneada por Jasón y cantada por Apolonio de Rodas en las <i>Argonaúticas</i>.</span></div>
<div style="text-align: left;">
<br /></div>
<div style="text-align: left;">
<table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: left; margin-right: 1em; text-align: left;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi2r_lgU8gZdoSo2qDUosf4xDPT9z8fSKfD7FCqkwnWCEBdsjNAckGtH1Tov_oLQrradXBJ2bG_mHZ-Vv8AOgzs45_ZWgNj8eod8QlgofWcxgJQFFeD3g8uTfmfOVcYLxmGAr4ob12UneHu/s1600/bestiario+8.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="167" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi2r_lgU8gZdoSo2qDUosf4xDPT9z8fSKfD7FCqkwnWCEBdsjNAckGtH1Tov_oLQrradXBJ2bG_mHZ-Vv8AOgzs45_ZWgNj8eod8QlgofWcxgJQFFeD3g8uTfmfOVcYLxmGAr4ob12UneHu/s200/bestiario+8.jpg" width="200" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><span class="irc_su" dir="ltr" style="text-align: left;"> Hevelius <i>Prodromus astronomiae</i></span></td></tr>
</tbody></table>
<span style="color: #9fc5e8;"><b>Escorpión</b> (<i>Scorpius</i>): A) Enorme animal con el que Artemis mató a Orión por haber intentado violarla en el curso de una cacería. Fue catasterizado por Zeus. B) Según Higinio, la picadura del escorpión es el castigo a Orión por haberse jactado éste de cazar aquel animal con que se tropezase.</span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;"><b>León</b> (<i>Leo</i>): León de Nemea, catasterizado por Zeus para perpetuar la hazaña de Heracles o, según otras versiones, por ser el rey de los ciadrúpedos. Constituye quizás la figura animalística a la que mejor se adaptan las estrellas de su constelación.</span></div>
<div style="text-align: left;">
<br /></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;"><b>Peces</b> (<i>Pisces</i>): Eran hijos o nietos del Gran Pez; respecto a ambos hay numerosas versiones: A) Décerto o la "diosa Siria", madre de Semíramis, fue salvada por los peces tras caer al mar, por lo que ambos fueron cartasterizados. B) Afrodita y Eros -o sólo Afrodita- se transformaron en peces para escapar de Tifón, o bien fueron rescatados por dos peces cuando sus vidas corrían peligro. C) Por último Higinio habla de un huevo que cayó al río Eufrates, siendo devuelto a la tierra por unos peces y criado por palomas. Entonces Afrodita salió del huevo y, en agradecimiento, colocó a los peces en el cielo.</span></div>
<div style="text-align: left;">
<br /></div>
<div style="text-align: left;">
<table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: left; margin-right: 1em; text-align: left;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhQJdz4u_-VtzkrHgFQdhbCFuonRSjfqGiBiYlRzylDmGqpzcRNeo_dHKctUky4eoco9CvOd3gd0NpU_dIuWBTPPHoCXjyeI2BWPgX3ZCD3oq9m_nRP8i79lkeodal4JPt7g329NtjpBT7I/s1600/bestiario+9.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="200" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhQJdz4u_-VtzkrHgFQdhbCFuonRSjfqGiBiYlRzylDmGqpzcRNeo_dHKctUky4eoco9CvOd3gd0NpU_dIuWBTPPHoCXjyeI2BWPgX3ZCD3oq9m_nRP8i79lkeodal4JPt7g329NtjpBT7I/s200/bestiario+9.jpg" width="143" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Astron. persa al-Sufi 964</td></tr>
</tbody></table>
<span style="color: #9fc5e8;"><b>Toro</b> (<i>Taurus</i>): A) Forma que Zeus adoptó para seducir a Europa. B) Ternera en la que fue metamorfoseada la princesa Io, amante de Zeus, para sustraerla de las sospechas de Hera. C) También se le identificó con el toro que fue amante de Pasifae, e incluso con el buey Apis.</span></div>
<div style="text-align: left;">
<br /></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;">Algo parecido sucede con las restantes agrupaciones estelares identificadas con formas animales reales o imaginarios. Suelen ser también variadas, según los autores, las narraciones fabuladas que supuestamente les dieron origen. Veamos, en primer lugar, las constelaciones animalísticas boreales:</span></div>
<div style="text-align: left;">
<br /></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;"><b>Aguila</b> (<i>Aquila</i>): A) Es el ave que raptó a Ganímedes arrastrándolo al cielo y que fue catasterizada por ser reina de todas las aves. B) En otra versión es el ave que Zeus eligió para sí por el buen agüero que propició su aparición antes de su victoria sobre los Titanes.</span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;">Perros<b> </b>del <b>Boyero </b>o <b>Bootes</b> (<i>Boootes</i>)<b>: </b>La figura de esta constelación parece hacer referencia al momento en que arcas, dedicándose a la caza, se encontró a su madre Calisto transformada en osa y trató de capturarla. Posteriormente Zeus catasterizó a ambos.</span><b><br /></b></div>
<div style="text-align: left;">
<br /></div>
<div style="text-align: left;">
<table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: left; margin-right: 1em; text-align: left;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEghH_vHj_lLKEWSaTUE4DWJt1iKk7bGAIMmATKwPMxekfdmwRgw_W1w3c_AiIGdKPrefyaubeH5szpgH_gpBNZxgA5Q7mqmZGKESPJEVrJ0apYCWg8PqRHss-QsysTAEjygdj3u9jnx9qMd/s1600/bestiario+10.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="161" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEghH_vHj_lLKEWSaTUE4DWJt1iKk7bGAIMmATKwPMxekfdmwRgw_W1w3c_AiIGdKPrefyaubeH5szpgH_gpBNZxgA5Q7mqmZGKESPJEVrJ0apYCWg8PqRHss-QsysTAEjygdj3u9jnx9qMd/s200/bestiario+10.jpg" width="200" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><i>Prodromus Astronomiæ</i> 1690</td></tr>
</tbody></table>
<span style="color: #9fc5e8;"><b>Caballo alado</b> (<i>Pegasus</i>): A) Para Arato, se trata de un caballo anónimo que de una coz hizo brotar la fuente Hipocrene. B) Según otras versiones se trata de Pegaso, que voló a las estrellas tras la caída de Belerofonte, o de una yegua, Hipe o Melanipe, también llamada Ocirroe por Ovidio.</span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;"><b>Cabra</b> (<i>Capra o Capella</i>): Es la Cabra Amaltea, la que fuera nodriza de Zeus en Creta. Iconográficamente aparece situada, junto a los Cabritos, en el hombro izquierdo de otra constelación, la del Auriga.</span></div>
<div style="text-align: left;">
<b><br /></b></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;"><b>Cisne</b> (<i>Cygnus</i>): Parece ser la forma de cisne que adoptó Zeus para seducir y unirse a Némesis. La forma cruciforme de la constelación, llamada también por Eratóstenes "Pajaro grande", permite, en efecto, asemejarla a un ave que vuela por debajo de la Vía Láctea.</span></div>
<div style="text-align: left;">
<br /></div>
<div style="text-align: left;">
<table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: left; margin-right: 1em; text-align: left;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgVdoPxLn7n6PZh6ujBlP_CcBDPRpgmGeoip12OCE3mVod00AukDc7qgZ42J0NFhVs2ChhYfrtgojt-Kbg5kmwO4mg4qkS7xENbEgfny0tFznxDhaiMZzoiAXEdrHumssZE8k37EeP304T-/s1600/bestiario+11.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="200" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgVdoPxLn7n6PZh6ujBlP_CcBDPRpgmGeoip12OCE3mVod00AukDc7qgZ42J0NFhVs2ChhYfrtgojt-Kbg5kmwO4mg4qkS7xENbEgfny0tFznxDhaiMZzoiAXEdrHumssZE8k37EeP304T-/s200/bestiario+11.jpg" width="163" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><span class="irc_su" dir="ltr" style="text-align: left;"> John Flamsteed (1729)</span></td></tr>
</tbody></table>
<span style="color: #9fc5e8;"><b>Delfín</b> (<i>Delphinus</i>): A) Fue catasterizado por Posidón en agradecimiento al servicio que le prestó al encontrarle a Anfitrite, con la que el dios marino tenía la pretensión de casarse, en las islas de Atlas. B) Según otros, se trata del delfín que salvó a Arión de perecer ahogado.</span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;"><b><br /></b></span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;"><b>Dragón</b> (<i>Serpens o Draco</i>): A) Animal fabuloso que custodiaba las manzanas de oro del jardín de las Hespérides que Heracles debía coger en su undécimo trabajo, y al que dio muerte. Fue catasterizado por Hera. B) Serpiente que los gigantes lanzaron contra Minerva, y que ésta su vez arrojó y fijó en el cielo. C) Forma que adoptó Zeus cuando Crono perseguía a Cinosura y Hélice por haber sido nodrizas del primero, a la vez que transformaba a ámbas en osas.</span><br />
<br />
<table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: left; margin-right: 1em; text-align: left;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhyDS_XbwXqKwrWpoVkOxT0QrS37BUQHB64fIm1MUCe9fF2y_5o65Vvl_1kC0mW-eu3a5YsyQyjL6eadznsw4eULe_-xIJW5Y7rsdMDmhcLGyIhnxfA9Rzedj6yzOH0zKmlF4QnvhC7PiBq/s1600/bestiario+5.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="200" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhyDS_XbwXqKwrWpoVkOxT0QrS37BUQHB64fIm1MUCe9fF2y_5o65Vvl_1kC0mW-eu3a5YsyQyjL6eadznsw4eULe_-xIJW5Y7rsdMDmhcLGyIhnxfA9Rzedj6yzOH0zKmlF4QnvhC7PiBq/s200/bestiario+5.jpg" width="188" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><i>Atlas Coelestis</i>, John Flamsteed</td></tr>
</tbody></table>
<span style="color: #9fc5e8;"><b>Lira</b> (<i>Lyra</i>) y el Ave infrapuestas: Hermes vació el caparazón de una tortuga y tendió sobre él cuerdas hechas con los restos de una vacas de Apolo, inventando así la lira. Se dice que el ave infrapuesta a la lira en las ilustraciones de la constelación es un águila, puesto que el significado original de Vega -la estrella más brillante de la constelación de Lira- parece proceder de la palabra árabe "águila de ataque".</span><br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">Serpiente de <b>Oficu</b> (<i>Ophiucus o Anguitenens</i> -"Portador de la serpiente"-): Eratóstenes lo identifica con Asclepio, a quien Zeus fulminó con su rayo por usurpar la facultad divina de resucitar a los muertos, y que más tarde catasterizó para complacer a Apolo. La serpiente que porta rodeando su bastón es el tradicional símbolo de Asclepio.</span><br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><b>Osa Mayor </b>(<i>Ursa maior</i>), llamada también<b> Hélice</b> o <b>Carro</b>. A) Hélice fue una de las ninfas nodrizas de Zeus, transformada en osa y después catasterizada por el dios para salvarla de la persecución de Crono. B) La constelación es identificada a veces con otra ninfa, Calisto, que, seducida por Zeus, fue metamorfoseada en osa por Hera cuando nació su hijo. Zeus la catasterizó posteriormente.</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: left; margin-right: 1em; text-align: left;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg1kO5NlTG4_hAa8vlqSQ_Cx_v9bHZNSigy1eT697La86pDb5NC5SjsNIt8sWY5YmXw_T9heVpnzvaVnFUAXUscqdWEgtgGSlbTUoeJPBTfSQcfuzSe5_dB32rYxYjh8jBdcvIEuS24oC4m/s1600/bestiario+12.JPG" imageanchor="1" style="clear: left; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="166" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg1kO5NlTG4_hAa8vlqSQ_Cx_v9bHZNSigy1eT697La86pDb5NC5SjsNIt8sWY5YmXw_T9heVpnzvaVnFUAXUscqdWEgtgGSlbTUoeJPBTfSQcfuzSe5_dB32rYxYjh8jBdcvIEuS24oC4m/s200/bestiario+12.JPG" width="200" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><i>Atlas Coelestis</i>, John Flamsteed</td></tr>
</tbody></table>
<span style="color: #9fc5e8;"><b>Osa Menor</b> (<i>Ursa minor</i>), llamada también <b>Cinosura</b>, o <b>Fenice</b>: A) Cinosura fue la otra ninfa nodriza de Zeus, convertida en osa y catasterizada junto con Hélice. B) Fenice fue compañera de Artemis, y convertida en osa por esta divinidad al encontrarla grávida de Zeus.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">Constelaciones animalísticas australes:</span><br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><b>Ballena</b> (<i>Cetus</i>): Habitualmente se piensa que el monstruo marino enviado por Posidón para devorar a Andrómeda era una ballena, de ahí que los astrónomos modernos designen con tal nombre a esta constelación. En realidad ya con Homero <i>ketos</i> designaba a cualquier monstruo surgido de las profundidades.</span><br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">Fiera inmolada por el <b>Centauro </b>(<i>Centaurus</i>): Es reconocida en los textos antiguos con la ambigua denominación de Bestia Animal que iba a ser sacrificado por el Centauro en el vacino Altar -<i>Ara</i>-. Su posterior identificación con el lobo -una pantera según Marciano Capela- ha llevado a relacionar este animal con Licaón, rey arcadio transformado en lobo por Zeus a causa de su impiedad.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;"><b>Cuervo</b> (<i>Corvus</i>): Ave consagrada a Apolo, está unida a la Copa y la Hidra por medio de una fábula descrita en varios textos.</span><br />
<br />
<table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: left; margin-right: 1em; text-align: left;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhuSFgg4iZD4beb0-zfhxJFJ-ZP1CLF7ZK9vljnzdE9JCzobAeWgmB6qwuMsXilRp037wL-Yh-yH1mZsENgAg1Nevgaw9ZP299cFFjJjz0QoxAD-0wFKMBy-hHZBZG8J2S1j3icqFwWpXiY/s1600/bestiario+13.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="161" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhuSFgg4iZD4beb0-zfhxJFJ-ZP1CLF7ZK9vljnzdE9JCzobAeWgmB6qwuMsXilRp037wL-Yh-yH1mZsENgAg1Nevgaw9ZP299cFFjJjz0QoxAD-0wFKMBy-hHZBZG8J2S1j3icqFwWpXiY/s200/bestiario+13.jpg" width="200" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Const. de Hidra por Ehlert Bode</td></tr>
</tbody></table>
<span style="color: #9fc5e8;"><b>Hidra</b> (<i>Hydra</i>): Según los mitógrafos es la serpiente de agua, relacionada con las constelaciones del Cuervo y la Copa gracias a la fábula ya referida, aunque el escoliasta Arato afirma que los egipcios la identificaban con el río Nilo. No hay que confundirlo con Hidro (<i>Hydrus</i>), constelación introducida por J. Bayer en 1603 y que está al sur de la Hidra, entre las dos nubes de Magallanes.</span><br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><b>Liebre</b> (<i>Lepus</i>): Fue catasterizada por Hermes en atención a su gran velocidad y fecundidad. Según Higinio, huye del perro Orión, que trata de cazarla.</span><br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><b>Perro mayor</b> (<i>Canis, Canis maior</i> o <i>Sirius</i>): A) Se suele identificar como el perro Lélape que Zeus regaló a Europa; de Europa pasó a Minos, luego a Pocris, y de éste a Céfalo, y que, posteriormente, petrificó y catasterizó Zeus durante la persecución de la zorra de Teumeso. B) Según otras variantes podría ser el perro de caza de Orión, que le sigue pegado a los talones.</span><br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><b>Perro menor</b> (<i>Canis minor, Antecanis, Canícula</i> o <i>Procyon</i>): A) Según una de las versiones, se trata de la perra Mera de Erígone. B) Es el segundo de los perros de Orión, al que Fírmico Materno denomina Argión o Argos. Se le suele llamar <i>Antecanis </i>porque surge en el firmamento antes que el Perro mayor.</span><br />
<br />
<table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: left; margin-right: 1em; text-align: left;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEglG4L1iUD3AUUYIzAtYfPEvcmE8L20eyw2e8-or9yA4tNOQc_oJj-ZiJqt6oPZHTwzquWXBLke3P5VPUZ3YHh1Gnx2xotz-o3uZCPgXdnoXDI9e1li-hUQOqNzBKB5kjbxOCN0lBVG6p5R/s1600/bestiario+14.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="149" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEglG4L1iUD3AUUYIzAtYfPEvcmE8L20eyw2e8-or9yA4tNOQc_oJj-ZiJqt6oPZHTwzquWXBLke3P5VPUZ3YHh1Gnx2xotz-o3uZCPgXdnoXDI9e1li-hUQOqNzBKB5kjbxOCN0lBVG6p5R/s200/bestiario+14.jpg" width="200" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><span style="font-size: x-small;">Johannes Hevelius, <i>Uranographia</i></span></td></tr>
</tbody></table>
<span style="color: #9fc5e8;"><b>Pez austral</b> (<i>Piscis</i> o <i>Pisces austrinus</i>): Se trata del Gran Pez, padre o abuelo de los peces de las constelación zodiacal de<i> Pisces</i>, como vimos.</span><br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">El sistema ptolemaico se mantuvo prácticamente intacto en las cartas celestes modernas hasta 1600. Por tanto, los mapas del firmamento que se elaboraron a lo largo de los ss. XV y XVI respetaron el número y morfología de las agrupaciones estelares clásicas.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">Si bien han pervivido varios mapas celestes figurados de los siglos medievales, el primero conservado que trata de conciliar su vertiente plástica con un mayor rigor científico es el denominado Manuscrito de Viena, incluido en un anónimo trabajo de astronomía, el <i>De composicione sphere solide</i>, fechado en 1440.</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhq6oCGDD-w2AoqJ_DZq9KX3jjVATe1CJJuz-Y__z3gxqmratKyUjwtwCAWdDYU8-JKfpnw44oWwab1hCVvrV7fDfBX-R-h4VzV-mbf9R0Nt5l0XeWx9DXzpSQXZQdty-UoyvitKqnyeipD/s1600/bestiario+6.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="345" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhq6oCGDD-w2AoqJ_DZq9KX3jjVATe1CJJuz-Y__z3gxqmratKyUjwtwCAWdDYU8-JKfpnw44oWwab1hCVvrV7fDfBX-R-h4VzV-mbf9R0Nt5l0XeWx9DXzpSQXZQdty-UoyvitKqnyeipD/s400/bestiario+6.jpg" width="400" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Manuscrito de Viena, planisferio celeste norte, hacia 1440</div>
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">De autor desconocido, su importancia radica en proporcionar un modelo iconográfico que será copiado continuamente a lo largo de los tres siglos siguientes. Contiene las 48 constelaciones ptolemaicas, y las estrellas han sido numeradas conforme al <i>Almagesto</i>. Siguiendo este modelo, las cartas astrales posteriores serán proyectadas desde los polos eclípticos, de tal manera que la banda zodiacal queda dispuesta como borde circular exterior del mapa.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">Parece que cartas manuscritas como la anterior circularon entre los científicos del Renacimiento, hasta llegar a sus primeras versiones impresas. En 1515 se edita en Nuremberg la carta celeste diseñada por los matemáticos Johann Stabius y Conrad Heinfogel e liustrada por Alberto Durero.</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiYgAqZ6OTzibkDYkZN2w4jFGT-0PkQP9qJobf4BphXwXXcVcPbCKA0vNq7MjBKRW172POExCfeTi56ltsoYj9t96dqOU4o4S_BjNIj1ZWMqNy3dzE70Kz60rBxlG2EBED2Webq2uvuRW3J/s1600/bestiario+15.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiYgAqZ6OTzibkDYkZN2w4jFGT-0PkQP9qJobf4BphXwXXcVcPbCKA0vNq7MjBKRW172POExCfeTi56ltsoYj9t96dqOU4o4S_BjNIj1ZWMqNy3dzE70Kz60rBxlG2EBED2Webq2uvuRW3J/s400/bestiario+15.jpg" width="380" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Alberto Durero, constelaciones del hemisferio norte</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">Considerada la culminación impresa de medio siglo de observación y experimentación de un grupo de intelectuales de Viena y Nuremberg, la principal novedad iconográfica de esta obra reside en una occidentalización de las vestiduras de los personajes, abandonando los hasta entonces frecuentes resabios árabes. Inauguró un género de publicaciones en los que el documento de carácter científico resulta a la vez agradable a la vista gracias a su cuidada vertiente artística.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">El diseño de Durero dejará abundantes secuelas a lo largo de la centuria: algunas de las más atractivas son las cartas celestes de Petrus Apianus (incluida en su <i>Astronomicum Caesareum</i>, 1540), o las <i>Imagines constellationum</i> de Johannes Honter (1541).</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhSsz9rzygpowCenOdyznaYSZz6dKRatR4Pt2XUzyWnqxvOWYaa5KccRPpMfLmpRTTYZjmNEtFDa12bLF2rA_g-Seod3Lr2Wu79sGBt36W5MfohcWeyJdooBb5bTtscE3mgfGeDBpcVGJIZ/s1600/bestiario+16.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhSsz9rzygpowCenOdyznaYSZz6dKRatR4Pt2XUzyWnqxvOWYaa5KccRPpMfLmpRTTYZjmNEtFDa12bLF2rA_g-Seod3Lr2Wu79sGBt36W5MfohcWeyJdooBb5bTtscE3mgfGeDBpcVGJIZ/s400/bestiario+16.jpg" width="386" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Johannes Honter, <i>Imagines constellationum </i>(1541)<i><br /></i></div>
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">Esta última resulta interesante por proporcionar una visión de las constelaciones tal y como son contempladas desde la tierra -y no desde un imaginario punto exterior-, con un movimiento similar al de las agujas del reloj a los largo de la eclíptica. Mencionemos por último el <i>Theatrum Mundi</i> de Giovanni Galluci (1588), obra en la que las ilustraciones de las distintas constelaciones aparecen individualizadas e introducidas en un esquema de coordenadas y proyección geométrica.</span><br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><b>Las constelaciones animalísticas pos-ptolemaicas</b></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">En estos mapas celestes de la segunda mitad del siglo XVI encontramos ya una tímida y progresiva superación del catálogo estelar de Ptolomeo, la primera después de casi milenio y medio de autoridad indiscutible. Aparecen ya descritos cometas, eclipses, tránsitos del sol y nebulosas, a los que debe añadirse alguna que otra nueva constelación. Sin embargo, el primer cambio espectacular se va a producir con el tránsito del siglo XVI al XVII.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">En efecto, durante los últimos decenios del milquinientos se va a observar una doble tendencia dentro de este "género" científico-artístico: por un lado editores como Andreas Cellarius y Reiner y Josua Ottens sacaron a la luz las bellas imitaciones de modelos anteriores, más preocupados por su elegante diseño, destinado a satisfacer plástica e intelectualmente a una clientela culta y libresca, que por su utilidad científica.</span><br />
<br />
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<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiGiYkiMMbrEuQVx28m5uSVShTKEpiPDqp8AJwm0nGlEJd4zPw7TsZkxjcW_QBOQe5jNd8s-vJzSQ2_Be3hp55E9Lr4T6WvtpsmK0xnzzTHO2Hf89zhc5T1fQVgwYr6BR_8Bh5LELp9poOS/s1600/bestiario+20.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiGiYkiMMbrEuQVx28m5uSVShTKEpiPDqp8AJwm0nGlEJd4zPw7TsZkxjcW_QBOQe5jNd8s-vJzSQ2_Be3hp55E9Lr4T6WvtpsmK0xnzzTHO2Hf89zhc5T1fQVgwYr6BR_8Bh5LELp9poOS/s640/bestiario+20.jpg" width="408" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Andreas Cellarius, <i>Armonia macrocosmica</i> (1660)</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">Por otro, astrónomos de vanguardia como Hevellius, Flamsteed o Bode avanzan en la ciencia astronómica a través de cartas innovadoras y cada vez más completas basadas en la investigación original. Será en este último tipo de obras donde localicemos las sucesivas ampliaciones del número de constelaciones clásicas.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">La vía más importante de innovaciones vendrá a través de los sucesivos avances en el conocimiento y codificación de los sistemas estelares del hemisferio austral. Ya desde mediados del s. XV los marineros portugueses, que circunavegaron las costas de África en un intento de buscar una ruta marina hacia el Este, debieron familiarizarse con las constelaciones meridionales. Éstas empezaron a ser difundidas a partir de 1504 con la narración de los viajes atlánticos que llevó a cabo Americo Vespuccio.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">Pero es en 1595-96, durante los viajes de Frederik de Houtman a la isla de Java, cuando su compatriota holandés Pieter Dircksz Keyser propone el primer catálogo sistemático de estrellas sureñas. A partir de esta información, Petrus Plancius diseñó una serie de nuevas constelaciones eligiendo, conforme a la tradición, nombres de bestias más o menos exóticas para la mayoría de ellas. Algunos de estos animales ya eran bien conocidos en Europa -<b>Mosca</b> -<i>Musca</i>-, <b>Pavo real</b> -<i>Pavo-,</i> <b>Grulla</b> -<i>Grus</i>-, otros son míticos (<b>Fénix</b> -<i>Phoenix</i>), y los restantes se inspiran en la fauna de los territorios recién explorados en América (<b>Tucan</b> -<i>Tucana</i>-) o el sur de Asia (<b>Camaleón </b>-<i>Chameleon</i>-), <b>Ave del Paraíso</b> -<i>Apus</i> o <i>Paradisea</i>-, <b>Pez volador</b> -<i>Volans</i>-, <b>Pez de colores</b> -<i>Dorado</i>-, y <b>Serpiente acuática</b> -<i>Hydrus</i>-). Las nuevas figuras aparecen representadas por primera vez de forma gráfica en los globos celestes impresos por Jocodus Hondius (1598) o Willem Jansz Blaeu (1599).</span><br />
<br />
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<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgX-iLjeu3pViYGVKVhuSEyKGNoTbythLLjAEit5I5g7ntEeDIHXKQKwRk3DyeSkkeuXcaz_C0IcMe9b8_Tw-BoWO7cif3sq9xFWm8HVbmZauY9JvYJqu_lCW6wW9NQsxF4-AOBDDRbv96F/s1600/bestiario+10.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="366" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgX-iLjeu3pViYGVKVhuSEyKGNoTbythLLjAEit5I5g7ntEeDIHXKQKwRk3DyeSkkeuXcaz_C0IcMe9b8_Tw-BoWO7cif3sq9xFWm8HVbmZauY9JvYJqu_lCW6wW9NQsxF4-AOBDDRbv96F/s400/bestiario+10.jpg" width="400" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Constelaciones del Fénix, Pavo real y Tucán entre otras en <i>Uranometría </i>(1603) de Johan Bayer</div>
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">Esta incorporaciones serán finalmente consagradas gracias a su inclusión en el popular atlas Uranometría (1603) de Johann Bayer, haciéndose ya permanentes.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">Esta moda innovadora parece haberse transmitido rápidamente a otros astrónomos, como Jakob Bartsch, quien en 1624 agrupó a un buen número de estrellas boreales aún sin catalogar en forma de nuevas constelaciones. De nuevo serán motivos zoológicos los preferidos para dar forma a los nuevos sistemas: <b>Jirafa</b> (<i>Camelopardalis</i>), <b>Paloma </b>(<i>Columba</i>), y <b>Unicornio</b> (<i>Monoceros</i>). En 1687 Johannes Hevelius diseñó otros siete grupos, en su mayor parte septentrionales, incluyendo el <b>Lince</b> (<i>Lynx</i>), el <b>Lagarto</b> (<i>Lacerta</i>), el <b>Pequeño León</b> (<i>Leo minor</i>), el <b>Zorro</b> (<i>Vulpecula</i>) y los <b>Perros de caza</b> (<i>Canes venatici</i>). El último bloque aceptado universalmente de constelaciones diseñadas de modo individual por un astrónomo fue la serie de Nicolas de Lacaille, quien entre 1750 y 1752 observó el cielo desde el observatorio del Cabo de Buena Esperanza. Sin embargo, este investigador rompió la tradición de motivos animalísticos, eligiendo temas técnicos más o menos relacionados con el oficio de astrónomo: reloj, compás, telescopio, etc.</span><br />
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<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhXuAZCwR3oVSsGWZO5wONUM-OZj0CAqsb3tjQOMkTGqrqBA39j9ZkrIhxKF8lOTbNihJX-MW2vzV6I0S_sGbpHWlCX3Tn6Ghd5RUgQkjsQTR4z08cK3DXywyQOu1RTHcv7Kdc0z80kpHzV/s1600/bestiario+17.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhXuAZCwR3oVSsGWZO5wONUM-OZj0CAqsb3tjQOMkTGqrqBA39j9ZkrIhxKF8lOTbNihJX-MW2vzV6I0S_sGbpHWlCX3Tn6Ghd5RUgQkjsQTR4z08cK3DXywyQOu1RTHcv7Kdc0z80kpHzV/s320/bestiario+17.jpg" width="300" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Constelación del Horno Alquímico (<i>Fornax chimiae</i>) en <i>Coelum Australe Stelliferum </i>(1763), de Nicolas de Lacaille</div>
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">Desde entonces -mediados del s. XVIII- hubo algunos intentos esporádicos de introducir nuevas constelaciones, en algunos casos de tema zoológico, en la cartografía celeste. Sin embargo, aunque consiguieron hacer acto de presencia en sucesivos mapas, no resultaron finalmente aceptadas por la comunidad astronómica internacional. Citemos el intento del astrónomo francés Pierre Charles Le Monnier para incluir en 1776 la constelación del <b>Pájaro solitario</b> -<i>Passer solitarius</i>-, un tordo de color gris azulado intenso que, aunque trató de identificarse con un supuesto pájaro exótico de las Filipinas, ya era conocido en su versión europea desde mediados del s. XVI; posteriormente, este ave fue sustituida en las cartas celestes por otras, entre ellas un búho -<i>Noctua-</i>, antes de ser rechazada definitivamente. El mismo astrónomo incluyó la constelación boreal del <b>Reno</b> -<i>Tarandus</i>- para conmemorar una expedición científica a Laponia.</span><br />
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<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjT2_huS62CcplO6M-QvXDz9UtamHUCYDc9V8BDZ_Oww7RhnH3h6h76y0aasDo39L5H41EaceVKaR2C6tCuuqpJ357p1oeXIw8NcT-JKIKXjXJt3BWbQF8jxFnyZE5I_5Tm4jasYH4jt9ri/s1600/bestiario+18.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="297" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjT2_huS62CcplO6M-QvXDz9UtamHUCYDc9V8BDZ_Oww7RhnH3h6h76y0aasDo39L5H41EaceVKaR2C6tCuuqpJ357p1oeXIw8NcT-JKIKXjXJt3BWbQF8jxFnyZE5I_5Tm4jasYH4jt9ri/s320/bestiario+18.jpg" width="320" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Pierre Charles Le Monnier, constelación boreal del Reno</div>
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</div>
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<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;">Otro astrónomo galo, Joseph Jerome de Lalande, propuso otra serie de constelaciones no aceptadas, entre ellas la que representaba a su propio <b>Gato</b> -<i>Felis</i>-, que, situada justo debajo de la <i>Hydra</i>, apareció por primera vez en la Uranographia de Johann Elert Bode (1801), uno de los últimos grandes atlas celestes decorativos.</span></div>
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<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEheZTCy9Yct6fsJdMGCLFAtCv304Wj7LfiFoiPsM9KZeUM9rKP3DSaT8HDI2uRWPpwmdkGbuFcleVV4gIuzTFoha7WGDwdHM-_vs_lJvbNbuGgdqqaJc940eDYqszb8FEnl5rz5eZYhrSxU/s1600/bestiario+20.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="262" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEheZTCy9Yct6fsJdMGCLFAtCv304Wj7LfiFoiPsM9KZeUM9rKP3DSaT8HDI2uRWPpwmdkGbuFcleVV4gIuzTFoha7WGDwdHM-_vs_lJvbNbuGgdqqaJc940eDYqszb8FEnl5rz5eZYhrSxU/s320/bestiario+20.jpg" width="320" /></a></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
Johann Elert Bode, <i>Uranographia</i> (1801)</div>
<br /></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span></div>
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<span style="color: #9fc5e8;">El declive del género de las cartas y atlas celestes ilustrados se produce cn el s. XIX, cuando la plasmación pictórica de las constelaciones comienza a considerarse una distracción anacrónica para los astrónomos profesionales, y se desarrollan nuevas formas, más austeras y funcionales, de representaciones celestes. Aunque siguieron publicándose hasta nuestro siglo, los mapas celestes pictóricos quedaron reducidas a la categoría de publicaciones populares y divulgativas. Fue sin duda la perfecta simbiosis entre la vertiente artística y científica de estas cartas celestes ilustradas lo que permitió que este género, aunque sometido a un rápido proceso de desmitificación y racionalización, perviviera mucho más allá que cualquier otra manifestación de la cultura simbólica ilustrada de la Edad Moderna.</span></div>
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<br /></div>
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<br />
<span style="font-size: large;"><br />Este ensayo viene acompañado de numerosas anotaciones, quienes estén interesados en su lectura pueden encontrarlas <a href="https://www.academia.edu/5538908/El_bestiario_astron%C3%B3mico._Los_motivos_animal%C3%ADsticos_en_los_mapas_celestes_en_la_Edad_Moderna">AQUÍ.</a></span><br />
<br />
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<br />
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<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2011/07/que-son-las-estrellas.html">¿Qué son las estrellas?</a><br />
<br />
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Janhttp://www.blogger.com/profile/10112360698804083485noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-4945391151380854953.post-53541685041669908342016-06-08T08:28:00.002-07:002016-06-08T08:28:59.384-07:00Imaginario hermético<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg_H21N7P8OxJMzqUds7XazQBmu2NrVxfIPP7aEYsSmikNZZH2RYl7krRiZ0DC4QlRQDXPU3RVtWP5Q6anxWB12BhwpNE9M6JmYykC_uSIQauktCbA91E3El5pAjTaP3PX6Tv2ECGDZrbEy/s1600/alquimia+1.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg_H21N7P8OxJMzqUds7XazQBmu2NrVxfIPP7aEYsSmikNZZH2RYl7krRiZ0DC4QlRQDXPU3RVtWP5Q6anxWB12BhwpNE9M6JmYykC_uSIQauktCbA91E3El5pAjTaP3PX6Tv2ECGDZrbEy/s400/alquimia+1.jpg" width="271" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
J. C. Barchusen,<i> Elementa chemicae</i> (1718)</div>
<br />
<br />
<br />
<span style="color: #ffe599;">"No debemos perder nunca de vista el hecho de que la Piedra Filosofal, elusiva meta de la Búsqueda alquímica, constituye una realización tan material como espiritual. Su proceso de elaboración, resumido en el axioma hermético <i>Solve et coagula</i>, consiste fundamentalmente en una repetida Disolución, seguida de Cristalizaciones, del Tema secreto de los Sabios, la Materia Prima o Piedra de los Filósofos. (...) Así pues, la espiritualización de la materia precede a la materialización del espíritu y la Piedra de los Filósofos se convierte en la Piedra Filosofal, sustancia muy evolucionada capaz de conseguir los efectos más extraordinarios".</span><br />
<br />
<span style="color: #f1c232;"><b>Stanislas Klossowski de Rola </b></span><br />
<br />
<br />
<br />
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;"><i><b><span style="font-size: large;">La imagen hermética y su dimensión emblemática:</span></b></i></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;"><i><b><span style="font-size: large;">Una síntesis</span></b></i></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;">por</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;"><span style="font-size: large;">José Julio García Arranz</span></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;">Universidad de Extremadura</span></div>
<br />
<br />
<br />
<br />
<span style="color: #cfe2f3;"><b>Síntesis histórica del hermetismo occidental</b></span><br />
<span style="color: #cfe2f3;"><br /></span>
<span style="color: #cfe2f3;">Cuando hablamos de disciplinas «esotéricas», entendidas éstas como reductos de sabiduría reservados a un círculo restringido y selecto de iniciados, nos referimos a una serie de materias de consolidada tradición, en particular la astrología, la magia y la alquimia, que proclaman como común aspiración la comprensión unificada de todo aquello que se produce en la naturaleza: desde los fenómenos astrales, físicos y biológicos hasta la causa de las enfermedades, y desde la composición de la materia inorgánica a la vida y propiedades de los animales y las plantas. De todas ellas será la alquimia o ciencia hermética —el «arte de Hermes»— la que determine unos más estrechos lazos de parentesco con la moda literaria de los emblemas que nace con la tercera década del milquinientos, hasta el extremo de llegar a formar parte integrante del género.</span><br />
<span style="color: #cfe2f3;">De modo muy genérico, puede definirse a la alquimia como forma de conocimiento orientada a la transformación psicológica y espiritual del individuo por medio del dominio de las energías creadoras que impregnan la naturaleza y el espíritu humano.</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhSlvOEBCE48YQPqw8KIzIqE6aemhIC-NVGfmW5rjbxGpO_cWt7kGRyLxCF4Ee65vVaekkjmLLJtd0-7EJMTqMo9RkK88CCpmKE49aifmBz0Bxg3OXBIbuddASbbOcmDTIL2CWrANwa0qiy/s1600/alquimia+2.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhSlvOEBCE48YQPqw8KIzIqE6aemhIC-NVGfmW5rjbxGpO_cWt7kGRyLxCF4Ee65vVaekkjmLLJtd0-7EJMTqMo9RkK88CCpmKE49aifmBz0Bxg3OXBIbuddASbbOcmDTIL2CWrANwa0qiy/s400/alquimia+2.jpg" width="288" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
J. J. Becher, <i>Physica subterranea</i> (1703)</div>
<div style="text-align: center;">
"El sol y la luna fuentes de toda vida sobre y bajo la tierra. En las entrañas de la madre tierra se gesta la perfecta maduración de los metales". Alexander Roob, <i>Alquimia & Mística</i></div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">Comprende una parte práctica —alquimia operativa—, fundada sobre el estudio de la materia y de los elementos a través de un proceso iniciático — <i>opus alchimicum</i> o «gran obra»— que, imitando las operaciones de la naturaleza, persigue la obtención del <i>lapis philosophorum</i> , sustancia o polvo fermentativo que transmuta los metales viles en oro al tiempo que sirve de elixir o remedio universal para todos los males naturales de hombres, animales o plantas. En el plano teórico —alquimia espiritual—, se nos presenta como un tipo de saber universal basado en los principios del acuerdo de los opuestos — <i>concordia oppositorum</i> —, que proporciona al iniciado la posibilidad de unir armoniosamente todos los aspectos de la naturaleza y la existencia humana. El propósito del verdadero alquimista, además, se corresponde a una ética: la ciencia hermética busca el perfeccionamiento del alma y su salvación como trasunto espiritual de la purificación de los metales innobles.</span><br />
<br />
<div style="text-align: center;">
<img alt="http://farm8.staticflickr.com/7110/7719866048_d00581bf48.jpg" src="http://farm8.staticflickr.com/7110/7719866048_d00581bf48.jpg" height="400" width="392" /> </div>
<div style="text-align: center;">
Heinrich Kunrath, <i>Amphiteatrum sapientae aeternae</i>, Hannover, 1609. La doble vertiente hermética: el oratorio y el laboratorio alquímico</div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">Se considera que el término «alquimia» procede del griego
<i>chyméia</i>
o
<i>chêmeia</i>, que, por etimología, puede emparentarse con
<i>chyma</i>
—«fundición de metal»—, si bien algunos textos griegos aluden a un
<i>primus inventor</i>
llamado Chymès; de ahí derivan los nombres árabes<i>
kîmiyâ’</i>
o
<i>al-kímya</i>, así como la
<i>alchemia</i>
o
<i>alchimia
</i>latina. La consideración del hermetismo como parte integrante de la
<i>prisca sapientia</i>
—el auténtico saber primigenio acerca de la naturaleza y el hombre— llevó a algunos de sus autores a afirmar que los primeros textos alquímicos tenían un origen premosaico, atribuible a diversas figuras legendarias de las principales corrientes espirituales y religiosas: Adán, Túbal-Caín, Salomón, Isis, Ostanés, María la Profetisa..., nombres míticos con los que se tratan de amplificar los aportes simbólicos de los procesos y sustancias a los que la alquimia atiende. Según la tradición escatológica, fueron los ángeles rebeldes quienes enseñaron a los hombres cómo conquistar la piedra filosofal: «Y Azâzêl enseñó a los hombres a fabricar espadas, cuchillos, escudos y petos, y les enseñó el conocimiento de los metales de la tierra y el arte de trabajarlos, y los brazaletes y los adornos y el uso del antimonio y el embellecimiento de los párpados y todo tipo de piedras preciosas y todos los tintes de colores».
Pero, si nos remitimos a la creencia más extendida, la alquimia es una ciencia que el fabuloso Hermes Trismegisto confió a ciertos elegidos, y cuyos arcanos fueron transmitidos secularmente de maestros a discípulos, lo que le otorgará su carácter de disciplina simbólica, revelada y tradicional.</span><br />
<br />
<div style="text-align: center;">
<img alt="http://libmedia.willamette.edu/hfma/omeka/files/original/a6ad38e292bdb2572a19100e0f4affd3.jpg" src="http://libmedia.willamette.edu/hfma/omeka/files/original/a6ad38e292bdb2572a19100e0f4affd3.jpg" height="315" width="400" /></div>
<div style="text-align: center;">
Michael Maier<i>, Symbola aureae mensae</i>, Francfort, 1617. Representación de Hermes Trismegisto</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">Su conocimiento se cifra en un lenguaje velado y enigmático que no puede comprenderse hasta finalizada una larga iniciación, y que, en consecuencia, resulta extraño e inaccesible a los profanos. Al margen de las disquisiciones de sus adeptos, la alquimia occidental germina y se desarrolla en el Egipto ptolemaico<span style="color: red;"> </span> —en especial Alejandría y otras ciudades del Bajo Nilo— a partir del s. I d. C. Sus primeros textos eran simples recetas referidas a ciertas técnicas de orfebrería, tinturas y tratamiento de los minerales naturales para ornamentación de los templos, que ocasionalmente aluden a la imitación del oro y de la plata, pero que no abordan aún la cuestión del cambio integral de los metales. Tales conocimientos, desarrollados por los artesanos del recinto sagrado, fueron transmitidos oralmente bajo secreto, y después consignados por escrito y archivados en los talleres de aquellos santuarios. Los primeros testimonios de estas prácticas artesanales, fechados hacia el 300 d. C., responden a sendos papiros griegos conservados, respectivamente, en Leiden y Estocolmo.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">La Alejandría de los primeros siglos de nuestra era fue lugar de confluencia ecléctica de especulaciones filosófico-místicas y tradiciones artesanales seculares en un sincretismo ideológico y religioso que se conjugó con los ritos y mitos asociados a las artes del fuego, propiciando que una alquimia aún balbuciente fuera asimilada con enorme prontitud. A la aportación del pensamiento griego a través de las teorías aristotélica y estoica de la materia, se suman las fuentes místicas orientales —caldeas o iranias—, las técnicas de iluminación y salvación de la gnosis cristiana y pagana, la astrología babilónica o la cábala judía.</span><br />
<br />
<div style="text-align: center;">
<img alt="https://41.media.tumblr.com/ffebb8462e9ff344f287138db17eeff5/tumblr_n1uwiiL1Qi1qm5yeno1_500.jpg" height="400" src="https://41.media.tumblr.com/ffebb8462e9ff344f287138db17eeff5/tumblr_n1uwiiL1Qi1qm5yeno1_500.jpg" width="336" /></div>
<div style="text-align: center;">
S. Michelspacher, <i>Cabala</i>, Augsburgo, 1616</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">De este modo la alquimia adquirió sus principales rasgos definitorios, con lo que alcanzará su primera edad de oro a fines del s. III con adeptos como Zósimo de Panópolis, Sinesius u Olimpiodoro, que fundamentaron las diferentes facetas filosóficas, místicas o científico-experimentales de la disciplina.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">Esta ciencia fue asimilada por la cultura árabe con la traducción de textos griegos —especialmente Zósimo— a raíz de la conquista de Egipto y de Siria, figurando Geber, Razi (Ar-Râzî) o el pseudo-Avicena entre sus más ilustres exponentes. Tales conocimientos fueron transmitidos al occidente europeo, probablemente desde mediados del s. XII, a través de España, Sicilia y las tierras ocupadas por los cruzados. Ello determinó la aparición de las primeras traducciones latinas de los tratados alquímicos árabes, que posibilitaron tanto el acceso a la filosofía hermética como una renovación de los conocimientos de mineralogía y metalurgia en la cristiandad. En el s. XIII la alquimia conoce una prodigiosa expansión por Europa, con atención tanto a su aspecto científico como a su dimensión espiritual, a través de trabajos fundamentales de Alberto Magno, Michael Scotus, Roger Bacon, Arnau de Vilanova o el pseudo-Llull, entre otros. Los príncipes cristianos y la Iglesia estimularon o condenaron su práctica dependiendo del lugar y el momento, pero sin recurrir a condenas irrevocables o persecuciones sistemáticas.</span><br />
<br />
<div style="text-align: center;">
<img alt="http://www.lib.udel.edu/ud/spec/exhibits/alchemy/images/geberi-philosophi-alchemy.jpg" src="http://www.lib.udel.edu/ud/spec/exhibits/alchemy/images/geberi-philosophi-alchemy.jpg" /></div>
<div style="text-align: center;">
Portada de un tratado alquímico atribuido a Dshabir Ibn Hayyan (Geber). </div>
<div style="text-align: center;">
Estrasburgo 1533</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">El pensamiento renacentista acogió con varia fortuna la ciencia de Hermes, pues ésta encontró en los círculos humanistas, caracterizados por su sincretismo intelectual, fervientes partidarios, pero también severos detractores. En tanto Erasmo de Rotterdam rechazaba su práctica, Martín Lutero y los seguidores de Calvino la ensalzaron por su capacidad para plasmar en forma alegórica los misterios cristianos, lo que propició la incorporación de ciertos iconos religiosos al imaginario alquímico. Un impulso decisivo llegará de la mano de intelectuales como Pico della Mirandola o, de forma más indirecta, Marsilio Ficino, que propugnaron una síntesis de la hermética y la cábala judía con el fin de resaltar la dimensión anímica de la magia natural, así como una cosmología de raíz platónica que concede protagonismo a los entes espirituales que actúan como lazos de unión entre Dios y la creación como alternativa a la filosofía natural de Aristóteles. Este enfoque neo-platónico se mantendrá vigente gracias a su reelaboración por parte del influyente Paracelso, que entiende la alquimia como ciencia que continúa y completa la obra creadora de la naturaleza, y que posibilita el verdadero conocimiento de la esencia de las cosas, percibida como dimensión espiritual e incorpórea que es responsable de las propiedades de las sustancias. Ello derivó hacia una concepción del
<i>opus magnum</i>
como medio de perfeccionamiento interno y purificación del hombre y su entorno que recrea la obra redentora de Cristo, filosofía asumida por oscuras sectas, como la fraternidad secreta de los Rosacruces, desde inicios del s. XVII.</span><br />
<br />
<div style="text-align: center;">
<img alt="http://www.crystalinks.com/alchemycircle.jpg" src="http://www.crystalinks.com/alchemycircle.jpg" /></div>
<div style="text-align: center;">
Simbología alquímica de la Orden Rosacruz</div>
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">Pero, sin duda, el auge de la alquimia a fines del s. XVI e inicios del XVII respondió ante todo al patrocinio concedido a sus más notorios valedores por parte de diversas cortes principescas. Desde los Habsburgo españoles y austríacos a los Medici de Florencia, los gobernantes mantendrán en sus palacios a alquimistas, e incluso practicarán personalmente este arte, por razones que podían ir de lo estrictamente crematístico —producción del oro— al conocimiento metafísico de la naturaleza y la sabiduría divina, del mero pasatiempo a su ostentación como signo de intelectualidad o poder. Los hermetistas encontraron un singular respaldo en las cortes alemanas, al amparo de determinados nobles interesados tanto en los aspectos prácticos como en los conceptos teóricos de la alquimia, tales como el
landgrave
Moritz von Hessen-Kassel, Friedrich I von Württemberg Wolfgang II von Hohenlohe y, sobre todo, el emperador Rodolfo II en Praga, quien protegió entre otros a Michael Maier, John Dee, Michael Sendivogius o Heinrich Khun-rath. Sin embargo el estatuto de alquimista cortesano, muy codiciado, atrajo también a farsantes e impostores que a largo plazo acabaron por dañar y trivializar la imagen de esta práctica.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;"><b>La iconografía alquímica y su naturaleza hermética</b></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">La imagen fue uno de los medios de expresión primordiales del
<i>ars
alquímica</i>, hasta el extremo de concitar un vasto imaginario de naturaleza sincrética cuyos componentes, a pesar de su variada procedencia, fueron articulados desde la Baja Edad Media conforme a un sistema que llegará a adquirir una sorprendente coherencia interna. Conjunto de símbolos universales, según Carl G. Jung, cuyo carácter arquetípico nos revela aspectos fundamentales de la mentalidad y el inconsciente del hombre, parece que la iconografía hermética adoptó como punto de partida el imaginario mítico de los mineros, fundidores y herreros, del que procede la concepción de la materia como algo sagrado, la transferencia del principio de sexualidad a los procesos químicos o la idea de la participación del hombre en la obra de la naturaleza. Desde entonces, los alquimistas incorporaron progresivamente fábulas y mitos clásicos, ciertos episodios históricos y un buen número de figuras alegóricas, símbolos y emblemas —o «jeroglíficos»— procedentes del ámbito moral y religioso, en un «complejo sistema de correspondencias múltiples», de notable riqueza expresiva y capacidad de sugerencia, pero cuya comprensión implicaba una ardua labor de iniciación.</span><br />
<br />
<div style="text-align: center;">
<img alt="http://www.levity.com/alchemy/images/aurora-6.jpg" src="http://www.levity.com/alchemy/images/aurora-6.jpg" height="270" width="400" /> </div>
<div style="text-align: center;">
<i> Aurora consurgens</i>, s. XVI. "La naturaleza no da nada perfecto, es el hombre queien tiene que consumarlo. Esta consumación se llama alquimia. El alquimista es el panadero que cuece el pan, el bodeguero que hace el vino, el tejedor que teje paño". (Paracelso)</div>
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">Tan rica y variada iconografía se sustenta en ese tono enigmático, auténtica marca de la casa, con que se inviste a sus motivos y composiciones: la necesidad de mantener sus conceptos, sustancias y procesos bajo secreto fue requisito indispensable de la práctica y la literatura alquímicas, de modo que permitieran revelar sus arcanos a los iniciados, pero que, al mismo tiempo, desconcertaran y ahuyentaran a profanos y curiosos. Con el fin de alcanzar este objetivo —ocultar, más que explicitar—, los alquimistas se sirven de unos indicios o «sobrenombres», muchas veces insólitos y ambiguos, adoptados de analogías, metáforas y alegorías, que se aplicaban a las sustancias y procesos en cuestión; se trata de figuraciones procedentes de la
Biblia, la mitología clásica, la historia humana y natural, la filosofía, la teología, la astrología, las fábulas de animales o ciertas actividades cotidianas, trasladadas a un contexto significativo radicalmente diferente. Para poder inducir a la necesaria confusión y extrañamiento en el profano, la conexión entre imagen alegórica y concepto no debe ser evidente. De este modo, las denominaciones de dioses/planetas que se asocian a ciertos metales no se consideran sobrenombres, sino sinónimos, por su obviedad; en cambio sí son auténticos sobrenombres, por ejemplo, las alusiones a ciertos depredadores —león, dragón, lobo— para designar un metal corrosivo, o el empleo de un ave para referir una sustancia volátil. Otro sistema de desplazamiento fue la denominación de una sustancia con el nombre de otra: así todos los líquidos se llaman «agua», todas las materias combustibles «azufre», las corrosivas «fuego» o las volátiles
<i>sal ammoniacum</i>. También se puede crear confusión atribuyendo denominaciones diversas a una misma sustancia. Había autores, en fin, que creaban su propio glosario de sobrenombres en el que incluían, en diferente contexto, conceptos utilizados por otros, o sencillamente inventaban nuevos nombres.</span><br />
<br />
<div style="text-align: center;">
<img alt="http://bildgeist.com/wp-content/uploads/2014/07/14-eleazar.jpg" class="overflowing" src="http://bildgeist.com/wp-content/uploads/2014/07/14-eleazar.jpg" height="400" width="266" /></div>
<div style="text-align: center;">
Abraham Eleazar, <i>Uraltes chemistes</i>. Leipzig, 1760</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">Tales procedimientos permitieron traducir en imágenes los procesos químicos de transmutación mediante personificaciones o motivos procedentes fundamentalmente de la mitología o del bestiario, campos de conocimiento que proporcionan unos relatos extensos de hechos fantásticos —a veces son presentados como «visiones» o «sueños»— que posibilitan la detallada transcripción de largos procesos de laboratorio recurriendo a la forma metafórica. Ello dará origen, en las postrimerías del Medievo, a la iconografía alquímica clásica, que será trasladada, a inicios del s. XVII, a un formato «emblemático». Fechados en el s. XIV encontramos los primeros manuscritos iluminados de Artephius, Alberto Magno, Ramón Llull o Hermes; sin embargo, estas primeras ilustraciones, aún bajo el influjo del sesgo esencialmente experimental de la alquimia árabe, se limitaron por lo común a representaciones de instrumentos o escenas de laboratorio. Es a finales de esa centuria, momento en que el hermetismo «científico» se ha transformado en una disciplina esotérica sensible a las interpretaciones religiosas, cuando esta imaginería deviene en un auténtico «arte hermético», con sus rasgos propios e intransferibles, capaz de transformar en iconos los intrincados textos alegóricos o las místicas operaciones descritas en los tratados. Igual que sucede con la emblemática —lo que podría explicar su inevitable encuentro—, el arte alquímico se apropia de los tres principales sistemas de representación gráfica —narrativo, alegórico y jeroglífico—, simultaneando sin reparo los tres registros en sus desconcertantes composiciones.</span><br />
<br />
<div style="text-align: center;">
<img alt="http://api.ning.com/files/5Bm0EO89jnqOZyrdW9dBuBjEXINJpAg4GFs2kzL5kCr4PttTBwooYCdb5IW6l*Ko8NrdQbWuhJVOYl3xggfY1pys6elkYmD1/MyliusAnatomiaauritheroyalbrotherandsisterwanttoproduceaheavenlychild.jpg?width=417&height=600" src="http://api.ning.com/files/5Bm0EO89jnqOZyrdW9dBuBjEXINJpAg4GFs2kzL5kCr4PttTBwooYCdb5IW6l*Ko8NrdQbWuhJVOYl3xggfY1pys6elkYmD1/MyliusAnatomiaauritheroyalbrotherandsisterwanttoproduceaheavenlychild.jpg?width=417&height=600" height="400" width="278" /></div>
<div style="text-align: center;">
J. D. Mylius, <i>Anatomia auri</i>, Francfort, 1628</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">En el imaginario alquímico los colores jugarán un papel esencial. La división de la gran obra en diferentes fases de acuerdo con el tratamiento y transformación de los compuestos se concretó simbólicamente mediante una serie de correspondencias cromáticas: la
nigredo
(= negro), la
albedo
(= blanco), la
viriditas
(= verde), la
citrinitas
(= amarillo) y la
rubedo
(= rojo). A cada etapa-color de la obra se asocia un planeta, una divinidad y un mito iniciático: por ejemplo, la
nigredo
, o retorno del compuesto al estado informe originario —putrefacción—, se simboliza mediante la figura de Saturno devorando a sus hijos, en tanto que Júpiter hace referencia al estado de la sublimación, también representada como resurrección del alma liberada de su lastre corporal.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><b><br /></b></span>
<span style="color: #9fc5e8;"><b>Principales fuentes de inspiración del imaginario alquímico</b>.<b> Alquimia y mística cristiana</b></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">La ciencia hermética, concebida en su dimensión espiritual como técnica de perfeccionamiento y salvación, no tardó en vincularse a la mística cristiana: el relato evangélico de la muerte del hombre-dios y de su renacimiento bajo un aspecto divino, liberado ya de su lastre humano, corresponde a la génesis de la piedra filosofal, que, a imagen de Cristo, encarna el paso de la imperfección material a la perfección espiritual.</span><br />
<table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: left; margin-right: 1em; text-align: left;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><span style="color: #9fc5e8;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj6ZpzWLjIPlG_3cdaeCQQjfgLlg8oUwamS9QsTetLQZ1AEIJnwqjrNJt1tMD29RG9o3W0TmYYk7FzVBi9dwsXm-rqIGMaDeVjUDrftYItevaC69D5jFMVKA9RyGgNeONj4flQWNBZGNzwQ/s1600/alquimia+3.gif" imageanchor="1" style="clear: left; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj6ZpzWLjIPlG_3cdaeCQQjfgLlg8oUwamS9QsTetLQZ1AEIJnwqjrNJt1tMD29RG9o3W0TmYYk7FzVBi9dwsXm-rqIGMaDeVjUDrftYItevaC69D5jFMVKA9RyGgNeONj4flQWNBZGNzwQ/s320/alquimia+3.gif" width="230" /></a></span></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><br /></td></tr>
</tbody></table>
(Imagen izquierda, resurección de Cristo como victoria de la Piedra Filosofal, Rosarium philosophorum, 1550).<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">Los
orígenes de esta idea son remotos: ya Zósimo de Panópolis describió en
sus
Memorias auténticas
—cap. I— una visión en la que los metales aparecen bajo la forma de
hombres martirizados, posible alusión al destino terrestre de Cristo que
devino hombre sujeto al sufrimiento. Al menos desde los escritos de los
ss. XIV —el
<i>Codicillus</i>
atribuido a Ramón Llull,
<i>Pretiosa margarita novella</i>
de Petrus Bonus— y XV — <i>
Liber Trinitatis fratris Almanni </i>
—, se plantea el paralelismo Cristo-lapis
, sustentado en ciertas similitudes entre el sufrimiento, la muerte y la
resurrección del Hijo de Dios y las distintas fases del «martirio» del
mercurio —separación del espíritu mercurial del cuerpo físico del
metal—, y de la fijación del azufre en el transcurso de la gran obra. La
función redentora del Salvador es de este modo asimilada a aquélla de
la piedra filosofal, capaz de transmutar los metales viles en oro y de
liberar de los elementos corporales el espíritu vital que impregna todas
las sustancias del universo. También el hermetista Michael Maier
subrayó a inicios del s. XVII las conexiones entre la epopeya del
Redentor y la de la piedra, y no tardan en crearse ritos alquímicos
inspirados en el gradual de la misa, clara expresión de los propósitos
místicos de la ciencia de Hermes.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">El
Cristo lapis
será lugar común de la gráfica alquímica a partir del s. XVI, incluido, por ejemplo, en el
<i>Rosarium philosophorum</i>
(Francfurt, 1550). Junto a éste, los alquimistas tomarán prestados otros motivos concretos de la iconografía cristiana: el dogma de la Trinidad, por ejemplo, alude alquímicamente a la tríada fundamental del azufre, mercurio y sal/arsenio, o triple germen de la «obra». La Virgen María, y concretamente los tipos de la
<i>Virgo gravida</i>
o
<i>Virgo lactans</i>
—donde aparece engendrando o alimentando al Hijo, símbolo del oro—, es imagen de la pureza de la piedra, que tampoco se encuentra mancillada por la cópula. Llegaron a utilizarse incluso pasajes como la caída de Lucifer o del Pecado original para simbolizar la corrupción de los metales innobles.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">Pero los paralelismos no se agotan aquí. Seguidores de Paracelso —que llegó a ofrecer una interpretación alquímica del
Génesis
en su
<i>Philosophia ad Athenienses</i>
al valorar la creación como un proceso de separación de contrarios—, en especial el polémico Heinrich Khunrath, más allá de la defensa del
<i>opus magnum</i>
como medio de purificación general —léase «redención»— de la humanidad y la naturaleza, insistieron en la concepción del universo como resultado de una alquimia divina.</span><br />
<br />
<div style="text-align: center;">
<img alt="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj31_dK1v7S4-9JtnXQg_qHDHLA2WEDwiSLSEytZRB2iLqrR-_PDyxjPaT6P9y7I5DjF6fJJOOSkeG_g3o3yTATtYCV0kdakZHbevsoi4TefueIOqPntx4BvloczzVY_lVeDG64Rp3tGPE/s1600/Khunrath+four+res.jpg" height="378" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj31_dK1v7S4-9JtnXQg_qHDHLA2WEDwiSLSEytZRB2iLqrR-_PDyxjPaT6P9y7I5DjF6fJJOOSkeG_g3o3yTATtYCV0kdakZHbevsoi4TefueIOqPntx4BvloczzVY_lVeDG64Rp3tGPE/s400/Khunrath+four+res.jpg" width="400" /></div>
<div style="text-align: center;">
Heinrich Khunrat, <span class="irc_su" dir="ltr" style="text-align: left;">Amphitheatrum sapientiae aeternae (1602)</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span class="irc_su" dir="ltr" style="text-align: left;">"El hijo del macrocosmos, el lapis, se asimila aquí a Cristo como hijo del microcosmos. Ambos resucitan después del martirio y la muerte, en un cuerpo celestial indestructible, que tiene el poder de salvar todos los demás elementos perecederos". Alexander Roob, <i>Alquimia & Mística</i></span></div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">En la Inglaterra del s. XVII se difundió la moda de la interpretación de la
Biblia
en clave hermética, de forma que Moisés fue en realidad un alquimista que adquirió sus conocimientos gracias a las revelaciones de los sacerdotes egipcios.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"> </span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><b>Las <i>nuptiae chymicae</i>: alquimia y sexualidad</b></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">El origen de la metáfora de la unión sexual —las
bodas químicas
de los contrarios— para designar la conjunción entre lo fijo y lo volátil previa a la sublimación o purificación de la materia, se remonta a los más tempranos textos de Zósimo y Olimpiodoro; ya estos autores resaltaban la unión armónica de principios que gobierna el equilibrio del cosmos, concretada en la reconciliación entre la dimensión masculina —
animus
— y femenina —
anima
— de la psique humana. La mujer, concebida habitualmente en la iconografía hermética como «disolvente universal», representa al mercurio, principio húmedo y volátil, que debe ser absorbido por el azufre, componente masculino, cálido y fijo. Eje axial de la literatura y el imaginario herméticos, el coito alquímico es imagen de esa asimilación esencial, y se ilustra mediante los episodios alegóricos del baño nupcial y de la unión del rey y la reina —o del sol y de la luna, de Apolo y Diana, de los hermanos Gabritius y Beia, o del encuentro incestuoso entre la madre y sus hijos—. El motivo alegórico de la
coniunctio
entre principios contrarios propicia la generación del
lapis
o «hijo de la filosofía», síntesis perfecta de los polos cósmicos opuestos.</span><br />
<br />
<div style="text-align: center;">
<img alt="http://a401.idata.over-blog.com/500x442-ffffff/0/38/41/67/Rosarium5.jpg" src="http://a401.idata.over-blog.com/500x442-ffffff/0/38/41/67/Rosarium5.jpg" height="353" width="400" /></div>
<div style="text-align: center;">
Arnau de Vilanova (atrib.) <i>Rosarium philosophorum</i>, 1550. Conjunción del rey y la reina.</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">Esta interpretación sexual de la producción del
oro filosófico
debe enlazarse, al margen del misticismo erótico que emana de ciertos textos bíblicos —
<i>Cantar de los cantares</i>
—, con la denominada «embriología metálica», concepto anclado en la creencia de que los metales crecen en la naturaleza como embriones en un vientre telúrico que les nutre materialmente, y evolucionan hasta convertirse en oro en el estado de madurez perfecta al final de su gestación. El alquimista arranca el metal embrionario del seno materno — <i>
terramater</i>
— para acelerar una maduración demasiado lenta de por sí
. Deben depositarse estos embriones metálicos en vasos herméticos comparables a los órganos sexuales humanos como la matriz o el útero —motivo extremadamente frecuente en el imaginario alquímico—, en cuyo interior se opera y acelera la transformación de la materia bajo forma de unas sustancias «embrionarias» que experimentan las más diversas metamorfosis alegóricas. Por medio de la gnosis se incorporó también a esta iconografía el hermafrodita o andrógino, síntesis de contrarios que simbolizan la totalidad perfecta, o el resurgimiento de la materia a partir del caos.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;"><b>El jardín y el bestiario de los filósofos</b></span><br />
<br />
<div style="text-align: center;">
<img alt="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjcYDcuJvj8eW-udgmCnoFX0mm-JitkXo_3Z8i75Vqarku2ZRN1C7ImKNfNoTDuUOrKLR4SM4yIWWhP1I_EcLCq05eIL4CoDV7gGTR7xsceNItmUxsuFGsZUYEcAmGWvA_OvzdLEwAO6Xfl/s1600/Map.JPG" height="276" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjcYDcuJvj8eW-udgmCnoFX0mm-JitkXo_3Z8i75Vqarku2ZRN1C7ImKNfNoTDuUOrKLR4SM4yIWWhP1I_EcLCq05eIL4CoDV7gGTR7xsceNItmUxsuFGsZUYEcAmGWvA_OvzdLEwAO6Xfl/s400/Map.JPG" width="400" /></div>
<div style="text-align: center;">
Daniel Mylius, <i>Opus medico.chymicum</i>, 1618, Plantas, animales y personificaciones del imaginario alquímico.</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">En el imaginario hermético descubrimos con frecuencia un jardín o huerto químico; allí los adeptos hicieron «germinar» una particular flora donde cada flor, cada árbol y cada fuente es símbolo de un concepto; lo mismo sucede con las figuras de animales reales o imaginarios, ya pertenezcan al medio terrestre, aéreo o acuático, que pueblan estos parajes mentales para describir de manera metafórica ciertos compuestos y fases de la gran obra. Los pájaros y demás seres alados —es el caso de algunos reptiles fabulosos— encarnan al principio volátil: cuando se elevan en el cielo, representan la volatilización o sublimación de las materias encerradas en el vaso, y, si descienden a tierra, simbolizan la precipitación y condensación de esos productos; los animales ápteros, por el contrario, representan el principio fijo. Con mucha frecuencia, un animal volador combate con uno terrestre para ilustrar la lucha química entre lo volátil y lo fijo, trazando su correspondencia espiritual en la oposición entre el alma y el cuerpo. Se encuentran asimismo animales de la misma especie y de sexos diferentes paseando juntos, copulando o peleando, emparejamientos que evocan de igual modo los dos principios que se unen o se enfrentan.</span><br />
<br />
<div style="text-align: center;">
<img alt="http://herve.delboy.perso.sfr.fr/lambs_8.jpg" src="http://herve.delboy.perso.sfr.fr/lambs_8.jpg" height="386" width="400" /> </div>
<div style="text-align: center;">
D. Stolcius von Stolcenberg, Viridiarum chymicum, 1624</div>
<div style="text-align: center;">
"Se descubre un bello bosque en el que hay dos pájaros ligados uno al otro. Uno es blanco como la nieve (mercurio), el otro rojo (azufre), y se matan a picotazos". Despues de devorarse mutuamente, se transforman primero en una paloma (blanqueo) y después en fénix (enrojecimiento).</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">Los diversos animales contribuyen con sus propiedades reales o literarias a definir sustancias o procesos: por ejemplo, la ígnea salamandra es habitual símbolo del fuego, el feroz lobo del antimonio, e híbridos como el grifo indican la combinación del azufre y el mercurio. Para representar uno de los agentes esenciales de la transmutación, el mercurio, caracterizado por la doble naturaleza de fijo y volátil, pueden emplearse distintos emblemas zoomorfos en razón de tal dualismo: de este modo, podría ser figurado bajo forma de un ave —principio del orden aéreo—, de una serpiente —principio ctónico, acuático y telúrico— o un dragón
ouroboros
que se muerde la cola —símbolo de la unión de los opuestos en la totalidad originaria—. Además, también los colores de animales y plantas aluden a las diversas tonalidades que se obtienen en el curso de las operaciones, y en ellas se incardina todo tipo de metamorfosis zoomórficas: del
<i>caput corvi </i>
de la
nigredo
a la paloma de la
albedo, de la
<i>cauda pavones</i>
de la
citrinitas
al pelícano que hace sangrar su pecho de la
multiplicatio
, o del león al fénix en la fase final de la
rubedo.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;"><b>Mitología, jeroglíficos y alquimia</b></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">Los alquimistas, familiarizados, como vimos, con textos en los que se recurre a un lenguaje velado y al empleo de sobrenombres para encubrir determinados conceptos y realidades a los no iniciados, entendieron la interpretación alegórica de los mitos como un modo legítimo de conocimiento de la naturaleza, que fue su principal maestra y guía. La adopción de temas y figuras procedentes de la mitología clásica en los escritos e ilustraciones alquímicos arranca de los siglos medievales, si bien aquí, si exceptuamos ciertas alusiones como la de Petrus Bonus de Ferrara en su tratado
<i>Pretiosa margarita novella
</i> (c. 1330) a que el verdadero propósito de autores como Homero, Virgilio u Ovidio no fue otro que transmitir determinados secretos herméticos, tal conexión se limitó a la identificación de los metales con sus respectivos dioses/astros. Será por tanto en el marco de la recuperación y revaloración humanísticas de la fábula antigua cuando los relatos míticos encuentren, a iniciativa e impulso de los neoplatónicos italianos, su lugar de privilegio en la literatura alquímica.</span><br />
<br />
<div style="text-align: center;">
<img alt="https://fr.maremagnum.com/uploads/item_image/image/162558/escalier-sages-philosophie-anciens-avec-20c61fd5-a8f5-4234-bc24-9356572f77b4.JPG" src="https://fr.maremagnum.com/uploads/item_image/image/162558/escalier-sages-philosophie-anciens-avec-20c61fd5-a8f5-4234-bc24-9356572f77b4.JPG" /></div>
<div style="text-align: center;">
B. Coenders, <i>Escalera de los sabios o la filosofía de los antiguos</i>, 1689</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">Convencidos de que los «viejos sabios» habían utilizado un lenguaje simbólico y poético para hablar de los secretos naturales, los hijos de Hermes, descifrando este sentido oculto, esperaban recuperar aquella remota sabiduría. Así se procedió a interpretar en clave alquímica casi todas las leyendas y todo el orden divino, muy en especial, las insólitas transformaciones de hombres y animales que se recogen en las
Metamorfosis
ovidianas, que permitían articular un eficaz paralelismo con la transmutación de los metales. La fábula de Virgilio titulada
<i>La rama dorada</i>
se interpretó, por ejemplo, como un texto cifrado acerca de la fabricación de la piedra filosofal.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">Son muy diversos los tópicos míticos que pasarán a formar parte del imaginario hermético —la lucha de Teseo contra Minotauro, el episodio de Dédalo e Ícaro, la fragua de Vulcano…—, si bien la atención de los alquimistas se dirige con más intensidad hacia aquellos relatos que ensalzan el valor del oro: la lluvia áurea que acontece con la seducción de Dánae por parte de Júpiter, o durante el nacimiento de Minerva del cerebro del rey del Olimpo, la expedición de Jasón y los argonautas en pos del vellocino de oro, o el relato de Atalanta, a quien Hipómenes venció en una carrera arrojando tres manzanas doradas que ella se apresuró a recoger.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">En la literatura alquímica, sincrética desde sus orígenes, mitos grecorromanos y tradición jeroglífica egipcia fueron de la mano en estrecho maridaje. Como indica Klossowski de Rola, ya desde el s. XII el gramático bizantino Ioannes Tzeztes trazó una correlación entre el tratado sobre jeroglíficos de Queremón de Alejandría (s. I d. C.), hoy perdido, y la
Ilíada
, para concluir que Homero concibió su obra como una alegoría cifrada de diversos mitos e imágenes religiosos, sistema con el que se familiarizó gracias al estudio de los pictogramas egipcios. Esta consideración alcanzó su punto culminante con el hermetismo humanista. Giovanni Bracesco, médico de Brescia, en su diálogo
<i>Espositione de Geber Philosopho</i>, que publica en Venecia en 1541 y 1544
29
, pone las siguientes palabras en boca del célebre alquimista árabe:
«Los antiguos ocultaron los secretos de la naturaleza no sólo en escritos, sino también mediante numerosas imágenes, caracteres, cifras, monstruos y animales representados y transformados de maneras diversas. Y dentro de sus palacios y templos pintaron esas fábulas poéticas, los planetas y los signos celestes, con muchos otros signos, monstruos y animales. Y no eran comprendidos sino por quienes tenían conocimientos de tales secretos…»
.
De entre todos los eruditos que trataron de aunar fábulas poéticas y hermetismo merece destacarse la figura de Michael Maier, autor de una prolífica obra, a menudo ilustrada con imágenes y emblemas.</span><br />
<br />
<div style="text-align: center;">
<img alt="http://65.media.tumblr.com/7c1c5ea004400c601f76274ad01f3be6/tumblr_nrsiquaG841u0xmcmo1_1280.jpg" class="overflowing" src="http://65.media.tumblr.com/7c1c5ea004400c601f76274ad01f3be6/tumblr_nrsiquaG841u0xmcmo1_1280.jpg" height="400" width="288" /></div>
<div style="text-align: center;">
Micahel Maier, <i>Arcana arcanissima</i> (1614)</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">Tal y como proclama en su
<i> Atalanta fugiens</i>
(1617), o, sobre todo, en sus<i>
Arcana arcanissima hoc est Hieroglyphica Aegypto-Graeca</i>
(¿Londres?, 1614), primer tratado en el que se aborda la interpretación hermética integral de la mitología grecoegipcia, las personificaciones y relatos de estas religiones antiguas eran explicaciones veladas del proceso de transmutación o, formas alegóricas del
<i>opus magnum</i>, hipótesis que alcanzó un amplio refrendo posterior: tales posiciones fueron defendidas poco después por el historiador Olaus Borrichius, o, ya en el s. XVIII, por el monje benedictino Antoine Joseph Pernety en
<i>Les Fables Egyptiennes et Grecques dévoilées et réduites au Même príncipe avec une Explication des Hieroglyphes et de la Gue-rre de Troye</i>
(París, 1758). Ese mismo año vio también la luz su
<i>Dictionnaire mytho hermétique</i>, donde podemos leer:
<i>Los Antiguos empleaban comúnmente las fábulas, y aquellas de los egipcios y de los griegos no han sido inventadas sino a la revista de la Gran Obra, si hemos de creer a los Filósofos, que las han citado a menudo en sus obras […] Algunos Filósofos han empleado un lenguaje mudo para hablar a los ojos del espíritu; han mostrado, a través de símbolos y de jeroglíficos, tanto las materias requeridas para la obra como sus prepara-ciones y con frecuencia hasta los signos demostrativos o los colores que aparecen en esta materia en el transcurso de las operaciones… </i></span><br />
<br />
<br />
Entradas relacionadas:.<br />
<br />
<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2015/06/alquimia-y-emblematica-la-fuga-de.html">Alquimia y emblemática: La Fuga de Atalanta </a><br />
<br />
<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2011/05/las-doce-llaves.html">Las doce llaves</a><br />
<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2010/12/la-tempestad.html"><br /></a>
<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2010/12/la-tempestad.html">La Tempestad</a><br />
<br />
<br />
.Janhttp://www.blogger.com/profile/10112360698804083485noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-4945391151380854953.post-57870650896242020272016-05-28T08:53:00.000-07:002016-05-28T08:53:03.801-07:00Emblemas del laberinto<br />
<div style="text-align: center;">
</div>
<div style="text-align: center;">
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiHPeQiOsLIj2_7zUN3Fd1DWMPuSeq7Bu_g2wKMUVXHIoxcBKwAlgkA2MpbDMDlh2ew8VCC3Hl1jQiuBxkanbVAOZXmBPzVUxfhRbuVULB0T2QFW2vjeaoibAFAhWQBC81GKGNCPA2SVMze/s1600/laberinto+5.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="305" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiHPeQiOsLIj2_7zUN3Fd1DWMPuSeq7Bu_g2wKMUVXHIoxcBKwAlgkA2MpbDMDlh2ew8VCC3Hl1jQiuBxkanbVAOZXmBPzVUxfhRbuVULB0T2QFW2vjeaoibAFAhWQBC81GKGNCPA2SVMze/s400/laberinto+5.jpg" width="400" /></a></div>
El mundo como laberinto<br />
Girolamo Rusucelli, <i>Le imprese ilustri</i> (1584)</div>
<br />
<br />
<span style="color: #ffe599;">"Nadie sabe qué mundo multiforme o qué multiplicada muerte llenan el laberinto. Tú tienes el tuyo, poblado de desoladas agonías".</span><br />
<br />
<span style="color: #f1c232;"> Julio Cortázar, <i>Los Reyes </i></span><br />
<br />
<div style="text-align: center;">
<br />
<div style="text-align: left;">
<br /></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="font-size: large;">El simbólico laberinto está muy presente en los emblemas de los siglos XVI y XVII, siendo ocupado su centro en la mayoría de ocasiones por el centauro en lugar del Mínotauro del mito griego original protagonizado por Teseo y Ariadna. Época de convulsiones y grandes cambios que daría paso al mundo moderno, también será el hombre el que aparece sólo en el centro o deambulando por sus senderos, imagen de la confusión y de los peligros por sortear en su recorrido por la vida terrena. </span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="font-size: large;">Veamos algunos ejemplos en un intresante ensayo publicado por la revista <a href="http://www.janusdigital.es/estaticas/ver.htm?id=1">Janus</a> dedicada a estudios sobre el siglo de oro.</span></div>
<div style="text-align: left;">
<br /></div>
<div style="text-align: left;">
<br /></div>
</div>
<div style="text-align: center;">
<b><br /></b></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #6fa8dc;"><b><span style="font-size: large;"><i>Celar, mostrar, desvelar...: estrategias <br />de remodelización verbovisual en la emblemática áurea</i></span></b></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #6fa8dc;">(fragmento)</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #6fa8dc;">por </span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #6fa8dc;"><span style="font-size: large;">Giuseppina Ledda </span></span></div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">(...) La tradición generalmente respeta
el núcleo duro del mito: el Minotauro, sujeto primario encarcelado en la
compleja arquitectura ideada por Dédalo, Teseo y el hilo de Ariadna que le
ayuda a no perderse...</span></span><br />
<br />
<div style="text-align: center;">
<img alt="http://www.palomanavarreteoficial.com/images/blog/javiernavarrete/laberinto/Teseo.jpg" src="http://www.palomanavarreteoficial.com/images/blog/javiernavarrete/laberinto/Teseo.jpg" height="314" width="400" /></div>
<div style="text-align: center;">
Baccio Baldini, <i>Teseo recibe el hilo de Ariadna</i> (1465)</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">En el empleo metafórico de la emblemática barroca se
añaden variantes, detalles, atributos o motivos secundarios, a menudo
cambiando papel y disposición: el bastón de Teseo, el hilo de Ariadna, el
barco de Teseo se desplazan o son
sustituidos;
el árbol de amor aparece
ocupando el centro o la periferia.
Así que el lector, aun reconociendo el mito
en su conjunto e intuyendo el significado más general
–
la pérdida del centro
y de la orientación, la iniciación
–
, ha de interrogarse sobre los detalles y
atributos que, en su desviación, vehiculan el mensaje que
el emisor desea
transmitir. El reconocimiento del camino que en el espacio cerrado lleva al
centro requiere silencio, prudencia y astucia.
En las
ediciones
de los epigramas de Alciato (2003:
27),
sucesivamente enriquecidas con los grabados que dieron vida
al género, se
divisa tan solo el signo primario: el Minotauro. El mito no se presenta
integralmente: el edificio no aparece. En primer plano, en un estandarte, el
hombre lleva un bastón en la mano derecha; cruza su cuerpo la inscripción
SPQR (<i>Senatus Populusque Romanus</i>).</span></span><br />
<br />
<div style="text-align: center;">
<img alt="http://www.emblems.arts.gla.ac.uk/alciato/images/pic_l/A91a012.jpg" src="http://www.emblems.arts.gla.ac.uk/alciato/images/pic_l/A91a012.jpg" height="398" width="400" /></div>
<div style="text-align: center;">
Alciato, <i>Emblematum Liber</i>. Emb. XII</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">El lema “Non vulganda consilia” (que los secretos no deben divulgarse) recuerda que el Capitán tiene que
guardar el secreto de sus consejos, al igual que la estructura de Dédalo había
escondido al monstruo Minotauro.</span></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">En el espacio icónico de una empresa que Ruscelli (
1584:
383
)
dedica a Consalvo Pérez, secretario de Carlos V y de Felipe II, aparece la
representación del Minotauro, en figura de centauro, encerrado y escondido
en el centro del laberinto; señal de oportuna censura, el dedo índice de la
mano izquierda le cierra los labios.</span></span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj6sLHtCxGttvqeT2MNK8GLLHHsHt4mN02pYk68WTlgaOqIos8IJSOQat1EEDoMF-a8NO-VyTIQsCl_m5h4g8Hlb1_Qluq5-utkGw4qokgrYlT_gEtTb-j3U6Cj8Rwm_N2biCRQC126Vc2t/s1600/laberintos+2.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="323" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj6sLHtCxGttvqeT2MNK8GLLHHsHt4mN02pYk68WTlgaOqIos8IJSOQat1EEDoMF-a8NO-VyTIQsCl_m5h4g8Hlb1_Qluq5-utkGw4qokgrYlT_gEtTb-j3U6Cj8Rwm_N2biCRQC126Vc2t/s400/laberintos+2.jpg" width="400" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Girolamo Rusucelli, <i>Le imprese ilustri</i> (1584)</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">El mote anuncia: "en
silentio et spe” (en silencio y esperanza)
(Isaías,
30,
15). La fuerza y la astucia del toro aluden a la prudencia del
hombre de estado que tiene que guardar los secretos en los negocios del
gobierno. En el interesante legado de Antonio Pérez (1625), secretario de
Felipe II, culpado de traición de la Sacra corona y del asesinato de Juan de
Escobedo (colección de relaciones, cartas, acotaciones marginales, copia de
papeles varios, en parte atribuidos a la pluma del tal vez inexistente Rafael
Peregrino), el autor incluye cuatro emblemas. Nos interesan los dos en los
que domina la representación del laberinto. Encabezan el párrafo preliminar
que lleva el título “La pluma arrojada a los curiosos”. Con sentido en parte
coincidente con el de Ruscelli, en el emblema a la izquierda sitúa el
Minotauro en el centro de un laberinto cerrado (han desaparecido Teseo, el
bastón y el hilo), para significar que, a pesar de la confusión de las prisiones, guarda la esperanza de salir libre, promete la constancia en el silencio.</span></span><br />
<br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhZPRHtXUEFoAAxwu91b4LVjjTJlwL3U32sd21UooeCcqV_l2_YujL-86_pjYYoBZMy1ugz_h00xX4jx3vBWfInU2pgbTkIZPVAjFBpAz5dfXCi_6AlvGoUlDH5IrGim3TrbkXDQN9bCNui/s1600/books.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="321" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhZPRHtXUEFoAAxwu91b4LVjjTJlwL3U32sd21UooeCcqV_l2_YujL-86_pjYYoBZMy1ugz_h00xX4jx3vBWfInU2pgbTkIZPVAjFBpAz5dfXCi_6AlvGoUlDH5IrGim3TrbkXDQN9bCNui/s400/books.jpg" width="400" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Antonio Perez, <i>Retrato al vivo del natural de la Fortuna</i> (1625)</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">En el
laberinto a la derecha una variante (las murallas que limitan los caminos
están hechas pedazos), la mano dirigida al cielo en señal de protesta y de
esperanza de justicia divina. El mote sentencia: “Usque adhuc”.</span></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">Antonio de Lorea en el
<i>David pecador </i>
(
1674
)
reproduce el tema
del
Centauro en el laberinto; para escarmiento del pecador empedernido;
representa su confusión en el tortuoso recorrido de la vida terrena.</span></span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiRIAb0zPytvOHnR3KzVFYSmUz7VF583gNUsLlMtRZ4MeRnbnYVJPFb0PWbx0Mo-D2ZUhDZ3hs5HwZ6KLQR8T0fhzH8ui7JdjFESBpe6dKPzWQwFG-LASfwBEOh8TrU5uH6LB5_Nfue0J3R/s1600/laberinto+3.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="249" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiRIAb0zPytvOHnR3KzVFYSmUz7VF583gNUsLlMtRZ4MeRnbnYVJPFb0PWbx0Mo-D2ZUhDZ3hs5HwZ6KLQR8T0fhzH8ui7JdjFESBpe6dKPzWQwFG-LASfwBEOh8TrU5uH6LB5_Nfue0J3R/s320/laberinto+3.jpg" width="320" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Antonio de Lorea, <i>David pecador</i> (1647) "De abismo en abismo"</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">(...) En los
Emblemas morales,
Sebastián
de Covarrubias (1591:
emblema
XXXI) en la invariante del edificio aporta la variante del
protagonista que suele habitarlo: desaparece el Minotauro sustituido en una
singular
<i>mise en abîme</i>
por el cortesano, destinatario de la empresa. Al igual
que las falsas vías del inescrutable edificio atraen y no dejan salir, así las
promesas del mundo engañan y ocultan la recta vía.</span></span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiNvp3avKqVZGb_EddlYe33z3LRnsv76i58cZ0aL1M44MthHkHD_6ogFtC7AhUIcszy8KL10Sf1PkwK0VQhbdtgXtCCbLUBBgp6qTxsSQM9hOqKA_v2e_lcSCv893F_pvJMosnTjq40SS7s/s1600/laberinto+4.gif" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiNvp3avKqVZGb_EddlYe33z3LRnsv76i58cZ0aL1M44MthHkHD_6ogFtC7AhUIcszy8KL10Sf1PkwK0VQhbdtgXtCCbLUBBgp6qTxsSQM9hOqKA_v2e_lcSCv893F_pvJMosnTjq40SS7s/s400/laberinto+4.gif" width="278" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Sebastián de Covarrubias, <i>Emblemas morales</i> (1591)</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">El referente es
convocado directamente sin recurso a la metamorfosis metafórico-alusiva, el
autor no establece una relación de analogía y similitud: un cortesano representa al cortesano. (...)</span></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">Paolo Aresi (
1649
) aporta otra interesante variación. Con el lema “a
vituperio del mundo” presenta en el emblema
XXXI en el centro del
laberinto un árbol, firmemente arraigado
al suelo. El signo, es notorio,
deriva
de las empresas de amor, sirve en este caso para demostrar la
dificultad o
imposibilidad del pecador empedernido de salir del laberinto del mundo.</span></span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi1xMVNxjiYbx83b7xzsj6tkwmxYxCXgeEebrVYWxQt2Yijnx9JuVOTJMPGybM-Jvq-S2EPy2cMk-kAORYuiBj9kMTB6aMBQR4oHV9UkDri9ry0oLvGgeBaOaPjta6NwB4L2CIYHb4jzSV1/s1600/books.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi1xMVNxjiYbx83b7xzsj6tkwmxYxCXgeEebrVYWxQt2Yijnx9JuVOTJMPGybM-Jvq-S2EPy2cMk-kAORYuiBj9kMTB6aMBQR4oHV9UkDri9ry0oLvGgeBaOaPjta6NwB4L2CIYHb4jzSV1/s400/books.jpg" width="392" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Paolo Aresi, <i>Imprese sacre</i> (1649)</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">(...) Otro de los motivos más frecuentes en los laberintos emblemáticos
es el del
mundo=laberinto
en el que el
alma humana puede perderse o
salvarse con la ayuda divina. La afirmación es antigua y moderna: el mundo
es un caos con encrucijadas tortuosas que se abren al viandante y al mismo
tiempo le niegan el paso. Luca Contile (
1574:
94v
) dedica una empresa a
Giulio
Beccaria en la que el signo dominante es el globo terrestre en forma
de laberinto. En el cielo una estrella ilumina y el mote enuncia “Hac duce
egredias” (sigue a esta guía): el alma humana puede salvarse y salir de los caminos del pecado
con el auxilio de la gracia divina.</span></span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj8nvapD6nR5HpDBWkYSxj6fosR0u-xWcL7g3fzJXWcCKrMrWNOIKdeN2xXd57N7H326RqU_Hj8WjWSUotGDgL-bgW5dNbURYgWHOw8j39h2m9ilYevuxNp1VTUJPwV3ceO3GceQ1FyyGXY/s1600/laberinto+5.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="280" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj8nvapD6nR5HpDBWkYSxj6fosR0u-xWcL7g3fzJXWcCKrMrWNOIKdeN2xXd57N7H326RqU_Hj8WjWSUotGDgL-bgW5dNbURYgWHOw8j39h2m9ilYevuxNp1VTUJPwV3ceO3GceQ1FyyGXY/s400/laberinto+5.jpg" width="400" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Luca Contile, <i>Ragionamento di Lvca Contile</i>...(1574) </div>
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span>
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">En el grabado se aprecia una riquísima
orla, que ya no se limita a ser marco, “fuera de texto” con función
decorativa: dos figuras contrapuestas insisten en repetir el mensaje cifrado
en el
cuerpo: la una dolorosa, con la mirada al suelo, desesperada por
no
haber hallado la justa vía, la otra alegre mirando al cielo.</span></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">El ejemplo más logrado y más asequible sobre este tema (merece ser
citado pese a que, a diferencia de los precedentes, aquí la exhibición y la
locuacidad vencen la esencialidad) lo ofrece Herman Hugo (
1624
) en los
<i>Pia
desideria</i>. Investida de una función religiosa
–
dedicada al tránsito por la
vida terrena y a la salvación o condena del alma
–
la imagen aprovecha y
sustituye los elementos del laberíntico mito enriqueciéndolos.</span></span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiuJAYW-VYNFJFvJsX8Du5NSAbFLcRgj0fbvW69EbaEK1fKDl7WRDCUgnDHyZNIoy3sMi-xu-1d9Z0F5teeQKZikJzZChbT4kvU7qvhI_yZzuOhZQFUAtYG_tZ8mWf-kEC2R8Qvz6FCQwr5/s1600/laberinto+6.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiuJAYW-VYNFJFvJsX8Du5NSAbFLcRgj0fbvW69EbaEK1fKDl7WRDCUgnDHyZNIoy3sMi-xu-1d9Z0F5teeQKZikJzZChbT4kvU7qvhI_yZzuOhZQFUAtYG_tZ8mWf-kEC2R8Qvz6FCQwr5/s640/laberinto+6.jpg" width="372" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Herman Hugo, <i>Pia Desideria</i></div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">La dinámica
desplegada del andar por un camino tortuoso ya no es exclusivamente
centrípeta o con salida periférica, se establece una relación bajo
-
alto, de
recorrido horizontal y vertical (la montaña y la torre). En el laberinto el alma
humana, en figura y traje de peregrin
o (¿o de peregrina?) con cayado y
zurrón a la espalda, transita e intenta salir de los intrincados recuadros de la
ingeniosa arquitectura, dirigiéndose hacia la torre
-
roca del cielo. Los muros
que marcan el recorrido son elevados y en este caso el alma debe recorrerlos
en la parte alta, así que los peligros que se le presentan son dos: caer en la
parte baja o no hallar la vía de salida. En las tortuosas vías se notan dos
individuos en el acto de caer, mientras un ciego guiado por un perro, que
representa la
confianza en Dios, halla la vía de la salvación. En la roca dos
peregrinos intentan subir, pero uno de los dos cae. A lo lejos se divisan en
las aguas del mar dos barcos guiados por un una luz encendida en la parte
más alta. Desde una torre elevada en la
cumbre de una montaña un ángel ha
lanzado una cuerda al peregrino. El lema es un pasaje de los Salmos
“Utinam dirigantur viae meae ad custodiendas iustificationes tuas” (<span class="line">¡Ojalá fuesen dirigidos mis caminos</span><span class="line"> para observar tus estatutos!</span>) (Ps,
119, 5).</span></span><br />
<br />
.<br />
Lecturas:<br />
<br />
<b>Giuseppina Ledda, </b><i>Celar, mostrar, desvelar...: estrategias de remodelización verbo-visual en la emblemática áurea. </i>Revista JANUS, estudios sobre el siglo de oro nº 4 (2015)<i></i><br />
<i><br /></i>
<i><br /></i>
<i>.</i>Janhttp://www.blogger.com/profile/10112360698804083485noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4945391151380854953.post-12802376186491603662016-05-19T08:31:00.001-07:002016-05-19T08:31:34.782-07:00Alquimia en el cristianismo medieval <br />
<div style="text-align: center;">
<img alt="" border="0" height="400" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5440730712351849522" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjixIaNOqcS3tHkrAGLF19AONkGukcdQB91Nv3HVmWXtgmZbyhJo0uTgdbSp4jAz1NnX52FW1bg2dE67ga57FYJcN2xf84zOMZmJ9VyjghiKs3huq7fzAIxw39_SnUTAz-L8oUACHN1Bv8/s400/20.499" style="display: block; margin: 0px auto 10px; text-align: center;" width="303" /><span style="color: #ffe599;"><i>"Entonces ví una formación gigantesca,
redonda e imprecisa. Hacia arriba se hacia más fina, como un huevo(...).
Su capa exterior parecía tener un fuego luminoso (empyerum). La
membrana que tenía debajo era sombría. En el fuego claro flotaba una
bola de fuego rojiza y chispeante (el sol)". Bajo la sombría membrana,
ella ve la zona del éter con la luna y las estrellas, y debajo de ellas,
una zona evanescente que ella llama "membrana blanca" o "aguas
superiores".</i><br /><i><span style="font-size: 85%;"></span></i></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #f1c232;"><br /></span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #f1c232;"><b>Hildegard von Bingen, <i>Scivias </i>(Códice de Rupersberger), s. XII</b></span></div>
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<br /></div>
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<b><span style="color: #009900;"> </span></b></div>
<div style="text-align: left;">
<b><span style="color: #009900;"></span></b><span style="font-size: large;">Esta entrada se publicó originalmente en febrero de 2010 (Nota de Fragmentalia)</span></div>
<br />
<br />
<br />
<div style="text-align: left;">
Victoria Cirlot, en su interesante ensayo <b><i>Hildegard Von Bingen y la tradición visionaria de Occidente</i></b>,
hace una reflexión sobre la falta de una teoría de la imaginació en el
Occidente europeo, causa según ella, por la que las experiencias
visionarias han carecido de un marco de comprensión. Los primeros
intentos para desentrañar el universo de los simbolos que aparecen en
esa tradición visionaria, fue llevada a cabo por el grupo Eranos, entre
los que destaca Henry Corbin. Este, en su viaje por tierras orientales,
encontró la llave que permitiera abrir el cofre del tesoro. Irán,
encrucijada entre el antiguo zoroastrismo, el neoplatonismo y el islam
chiita, le posibilitó comprender la realidad del mundo imaginal y
angélico, también presente en la cultura europea aunque huerfano de un
discurso teórico. Victoria Cirlot reclama aplicar la hermeneútica
corbiniana, dirigida a textos de Avicena y Sohrawardi, a la obra de
Hildergar von Bingen, accediendo así a una lectura por la que descubrir
la dramaturgia transformadora del alma expresada en su obra, proceso de
transmutación que también podemos encontrar proyectado en los textos e
imágenes de los tratados sobre alquimia.<b><span style="color: #009900;"></span></b><br />
<div align="left">
En la
imaginería del cristianismo medieval podemos ver la figura del huevo
cósmico visualizado por la mística Hildegard de Bingen. En su obra <i>Scivias, </i>la
Santa describe al mundo como un huevo cósmico, subrayando la idea de
una totalidad como algo orgánico y vivo, en crecimiento. <i>"Dios concibió al mundo como único ser viviente, una totalidad en la que el todo penetra cada una de sus partes".</i></div>
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</div>
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<i> </i>Matila c. ghyka dice en su imprescindible libro <i><b>El número de oro</b>:
"Una tercera cadena de transmisión de las ideas pitagórico-platónicas, y
en especial del principio de correspondencias entre el "Mundo grande y
el pequeño" es filial de lo que podría llamarse el platonismo monástico,
o aún benedictino. Igual que para la arquitectura, el mundo árabe es el
que procura al Occidente cristiano el contacto con Platón y el esquema
de correspondencias de Timeo.(...) La monja benedictina Hildegarda de
Bingen (1098-1179), abadesa de Ruperstberg (Santa Hildegarda), cuyos dos
manuscritos han llegado hasta nosotros (Scivias y Liber divinorum
operum simplicis hominis), nos describe sus visiones cosmogónicas. En
una de sus extraordinarias ilustraciones aparece el hombre desnudo, en
el centro del Universo planetario, al que lo unen radios que se
entrecruzan en un polígono estrellado </i>(más abajo se encuentra reproducida)<i>.
La abadesa alsaciana Herrade de Lasndsberg, contemporánea de santa
Hildegarda, nos muestra igualmente en una miniatura de su Hortus
delicarum, a un hombre desnudo llamado microcosmus unido por rayos a un
macrocosmos circular. Son los precursores de los microcosmos
pentagramáticos de Agripa y de Paracelso. Sabemos, además, que el
maestro de Paracelso y de Agripa, el abate Tritemo de Sponheim, estudió
atentamente los escritos de Hildegarda, muchas de cuyas expresiones
pasaron textualmente a los escritos de sus discípulos".</i></div>
<div align="left">
<br /></div>
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<div align="left">
Tanto <i>Scivias </i>como <i>Liber Divinum Operum </i>no
trata propiamente sobre alquimia, pero podemos reconocer que las
miniaturas que las ilustran, inspiradas en los relatos de las visiones
de Santa Hildegard, acompañan perfectamente un texto sobre esa materia
como el que a continuación dejo. Es el capítulo titulado "La alquimia",
perteneciente al hermoso ensayo <b><i>Iniciación a la simbología románica</i></b>, de la investigadora francesa Marie-Madeleine Davy. </div>
Las
imágenes que he intercalado, y que no aparecen en el original, proceden
del códice Rupertsberg s. XII, y del códice de San Ruperto, s. XII. Las
notas que las acompañan proceden de <i>Alquimia & Mística </i>editada por Taschen, y <i>Hildegard von Bingen y la tradición visionaria de Occidente,</i> editada por Herder.<br />
</div>
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<br /></div>
</div>
<div style="text-align: left;">
<b style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" border="0" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5441383296161520786" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjECeqD0lVfLKzOrggM_tE5s4TANpcxyuSlBa_In8RB3JXUTC-DeBItXfvWyfGFalwxNP3ibFW_cEcGmppKIk5xzezSEUlWdx6uCSIF0M44rWXNlUzQ4_yMhcvtmZvzeJ-PCLiTAiB_rM4/s320/mandala.jpg" style="float: right; height: 320px; margin: 0px 0px 10px 10px; width: 262px;" /> </b><span style="color: #ffe599;">Además de la imagen del huevo, la rueda es
para Santa Hildegarda el símbolo más adecuado para explicar el
funcionamiento del plan macrocósmico. Al igual que el mundo, la
divinidad es completamente redonda como una rueda, movida por el amor.
El estrato igneo exterior de la ira divina solidifica el firmamento para
que no se desparrame, el éter suscita su movimiento, la región del aire
acuoso lo humedece, los vientos en forma animal lo mantienen en
rotación y las diferentes capas del aire hacen reverdecer la tierra,
representada aquí como eje de la ruedacon los radios de las cuatro
estaciones del año y las cuatro partes del cosmos. <i><b>Liber Divinorum Operum</b></i></span></div>
<div style="text-align: left;">
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<b><span style="color: #009900;"> </span></b></div>
<div style="text-align: left;">
<br /><div style="text-align: center;">
<span style="color: #f1c232;"><b><i><span style="font-size: large;">La alquimia</span></i></b></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #f1c232;"><span style="font-size: small;">por</span></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #f1c232;"><span style="font-size: large;">Marie-Madeleine Davy</span></span></div>
<br /><br /> <br /> <span style="font-size: large;"><b><span style="color: #009900;"> </span></b><span style="color: #ffcc33; font-family: "trebuchet ms";">En
la Edad Media la alquimia no sólo concernía a la química teórica y
práctica, el arte de hacer oro, sino también al tratamiento de los
vidrios, las perlas y las piedras preciosas, a ladestilación de los
perfumes y alcoholes, a la fabricación de los polvos y los ungüentos y
al tinte de los tejidos. La obra del monje Teófilo que data de finales
del siglo X, <i>Schedula diversarum artium, </i>trata de los metales y
contiene una enseñanza relativa a la fabricación de los objetos
sagrados como copones y campanas. Los testimonios más antiguos remontan
la alquimia a Egipto, y sin embargo el Occidente medieval tomó contacto
con esta ciencia a través del pensamiento árabe. Tras la partida de los
árbes de España, los traductores intentaron estudiar -particularmente en
Toledo- los abundantes manuscritos árabes que concernían a la alquimia y
la medicina. Entre los traductores habría que citar a Gerardo de
Cremona, y a Gundissalinus, aunque los grupos de alquimistas fueron más
florecientes en España debido justamente a la aportación de los árabes.
Así, el <i>Tratado de los alumbres y las sales, </i>que data de finales del siglo XII y que se atribuye a Ibn Râzí, ejerció gran influencia en la alquimia medieval.</span></span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="font-size: large;"><span style="color: #ffcc33; font-family: "trebuchet ms";"><span style="color: #ffcc33; font-family: "trebuchet ms";">Pero
no sólo se trata de una ciencia física o química. En la alquimia, se
tiene además en cuenta el significado de los metales, que se inscriben
en una escala de valores comparable a la doctrina de Hesíodo sobre las
edades de la humanidad. Así en el <i>Ars lectoria, </i>compuesto en 1086 por el gramático Aimeric, la literatura cristiana se divide en cuatro clases: 1.º <i>aurum: authentica; 2.º argentum: hagiographa; 3.º stagnum: communia; 4.º plumbum: apocripha. </i>Los
escritores cristianos y paganos se sitúan igualmente en orden
decreciente, correspondiendo así a los distintos metales. Pero de hecho,
Aimeric propone en realidad una opinión corriente, pues esta escala de
valores ya se hallaba expresada en el libro de Daniel (II, 32), a
propósito de la famosa estatua del sueño del rey Nabuconodosor, que
tenía la cabeza de oro, el pecho y los brazos de plata, el bientre y los
muslos de bronce, las piernas de hierro, y los pies por último en parte
de hierro y en parte de arcilla. Los alquimistas medievales concebían
su obra teniendo en cuenta el valor simbólico de los metales, conociendo
para ello los múltiples sentidos presentes de los símbolos.</span> </span></span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="font-size: large;"><span style="color: #ffcc33; font-family: "trebuchet ms";"><span style="color: #ffcc33; font-family: "trebuchet ms";">Por
lo demás cualquier símbolo es polivalente, debido a la polivalencia de
niveles en los que es recibido por el sujeto. Gracias al símblo, el
hombre es conducido a lo real. Se trata por tanto de un proceso
iniciático consistente en una especie de alquimia que tiene diferentes
etapas, incluyendo por ejemplo la mística y la gnosis. La transmutación
desemboca en una total transfiguración, esto es, lo esencial del arte
real (<i>ars regia</i>). El ser descubre el elixir de la vida, y en
cuanto lo encuentra para sí, lo utiliza para cambiar el mundo, es decir,
para salvarlo.</span></span></span></div>
<div style="text-align: left;">
</div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #ffcc33; font-family: "trebuchet ms"; font-size: 130%;"><span style="color: #ffcc33; font-family: "trebuchet ms"; font-size: 130%;"></span></span><br />
<div style="text-align: left;">
<span style="clear: left; color: #ffe599; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi2r6fd0Nhk4471hm7-YSmEDT2z5ZWPdQ8krlHRuqtKXvgMWO88xsQ-z-AzTx9cVjpmjzrxK9DK5fRsQLXncyArhRw6Qxaar_8yjIEm5gAVI3JIJvhHuyyn2B4pPc6j1zNmXSqckWeTYQE/s1600/hildegarda22.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi2r6fd0Nhk4471hm7-YSmEDT2z5ZWPdQ8krlHRuqtKXvgMWO88xsQ-z-AzTx9cVjpmjzrxK9DK5fRsQLXncyArhRw6Qxaar_8yjIEm5gAVI3JIJvhHuyyn2B4pPc6j1zNmXSqckWeTYQE/s320/hildegarda22.jpg" border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi2r6fd0Nhk4471hm7-YSmEDT2z5ZWPdQ8krlHRuqtKXvgMWO88xsQ-z-AzTx9cVjpmjzrxK9DK5fRsQLXncyArhRw6Qxaar_8yjIEm5gAVI3JIJvhHuyyn2B4pPc6j1zNmXSqckWeTYQE/s320/hildegarda22.jpg" /></a>En su cuarta visión,
Santa Hildegarda ve "una formidable luminaria que refulgía como
innumerables ojos y sus cuatro ángulos estaban orientados a los cuatro
puntos cardinales". Es la omnisciencia de Dios, en cuyo centro "aparece
otro fulgor parecido a la aurora en rayos de púrpura". De esta matriz
celeste deriva la roja bola ignea del alma, que vivifica el embrión en
el vientre materno. La visión es concebida como una "impresión" de Dios
en el alma del estado uterino. "Una esfera de fuego sin rasgo humano"
inunda el feto de la mujer embarazada, "tocando su cerebro y
expandiéndose a lo largo de todos sus miembros", dice Hildegard de su
visión. En la versión de la miniatura el feto se encuentra ligado al
espacio celestial, simbolizado por el cuadrángulo plagado de ojos de
color dorado y púrpura, por medio de una especie de cordón umbilical por
el que desciende la esfera que se introduce en el cerebro <b><i>Scivias </i></b></span><span style="font-size: large;"><span style="color: #ffcc33; font-family: "trebuchet ms";">Matila
Ghyca (el número de oro) ha mostrado cómo los alquimistas de la Edad
Media rechazan limitarse a la búsqueda de las aleaciones y
transmutaciones de la materia. Iluminados por principios metafísicos,
examinaron "la ciencia general de las Fuerzas, o Magia". Así en el siglo
XII, la alquimia se presenta como un ciencia que resulta a la vez
natural y hermética.</span> <span style="color: #ffcc33; font-family: "trebuchet ms";">Estamos
acostumbrados a considerar la alquimia como ciencia que busca convertir
metales viles en oro pero el objetivo de la verdadera alquimia es
despertar lo que está dormido, hacer que surja el agua que se encuentra
encarcelada en el seno de la tierra. En otros términos, el sentido de la
alquimia es despertarlaprincesa dormida dentro de lo más secreto del
alma.</span></span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="font-size: large;"><span style="color: #ffcc33; font-family: "trebuchet ms";"> </span><span style="color: #ffcc33; font-family: "trebuchet ms";">Las
relaciones entre la búsqueda alquímica del oro y la purificación
ascética han sido estudiadas a menudo. Del mismo modo que el oro es
material "maduro", la realización espiritual corresponde a una madurez.
Mircea Eliade ha mostrado la relación entre el alquimista y el yogui.
Éste busca en efecto "la perfección del espíritu", la liberación, la
autonomía, y el "cuerpo de diamante" de los Vajrâyanistas guarda por
cierto un claro parecido con el cuerpo glorioso de la cultura
occidental.</span></span><br />
<div align="left">
<span style="font-size: large;"><span style="color: #ffcc33; font-family: "trebuchet ms";">El oro simboliza el cuerpo resucitado y, según Alano de Lille (en su <i>Anticlaudianus</i>),
el hombre nuevo prepara el advenimiento de la edad de oro. Guillermo de
Saint Thierry habla también del esbozo, aquí, en la tierra, de ese
cuerpo glorioso que quedará realizado por completo en la vida futura.
También hace alusión al "lenguaje angélico" que sirve de comunicación a
los sabios, cuyo cuerpo glorioso está ya realizado en el plano
terrestre. Así, cuando cita los siete grados del alma en la
contemplación de la Verdad, Guillermo dice que el séptimo ya no es un
grado sino una morada, por lo que el cuerpo de resurrección se encuentra
ya realizado.(...)</span></span></div>
<div align="left">
<br /></div>
<div align="left">
<span style="clear: right; float: right; font-family: "trebuchet ms"; font-size: 130%; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em;"><img alt="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjZrXPbB4WcFJ092cSUcsdigzLc_OQgKzpWVpm8vlyC9UdjetXH4gEit7ykMOuoMeR8rkuWLoauus6wb6q5mzQW17xY19Dj4nOnJGxxqCPUlq5wi_qjrzUQvHJGoh2y_zwLAe2LIDkoxVU/s320/LDO_P1_v2_600d.jpg" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjZrXPbB4WcFJ092cSUcsdigzLc_OQgKzpWVpm8vlyC9UdjetXH4gEit7ykMOuoMeR8rkuWLoauus6wb6q5mzQW17xY19Dj4nOnJGxxqCPUlq5wi_qjrzUQvHJGoh2y_zwLAe2LIDkoxVU/s320/LDO_P1_v2_600d.jpg" /></span><span style="color: #ffe599;"><span style="font-family: "trebuchet ms"; font-size: 130%;"> </span></span><span style="color: #ffe599;">Las últimas visiones de Santa Hildegarda
escritas entre 1163 y 1173, tienen por objeto la integración del hombre
en el orden de la creación divina. El amor divino del Hijo aparece en el
cielo bajo una figura cósmica de color rojo, superada solamente por la
bondad del Padre. En su pecho veía la santa la "rueda del mundo", con el
fuego claro del amor y el fuego rojo del juicio final como límite
exterior del universo. Las doce cabezas de animales representan las
virtudes, que forman el sistema de relaciones en el que el hombre puede
vivir como rey de la creación. <b><i>Liber Divinorum Operum.</i></b></span></div>
<div align="left">
<br /></div>
<div align="left">
<span style="color: #ffe599;"><b><i> </i></b></span><span style="font-size: large;"><span style="color: #ffcc33; font-family: "trebuchet ms";">Así,
el ser que todavía no ha "nacido" se encuentra rodeado de un caparazón
que lo aísla de su principio, y que por ello le impide unirse a la
creación. En efecto, si el hombre no renuncia a sí mismo, queda separado
de la vida. El <i>vae soli </i>de la Escritura puede sin duda aplicarse al ser desprovisto de sentido cósmico y reducido a los límites de su cuerpoo físico.</span><span style="color: #ffcc33; font-family: "trebuchet ms";">El
aspecto cosmológico del hombre hace posible la apertura de fisuras en
el cascarón que rodea a cada ser y que lo enclaustra respecto a todo
cuanto no es él. Pero este caparazón es a la vez una prisión y una
armadura. La alquimia espiritual, al arrancar ese caparazón, suprime las
compartimentaciones inherentes al amor propio y a la dureza del
corazón. Así, el ser cuyo caparazón se quiebra, se abre con ello a la
divinidad, en su realidad con los demás y consigo mismo, participa en la
vida cósmica y la comparte.</span></span></div>
<div align="left">
<span style="font-size: large;"><span style="color: #ffcc33; font-family: "trebuchet ms";"><span style="color: #ffcc33; font-family: "trebuchet ms";">La
alquimia procede por lo demás de manera sutil, empleando disciplinas
muy precisas que aplica al microcosmos. Bajo el efecto de los ejercicios
apropiados, el caparazón, pese a su dureza, se licua. Así, el ser puede
unirse con toda la creación. Si todo se convierte en oro, es porque el
hombre está creado a imagen del Creador; el puente establecido entre
sujeto y objeto ha sido formado por el mismo ordenador del universo.
Claro que hay otros modos de interpretar el símbolo alquímico, pero la
que aquí proponemos es seguramente la esencial.</span></span></span><br />
<div align="left">
<span style="font-size: large;"><span style="color: #ffcc33; font-family: "trebuchet ms";">El
milagro de la alquimia corresponde a la naturaleza fundamental del
hombre, la de coincidir de manera viva y absoluta con todo lo que
existe. La operación alquímica marca dicho paso, introduciéndose en una
dimensión de orden universal. Debido a ello, dicha operación suprime el
aislamiento. El muro que separa al hombre de la creación se vuelve
fluido, y ya no hay frontera, lo que no implica que el ser se disuelva
en lo otro, sino que, al contrario, se convierte en sí mismo, en el seno
de una verdad metafísica que antes le era por completo desconocida.
Sólo queda abolida la distinción egocéntrica, es decir, la existencia
separada, y por lo mismo se crea una especie de transparencia. El ser
participa en la universal orquestación con su color, así como con su
nombre y con el sonido que le es propio.</span></span></div>
<div align="left">
<br /></div>
<div align="left">
<span style="clear: left; color: #ffcc33; float: left; font-family: "trebuchet ms"; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgj9Nv0pqOtftbftgolgH6hZ2Ev-4cHjuYTFIwfohFeduvlTbXe6YdKlcgCvbWNYwDHJ7Rh8Z5Dt-rmEgBxZ50vLXba6gPObguff3ihSf3g46lGMw7eEWL9W1K9OnB2G2yh62pvBZn22zQ/s320/dreifaltigkeit.jpg" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgj9Nv0pqOtftbftgolgH6hZ2Ev-4cHjuYTFIwfohFeduvlTbXe6YdKlcgCvbWNYwDHJ7Rh8Z5Dt-rmEgBxZ50vLXba6gPObguff3ihSf3g46lGMw7eEWL9W1K9OnB2G2yh62pvBZn22zQ/s320/dreifaltigkeit.jpg" /> </span><span style="color: #ffe599;">Representación de la Trinidad como Unidad verdadera. <i>"Después
vi una luz muy esplendorosa (serenissimam lucem)(el Padre) y, en ella,
una forma humana del color del zafiro (sapphirini coloris)(el Hijo), que
ardía entera en un suave fuego rutilante (rutilante igne)(Espíritu
Santo). Yesa esplendorosa luz inundaba todo el fuego rutilante, y el
fuego rutilante, la esplendorosa luz; y la esplendorosa luz y el fuego
rutilante inundaban toda la forma human, siendo una sola luz en una sola
fuerza y potencia." </i><b>Scivias.</b></span></div>
<div align="left">
<br /></div>
<div align="left">
<span style="font-size: large;"><span style="color: #99ff99;"><b> </b></span><span style="color: #ffcc33; font-family: "trebuchet ms";">Según
el simbolismo alquímico, ¿estará cualquier ser capacitado para tal
transmutación? La respuesta es afirmativa, ya que la analogía entre le
microcosmos y el macrocosmos se liga con el estado original. Pero en el
plano concreto existen disposiciones de orden accidental que hacen muy
dificil la operación alquímica. El consentimiento del sujeto es
necesario. El <i>ex opere operato, </i>cuya realización vemos en la
materia, no conviene al hombre, sino que éste debe dar su asentimiento.
De ahí resulta que sólo un corto número de hombres alcancen la
transfiguración; además muy pocos lo desean.</span></span></div>
<div align="left">
<br />
<div align="left">
<span style="font-size: large;"><span style="color: #ffcc33; font-family: "trebuchet ms";">La
simbología alquímica y cosmológica concierne a la materia que sufre una
mutación. Podríamos hablar exactamente de una asunción de la
materia.(...)</span></span></div>
<div align="left">
<span style="font-size: large;"><span style="color: #ffcc33; font-family: "trebuchet ms";">Si
por ejemplo la mirada se posa sobre un paisaje que está cubierto de
sombra, o iluminado por el sol, la reacción del observador es
rigurosamente diferente, ya que su visión no es identica. Sin embargo no
hay variedad en el objeto, sólo la percepción difiere. La contemplación
de la naturaleza sin ligarla con su Creador hace aparecer una
naturaleza abandonada así misma. En cambio si dicha naturaleza es
contemplada en Dios, es decir, si el hombre la percibe en su verdadera
filiación original, entonces "el ojo del corazón puede ver oro en el
plomo y cristal en la montaña". En este caso tenemos la transfiguración
cósmica, y la transfiguración es ciertamente menos asombrosa en la
materia que en el plano espiritual. Por un lado es el despertar del oro
en una materia que no tiene conciencia de ello , y por otro el despertar
de una presencia dormida.</span></span></div>
<span style="font-size: large;"><span style="color: #ffcc33; font-family: "trebuchet ms";">Según
Boecio, sólo las cosas que tienen como objeto común una misma materia
pueden ser mutuamente intercambiadas y transformadas. </span><br /><span style="color: #ffcc33; font-family: "trebuchet ms";">Guillermo
de San Thierry, al estudiar la transmutación de la naturaleza y de las
formas, observa que dicha transmutación sólo se opera en la medida en
que las naturalezas actúan unas sobre otras y que reciben la una de la
otra. Existen cuerpos que no se pueden transformar en otros cuerpos, por
ejemplo "el bronce en piedra o la piedra en hierba", ya que no hay en
ellos "materia comun". Pero existen otros que sí poseen esta comunidad
de materia, y así actúan uno sobre otro, se amasan uno con otro, hasta
el punto de mezclar "sus cualidades" y que uno absorba al otro: "la
cualidad de uno queda destruida con la del otro". Si se vierte vino en
el mar, sigue diciendo Guillermo, el vino no se mezcla con el mar, sino
que se diluye en el mar, precisamente porque la cualidad de éste nada
recibe de la del vino, debido a su inmensidad, y porque en realidad el
mar en su inmensida<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiTwgV5Pf7M0MnpW2GrDhrLpm05dJB8_KoB94Ln-CGph9kuDJu8wif9xLrchLRRUnzPXXHT5eAZFnaBUrUb_n4Vs0H_Fi1fQu-VWNwYR39GNBSgfMSRnX-renrFPx2nQ8GqOnr_Xb8V0aw/s1600-h/Hildegard_first_vision.jpg"><img alt="" border="0" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5441027618917071922" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiTwgV5Pf7M0MnpW2GrDhrLpm05dJB8_KoB94Ln-CGph9kuDJu8wif9xLrchLRRUnzPXXHT5eAZFnaBUrUb_n4Vs0H_Fi1fQu-VWNwYR39GNBSgfMSRnX-renrFPx2nQ8GqOnr_Xb8V0aw/s320/Hildegard_first_vision.jpg" style="float: right; height: 320px; margin: 0px 0px 10px 10px; width: 189px;" /></a>d, ha cambiado en sí mismo la cualidad del vino.</span></span></div>
<span style="font-size: large;"><span style="color: #ffcc33; font-family: "trebuchet ms";"></span><span style="color: #ffcc33; font-family: "trebuchet ms";">Siguiendo
con su estudio y considerando la eucaristía, Guillermo observa que el
cuerpo de Cristo tiene con el pan una común base material, ya que su
cuerpo ha podido ser engendrado y morir. Por el hecho de que el pan
tiene materia común con el cuerpo de Cristo, existe la posibilidad de
que se cambie en él. Pues es posible, precisará Guillermo, para el poder
de Cristo, que es uno con el Padre, cambiar el pan en su cuerpo en
razón de la obediente pasividad de la criatura.</span><span style="color: #ffcc33; font-family: "trebuchet ms";"></span><span style="color: #ffcc33; font-family: "trebuchet ms";">En su tratado del <i>Amor de Dios, </i>San
Bernardo, al examinar el cuarto grado por el que el hombre ya no se ama
así mismo sino por Dios, estudia los ejemplos dados por Máximo el
Confesor concernientes a la gota de agua mezclada con mucho vino, y al
hierro incandescente que por ello se vuelve semejante al fuego, como si
tanto el uno como el otro hubiesen perdido su forma primera y
particular. </span><span style="color: #ffcc33; font-family: "trebuchet ms";">También
toma las comparaciones del aire henchido de la luz del sol que se
transforma en la claridad propia de esa luz, hasta el punto de que
parece iluminar en vez de ser iluminado. Del mismo modo, se dice, es
absolutamente necesario que en los santos todo afecto se funda y se
transfiera enteramente a la voluntad de Dios, pues sino ¿cómo podría ser
Dios todo y para todos (<i>I Cor.,</i>XV, 28), si subsistiera en el
hombre algo que fuese del hombre? Ciertamente, la sustancia humana
permanecerá, pero lo hará bajo otra forma, en otra gloria, y con otra
potencia. Así, el símbolo alquímico que concierne al despertar del alma
no se puede captar sino en razón al parentesco entre el hombre y Dios,
parentesco que reposa sobre el hecho de la creación a imagen y semejanza
de Dios mismo. Por eso, la alquimia debe ser considerada como ciencia
de carácter "sacramental". </span></span></div>
<div align="left">
<span style="font-size: large;"><span style="color: #ffcc33; font-family: "trebuchet ms";">Encontramos
además en los símbolos alquímicos las mismas leyes de la proporción que
hemos tenido ocasión de deducir muchas veces al hablar de la analogía
entre macrocosmos y microcosmos. La jerarquía y el orden definen las
relaciones del cuerpo con el alma, del alma con el espíritu y del
espíritu con Dios. En lo que hace a los otros, el procedimiento
alquímico consistirá en recordarles que son templo de Dios, y que las
leyes de transmutación que operan en el templo de piedra pueden también
efectuarse en su propio templo.</span></span><br />
<div align="left">
<span style="font-size: large;"><span style="color: #ffcc33; font-family: "trebuchet ms";">La
alquimia enseña al plomo que en realidad es oro, y el alquimista
románico enseña al hombre que posee en sí mismo la imagen de la
divinidad, que se encuentra en la base de la transmutación de su ser.</span></span></div>
<div align="left">
<span style="font-size: large;"><span style="color: #ffcc33; font-family: "trebuchet ms";"></span></span></div>
<div align="center">
<span style="font-size: large;"><span style="color: #ffcc33; font-family: "trebuchet ms";">******</span></span></div>
</div>
<div align="left">
<br />
Lecturas:<br />
<br />
<br />
<b>Marie-Madeleine Davy</b>, <i>Iniciación a la simbología románica</i>. Akal 2006<br />
<br />
<b>Victoria Cirlot</b>,<i> Hildegard von Bingen y la tradición visionaria de Occidente</i>. Herder 2005<br />
<br />
<br />
. </div>
</div>
<div align="right">
</div>
</div>
<div style="text-align: center;">
</div>
Janhttp://www.blogger.com/profile/10112360698804083485noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4945391151380854953.post-70135313141426361032016-05-09T01:07:00.000-07:002016-05-09T01:34:50.694-07:00Nascentes morimur<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjyj0OHhUPpq1FESjpx65ElEdmgnnVvc-Ss_5O8Y621x0ypPA5aZE2wftjuRRw1p9cPpvE6zQTewGifEXj8FoWPgH5VuyiBjt08MQy_W49g_CEhSe-oCasAgMLNY7HKk4gTdqDiWtnBi2Db/s1600/muerte+4.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjyj0OHhUPpq1FESjpx65ElEdmgnnVvc-Ss_5O8Y621x0ypPA5aZE2wftjuRRw1p9cPpvE6zQTewGifEXj8FoWPgH5VuyiBjt08MQy_W49g_CEhSe-oCasAgMLNY7HKk4gTdqDiWtnBi2Db/s400/muerte+4.jpg" width="291" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Hendrik Goltzius, <i>Quis evadet?</i> (1594)</div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div style="text-align: center;">
<i>La fresca flor silvestre, fragante con el hálito privamaveral,</i></div>
<div style="text-align: center;">
<i>pronto se marchita, y su belleza perece.</i></div>
<div style="text-align: center;">
<i>Así la vida del hombre, decreciendo ya en el recién nacido,</i></div>
<div style="text-align: center;">
<i>desaparece como una pompa, como efímero humo.</i></div>
<div style="text-align: center;">
(inscripción en la parte inferior del grabado))</div>
<br />
<br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgbz4orkb5e4RmCUqkJuhyU9icsZeV_DvCVW4wKKN_WUrqi9MFNmy7dR7uGGRS18TtfdSQDZaJJ8HvAHjaYe-XS5HRsWzIbfeh2_AuIMHK6acDgs3ABzoUcRB3witTA6eR9WOKYHDhEJUKV/s1600/muerte+2.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="148" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgbz4orkb5e4RmCUqkJuhyU9icsZeV_DvCVW4wKKN_WUrqi9MFNmy7dR7uGGRS18TtfdSQDZaJJ8HvAHjaYe-XS5HRsWzIbfeh2_AuIMHK6acDgs3ABzoUcRB3witTA6eR9WOKYHDhEJUKV/s200/muerte+2.jpg" width="200" /></a></div>
<span style="font-size: large;">Un pequeña pintura de Marten de Vos descrita como "alegoría de la vida y de la muerte", es motivo de un magistral estudio iconológico por parte de Rudolf Wittkower del Instituto Warburg. En las composciones del manierismo tardío nada de lo representado se dejaba al azar, incluso lo aparentemente insignificante tenía un significado para los contemporáneos habituados a ese tipo de expresiones, obteniendo de su lectura una gran satisfacción. Cuanto más difícil era el desciframiento de la complejidad simbólica, mayor atracción ejercía la obra, algo que no era un objetivo en sí mismo, sino el medio visual por el que el observador obtenía una lección de índole moral o la revelación de una verdad última. El autor del ensayo nos propone una interpretación sobre cual sería exactamente la idea que el pintor quería transmitir en esta pintura, haciéndonos descubrir al mismo tiempo las fuentes clásicas y cristianas que le sirvieron de inspiración.</span><br />
<span style="font-size: large;">Sobre la obra en cuestión no se encuentra ninguna imagen en la web, ya que desde que fue subastada por Christi'es en 1939 se ignora su paradero, por lo que he recurrido a su reproducción en un grabado de la época que he dejado al comienzo de estas líneas, y que aparece ampliado más abajo cuando a él se hace referencia.</span><br />
<br />
<br />
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;"><b><i><span style="font-size: large;">Muerte y Resurrección en un cuadro de Marten de Vos</span></i></b></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;">(fragmentos) </span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;">por</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;"><span style="font-size: large;">Rudolf Wittkower </span></span></div>
<br />
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">(...) El <i>putto</i> con la calvera es un conocido <i>memento mori</i> del Renacimiento. Parece que esta convinación apareció por primera vez en la medalla humanista de Giovanni Boldù de 1458, y a partir de ese momento este nuevo símbolo de la muerte demostró tener una fuerza extraordinaria.</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhp8hkOtn5b-gYwLaS4oViAu_A6IYau7fjOStfotLUZX8ynYcns35NvVicea19f6NDcMNVAzPGq7bij04dX4yG-388LV6TNVhXkBdvhKHalYPjnvlY4YsX4hOFhelpKjae4rwpNSHHHZk0H/s1600/muerte+1.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhp8hkOtn5b-gYwLaS4oViAu_A6IYau7fjOStfotLUZX8ynYcns35NvVicea19f6NDcMNVAzPGq7bij04dX4yG-388LV6TNVhXkBdvhKHalYPjnvlY4YsX4hOFhelpKjae4rwpNSHHHZk0H/s1600/muerte+1.jpg" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Giovanni Boldù, 1458</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">Esto se debe no sólo al simbolismo obvio sobre la brevedad de la vida humana y el choque psicológico producido por el antagonismo visual de la infancia y la muerte, sino también a ciertas connotaciones específicamente clásicas como cristianas. Por otra parte, la infancia como estado de inocencia y pureza estimula pensamientos sobre el estado en que debemos encontrarnos con la muerte. (...)</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">Si el niño con la calavera es un<i> memento mori</i>, el <i>putto </i> haciendo pompas representa la transitoriedad y vanidad de la vida humana. El proverbio antiguo "homo bulla" -el Hombre es una burbuja-, procedente de Varrón y Luciano fue revivido y reintroducido en el simbolismo del Renacimiento a través de los <i>Adagia</i> de Erasmo. Encontramos la inscripción "homo bulla" ya en 1620 en las réplicas flamencas del melancólico <i>San Jerónimo</i> de Durero de 1521. (...)</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhMTZvd4vnoiDYzmvnWMMFr4SInh2sc2BUWmWrXhz1PfcLH18DQxHwx4YgnZw32sB_lRpAvsk0Jai3hA8I76GoGVZUHiLtVN2_elk7RwdXV3rVCVEkTZLsBanm_4r_sU5Lo6lAySJxagc2Z/s1600/muerte+3.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhMTZvd4vnoiDYzmvnWMMFr4SInh2sc2BUWmWrXhz1PfcLH18DQxHwx4YgnZw32sB_lRpAvsk0Jai3hA8I76GoGVZUHiLtVN2_elk7RwdXV3rVCVEkTZLsBanm_4r_sU5Lo6lAySJxagc2Z/s1600/muerte+3.jpg" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Joos van Cleve, <i>San Jerónimo</i> (según Durero)</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">En un grabado de 1594 Heindrik Goltzius (imagen de cabecera de esta entrada) había mezclado el <i>putto </i>que sopla burbujas con el tipo tradicional del putto con la calavera. Las dos ideas estrechamente relacionadas del <i>memento mori</i> y la vanidad de la vida humana, resumidas en el lema del grabado: <i>Quis evadet </i>(¿quien se librará?), fueron expresadas en nuestro cuadro mediante dos protagonistas diferentes. Esto era lógico y hasta este punto el contenido del cuadro parece casi corresponder con la figura "sintética" de Goltzius. Pero aquí el pintor se aparta del camino trillado. La calavera está sobre espigas de cereal que brotan de debajo de ella. ¿Qué significa esto? La clave debe encontrarse en el versículo del Evangelio de san Juan (12, 24): "En verdad, en verdad os digo que si el grano de trigo no cae en la tierra y muere, quedará solo; pero si muere, llevará mucho fruto". Y los siguientes versículos de la primera carta de San Pablo a los corintios ayudan a clarificar el símil: "Pero dirá alguno: ¿Cómo resucitan los muertos? ¿Con qué cuerpo vienen? ¡Necio! Lo que tú siembras no revive si no muere" (15, 35-36); y más adelante: "Pues así en la resurreción de los muertos. Se siembra en corrupción y resucita en incorrupción -Seminatur corpus in corruptione, ut surget incorruptione" (15-42). (...) El paulino <i>Seminatur corpus in corruptione, ut surget in incorruptione</i> aparece con más color en el Apologético de Tertuliano: "Día tras día la luz muere y brilla una vez más; la oscuridad, a su debido tiempo, parte de nuevo y vuelve otra vez, las estrellas de la muerte vienen a la vida; las estaciones, cuando terminan, empiezan de nuevo; los cultivos maduran y retornan; sin duda la semilla debe perderse y disolverse para crecer más fructíferamente; todo es salvado al perderse; todo es re-modelado a partir de la muerte:<i> certe semina non nisi corrupta et dissoluta fecundis surgunt, omnia pereundo servatur, omnia de interitu reformantur". </i>(...)</span><br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">El símil bíblico entre el trigo y el hombre no parece haber encontrado ningún eco en las artes antes de la Contrareforma. Entonces, de repente, surge en la literatura emblémática. La primera obra en que lo hemos encontrado es <i>Divisas heroicas</i> de Claude Paradin (Lyon 1557) donde el cuadro de los huesos con el trigo brotando de ellos se muestra bajo el lema: "Spes altera vitae". (...) la imagen de los huesos y el trigo, aunque no muy ingeniosa, es una lógica expresión pictórica del símil. Emblema y lema fueron tomados en 1590 por Joachim Camerarius para su <i>Symbolorum et Emblematum ex re herbaria desumtorum centuria. </i></span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhbIqfddrLO_5DxxT0CHGR5SndXOMX78LGzFgmle9WPnV_uJJ_NRxgdOA_e-E3nyR_SlRcY2fwj9vxWlvJTTMS_tU20uPJUzcd6MBjzhMZ_Epa5JY0YMSL8KylxTcCfPPCXRqWGlwXyRWly/s1600/muerte+5.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhbIqfddrLO_5DxxT0CHGR5SndXOMX78LGzFgmle9WPnV_uJJ_NRxgdOA_e-E3nyR_SlRcY2fwj9vxWlvJTTMS_tU20uPJUzcd6MBjzhMZ_Epa5JY0YMSL8KylxTcCfPPCXRqWGlwXyRWly/s1600/muerte+5.jpg" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Emblema de Joachim Camerarius siguiendo a Claude paradine</div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div style="text-align: left;">
</div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;">Sin embargo, su comentario es mucho más explícito que el de Paradin. Tras este cuadro está la moraleja de que, para quienes saben que resucitan de nuevo físicamente, la muerte significa una vida nueva:</span></div>
<span style="color: #9fc5e8;"><i><br /></i></span>
<span style="color: #9fc5e8;"><i>Securus moritur, qui scit se morte renasci:</i></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><i>Non ea mors dici, sed nova vida potest.</i></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">(...) Nuestro pintor, que quería combinar el <i>putto</i> y la imagen de la calavera con el símil del hombre y el trigo, se había dado a sí mismo (o le dieron) una tarea imposible. Pues si conservaba con alguna pureza el tipo del putto con la calavera, tenía que hacer lo que hizo, a saber, poner la calavera encima de las espigas de trigo, inviertiendo con ello el orden lógico. Pero se debe decir en su favor que escogió una disposición pitóricamente plausible. Su fórmula para el símil del hombre y el trigo que parece ser única está sin embargo tan traída por los pelos como la divisa "homo bullens" (el hombre es una efímera burbuja) y lleva el sello característico de la "edad emblemática". La imagen emblemática de la calavera sobre las espigas de trigo en el primer plano está complementada y expuesta por escenas en el segundo plano.</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgnPQz2ZEvtdhoNFpUqj863m9do5ukq3wwg1smF3qH5UVumMFroAfgJQ8xtMvd7Wh0pIT49sUjE1LRie8l7Rl8c2k2WfZBtOBR_bhbsT8PvorMafNDdePji4Q-PBagPVHYPQBlI_TAt5d9k/s1600/muerte+8.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgnPQz2ZEvtdhoNFpUqj863m9do5ukq3wwg1smF3qH5UVumMFroAfgJQ8xtMvd7Wh0pIT49sUjE1LRie8l7Rl8c2k2WfZBtOBR_bhbsT8PvorMafNDdePji4Q-PBagPVHYPQBlI_TAt5d9k/s1600/muerte+8.jpg" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Detalle del grabado que reproduce la pintura de Martin de Vos</div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">Detrás del <i>putto</i> muerto hay un agricultor cortando el trigo maduro en el campo (recuadro azul de la imagen de arriba), ejemplificando así en las palabras de Tertuliano que la "semilla debe perderse y descomponerse para crecer más fructífera". Y detrás del campo y exactamente encima del símbolo del trigo y la calavera está -como cabía esperar- la Resurrección de Cristo (recuadro rojo). De este modo, el putto con la calavera no es aquí un simple memento mori, sino que representa al mismo tiempo la esperanza de la resurreción del hombre, y, como tal, incorpora una importante alusión a la muerte de Cristo. (...)</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">La interpretación del cuadro puede ir un paso más allá, pues existe un grabado, copia de aquél, con un dístico latino que resume su contenido. Además, el grabado ofrece una clave en cuanto al artista del cuadro. Está firmado "M. De Vos inv., R. Sadeler fec." El cuadro, por lo tanto, forma parte de la obra de Marten de Vos y debería datarse hacia 1600 o antes.</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgY9naI0rRp8i03N4JiIU7Ari492_LK2aTkvvzSh4fDjM7O1F2SuG4Cr6-Km-zmvSp748uxFnfFiJEcEfv3pqjUOJDtUuF0g5YNhtrfiDxmx7hdB38xowbb5nOMZKcgv240d_TcFA62q50m/s1600/muerte+6.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="332" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgY9naI0rRp8i03N4JiIU7Ari492_LK2aTkvvzSh4fDjM7O1F2SuG4Cr6-Km-zmvSp748uxFnfFiJEcEfv3pqjUOJDtUuF0g5YNhtrfiDxmx7hdB38xowbb5nOMZKcgv240d_TcFA62q50m/s400/muerte+6.jpg" width="400" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Reproducción en grabado del cuadro de Marten de Vos</div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">La inscripción dice:</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<br />
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #9fc5e8;"><i>¿Qué es la vida sino una ligera burbuja, una brisa pasajera</i></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #9fc5e8;"><i>que huye como la sombra, que perece como la hierba?</i></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #9fc5e8;"><i>La muerte procede directamente del nacimiento, y, como final,</i></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #9fc5e8;"><i>sigue al comienzo. Sólo la esperenza devota hace feliz.</i></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #9fc5e8;"><i>Pues si el agricultor no entierra sus semillas en el campo,</i></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #9fc5e8;"><i>no puede entregar el fruto de la cosecha a su dueño.</i></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #9fc5e8;"><i>Así, si no confías el cuerpo mortal al sepulcro,</i></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #9fc5e8;"><i>no habrá gloria de la resurrección de la carne.</i></span></div>
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">(...) Las dos primeras líneas del poema expresan la fragilidad de la vida humana mediante las cuatro metáforas: burbuja, viento, sombra y vegetación. No hace falta decir nada más sobre la concepción de la burbuja; la comparación con la sombra está tomada casi literalmente del libro de Job: "Et fugit velut umbra" (14,2), mientras que la vegetación y el viento parecen parafrasear a Isaías 40,7: "Sécase la hierba, marchítase la flor cuando pasa sobre ellos el soplo de Yahvé. Ciertamente hierba es el pueblo". Con las dos líneas siguientes sobre la reciprocidad de la vida y la muerte volvemos de nuevo a la literatura clásica. Traducen exactamente el sentido de las famosas y, desde el XV, frecuentemente citadas palabras de Manilius: "Nascentes morimur, finisque ab origine pendent" ("Morimos con el nacimiento, y el final es consecuencia inevitable del principio"). Con la referencia a la necesidad de esperanza, esas macabras líneas conducen al tema de la resurrección, y el resto del poema elabora la metáfora del trigo de la primera carta de Pablo a los Corintios.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">El símil paulino posee una historia que tiene que ver con la apreciación plena de las intenciones de nuestro pintor. Cicerón, en <i>Disputas tusculanas</i>, cita el siguiente pasaje de <i>Hipsipyle</i>, la tragedia de Euripides:</span><br />
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #9fc5e8;"><i>La tierra debe volver a la tierra: entonces la vida toda</i></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #9fc5e8;"><i>como la cosecha debe ser recogida. Así debe ser.</i></span></div>
<br />
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgNuvyNbVCEXNX3OqvijReBn9dkHTNmqf3QICvPM0IZcTjvLSB0lM9GLKbsOdxR6Zbxc7p6rfxSkWtCsKXc8qBsc2xMhd6HqREfSAaA3nS6O42yj_WpLEf8IKYakNHh_PtE9f5HDHVSXhuo/s1600/muerte+9.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgNuvyNbVCEXNX3OqvijReBn9dkHTNmqf3QICvPM0IZcTjvLSB0lM9GLKbsOdxR6Zbxc7p6rfxSkWtCsKXc8qBsc2xMhd6HqREfSAaA3nS6O42yj_WpLEf8IKYakNHh_PtE9f5HDHVSXhuo/s400/muerte+9.jpg" width="327" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Perséfone y Hades en el mundo de los muertos con una gavilla de trigo. Detalle de un relieve vótivo, 480-450 a.C. Locri, Italia</div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">Los rituales primitivos de la vegetación que asocian el trigo con ideas de la muerte y resurrección encuentran aquí una sublimación poética. Más tarde, la concepción fue integrada por los filósofos estoicos. La encontramos en Marco Aurelio: "Nuestras vidas son cosechadas como espigas de trigo maduro, Y cuando uno cae, otro sin embargo nace"; y muy próxima a nuestro texto y al espíritu del cuadro está la frase de los <i>Discursos</i> de Epicteto: "Pero es una maldición para las espigas de trigo no ser nunca segadas. Por eso debemos saber que, en el caso de los hombres, no morir es también una maldición, igual que no madurar y no ser cosechado". Es conocida la influencia de las doctrinas estoicas en las cartas de San Pablo y, particularmente, en la doctrina central de la resurrección como se propone en 1 Cor. El cuadro de Marten de Vos fue concebido en una coyuntura en la que -ahora podemos concluir- el uso por parte de san Pablo de ciertos aspectos estoicos era conocido. (...)</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">Es en las Epístolas de Séneca donde encontramos la atmósfera del cuadro de Marten de Vos. El <i>meditare mortem</i> -estar dispuesto para la muerte en cualquier momento- es el tema de la Epístola 26, la Epístola 49 trata de "la apresurada huida del tiempo". Séneca vuelve una y otra vez sobre la idea de que la muerte es otra cara siempre presente de la vida: "El mismo día que ahora vivimos es compartido por nosotros y la muerte". (Epístola 24), y su seguridad en la resurrección tiene un aroma claramente cristiano: "Puesto que estás destinado a regresar, debes marchar con mente tranquila" (Epístola 36). No es sorprendente que, una y otra vez, fuera considerado cristiano. (...)</span><br />
<br />
<br />
Lecturas:<br />
<br />
<b>Rudolf Wittkower</b>,<i> La alegoría y la migración de los símbolos</i>. Siruela 2006<br />
<br />
<br />
Entradas relacionadas:<br />
<br />
<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2013/09/demeter-y-persefone.html">Deméter y Perséfone</a><br />
<br />
<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2010/02/la-pasion-de-osiris.html">La Pasión de Osiris</a><br />
<br />
<br />
.Janhttp://www.blogger.com/profile/10112360698804083485noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4945391151380854953.post-67632424623237620992016-04-27T10:32:00.000-07:002016-04-27T10:32:13.175-07:00Mandalas<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgaCDfcyfhkjgl1xunEdpBo7JmsSpCRXR0h4Tia8MSSjR1vsb4CEY65zgT768574xLB8W1ywz_kimsf94Jw89GBG_COjVBWDKSC8AjpQDODMy4dn2w7lOt42Jz3y3sIQ8WqCWejV6WjT37P/s1600/mandala+12.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgaCDfcyfhkjgl1xunEdpBo7JmsSpCRXR0h4Tia8MSSjR1vsb4CEY65zgT768574xLB8W1ywz_kimsf94Jw89GBG_COjVBWDKSC8AjpQDODMy4dn2w7lOt42Jz3y3sIQ8WqCWejV6WjT37P/s400/mandala+12.jpg" width="340" /></a></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
Beato de Liébana (1047) Arte mozárabe</div>
<br />
<br />
<br />
<span style="font-size: large;">Las ifluencias iconográficas entre Oriente y Occidente migran en una y
otra dirección a lo largo de la historia, temas asiáticos que
conquistaron el mediterráneo, y temas de la cultura mediterránea que
traspasaron fronteras hasta lugares lejanos de Asia viajaron entre los
dos mundos. Diseños artísticos que dieron forma a concepciones míticas,
filosóficas y religiosas durante la expansión helenística, llegaron en
determinados periodos a culturas más estables de la India, Asia
septentrional e incluso China, volviendo transfiguradas, llenas de
renovada significación y leyendas para reintegrarse nuevamente en el
mundo occidental.</span><br />
<span style="font-size: large;">Las representaciones del cielo cristiano con sus
símbolos y alegorías del Antiguo y Nuevo Testamento, ocupando un lugar
en el interior de los círculos zodiacales presentes desde la época
carolingia, convergen con esas corrientes que llegan. A la herencia
grecorromana que revivió la astrología babilónica mostrada en los diseños
medievales, se asimilan otros con aspectos búdicos. Por otra parte, las
antiguas composiciones de medallones donde las imágenes religiosas se
disponen en un orden determinado, se muestran en estrecha relación con
especulaciones orientales representadas en mandalas y ruedas de la
Transmigración. Sobre esto nos ilustra Jurgis Baltrusaitis con
el análisis cotejado entre algunas obras de arte en esta nueva entrada de
Fragmentalia.</span><br />
<span style="font-size: large;"><br /></span>
<span style="font-size: large;"><br /></span>
<br />
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #6fa8dc;"><span style="font-size: large;">LOS MANDALAS. <i>El mandala búdico. El mandala gótico. La rueda de la transmigración y sus metamorfosis occidentales.</i></span></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #6fa8dc;"><span style="font-size: small;">por</span></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #6fa8dc;"><span style="font-size: large;">Jurgis Baltrusaitis</span></span></div>
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">(...) Toda la cúpula del santuario de Kakrak (Afganistán) está decorada por una acumulación de ruedas: una está en el centro, sobre el luquete, y las otras siete engranadas sobre la circunferencia. Cada una de ellas forma, por su parte, una misma corona de círculos. El conjunto constituye un mecanismo de relojería de innumerables discos inscritos unos en otros. Estos discos componen las aureolas de los Cien Budas. En el centro, Bodhisattva Maitreya, emparentado con el Mithra iraní, está rodeado por 16 figuras sentadas.</span><span style="color: #9fc5e8;">En las circunferencias tangentes, 11 budas más pequeños encuadran un Buda central.</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgBCTW0dlwWyk3tPrbXV1zVMEg5OZ-Ahi3yyoBD2dJVD7OHLb3APA41KfcpIlyzLs0y_ovaVnCSsxhvetohTEGKPqfXWTNbRwT1BkuDHugMf8U2j5J32fWy8PeCiFf2m1BptAKXDKqYQKyj/s1600/mandala+4.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgBCTW0dlwWyk3tPrbXV1zVMEg5OZ-Ahi3yyoBD2dJVD7OHLb3APA41KfcpIlyzLs0y_ovaVnCSsxhvetohTEGKPqfXWTNbRwT1BkuDHugMf8U2j5J32fWy8PeCiFf2m1BptAKXDKqYQKyj/s400/mandala+4.jpg" width="371" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Detalle de la cúpula del santuario de Kakrak</div>
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">Toda la escena está ordenada sobre los rayos divinos donde las mandorlas emanan unas de otras y se agrupan de acuerdo a los números y curvas sagradas. Ante la visión de semejante conjunto, no podemos evitar la sensación de vértigo. En Bâmiyân, se han señalado composiciones análogas en las grutas J y K. Una diadema hucano-sasánida de triple media luna que lleva un rey cazador, indica a la vez la fecha -primera mitad del siglo V- y el origen geográfico de estas composiciones: Persia, vuelta directamente hacia la cuna del pensamiento astrológico. La red de esferas y de luz alrededor de las representaciones religiosas, deriva de la geometría y de las figuras de sus andamiajes cósmicos.</span><br />
<br />
<br />
<div style="text-align: center;">
<img alt="http://www.martingansten.com/images/Persian%20horoscope.jpg" src="http://www.martingansten.com/images/Persian%20horoscope.jpg" /></div>
<div style="text-align: center;">
Manuscrito astrológico persa</div>
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">En Japón y Tibet, estas construccioones gráficas se integran en los ritos y ceremonias del culto. Se las llama <i>mandalas</i>, <i>mandaras</i> en tibetano. En ellas toda la jerarquía de los dioses y símbolos indestructibles se organizan alrededor de la potencia primordial en la región que le es propia: el Paraíso. Ocho figuras -entre las cuales se encuentra el Buda Sakyammuni- se ordenan, como rayos, alrededor de Amoghapasa, forma de Bodhisattva Avalokitêsvara. Ocho Bucchôs, ocho grandes Bodisattvas y ocho Reyes de la Ciencia, brotan sucesivamente del Bucchô sincrético Shoissai-Bucchô como su emanación directa. Dieciseis Bodhisattvas, treinta y dos Bodhisattvas seguidos de varias rondas de dioses y genios, describen círculos concéntricos.</span><br />
<br />
<div style="text-align: center;">
<img alt="Foto" src="http://2ndhandinspiration.weebly.com/uploads/3/6/3/6/3636903/5821427_orig.jpg" height="300" style="max-width: 100%; width: auto;" width="400" /></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="font-size: small;">Avalokiteshvara Boeddha Mandala</span></div>
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">A veces, los personajes alternan con el Zodiaco. La irradiación de la sabiduría y amor búdicos, sabiduría que ilumina la verdad y doma el vicio, amor que abraza todas las existencias en el buen obrar compasivo del amor cósmico, está igualmente representada en estas composiciones. Las esferas se diversifican multiplicando los signos y el poder de la figura. Sus movimientos se generan mutuamente y se encadenan.</span><br />
<br />
<div style="text-align: center;">
<img alt="http://www.exoticindia.com/artimages/tf61.jpg" src="http://www.exoticindia.com/artimages/tf61.jpg" height="640" width="416" /></div>
<div style="text-align: center;">
<span class="" id="result_box" lang="es"><span class="">Avalokiteshvara</span> de mil brazos, Bodhisattva de la compasión.</span></div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;">Nunca los diagramas semiabstractos del mundo espiritual fueron tan puros ni se construyeron tan sabiamente: ¿No se alcanzaba contemplándolos la iniciación a los grandes misterios e incluso el Nirvana? Se trata de una especulación de la geometría, pero también de magia y de un medio de evocación. No solamente la India, sino el Universo entero con sus continentes, el cielo y todos sus habitantes, los siete objetos preciosos y los tesoros, se ofrecen diariamente al Bienaventurado, contenidos en una red de treinta y dos círculos encajados unos en otros.</span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;">Las composiciones occidentales que, entretanto, han experimentado la acción de astrónomos árabes que restituyen un antiguo fondo oriental más riguroso y salvaje que los sistemas helenizados, terminan por adoptar esta exuberancia de abstracciones y símbolos. A partir del siglo XV, varias representaciones de rueda se convierten en verdaderos mandalas.</span></div>
<div style="text-align: left;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgPTwadqCX8KBqiVjaRauT4q3tASdSq6TtzhA2hUnwuXNvbfnG1T59zK6T9xFL9iEgLC4Z3HEmNwA6oqLtVhrZP48nLjasXxwQwdR6bz7MEZ2FZhXRqE6zDb0XErIqNmNDpw1MGu7Dq2DVR/s1600/mandala+3.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgPTwadqCX8KBqiVjaRauT4q3tASdSq6TtzhA2hUnwuXNvbfnG1T59zK6T9xFL9iEgLC4Z3HEmNwA6oqLtVhrZP48nLjasXxwQwdR6bz7MEZ2FZhXRqE6zDb0XErIqNmNDpw1MGu7Dq2DVR/s400/mandala+3.jpg" width="290" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Los Gozos y los Triunfos de la Virgen, W. Traut (1510)</div>
<div style="text-align: left;">
<br /></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;">En un grabado de Traut (imagen de arriba), quince discos se ajustan a tres grandes círculos concéntricos. Estos constituyen una triple rosa, o más bien un engranaje de medallones, donde tiene lugar las fases del Evangelio. En el centro, en el "Paraíso", se situa la Trinidad. La Virgen con Santa Ana se encuentran también en la misma región. Las coronas contienen sucesivamente sus cinco Alegrías, sus cinco Dolores y sus cinco Triunfos que aparecen como emanación aureolada del poder divino. Como en Asia, una serie de rotaciones revelan las relaciones ocultas de las cosas.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">En un grabado bávaro realizado hacia 1490, los Vicios y las Virtudes giran en un mecanismo parecido: noventa discos, cada uno con su inscripción, se engranan dentro de cuatro círculos concéntricos; en el centro, el Todopoderoso. Cincuenta y siete discos, que contienen los Pecados Capitales con sus satélites dominados por el Orgullo y la Escena de la Caída, se despliegan en un quinto anillo negro.</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjR_6A_8JmpmrJM3teL2K9dAveNlGXsn4wlgD92zaVuR2w_R-_WsgKoCHK17lJb5fr6LsXl2IppGK0fpuHXYzAPu5iDwAtfca6aAppobGzxwfxpc4pUfjj5zmxqJGzlVkl98DyWoK-pxjm8/s1600/mandala+1.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjR_6A_8JmpmrJM3teL2K9dAveNlGXsn4wlgD92zaVuR2w_R-_WsgKoCHK17lJb5fr6LsXl2IppGK0fpuHXYzAPu5iDwAtfca6aAppobGzxwfxpc4pUfjj5zmxqJGzlVkl98DyWoK-pxjm8/s400/mandala+1.jpg" width="321" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Los Vicios y las Virtudes, Nuremberg (1490)</div>
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">Aquí también las relaciones entre las fuerzas se ilustran con los movimientos giratorios que se transmiten. Las sentencias, las palabras relativas a las diferentes virtudes brotan del Creador en una nube de redondeles que chocan con los Vicios correspondientes que les rodean. Así, Mansedumbre y Piedad se encuentran frente a Cólera, Indignación y Blasfemia. La explosión de la zona clara relega a un segundo plano la zona oscura. Representado de este modo, el mundo moral se hace inteligible, pero esta iniciación reviste también, como en el mandala, un carácter mágico. Precisando el mecanismo y las relaciones entre los Vicios y las Potencias que les combaten, numerándolos y haciendo girar su nombre y sus figuras, el juego de círculos sirve, en resumidas cuentas, para conjurar el mal.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">La composición contiene un elemento nuevo: las ruedas están separadas por rayos que las dividen en siete compartimentos iguales agrupados alrededor de un centro. Pero el sistema es búdico y se relaciona con las ruedas de la Transmigración-Bhavacakra.</span><br />
<br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhcjhZeqrwGIha54pT1ajBBdN6WEKRvcLM_Ku4Bo4QIKpLc-v4RAPZ5Mf4WZ2nMd6faUQExjGP1MJOfU8RnpZgMxjl69jb3zYY910G5U9SciP9y1Q6lWGfNJJEtDKKtZP4WxEJ7cqFFn2G6/s1600/mandala+6.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhcjhZeqrwGIha54pT1ajBBdN6WEKRvcLM_Ku4Bo4QIKpLc-v4RAPZ5Mf4WZ2nMd6faUQExjGP1MJOfU8RnpZgMxjl69jb3zYY910G5U9SciP9y1Q6lWGfNJJEtDKKtZP4WxEJ7cqFFn2G6/s400/mandala+6.jpg" width="295" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Bhavacakra (Rueda de la Vida) Tibet</div>
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">Según el<i> Vinaya</i>, la Disciplina, el segundo conjunto de las Escrituras del budismo, Sakya muni, habría ordenado pintar su representación sobre algunas partes del monasterio de la manera siguiente:</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<br />
<blockquote class="tr_bq">
<span style="color: #9fc5e8;">Es preciso hacer un círculo en forma de rueda, colocar el eje en el medio. Después, haced cinco rayos para separar las representaciones de las cinco vías: abajo el eje, y, a ambos lados, los demonios hambrientos y los animales; encima, deben pintarse los hombres y los dioses.</span></blockquote>
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">Las cinco vías de regeneración, infernal, demoníaca, bestial, humana, divina, según los deméritos y méritos del ser, giran dentro del Samsara, la rueda del ciclo infinito de la Vida.</span> <br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj9X5xumMtxi9I9BZg_kd1SRMy_v_vA4iiveApYJ_3Hc8nJK8mkrW2lT3aU8BEOuEaPxye28AUuQv2M6jeoZhwMtaKyy-QjHlIS1_IAvVZXQM9p1Y8Dq2BSBMomnaB7uKAe5zj0LmovtBjn/s1600/mandala+8.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="198" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj9X5xumMtxi9I9BZg_kd1SRMy_v_vA4iiveApYJ_3Hc8nJK8mkrW2lT3aU8BEOuEaPxye28AUuQv2M6jeoZhwMtaKyy-QjHlIS1_IAvVZXQM9p1Y8Dq2BSBMomnaB7uKAe5zj0LmovtBjn/s200/mandala+8.jpg" width="200" /></a></div>
<span style="color: #9fc5e8;">El eje contiene una imagen de Buda acompañado por tres formas: un pichón que simboliza la Codicia, una serpiente alegoría de la Cólera, y un cerdo símbolo de la Ignorancia.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">La figura se reproduce en Adjantâ durante el siglo VI y no cambia ni en el Tibet ni en los templos chinos modernos.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">Entre los<i> asuras</i>
solamente se añade generalmente a las demás una sexta vía del génesis,
mientras que en el eje encontramos también hombres que suben hacia las
divinidades y vuelven a bajar a los Infiernos. Todos los compartimentos
se combinan no tanto como registros llanos, como cuanto ventanas
abiertas sobre bordes del universo.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">En
esta representación, dos elementos concuerdan con el mandala bávaro: el
tema moral de los Vicios y las Virtudes superpuestos a las sucesiones
de vidas en registros diferentes y la forma de la separación que delimita las vías de la regeneración según los méritos y deméritos. En la representación de los <i>Siete Pecados</i> del Bosco, la analogía todavía es más sorprendente.</span></div>
<div style="text-align: center;">
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjrYBxopVETHOaJLoXWV_VoVxl1f33swQ3q2PaKBBi_zpt4Da96lJXXILla0eIPmefZkC7SJ44TNJYfqFobOSkmZpLNOyeULGP3DQJ8OrMBRxA5VhhdKalPfWD-HX-wPuUmwfGtCdE5UdRO/s1600/mandala+8.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="395" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjrYBxopVETHOaJLoXWV_VoVxl1f33swQ3q2PaKBBi_zpt4Da96lJXXILla0eIPmefZkC7SJ44TNJYfqFobOSkmZpLNOyeULGP3DQJ8OrMBRxA5VhhdKalPfWD-HX-wPuUmwfGtCdE5UdRO/s400/mandala+8.jpg" width="400" /></a></div>
</div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<div style="text-align: center;">
El Bosco,<i> Los site Pecados</i></div>
<div style="text-align: left;">
</div>
<div style="text-align: left;">
</div>
<div style="text-align: left;">
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<span style="color: #9fc5e8;">Está inscrita en la misma rueda con los radios distribuidos de igual modo y desprovistos de medallones. Ya no se trata de signos ni de alegorías abstractas. Las escenas se desarrollan en paisajes o en casa como pequeños mundos independientes. También aquí la rueda es como una rosa de ventanas: el mismo juego mágico que en Adjantâ.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">El Bhavacakra ordena también el <i>Espejo de la Sabiduría</i>, con un ciclo de la Vida y de la Muerte, sobre un grabado alemán que muestra las diferentes maneras de atravesar el mundo y sus respectivas recompensas. (imagen no encontrada N. de Frgamentalia) El eje se alarga, pero vemos, como en las ruedas búdicas, un peregrino que sube la escalera para, enseguida, volver a bajarla perseguido, de un lado por un demonio, del otro por la Muerte. Sorprenden las correspondencias entre las vidas que se suceden en las transmigraciones y los destinos de almas de acuerdo al dogma cristiano. Encontramos aquí las seis vías de regeneración. En la zona del nacimiento entre los Infiernos (parte inferior) se sitúan las fauces de Leviatán; en la del nacimiento entre los dioses (parte superior) la Trinidad con la Virgen y los Elegidos. A la izquierda, en los registros de los nacimientos entre los animales, figura la vida de los animales en pecado representado por un alegre banquete; en el del nacimiento entre los hombres, encontramos en la penumbra de una capilla la vida virtuosa con un crucifijo. Enfrente, las escenas de la resurrección de los muertos y el Juicio Final se distribuyen en dos registros. Los Elegidos se encuentran en el del nacimiento entre los <i>asuras</i>, mientras que los condenados están en el del nacimiento, pero entre los demonios hambrientos. Las imágenes alternan con figuras de ángeles y paneles con inscripciones, pero su disposición concuerda con las leyes búdicas de las vidas nuevas dadas en recompensa de existencias anteriores. (...)</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">En el <i>Breviario de Amor</i> del Maestro Ermengau (siglo XIV), una rueda de seis compartimentos contiene no ya la vida de un hombre, sino la del mundo: las edades bíblicas que corresponden a su infancia, adolescencia, juventud, virilidad y a la edad de Cristo que las renueva, se despliegan dentro de un disco, como en una rueda de Transmigración.</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhGpTXrxSjNFyuUotMBDXgl2ZbQO0KWSDe1fRmHNRBDNBH67CRUyCD1PoH91PV_RV0Kc__-7UibPDswYHopmZjDmlMZCDxUuTB6JABoTNORgpDkp6_TMykE7FToEMfG7CciUp5TjhwTbmIl/s1600/mandala+9.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="294" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhGpTXrxSjNFyuUotMBDXgl2ZbQO0KWSDe1fRmHNRBDNBH67CRUyCD1PoH91PV_RV0Kc__-7UibPDswYHopmZjDmlMZCDxUuTB6JABoTNORgpDkp6_TMykE7FToEMfG7CciUp5TjhwTbmIl/s320/mandala+9.jpg" width="320" /></a></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
Maestro Ermengau, <i>Breviario de amor </i></div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
</div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;">Superspuestas a las redes circulares que perpetúan las antiguas tradiciones islamizadas, estas formas búdicas las recomponen multiplicando y acelerando las rotaciones. Inspiran un nuevo desarrollo, más riguroso y complejo todavía, al tiempo que introducen algunos temas muy concretos de encantamiento y revelación sagrada. (...)</span></div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div style="text-align: center;">
<br />
<div style="text-align: left;">
Lecturas:</div>
<div style="text-align: left;">
<br /></div>
<div style="text-align: left;">
<b>Jurgis Baltrusaitis</b>, <i>La Edad Media fantástica</i>. Ediciones Cátedra 1983</div>
<div style="text-align: left;">
<br /></div>
<div style="text-align: left;">
<br /></div>
<div style="text-align: left;">
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<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2013/08/la-naturaleza-animada.html">La naturaleza animada</a><br />
<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2013/07/fascinacion-por-oriente-en-la-edad-media.html"><br /></a>
<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2013/07/fascinacion-por-oriente-en-la-edad-media.html">Fascinación por oriente en la Edad Media</a><br />
<br />
<br />
.</div>
</div>
Janhttp://www.blogger.com/profile/10112360698804083485noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-4945391151380854953.post-2720467564163286202016-04-18T08:57:00.000-07:002016-04-19T03:09:43.008-07:00El pacto con la serpiente (II)<div style="text-align: center;">
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiFJwnlVaKLkZgdjNQo1fBYqt6MYnZg_tmFnb743xYNfXWlphJvsnC8pWSzvZt9nGotZFsfE8k6p6idtoLccKG0gb5S0KiRMmeCtQKQTvFGaQO2W6mUYxuxdfIMqig2rjWYYOHBcOFwQMpH/s1600/serp.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiFJwnlVaKLkZgdjNQo1fBYqt6MYnZg_tmFnb743xYNfXWlphJvsnC8pWSzvZt9nGotZFsfE8k6p6idtoLccKG0gb5S0KiRMmeCtQKQTvFGaQO2W6mUYxuxdfIMqig2rjWYYOHBcOFwQMpH/s400/serp.jpg" width="240" /></a></div>
<span style="font-size: small;">Hans Baldung Grien,<i> Eva, la serpiente y la muerte</i></span></div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<br />
<span style="font-size: large;">Esta entrada fue publicada con anterioridad en noviembre de 2012. Los comentarios que en aquella ocasión se hicieron pueden leerse <a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2012/11/el-pacto-con-la-serpiente.html">AQUÍ </a></span><br />
<br />
<div style="color: #ffd966;">
</div>
<div style="color: #ffd966;">
<i>¡Fuera, pensamientos, víboras que os enroscáis en torno de mi mente,</i></div>
<div style="color: #ffd966;">
<i>negro sueño de la realidad!</i><br />
<br /></div>
<div style="color: #ffd966;">
</div>
<div style="color: #ffd966;">
</div>
<div style="color: #bf9000;">
<b>Coleridge</b>, <i>Deyection</i> (VII)<br />
<br /></div>
<div style="color: #bf9000;">
</div>
<div style="color: #ffd966;">
</div>
<div style="color: #ffd966;">
</div>
<div style="color: #ffd966;">
</div>
<div style="color: #ffd966;">
"La relación entre serpiente y fantasía es arquetípica, reaparece espontáneamente en las metáforas de los poetas.</div>
<div style="color: #ffd966;">
Quienes firman el pacto con la serpiente entran en un universo donde
todo se trastorna; en vez de ser ahuyentada, la fantasia es cultivada,
adornada, nos convertimos voluntariamente en su alimento"<br />
<br /></div>
<div style="color: #ffd966;">
</div>
<div style="color: #ffd966;">
</div>
<div style="color: #bf9000;">
<b>Elémire Zola</b>, <i>Storia del fantasticare</i><br />
<br /></div>
<div style="color: #bf9000;">
</div>
<div style="color: #bf9000;">
</div>
<div style="color: #bf9000;">
</div>
<span style="font-size: large;"> El siguiente texto de Mario Praz es el prefacio a su obra El pacto con la serpiente. El título está inspirado en el cuadro de Hans Baldung Grien que aparece más arriba acerca de la tentación de Eva, y que según su autor, revisando la interpretación que se ha hecho de esta obra basada en la doctrina agustiniana, se podría encontrar una escenificación de lo que sería una parábola sobre la sensibilidad estimulada por la imaginación. La sensibilidad la encontraríamos aquí representada por Eva, y la imaginación por la serpiente. El uso de esta parábola servirá a Mario Praz como ilustración con la que poder meditar sobre la dirección que siguió el arte occidental en determinado momento. La "serpiente de la imaginación" habría tenido libre curso en el arte desde el Romanticismo hasta la época contemporanea, periodo en el que se encuentran las obras artísticas y literarias que analiza en su libro, y de forma especial las comprendidas en lo que se ha venido en llamar <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Decadentismo">Decadentismo</a>. El pacto con la serpiente no sería pues otra cosa que el pacto por el que el artista será "tentado" a sentirse libre para, sirviéndose de su capacidad creativa, dar expresión a su "psiquismo interior", algo que finalmente acabará convirtiéndose en un arma de doble filo. La imaginación fantasiosa animada por la proyección del psiquismo personal hasta agotar sus posibilidades, llegará a los excesos del arte moderno que tendrá como resultado el planteamiento en determinados círculos críticos la cuestión sobre la muerte del arte. <br /> Dice en otro lugar Mario Praz:<i> "Antes de la revolución romántica la expresión de la personalidad del artista estaba contenida dentro de límites contra los cuales raramente se rebelaba: límites aceptados hasta el punto de no sentir, de ni siquiera imaginar, la necesidad de franquearlos y sobrepasarlos"</i>. Y refiriéndose a la producción literatura y artística contemporánea:<i> "Al abrirse con Freud y con Joyce la caja de Pandora, todo el mundo larval de la psicopatía inundó la literatura a tal punto que no terminaríamos de dar nombres. Su nombre es legión. (...), palabras, palabras, palabras del subsuelo, todos marchando a plena luz, cada uno con su serpiente enroscada al cuerpo desnudo (...)"</i><br /> Siguiendo su teoría, creo que Praz podría concluir que este proceso de "desnudamiento" de lo personal actualmente estaría manifestándose a gran escala en determinado uso de las populares redes sociales.</span><br />
<br />
<br />
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div style="color: #bf9000; text-align: center;">
<span style="font-size: large;"><b>Prefacio a <i>El pacto con la serpiente</i></b></span></div>
<span style="font-size: large;">
</span>
<br />
<div style="color: #bf9000; text-align: center;">
<span style="font-size: large;"><b>Por</b></span></div>
<span style="font-size: large;">
</span>
<br />
<div style="color: #bf9000; text-align: center;">
<span style="font-size: large;"><b>Mario Praz </b></span></div>
<br />
<br />
<div style="color: #93c47d;">
En un cuadro de Hans Baldung Grien que salió a la luz en 1970 (imagen de
cabecera), este alumno de Durero, muy conocido por sus composiciones
macabras, nos enfrenta a un acontecimiento que tendría que dejarnos
perplejos y atónitos. Un repugnante esqueleto, todavía revestido de
jirones de pútrida carne, cuyo carácter satánico está denunciado por el
pie izquierdo que termina en una pezuña hendida, sujeta por el brazo
izquierdo a una joven cuya mano derecha esconde en la espalda una
manzana. Una serpiente arqueada, como el instrumento musical que de ella
toma el nombre, sella un pacto con ambos personajes, al estar sujeta su
cola al brazo del esqueleto.</div>
<div class="separator" style="clear: both; color: #93c47d; text-align: center;">
</div>
<div style="color: #93c47d; text-align: left;">
<a href="http://www.visual-arts-cork.com/images-renaissance/baldung-death.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="http://www.visual-arts-cork.com/images-renaissance/baldung-death.jpg" border="0" src="http://www.visual-arts-cork.com/images-renaissance/baldung-death.jpg" /></a>
Lo más asombroso es la expresión del rostro de la mujer, no de terror
como el de la otra mujer besada o mordida por la Muerte en otro cuadro
del pintor en el Kunstsammlung de Basilea (en la imagen izquierda ver
detalle), </div>
<span style="color: #93c47d;">no de angustia como la durmiente de Füssli,
oprimida por el íncubo personificado por el mono y por la cabeza de
caballo con vítreos ojos sin mirada; sino más bien de seguridad y de
satisfacción, como su hubiese entrado en posesión de un bien codiciado.</span>
<br />
<div style="color: #93c47d;">
Esta tentación de Eva suele interpretarse a la luz de las enseñanzas de
Lutero, quien había recibido la influencia de la orden agustiniana a la
que pertencía en la época en que predicaba en el monasterio de Witenberg
-en la época del cuadro de Baldung Grien, pintadp alrededor de 1517.</div>
<div style="color: #93c47d;">
Según San Agustín, el Orgullo y la Envidia son los dos supremos pecados
capitales. La envidia fue el pecado capital de Adán, pero fue el orgullo
el que perdió a Eva. Y aquí vemos cómo se articula el pacto: el orgullo
(Eva) conduce al pecado (la serpiente) que conduce a la muerte (el
esqueleto) que lleva al infierno (el pie bifurcado).</div>
<div style="color: #93c47d;">
Pero la interpretación agustiniana del relato de la caída es todavía más
compleja: la serpiente tentadora es la imaginación que se presenta a
Eva (la concupiscencia o sensibilidad) que, a su vez, corrompe a Adán
(la voluntad).(...)</div>
<div style="color: #93c47d;">
<div style="color: #93c47d;">
En la tentación de Eva se simboliza la parábola de la sensibilidad
estimulada por la imaginación, a la que desde el romanticismo en
adelante se le dio libre curso (para la secta de los ofitas, la
serpiente se identificaba con el principio liberador del mundo),
agotando casi todas las posibilidades hasta aquella muerte del arte de
la que hoy se habla tan insistentemente. Ciertos versos de Nietzsche (<i>Zwischen Raubvögeln</i>) podrían ser el epígrafe para el arte moderno:</div>
<div style="color: #93c47d;">
<i><br /></i>
<i>¿Por qué te has atraído tú mismo</i></div>
<div style="color: #93c47d;">
<i>al paraíso de la vieja serpiente?</i></div>
<div style="color: #93c47d;">
<i>¿Por qué te has insinuado en ti, en ti?</i></div>
<div style="color: #93c47d;">
<i>Ahora eres un enfermo,</i></div>
<div style="color: #93c47d;">
<i>un enfermo por el veneno de la serpiente.</i></div>
<div style="color: #93c47d;">
<i>Un prisionero eres</i></div>
<div style="color: #93c47d;">
<i>que has elegido la suerte más dura.</i></div>
</div>
<div style="color: #93c47d;">
<br />
<div style="color: #93c47d;">
Hay otro aspecto, entre tantos que ofrece la serpiente, del que vemos
una impresionante ilustración en una composición de Blake a propósito
del pasaje del <i>Paraíso perdido</i> de Milton, en el que Satán envidia
la felicidad de Adán y Eva y siente él mismo "fierce desire-still
unfulfilled" (deseo feroz aún no conocido). Adán acaricia a Eva, y Satán
la serpiente, que es como su "doble", su propia imagen. En su envidia,
sólo le queda a Satán replegarse sobre sí mismo, y eso lo representa
Blake con la imagen de Satán que abraza la serpiente,
"self-contemplation is self-enclosure, and deadens the soul". </div>
</div>
<div style="text-align: center;">
<img alt="https://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/a/ae/William_Blake_sata_amor_adao_eva.jpg" class="shrinkToFit" height="400" src="https://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/a/ae/William_Blake_sata_amor_adao_eva.jpg" width="306" /></div>
<div style="text-align: center;">
William Blake, <i>Satán mirando a Adán y Eva</i></div>
<br />
<br />
<span style="font-size: large;">Ésta últimas palabras en inglés las
podemos entender como el peligro del oscurecimiento del alma que puede
conllevar el ensimismamiento, el aislamiento en uno mismo cuando la
imaginación es incapaz de liberarse de los fantasmas de la mente
particular. A este aspecto fantasioso de la imaginación está dedicado el
siguiente texto de Elémire Zolla, que también se servirá de la
interpretación de una visionaria obra de William Blake inspirada en <i>El paraíso perdido</i> de Milton.</span><br />
<br />
<br />
<div style="color: #bf9000; text-align: center;">
<span style="font-size: large;"><b><i>El lado oscuro de la imaginación</i></b></span></div>
<span style="font-size: large;">
</span>
<br />
<div style="color: #bf9000; text-align: center;">
<span style="font-size: large;"><b>Por</b></span></div>
<span style="font-size: large;">
</span>
<br />
<div style="color: #bf9000; text-align: center;">
<span style="font-size: large;"><b>Elémire Zolla</b></span></div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div style="color: #93c47d; text-align: left;">
La imaginación es el istmo entre la vida y la extinción, entre noche y
día, engaño y verdad. Su luz crepuscular puede peludiar, o a la
eternidad, o a la muerte espiritual. Todo depende de la imaginación.
Ella forja sin tregua imágenes a partir de los mensajes que transmiten
los sentidos, pero cuando se distrae de lo sensible, puede volverse a su
interior, a la fuente de luz, a la lámpara del intelecto, o bien puede,
al revés, divertirse entre las imágenes que ha amontonado en la
memoria. Estas dos actitudes definen, respectivamente, la visión
inspirada y la quimera; la una conduce al objetivo supremo, la otra a la
degradación.</div>
<div style="color: #93c47d; text-align: left;">
Funesto es el ensueño con los ojos abiertos, también y especialmente
cuando finge ser un inocente juego de imágenes. Las imágenes son ídolos,
ejercen influencias; la mente no puede juguetear impunemente con ellas.
Éstas le infligen un triple daño: las quimeras no sólo son lo opuesto
de la meditación y de la contemplación, sino que además contaminan los
sueños nocturnos, que las refeljan como en un espejo curvo. Recortan la
pronitud, la vivacidad de la vigilia. El fantasear aglutina al mundo
exterior y al mismo tiempo genera ineptitud para las obras prácticas.
Además de exponer a cualquier instinto, genera timidez e indecisión.
Insensible, complacido, centrado siempre en sí mismo, vacilante, incapaz
de reacciones ágiles y de rápidas valoraciones: así es el soñador con
los ojos abiertos. (...)</div>
<div style="color: #93c47d; text-align: left;">
<div style="color: #93c47d; text-align: left;">
El soñador con los ojos abiertos no se da cuenta del mal que incuba y
poco a poco deja también de recordar que no es poco lo que se requiere
para tener la mente tersa y pulida, que al barrer las imágenes
suplerfuas y errabundas se obtiene alivio y paz, y que una mente pura
irradia autoridad en el gesto, en la mirada.</div>
<div style="color: #93c47d; text-align: left;">
Por el contrario, el más pequeño esfuerzo volitivo le cuesta al
inveterado soñador con los ojos abiertos un esfuerzo enorme: su
costumbre más necia le parece irreprimible, la tentación más leve,
irresistible.</div>
<div style="color: #93c47d; text-align: left;">
Cuando Satanás quiere hacer caer a Eva, la induce, según Milton, a una quimera (<i>El paraiso perdido</i>, IV, 800):</div>
<div style="color: #93c47d; text-align: left;">
<i><br /></i></div>
<div style="color: #93c47d; text-align: left;">
<i>Aplastado como un sapo contra el oído de Eva,</i></div>
<div style="color: #93c47d; text-align: left;">
<i>intenta alcanzar con arte diabólica</i></div>
<div style="color: #93c47d; text-align: left;">
<i>los órganos de la fantasía, y con ellos forjar</i></div>
<div style="color: #93c47d; text-align: left;">
<i>fantasmas y sueños, ilusiones a voluntad.</i><br />
<br /></div>
<div style="color: #93c47d; text-align: left;">
</div>
<div style="color: #93c47d; text-align: left;">
No hay tradición que no ponga en guardia contra el hecho de fantasear.</div>
</div>
<div style="text-align: center;">
<img alt="http://www.jesuswalk.com/ephesians/images/wm-blake-tempt-eve153x225.jpg" src="http://www.jesuswalk.com/ephesians/images/wm-blake-tempt-eve153x225.jpg" height="400" width="271" /></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="font-size: large;"> </span>William Blake, <i>Eva tentada por la serpiente</i> (detalle) Inspirado en <i>El paraiso perdido</i> de Milton</div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div style="color: #f1c232; text-align: left;">
<i>A diferencia de la</i><i> </i>Imaginatio vera<i>, la fantasía (</i>phantasey<i>) es un juego del pensamiento, sin fundamento en la Naturaleza; nada más que "</i>la piedra angular de los locos<i>".</i></div>
<div style="color: #bf9000; text-align: left;">
</div>
<b style="color: #bf9000;">Paracelso </b><br />
<b style="color: #bf9000;"><br /></b>
<b style="color: #bf9000;"><br /></b>
<br />
Lecturas:<br />
<br />
<b>Mario Praz</b>, <i>El pacto con la serpiente</i>. Fondo de Cultura Económica 1988<br />
<br />
<b>Elémire Zolla</b>, <i>Verdades secretas expuestas a la evidencia. Sincretismo y fantasía. Contemplación y esoterismo</i>. Paidós Orientalia 2002<br />
<br />
. Janhttp://www.blogger.com/profile/10112360698804083485noreply@blogger.com7tag:blogger.com,1999:blog-4945391151380854953.post-27477705426120765632016-04-08T00:35:00.000-07:002016-04-08T00:35:50.577-07:00Amor ígneo<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi8ofZVTMvbio6LQeMu50TZNoUHru-iq7ZtNjDOUsoySgw_0DFung_9_b1z0MKd6bZ88mqDUy_rYBuAVKa5gsvXXCkF6eIqp6tAIz5nTdGC-eRbskKyNH5jz4VxHoCjBisAKGyoUtgyfkuk/s1600/books_002.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi8ofZVTMvbio6LQeMu50TZNoUHru-iq7ZtNjDOUsoySgw_0DFung_9_b1z0MKd6bZ88mqDUy_rYBuAVKa5gsvXXCkF6eIqp6tAIz5nTdGC-eRbskKyNH5jz4VxHoCjBisAKGyoUtgyfkuk/s400/books_002.jpg" width="382" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Detalle del emblema 115 de <i>Amorum Emblemata</i> (1608) de Otto Vaenius acompañando al lmote<i> Mea vita per ignem </i>(mi vida para el fuego), al que le sigue el poético epigrama:</div>
<div style="text-align: center;">
</div>
<div style="text-align: center;">
"En el fuego del amor vive el amante,</div>
<div style="text-align: center;">
y en él crece su gloria y se recrea,</div>
<div style="text-align: center;">
no se ha visto fortuna semejante</div>
<div style="text-align: center;">
en cuanto ciñe el mar y el Sol rodea.</div>
<div style="text-align: center;">
Salamandra parece que triunfante</div>
<div style="text-align: center;">
se halla ardiendo en el monte Etna</div>
<div style="text-align: center;">
que allí vive y goza, y lo que mata</div>
<div style="text-align: center;">
a otros, le da vida, y le fortalece".</div>
<br />
<br />
<span style="font-size: large;">En esta entrada los emblemas segundo, tercero y sexto de la obra del holandés Daniël Heinsius (1580-1655) <i>Emblemata amatoria</i>. La selección que hago entre los 24 que componen la obra, ha sido determinada por la común presencia del fuego como imagen simbólica de la pasión amorosa. El estudio crítico de cada uno de los emblemas es autoría del profesor Santiago Sebastián, de quien este blog se ha nutrido en otras ocasiones.</span><br />
<br />
<br />
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;"><i><span style="font-size: large;">La mejor emblemática amorosa del Barroco</span></i></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;">(selección de tres emblemas de Daniël Heinsius)</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;">por</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;"><span style="font-size: large;">Santiago Sebastián</span></span></div>
<br />
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;"><b>Emblema II</b></span></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;"><i>Au dedans je me consume</i> (Interiormente yo me consumo). Este lema lo explica así el epigrama: "Como por fuera el ardor del fuego consume lo que contienen las ollas tapadas, así también el amor ciego consume mis entrañas".</span></span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiUhn4qLnfJNaiehgh_eewPJ9yQswyC0vmRRGaDcYKPbwERGvqOm5q-Q6SBxho5yTK6dhEYDUWEeFkNR6zLPchid6ZkbcRVI_GdIIzY3Z8QSU-vcDkNfPEW_zbfABHr9L-dR5OLQ9zu8Eel/s1600/amor+igneo+4.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="316" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiUhn4qLnfJNaiehgh_eewPJ9yQswyC0vmRRGaDcYKPbwERGvqOm5q-Q6SBxho5yTK6dhEYDUWEeFkNR6zLPchid6ZkbcRVI_GdIIzY3Z8QSU-vcDkNfPEW_zbfABHr9L-dR5OLQ9zu8Eel/s320/amor+igneo+4.jpg" width="320" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
<i>Au dedans je me consume</i>. Heinsisus,<i> Emblemata Amatoria</i> (1607)</div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiQ5fuKJJ3Zw9hPPN_WPA7xnBkxMCo82XMzQsWKqxdNmU-o92HfZ5UGH0M4EJrQ6AsQNlvM3XvEhlvXcCP_XQHERz-ffcBZNSzeW5PR0_YcaOYLsO0eVL1mLOFWL0tWSJlnyMLSf1H_6AJS/s1600/amor+igneo+5.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="176" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiQ5fuKJJ3Zw9hPPN_WPA7xnBkxMCo82XMzQsWKqxdNmU-o92HfZ5UGH0M4EJrQ6AsQNlvM3XvEhlvXcCP_XQHERz-ffcBZNSzeW5PR0_YcaOYLsO0eVL1mLOFWL0tWSJlnyMLSf1H_6AJS/s200/amor+igneo+5.jpg" width="200" /></a></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">Aquí se pone de manifiesto otra de las fuentes más socorridas de Hensius, la obra <i>Delie</i> (Lyon 1544) de Scève, quien en su empresa 36 presenta una vasija al fuego con un lema semejante <i>"Dedans ie me consume"</i>. (Imagen izquierda)</span></span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">En el grabado circular de Gheyn vemos a Cupido ante un paisaje abierto, que con un fuelle aviva la llama de un fuego para calentar una olla colocada encima de unas trébedes. </span></span></div>
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhwNQ4MZVh0MpOiM2lxXxG-iEd1Q5SbVnHaqLjUfsTTVhqXwqK1WpoaiY-_-ZgppGigIi0GAp3UYJcHeeDvnPHnZ8w2J03PqanGDtCnHg6Hz3ootlTMw9gdsnkp4v1vkOj2lrfGHWw03yuj/s1600/amor+igneo+3.jpg" imageanchor="1" style="clear: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhwNQ4MZVh0MpOiM2lxXxG-iEd1Q5SbVnHaqLjUfsTTVhqXwqK1WpoaiY-_-ZgppGigIi0GAp3UYJcHeeDvnPHnZ8w2J03PqanGDtCnHg6Hz3ootlTMw9gdsnkp4v1vkOj2lrfGHWw03yuj/s320/amor+igneo+3.jpg" width="190" /></a>Si bien la metáfora del amor como un fuego interior, que corroe a los enamorados, está en la poesía antigua, ya Alciato echó mano del componente ígneo del amor, así en el emblema 107: "Vis amoris", nos presenta a Cupido alado quebrando el rayo para demostrar que "El fuego del amor es más fuerte que el fuego" (imagen derecha). El amor ígneo fue uno de los grandes componentes típicos de la poesía y de las representaciones amorosas de todos los tiempos.</span></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<br />
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;"><b>Emblema III</b></span></span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;"><i>Mes pleurs mon feu decelent</i> (Mis lágrimas descubren mi fuego). Ello se aclara en el epigrama: "¿Acaso lo dudas? Sean las lágrimas testigos de la llama de mi amor; siempre destila gotas un líquido encerrado en el alambique".</span></span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh7TUlcxObXkYv8N1BaV52ioc9ia_NkOOOhq4dq2cF2HSsHtrOXXaNU1GcOJy7SucjXGn0r_hn_a2Q5TYCt1F0e0DutRP120EtWhIBvl_X6Q3vsekexrP8O_EGVNv59mEUc4phODXmMtVSv/s1600/amor+igneo+6.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="318" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh7TUlcxObXkYv8N1BaV52ioc9ia_NkOOOhq4dq2cF2HSsHtrOXXaNU1GcOJy7SucjXGn0r_hn_a2Q5TYCt1F0e0DutRP120EtWhIBvl_X6Q3vsekexrP8O_EGVNv59mEUc4phODXmMtVSv/s320/amor+igneo+6.jpg" width="320" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
<i>Mes pleurs mon feu decelent,</i><i><i> Emblemata Amatoria</i> </i>(1607)</div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEipO58KPcBYO4olUIoO6RXt1_JiITEwAbmxs4dwu5mFCTEdoYTtCJzEc7-sidpX3oN0kGz9Ph_8dCUPu58rZP8rVcb9ElzLUaiAbzUed8BNniNr5eURrnBvz-drT5BZTuPegWUR372ASS8W/s1600/amor+igneo+1.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="179" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEipO58KPcBYO4olUIoO6RXt1_JiITEwAbmxs4dwu5mFCTEdoYTtCJzEc7-sidpX3oN0kGz9Ph_8dCUPu58rZP8rVcb9ElzLUaiAbzUed8BNniNr5eURrnBvz-drT5BZTuPegWUR372ASS8W/s200/amor+igneo+1.jpg" width="200" /></a></div>
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">De nuevo la fuente era de Scève en la empresa 23 de su <i>Delie</i> (Lyon 1544), en la que figura un alambique con el mismo lema (imagen izquierda). Aunque hubo una fuente emblemática anterior: <i>Le theatre des bons engines</i>, publicado en el mismo Lyon, tal vez en 1540, en cuyo emblema 79 nos presenta a Cupido avivando el fuego de un horno aunque con lema distinto.</span></span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhwfyipt4Q4FeqKiQ-yfGR2l4Nnjzu-40Q1Mycn6N-sX2kf9XCCM7ASqKXnF5JZNO6gmDdCsWeYfOuCpWqH9lo9H0bni4mMvg-VxHwLLoNzlxAwENzV8WuoM_cJE8uyp-1xqMNHQ9zI8Wkl/s1600/amor+igneo+2.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhwfyipt4Q4FeqKiQ-yfGR2l4Nnjzu-40Q1Mycn6N-sX2kf9XCCM7ASqKXnF5JZNO6gmDdCsWeYfOuCpWqH9lo9H0bni4mMvg-VxHwLLoNzlxAwENzV8WuoM_cJE8uyp-1xqMNHQ9zI8Wkl/s320/amor+igneo+2.jpg" width="314" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Guillaume La Perrière<i>, Le theatre des bons engines. </i>Embl. LXXIX<i><br /></i></div>
</div>
<div style="text-align: left;">
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">Como ya señaló Praz estas imágenes emblemáticas no eran sino la traducción de conceptos muy extendidos en la poesía amorosa, especialmente la italiana, que partía de Petrarca:</span></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">"Con lágrimas que de a millones yo derramo,</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">conviene que el dolor por los ojos gotee</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">desde el corazón, que en si tiene fuego y yesca;</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">no sólo cual fue, sino paréceme que creciera.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">¿Qué fuego no tuvieran ya apagado y muerto</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">las ondas que los tristes ojos derraman para siempre?</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">Amor, aunque tarde me haya dad cuenta,</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">quiere que entre los contrarios yo me consuma".</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">Esta paradoja de Petrarca en su balada Quel fuoco será reiterada por Serafino en su verso:</span></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">"Se porta dentro una fornace ardente..."</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">Y también por lo spoetas franceses, en primer lugar por Scève. El grabado de Gheyn nos muestra en primer término a Cupido, que está avivando el fuego de un alambique. El sentido amoroso lo confirma la pareja de amantes que se abrazan entre las frondas de un jardín.</span></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;"><b>Emblema VI</b></span></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;"><i>A autroy mort, a moy la vie</i> (La muerte al prójimo, la vida para mí). El epígrafe explicita la imagen: "A ti, oh Salamandra, te alimentan los fuegos que a otros destruyen. Lo que a otros el fuego les da la muerte, a nosotros el fuego del amor nos da la vida". </span></span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjUGoCVtGCj81ulVJIay82bbHeeuuruNjclAfnLTTg-X4nk4ORvEUnFIX-IKX805gr6xdKMBo0YIfeQFcOZArugoKJcvkzpfaB2h22BnmJdZL3v5YaPbSBE1J4rywK3bXRcrINZ0JZI9DeB/s1600/amor+igneo+8.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjUGoCVtGCj81ulVJIay82bbHeeuuruNjclAfnLTTg-X4nk4ORvEUnFIX-IKX805gr6xdKMBo0YIfeQFcOZArugoKJcvkzpfaB2h22BnmJdZL3v5YaPbSBE1J4rywK3bXRcrINZ0JZI9DeB/s320/amor+igneo+8.jpg" width="316" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
<i>A autroy mort, a moy la vie, Emblemata Amatoria </i>(1607)</div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">La imagen de la salamandra venía a traer el punto álgido del tema del amor ígneo. (...) Pese a su mala reputación, por el poder mortífero de su veneno, el lenguaje simbólico ha hecho desempeñar a este animal papeles muy nobles. Se la vio como símbolo del fuego, por tanto los alquimistas hicieron de ella el símbolo de la calcinación; también se hizo de ella símbolo de las Justicia, pues podía vivir entre llamas avivando el fuego bueno, mientras apagaba el malo.</span></span></div>
<div style="text-align: left;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhmTNcjoYvvx70DDc8pD7Ikw06T7njuVRvsyRubBmCBO9mXGQMRLB7obbRBVM_DOZAcB9NgUP1QECZIartiNl80xJWRh16ZVCEgtqDDL5UeCl7HjlroZzyuQNTKBlV3GxJIPUyRoCbMdKeq/s1600/salamandra+1.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhmTNcjoYvvx70DDc8pD7Ikw06T7njuVRvsyRubBmCBO9mXGQMRLB7obbRBVM_DOZAcB9NgUP1QECZIartiNl80xJWRh16ZVCEgtqDDL5UeCl7HjlroZzyuQNTKBlV3GxJIPUyRoCbMdKeq/s400/salamandra+1.jpg" width="253" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
La salamandra como símbolo del elemento fuego en el frontispicio del tratado alquímico<i> Musaeum hermeticum</i> (1625)</div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">El rey Francisco I la tomó como su divisa bajo el mote: "Nutrisco et extinguo" (Lo alimento y lo apago), que más que a la Justicia, el fuego de ella hacía alusión al del Amor, y en este sentido le dedicó Giovio la empresa VII de su <i>Dialogo dell'Impresse militari et amorose </i>(Venecia 1556) para referir que el príncipe francés no se vio libre de los lazos amorosos y también tuvo ánimo indomable ante la Fortuna como la Salamandra.</span></span></div>
<div style="text-align: left;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgMeRHgMREgTfr7LO1KOmcQvFREhIQRYZK0het11BhhhVAlhXOp4_cEQmTsiwenzqcBqOFYLs7Av_xeV6XYVYQ7EgH9eZ7-1mH8TUA_goBNLnxX0Z4BEduE9yhrFJB-h9xfA9r7b78CGYPU/s1600/books_002.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="247" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgMeRHgMREgTfr7LO1KOmcQvFREhIQRYZK0het11BhhhVAlhXOp4_cEQmTsiwenzqcBqOFYLs7Av_xeV6XYVYQ7EgH9eZ7-1mH8TUA_goBNLnxX0Z4BEduE9yhrFJB-h9xfA9r7b78CGYPU/s320/books_002.jpg" width="320" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Paolo Giovio, <i>Dialogo dell'Impresse militari et amorose </i></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<div style="text-align: left;">
<br /></div>
<div style="text-align: left;">
<br /></div>
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">Mas no olvidemos que por otra parte estaba la tradición poética de Petrarca, que su composición Ben mi credea empieza así su parte cuarta: </span></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">"De mi muerte me nutro y vivo en llamas:</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">¡Extraño alimento y admirable salamandra!"</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">Y el poeta francés Scève dirá al respecto: </span></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">"Como una salamandra, en las llamas ardientes donde perecen otros, vivo yo alegremente".</span><br />
<br /></div>
<div style="text-align: left;">
<br />
<br />
Lecturas:<br />
<br />
<b>Santiago Sebastián</b>,<i> La mejor emblemática amorosa del Barroco</i>. Sociedad de Cultura Valle Inclán 2001</div>
<div style="text-align: left;">
<br /></div>
<div style="text-align: left;">
<br />
Entradas relaciondas:<br />
<br />
<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2010/07/extincion.html">Extinción </a><br />
<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2015/06/alquimia-y-emblematica-la-fuga-de.html"><br /></a>
<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2015/06/alquimia-y-emblematica-la-fuga-de.html">Alquimia y emblemática: La fuga de Atalanta</a><br />
<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2016/02/cardiopatias-amorosas.html"><br /></a>
<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2016/02/cardiopatias-amorosas.html">Cardiopatías amorosas</a><br />
<br />
<br />
.</div>
Janhttp://www.blogger.com/profile/10112360698804083485noreply@blogger.com8tag:blogger.com,1999:blog-4945391151380854953.post-37427043654456193502016-03-27T01:18:00.000-07:002016-03-27T01:18:00.954-07:00Siete cabezas tiene la Bestia<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgbtUEx1qw8hXGgeS_9ctmazcHPcI8TwFlz2Y4ML_x2WV7Izj8MMXWmAenbSuGAVPyeQJoBRNtE3VDYr9-RrPa2EH4iLm0x2ecg6vAhzx_CVXpFHZ2l7HJ-RbspUnURrIxHc8rMIPYT5MJK/s1600/hidra+10.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgbtUEx1qw8hXGgeS_9ctmazcHPcI8TwFlz2Y4ML_x2WV7Izj8MMXWmAenbSuGAVPyeQJoBRNtE3VDYr9-RrPa2EH4iLm0x2ecg6vAhzx_CVXpFHZ2l7HJ-RbspUnURrIxHc8rMIPYT5MJK/s400/hidra+10.jpg" width="335" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
La ramera de Babilonia,<i> Biblia</i> de Lutero (1534)</div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #ffe599;">"Me trasladó un espíritu al desierto. Y vi a una mujer, sentada sobre una Bestia de color escarlata, cubierta de títulos blasfemos; la Bestia tenía siete cabezas
y diez cuernos.<span class="text Rev-17-4" id="es-RVR1960-30982"> La mujer estaba
vestida de púrpura y escarlata, resplandecía de oro, piedras preciosas y perlas; llevaba en su mano una copa de oro llena de abominaciones, y también las impurezas de su prostitución, y en su frente un nombre escrito -un misterio- : 'La gran Babilonia, la madre de las prostitutas y de las abominaciones de la tierra'. (...) Me dijo además (el espíritu): 'Las aguas que has visto, donde está sentada la Prostituta, son pueblos y muchedumbres, naciones y lenguas".</span></span> </div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: left;">
<span style="color: #f1c232;"><i><b>Apocalipsis de San Juan</b></i> 17 </span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: left;">
<br /></div>
<br />
<br />
<span style="font-size: large;">La Hidra, el mítico monstruo policéfalo que Hércules mata en uno de sus legendarios trabajos impuestos por la Sibila delfica, encuentra correlato iconográfico con las bestias de siete cabezas descritas en <i>Apocalipsis</i> 12 y 17, cuyas fuentes se pueden rastrear en relatos sumerios que darían lugar a expresiones artísticas como las que podemos ver en la imagen impresa de un sello real, simbolizando la eterna lucha del bien contra el mal o la imposición del orden a las fuerzas disgregadoras y el caos.</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjD98TkIR7HWqfGG6QNFn9AVib0Narurn05C-V6IwiZ8Dw47Y5Z5l06yTmF5alfbwP0etfthKIHEer95ZKVphyphenhyphenCcZwCdn4YgB_wHBvuXlCKY-PnyFgEECekC29SUNbMtUCySsdVwhaD2Pfv/s1600/hidra+12.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="177" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjD98TkIR7HWqfGG6QNFn9AVib0Narurn05C-V6IwiZ8Dw47Y5Z5l06yTmF5alfbwP0etfthKIHEer95ZKVphyphenhyphenCcZwCdn4YgB_wHBvuXlCKY-PnyFgEECekC29SUNbMtUCySsdVwhaD2Pfv/s320/hidra+12.jpg" width="320" /></a></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<div style="text-align: center;">
Impresión sobre cera de un sello cilíndrico sumerio donde se representa el ataque a un monstruo de siete cabezas.</div>
<br />
<span style="font-size: large;"><br /></span>
<span style="font-size: large;">Algo de esto parece perdurar en uno de los emblemas de Sebastián de Covarrubias, el 74 de la pimera centuria, donde la Hidra se presenta como imagen para ilustrar la confusión y desavenencias que se producen cuando se enfrentan variedad de pareceres sin orden ni concierto, lo que se da a entender por las siete cabezas del monstruo sobre las que está inscrito el mote <i>TOT SENTENTIAE</i> (TANTAS OPINIONES)</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgGQ0ZX4slCihBntWbhPoDAu5rxb2c6pu9TstkBs-2n8keC32jiRkcArgvttWH5Td1w2_aRPe27lWCTnypJtA9gjcdN00FQbXAaVeKHQUGuFRds5xoS9eGQmrITZ1lG3GI5blMJcL0Vra11/s1600/covarrubias.gif" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgGQ0ZX4slCihBntWbhPoDAu5rxb2c6pu9TstkBs-2n8keC32jiRkcArgvttWH5Td1w2_aRPe27lWCTnypJtA9gjcdN00FQbXAaVeKHQUGuFRds5xoS9eGQmrITZ1lG3GI5blMJcL0Vra11/s400/covarrubias.gif" width="292" /></a></div>
<br />
<span style="font-size: large;">El epigrama en verso de debajo también es explícito al respecto:</span><br />
<br />
<div style="text-align: center;">
Horrendo monstruo, bestia prodigiosa,</div>
<div style="text-align: center;">
es la comunidad y ayuntamiento,</div>
<div style="text-align: center;">
de la bárbara gente revoltosa;</div>
<div style="text-align: center;">
sin orden, sin razón ni entendimiento,</div>
<div style="text-align: center;">
propone mucho y no resuelve cosa.</div>
<div style="text-align: center;">
Hay, sobre un caso, pareceres ciento,</div>
<div style="text-align: center;">
cada cual tiene voto diferente,</div>
<div style="text-align: center;">
o Cancerbero, o hidra pestilente.</div>
<br />
<span style="font-size: large;">En el análisis iconográfico dedicado a este emblema, Juan de Dios Hernández Miñano nos relata la presencia de este fantástico animal en la literatura clásica, bíblica y patrística, junto a los idearios simbólicos y morales que lo han acompañado en diferentes contextos históricos. También en la parte final conjetura sobre cómo Covarrubias pudo servirse de esa imagen para dirigir una crítica solapada al sistema asambleario del Cabildo de la Catedral de Cuenca, en cuyas interminables controversias se viera tantas veces involucrado siendo maestrescuela.</span><br />
<br />
<br />
<br />
<span style="color: #3d85c6;"><span style="font-size: large;"><b>Juan de Dios Hernández de Miñano</b>, análisis del emblema I, 74 de <i>Emblemas Morales</i> de Sebastián de Covarrubias.</span></span><br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">La hidra es un animal serpentiforme y monstruoso que el poeta griego Pisandro de Camiro describe como un animal enorme y especialmente terrible, dotado de muchas cabezas que vive en lagos y pantanos. Plinio describe este extraño animal: <i>Es como una culebra, pero tiene el pellejo muy pintado y hermoso, esmaltado de mil colores.</i> San Isidro refiere que cuando se le corta una cabeza a este horrendo animal, le brotan otras tres.</span></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">La bestia bíblica, símbolo de las fuerzas irracionales, posee las características de lo informe, lo caótico y lo satánico. Como confusas son sus siete cabezas que representan los siete pecados capitales, cuyos cuernos simbolizan su potencia, y las diademas y coronas con que se engalana, su pseudorealeza, ante la que todos los hombres engañados la adoran. También se identifica con el Anticristo que tanta confusión llevará a los hombres.</span></span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh2FnRFeLNwrzWqMNhJ-tq8pyxNRScAxjhsoRoWiSHxKdMleCFo7oz387eLUeWCAyionEKfebEykqB3cBkNvy4OEf75q6neMZ-TEm-2tp1dLOvGxBbAbQ0wC80LKivz7Q7K-VQspbjod0ea/s1600/hidra+3.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh2FnRFeLNwrzWqMNhJ-tq8pyxNRScAxjhsoRoWiSHxKdMleCFo7oz387eLUeWCAyionEKfebEykqB3cBkNvy4OEf75q6neMZ-TEm-2tp1dLOvGxBbAbQ0wC80LKivz7Q7K-VQspbjod0ea/s400/hidra+3.jpg" width="391" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
<i>Beato de Fernando y Sancha</i>, Folio 186 v. (detalle)</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">Muy pronto el mundo clasico identificó a la bestia de múltiples cabezas con la imagen de la confusión, al resultar desconcertante en su forma de ser y de actuar. Platón estima que un sofista es la imagen de la hidra, porque sostiene sus argumentos con mentiras y engaños, puras opiniones. Los moralistas del mundo clásico habían distinguido entre razón y opinión, reconociendo en la primera la trascripción firme y ordenada de la verdad y, en la segunda, un parecer versátil, caprichoso y desordenado, de ordinario incurso en el error. Así, pues, la opinión del grupo o de sus miembros resulta siempre tornadiza y sin criterio y, por tanto, carente de valor y de consideración alguna. Lo que dio lugar pronto a expresiones de claro matiz despectivo, como la de Terencio: <i>Quot capita tot sententiae</i> (<i>Tantas cabezas, tantas opiniones</i>), con clara alusión a la hidra sin nombrarla expresamente. Horacio, con la profundidad crítica característica, escribe sobre la confusa vida de la Comuna romana:</span></span><br />
<i><br /></i>
<span style="color: #9fc5e8;"><i>Eres, pueblo de Roma, una bestia de muchas cabezas; así pues, ¿a quién o qué seguiré? Algunos se desviven por conseguir el arriendo de los impuestos públicos; otros se dedican a cazar viudas avaras con pastelitos y frutas y a conquistar ancianos para ponerlos en sus viveros, y muchos hacen crecer su fortuna con clandestina usura.</i></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">Para Tervarent, la hidra es el atributo de Hércules y también de Alejandro por ser éste el creador de un imperio que, aunque pretendidamente unitario, estaba integrado por numeros reinos con diversas lenguas y comunas ingobernables.</span></span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg8nBIPLP1LuEMvb2f8CbVdzIA8obT7A0J7oGGDlNX2sUxHGwbfZFZAMKcQqeFUkyJAJXo9Ptls8f4Jtcw_iiPAqrk90wt_teNwbm8JcJqTtjSwWX61NMCY0BnDG52CxaBLltONZzfw5SX3/s1600/hidra+5.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg8nBIPLP1LuEMvb2f8CbVdzIA8obT7A0J7oGGDlNX2sUxHGwbfZFZAMKcQqeFUkyJAJXo9Ptls8f4Jtcw_iiPAqrk90wt_teNwbm8JcJqTtjSwWX61NMCY0BnDG52CxaBLltONZzfw5SX3/s400/hidra+5.jpg" width="295" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Vaso griego, Heracles mata a la hidra en su segundo trabajo</div>
<span style="font-size: large;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">La pervivencia de esta idea se aprecia en algunos bestiarios como el de Cambridge, que siguen de cerca a Plinio y San Isidoro, al pretender ver en la bestia-hidra, entre otras valoraciones, el símbolo de la gente sin criterio, hipócrita, disoluta y poco fiable, porque, de alguna manera, tiene su misma naturaleza.</span></span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgR5FUhqWcWzuZIPreAjykV1n5YG_PnR788Yc1HZOC4J8SjaNoZTH45SMlt_dhCipcEdwzjl_V5BLbA41sRjkepSWXKj_BDhR3q-LfYb7UPiwmWRaqSobFEjsO1tUfuFNXSavnZ1iiyCuk1/s1600/hidra+13.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="293" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgR5FUhqWcWzuZIPreAjykV1n5YG_PnR788Yc1HZOC4J8SjaNoZTH45SMlt_dhCipcEdwzjl_V5BLbA41sRjkepSWXKj_BDhR3q-LfYb7UPiwmWRaqSobFEjsO1tUfuFNXSavnZ1iiyCuk1/s400/hidra+13.jpg" width="400" /></a></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<div style="text-align: center;">
La guerra contra el dragón, manuscrito francés (1295)<br />
<br /></div>
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">En el siglo IV, Lactancio, filósofo de la Patrística, refiere que, cuando la ciencia no alcanza su objetivo, sólo queda la función de opinar; y es que todo el mundo opina sobre aquello que no sabe, incluso algunos, ante una incertidumbre, opinan que es como ellos piensan; luego desconocen la verdad, porque la ciencia se mueve en el campo de la certidumbre, y la opinión en el de la incertidumbre. De ahí que el <i>Eclesiástico</i> diga: <i>¡son tan numerosas las opiniones de los hombres, y sus locas fantasías los extravían!</i></span></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">No obstante, durante el Medievo, la opinión del público tenía una alta consideración por la creencia de estar dotada de virtudes naturales y ser expresión de la voluntad divina. El juicio popular era como el cauce espontáneo de la razón moral. De ahí el aforismo <i>vox populi, vox de Dei</i>. Pero<i>, </i>desde el siglo XVI, esas palabras se olvidan y se recurre cada vez más a expresiones que van en sentido opuesto. La razón está en que la opinión del pueblo se ve ahora como algo informe e inculto, como algo que surge de una masa anónima cuyo parecer no supone un orden natural de racionalidad. En este sentido, Gracián dice que <i>por ningún acontecimiento se diga que la voz del pueblo es la voz de Dios, sino de la ignorancia, y por la boca del vulgo suelen hablar todos los diablo</i>s.</span></span><br />
<br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEicKXpYGsJQy-8M3mumRjOBxK2RkmWZBRD9w9CpXw6oVNWXlBfa82GXgALcifKzrnZRtEFtmCaQVdcKhM-Zna1UptFIHDBS8BsaMjIVErrOfRThMx8Kva6ywaqgftGY3fHZ_2avw-v_nWdK/s1600/hidra+14.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="296" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEicKXpYGsJQy-8M3mumRjOBxK2RkmWZBRD9w9CpXw6oVNWXlBfa82GXgALcifKzrnZRtEFtmCaQVdcKhM-Zna1UptFIHDBS8BsaMjIVErrOfRThMx8Kva6ywaqgftGY3fHZ_2avw-v_nWdK/s400/hidra+14.jpg" width="400" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
La bestia del mar se encuentra con el dragón, manuscrito francés (1295)</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">Con la llegada del Renacimiento, tendría lugar la consolidación del proverbio clásico, tal como lo expresa Erasmo de Rotterdam: <i>Tantas cabezas, cuántas opiniones</i>. Dante Alighieri, partidario de la idea de que la unidad de acción es preferible a la caótica pluralidad que rige en la sociedad humana, refiere:</span></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><i><br /></i></span>
<span style="color: #9fc5e8;"><i>¡Oh, género humano, cuántos tormentos y pérdidas, cuántos naufragios te ves obligado a padecer por haberte convertido en una bestia de muchas cabezas y agitarte con tendencias contrarias!</i></span><br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">Para Ripa, la "Opinión" es todo aquello que tiene su lugar en la mente y la imaginación de los hombres, en tanto no tenga demostración patente; así que pueden ser múltiples, tantas como hombres. De ahí el conocido dicho: <i>Cuantas cabezas, tantas opiniones</i>. Otro hombre del Renacimiento, Fray Luis de Granada, llama a los creyentes a la prudencia para no alejarse de la comunidad cristiana, siguiendo las opiniones dispersas de algunos hombres:</span></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;"><i>A lo menos, esto es cierto, que ninguna mayor locura puede hacer un hombre que regirse por la bestia de tantas cabezas como es el vulgo, que ningún tiento ni consideración tiene en lo que dice.</i></span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<span style="color: #9fc5e8;"><i><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhpxMWLnKhBPw2h4A5WzSEI1FOALIVtjxmsHB8Ve-TqUpwNpNKacXm-NNviyGiVVFMsnvdaQd-DHow4Zfe0HB8_v2DH4N3GOYyx8ekKRJRqMUPL7RuLgTiQaU3RdVBhlua5m9Y5Td27VJYN/s1600/hidra+15.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhpxMWLnKhBPw2h4A5WzSEI1FOALIVtjxmsHB8Ve-TqUpwNpNKacXm-NNviyGiVVFMsnvdaQd-DHow4Zfe0HB8_v2DH4N3GOYyx8ekKRJRqMUPL7RuLgTiQaU3RdVBhlua5m9Y5Td27VJYN/s400/hidra+15.jpg" width="285" /></a></i></span></div>
<br />
<div style="text-align: center;">
Giusto de Menobuoi (1330-1390), <i>La Bestia surgiendo del mar</i><span style="color: #9fc5e8;"> <i><br /></i></span></div>
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">Por su parte, Baños de Velasco pretende avisar al Príncipe de lo poco consistente que son las opiniones del pueblo, pues nunca se expresan con una sola voz, sino que cada individuo es una opinión diferente y, además, se presta al cambio de acuerdo con las circunstancias:</span></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;"><i>Sabido porque lo dize el Impugnador tiene muchas cabeças el vulgo y tantas bocas como cabeças (...), si donde huviese muchas cabeças, precisamente se infiere ha de aver muchas variedades: su juizio es el peor, fluctuando a cada passo entre errores, es su boca un mar de mentiras, sus apetitos infames, sus aprobaciones imperfectas (...). Cuerpo de tantas cabeças, no es seguro para afiançar el favor, donde si se inclinase la una, han de sentir lo contrario los demás (...). Convierte esta venenosa Hydra, los cariños en manifiesta rebeldía.</i></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">En el siglo XVII, el pensador inglés Hobbes ve al hombre como un ser egoísta y sin interés por la compañía de sus semejantes; sólo intenta hacer prevalecer su opinión para destacar y someter a los demás a su criterio. Por lo que se hace necesario el nacimiento del Estado que despoje al hombre de su afán de poder, pero, al mismo tiempo, esta institución pronto se convierte en una bestia de pareceres distintos, semejante a la bíblica.</span></span><br />
<table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: left; margin-right: 1em; text-align: left;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjG9uLVgVao8DbiPjg6j_7Nxpped-9E2aIYYlS-sod6P5gpTfpVKj-kGVI1XiFXon_1TbrD6AR0coLW6Ivmnmo26cUjecbHx_uADeM-vpEnhN5wgvUyZpjpHuf6xYtcO2mq-qzw69NZKCGH/s1600/hidra+4.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="185" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjG9uLVgVao8DbiPjg6j_7Nxpped-9E2aIYYlS-sod6P5gpTfpVKj-kGVI1XiFXon_1TbrD6AR0coLW6Ivmnmo26cUjecbHx_uADeM-vpEnhN5wgvUyZpjpHuf6xYtcO2mq-qzw69NZKCGH/s200/hidra+4.jpg" width="200" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Hidra en un capitel de St. Aigna </td></tr>
</tbody></table>
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">La representación icónica de la bestia es abundante, de entre la que destacaremos la hidra o serpiente de siete cabezas de un capitel románico de la iglesia de St. Aigna (Francia), que representa los siete pecados capitales.</span></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">Más significativo resulta el grabado que trae la obra del siglo XVII <i>Basis Totius Moralis Theologiae</i> (...), de Julio Mercero, que muestra a la bestia o hidra, de siete cabezas coronadas, encadenada a un obelisco donde aparece escrito: <i>Praxis opinorum limitata </i>(Se ha de limitar la práctica de la opinión). </span></span><br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhJSIr20H143l1FchYPYOhTJhKWIlWBdcuUaLbOKl5ihVXjBDTfekpH08Rn_0BBOFPgEa1TEI9DL3WetYGJzpGeCMvaWWNgH62f8YDMQBOIaRRCUo2fAtv19Zp82BYRL5Snb3OwVSEY_jJK/s1600/books.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhJSIr20H143l1FchYPYOhTJhKWIlWBdcuUaLbOKl5ihVXjBDTfekpH08Rn_0BBOFPgEa1TEI9DL3WetYGJzpGeCMvaWWNgH62f8YDMQBOIaRRCUo2fAtv19Zp82BYRL5Snb3OwVSEY_jJK/s400/books.jpg" width="277" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Julio Mercero,<i>Totius Moralis Theologiae...</i> (1618)<br />
<br />
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">Covarrubias fue nombrado maestrescuela de la Catedral de Cuenca, dependencia del Cabildo de esa ciudad. Durante años estuvo asistiendo normalmente a los cabildos y ocupándose de sus cargos. Con este emblema, nuestro autor arremete contra esas asambleas y sus largas controversias e indecisiones parlamentarias. Así, para González Palencia, la hidra o bestia es la imagen del Cabildo catedralicio conquense, que tantas trabas puso siempre a las solicitudes del maestrescuela. Sería, pues, una especie de pequeña venganza por parte de nuestro autor, aunque en el comentario del emblema diga que su intención no va dirigida a cabildos eclesiásticos.</span></span><br />
<br />
<div style="text-align: center;">
<span style="font-size: large;">*************************************</span></div>
<br />
<span style="font-size: large;"><span style="font-size: small;">Lecturas:</span></span><br />
<br />
<span style="font-size: large;"><span style="font-size: small;"><b>Juan de Dios Hernández de Miñano</b>, <i>Emblemas Morales de Sebastián de Covarrubias</i>. Ediciones de la Universidad de Murcia, 2015</span></span><br />
<br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgjLnD-mz8JxFhT5ogxt3cRY_xtIjycmI9e9pn0oAf1ytkQz4hOL0jofLI_JKkr3SeiieM-cyphRelDSenlf7VezuvKnW0XnQNu9ALc3Ubvw2OS0ulE5NixyYnBl0WrmUP8-XKIW71qOUbr/s1600/hidra+2.gif" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="250" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgjLnD-mz8JxFhT5ogxt3cRY_xtIjycmI9e9pn0oAf1ytkQz4hOL0jofLI_JKkr3SeiieM-cyphRelDSenlf7VezuvKnW0XnQNu9ALc3Ubvw2OS0ulE5NixyYnBl0WrmUP8-XKIW71qOUbr/s400/hidra+2.gif" width="400" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Escena de <i>Jason y los argonautas</i> (1963) de Don Chaffey</div>
<br />
<br />
.</div>
</div>
Janhttp://www.blogger.com/profile/10112360698804083485noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-4945391151380854953.post-91764661141559684212016-03-16T02:57:00.000-07:002016-03-16T02:57:14.690-07:00Rosas para los cerdos<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj3vmhuip_fTjQf_lUohM87G5pags6LJeEFMBHg_wgv3-A6zksCZkPp5X5dRj68GmZhTCrJ-QIQyXMW6HKhfDpXxj8hT6NMN7ntY82xuwio4-oyFHEKC0SGPhDFeOD7ltIcr_3CCwg1k9cF/s1600/cerdos+2.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj3vmhuip_fTjQf_lUohM87G5pags6LJeEFMBHg_wgv3-A6zksCZkPp5X5dRj68GmZhTCrJ-QIQyXMW6HKhfDpXxj8hT6NMN7ntY82xuwio4-oyFHEKC0SGPhDFeOD7ltIcr_3CCwg1k9cF/s640/cerdos+2.jpg" width="424" /></a></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
Pieter Brueghel el Viejo, detalle de <i>Los proverbios flamencos</i> (1559)</div>
<br />
<br />
<br />
<span style="color: #ffe599;">"Perdone el ser humano, que le he de comparar al puerco, pues es animal que cuando está comiendo, está murmurando o gruñendo, y hasta que muere no hay sosiego ni quietud en la casa que habitan, y muriendo dan buenos días."</span><br />
<br />
<span style="color: #f1c232;"><b>Francisco Santos</b>, <i>Día y noche de Madrid</i> (1663)</span><br />
<br />
<br />
<span style="font-size: large;"><br /></span>
<span style="font-size: large;"><i>Emblemas Morales </i>(1610) de Sebastián de Cobarrubias, es considerada la obra más significativa de toda la literatura emblemática producida en España. En ella se reunen 300 emblemas dirigidos a inculcar valores morales a través de expresiones, dichos, frases o poemas ayudados por el poder didáctico de la imagen para ser asimilados a modo de proverbios. Juan de Dios Hernández Miñano de la Universidad de Estremadura, realiza un trabajo exaustivo sobre cada uno de los emblemas rastreando sus antecedentes iconográficos y literarios. El dedicado al emblema 48 de la primera centuria que aparece con el mote griego YS ΔIAPOΔΩN (un cerdo entre rosas), estaría relacionado con esos dichos que todavía hoy oímos como "no está hecha la miel para la boca del cerdo", o "es como echar rosas (o maragaritas) a los cerdos", advirtiéndonos sobre el sinsentido de ofrecer algo valioso a quien no está capacitado para apreciarlo ni es merecedor de recibirlo. Mensaje moral que en diferentes emblemas y obras artísticas de épocas pasadas sería un motivo dirigido a promover la virtud y las buenas costumbres, pero en este caso su autor le añade connotaciones críticas al funcionamiento de la Corte española que conoció durante una época de su vida.</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhuzyKKQXzgFwtIGGXJy6jgohH2FX4MpdrOzK-0k0_Ks4V0QkHZOf6c7xe0gm1xh4DEJ35TqAFbNvNYlTwi1-VTDzRo5D1kdniI0RG3HPjkVJjTIzcBp3g0zTPUaroZuNunz6sq9YlP5W5S/s1600/books_002.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhuzyKKQXzgFwtIGGXJy6jgohH2FX4MpdrOzK-0k0_Ks4V0QkHZOf6c7xe0gm1xh4DEJ35TqAFbNvNYlTwi1-VTDzRo5D1kdniI0RG3HPjkVJjTIzcBp3g0zTPUaroZuNunz6sq9YlP5W5S/s400/books_002.jpg" width="284" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Sebastian de Covarrubias, <i>Emblemas Morales</i></div>
<br />
<span style="font-size: large;">En su pictura se muestra un cerdo agazapado sobre un lecho de rosas, el epigrama en verso que la acompaña dice:</span><br />
<br />
<div style="text-align: center;">
Cual estaría un puerco encenagado</div>
<div style="text-align: center;">
en una cama de purpúreas rosas</div>
<div style="text-align: center;">
de damas y doncellas rodeado</div>
<div style="text-align: center;">
por su regalo y gusto, cuidadosas;</div>
<div style="text-align: center;">
tal es el necio, cuando entronizado</div>
<div style="text-align: center;">
en las supremas sillas poderosas</div>
<div style="text-align: center;">
le sirve el noble, el sabio, el virtuoso,</div>
<div style="text-align: center;">
porque para vivir les es forzoso.</div>
<br />
<span style="font-size: large;">El mensaje de Cobarrubias es que el cerdo tumbado entre las rosas, sería como el inepto o ignorante que por determinadas circunstancias alcanza puestos de poder, disfrutando de una vida regalada de lujo y teniendo bajo sus órdenes a personas más capaces y virtuosas que él. En ello vemos una crítica a la Corte española en tiempos de profunda crisis, especialmente favorable al surgimiento de personajes incapaces de asumir eficázmente cargos de alta responsabilidad.</span><br />
<br />
<span style="font-size: large;">Veamos a continuación el análisis iconográfico de Hernández de Miñano dedicado a este emblema.</span><br />
<br />
<br />
<span style="color: #3d85c6;"><br /><span style="font-size: large;">Juan de Dios Hernández Miñano (Universidad de Extremadura), análisis del emblema I, 48 de los <i>Emblemas Morales</i> de Sebastián de Covarrubias.</span></span><br />
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">Para Herodoto el cerdo es un animal impuro hasta el punto de que los egipcios no lo consideraban digno de ser dado en ofrenda a los dioses. Señalan Plinio y San Isidoro que son animales inmundos, y se les llama puercos en el sentido de que son sucios: se revuelcan en el fango, se sumergen en el lodo y se recubren de cieno. Así, dice Horacio: <i>Y la cerda,amiga del lodo</i>. Varrón, por su parte, afirma que son poco dóciles y muy torpes e ignorantes, dando con ello al adagio griego: <i>Con Minerva, la diosa de las ciencias, quiere tener el cerdo competencias</i>. También Claudio Eliano sostiene que el cerdo es un animal de mala condición sin moderación ni respeto. Del mismo modo, en el <i>Antiguo Testamento</i> se le tiene por despreciable e impuro.</span></span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjKApcmFNa1KHyvpMr6d7mi3FHHy4ikL9SO3yXxKUVANGu8Ah-Ymgya_PlZeFep97feOT9uZR6IQ6y-UrqYOTtf1aMB_n7_AXZG8n47DaB_AG47VBXF3-tyqAf0Ed3R0WiZIVtcvSt9U6Zb/s1600/cerdos+6.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="295" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjKApcmFNa1KHyvpMr6d7mi3FHHy4ikL9SO3yXxKUVANGu8Ah-Ymgya_PlZeFep97feOT9uZR6IQ6y-UrqYOTtf1aMB_n7_AXZG8n47DaB_AG47VBXF3-tyqAf0Ed3R0WiZIVtcvSt9U6Zb/s320/cerdos+6.jpg" width="320" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
<i>Historia Plantarum</i>, Lombardía, 1395-1400.</div>
<div style="text-align: center;">
Roma, Biblioteca Casanatense, Ms. 459, fol. 250r</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">El escritor romano Lucrecio, al confrontar al hombre con el cerdo, dice que, si bien al primero el buen perfume de las flores le resulta reconfortante, incluso parece que le devuelve la vida, para el cerdo resulta detestable, prefiriendo siempre revolcarse en la inmundicia. Plinio, según la traducción de Gerónimo de Huerta del siglo XVII, precisa el caracter del animal, completamente alejado de la vida virtuosa:</span></span><br />
<br />
<span style="color: #cfe2f3;"><i>Los egipcios, para significar a un hombre ajeno a las buenas costumbres, pintaban a un puerco encenagado y sucio, pisando flores y rosas, las cuales en las Escrituras Sagradas significan la sinceridad y pureza de las costumbres y vida, de quien el malo es contrario, como lo es el puerco del buen olor y la limpieza; y así por la misma razón llamó David a Bucodonosor puerco montés, o como otros declaran, a Salmanasar, por ser sucios en sus costumbres y vida; y a los hebreos les fue prohibido el comer carne de puercos, por ser animales inmundos (...). El más sucio de los animales, porque todo su gusto es andar entre estiercol y hediondo cieno (...)</i></span><br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">En los bestiarios medievales, asimismo, se mantiene esta negativa visión del cerdo. En el <i>Libro de las utilidades de los animales</i> de El Escorial, se dice que el cerdo busca el basurero ansiosamente. En este sentido, en algún aforismo medieval se lee: <i>Más goza el cerdo en el cieno que en el agua clara</i>. En el siglo XV se descubre los <i>Hieroglyphica</i> de Horapolo, de tanta importancia en la erudición moderna, y en ellos se recoge que los egipcios representaban al hombre depravado por medio de un cerdo. En el siglo XVI, Piero Valeriano simboliza con un cerdo su jeroglífico:<i> A bouis moribus aliennus</i>, queriendo indicar que hablar con razonamiento a un necio es como echar rosas a los cerdos. El erudito italiano acompaña el texto con un grabado donde aparece un cerdo sobre un suelo de rosas.</span></span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj4CFyzKsHVThb-GWvHlT7S6Egwe9Qak-jGKwYzA974-VFAJH20XEJ6Dhm84kvHK2p-EiEW7mZ5aFPACeDgAo5tfFfWviLV2h5QKBmT-kSx-hxxZD0nknNuB7kWwx41TUcGDCYANuYQHUka/s1600/books_002.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj4CFyzKsHVThb-GWvHlT7S6Egwe9Qak-jGKwYzA974-VFAJH20XEJ6Dhm84kvHK2p-EiEW7mZ5aFPACeDgAo5tfFfWviLV2h5QKBmT-kSx-hxxZD0nknNuB7kWwx41TUcGDCYANuYQHUka/s1600/books_002.jpg" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Piero Valeriano <i>Hieroglyphica</i></div>
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">Por su parte, Ripa ve en el cerdo la figura del hombre depravado, al personificar el "Desprecio de la virtud":</span></span><br />
<span style="color: #cfe2f3;"><i><br /></i></span>
<span style="color: #cfe2f3;"><i>Acostumbran los egipcios, cuando representana un hombre de malas costumbres, pintar un cerdo pisando algunas rosas.</i></span><br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">También Erasmo de Rotterdam en su Adagio: Nada tienen en común los cerdos y el perfume, critica a los hombres que viven en la vileza de costumbres de desenfreno.</span></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">En las Sagradas Escritura, cuando se habla de las rosas y otras sustancias aromáticas, se pretende simbolizar unas costumbres sanas y una vida sencilla. Así, dice la esposa en el <i>Cantar de los cantares</i> que el olor de su Esposo, es decir, el hombre vistuoso, era como el aroma de un campo todo lleno de flores. En este sentido, San Agustín señala que la virtud es la perfecta razón del hombre que se ejercita entendiendo a Dios y disfrutando del aroma de Cristo. Disfrute que está vedado para los necios e insensatos, como leemos en las Escrituras: <i>No corresponde al insensato las delicias, ni al siervo el mandar a los príncipes. </i>Como tampoco ver al<i> tonto colocado en la alta dignidad, y sentado en los puestos bajos, los más aptos</i>. Una de las valoraciones del cerdo es precisamente la de la sucia ignorancia, que descubrimos al interpretar a San Mateo: <i>No echéis vuestra perlas a los cerdos, no sea que la huellen con sus patas, y se vuelvan contra vosotros y os despedacen</i>. Palabras que son interpretadas por San Agustín como imágenes de las verdades espirituales inconsiderablemente reveladas a los necios que son indignos de recibirlas, ni capaces de aprehenderlas. San Ambrosio dice que no echar piedras preciosas o flores olorosas a los cerdos se debe interpretar como el hombre vicioso que con sus pecados mancha lo que es virtuoso y hermoso.</span></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">En el campo emblemático , Joachim Camerarius, con el mote <i>Non bene vonveniunt,</i> presenta a un cerdo pisoteando las rosas.</span></span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhLKxhozEufSfm40vd-H68kD9IJgCBNVKC5DPQxDTX4I6xElcx_iqaP66yyS46JW7qhIjjqfo7G14uSE3siVtv_ZgmGehrfMMc8lUGRm35Ld3Fpv-JLYCBEHSNSc_aOVTLnmqcNePu8nZ5h/s1600/cerdos+3.png" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhLKxhozEufSfm40vd-H68kD9IJgCBNVKC5DPQxDTX4I6xElcx_iqaP66yyS46JW7qhIjjqfo7G14uSE3siVtv_ZgmGehrfMMc8lUGRm35Ld3Fpv-JLYCBEHSNSc_aOVTLnmqcNePu8nZ5h/s320/cerdos+3.png" width="319" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Joachim Camerarius, <i>Non venen conveniunt</i></div>
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">El hombre necio y lujurioso no cuadra bien con una vida virtuosa y la dedicación al estudio. En otro emblema del alemán, se muestra a un cerdo oliendo el perfume de las flores de una planta, con el mote: <i>Non tibi spiro</i>, y el mensaje moral: el hombre sucio y vicioso encuentra irrespirable la doctrina que enseña el camino de la vida.</span></span><br />
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<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg8ENE4qKUF1Kmx3-CSy6_E9Nddp0hj7xo0QvvpPe8qmPpZGQR6MgHpR5KbCEFG8WATatDjXnxtNwP8XAMcu3hWPvTvBfJfBoW5w_qQp8F1ZnuTtsx66HCqSB-4izEOAm5CyfPOg5EGaYx4/s1600/cerdos+4.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg8ENE4qKUF1Kmx3-CSy6_E9Nddp0hj7xo0QvvpPe8qmPpZGQR6MgHpR5KbCEFG8WATatDjXnxtNwP8XAMcu3hWPvTvBfJfBoW5w_qQp8F1ZnuTtsx66HCqSB-4izEOAm5CyfPOg5EGaYx4/s320/cerdos+4.jpg" width="307" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Joachim Camerarius, <i>Non tibi spiro</i></div>
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<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">La fuente de Covarrubias podría estar en el primero de ellos. Sin embargo, el mote en griego, lo toma del emblema XXI de la II parte de la <i>Emblemata</i> de Nicolás Reusner, donde se muestra un cerdo en la <i>pictura</i>, para comunicarnos que el vicioso, como el ignorante, del perfume de la virtud y de la sabiduría huye.</span></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">Por lo que se refiere a la imagen de nuestro grabado y su relación iconográfica, el pintor Pieter Brueghel, en el siglo XVI, lleva a cabo una colección de doce tondos con el título de <i>Proverbios flamencos</i>; en uno de ellos se muestra a un hombre que está alimentando a varios cerdos con rosas.</span></span><br />
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<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiWXZbp8PYBiEUG9UVPICxSN998TKlTsTBHVWFZAQbTZsQZkjzilRXYMckXAZ_FkC93D5bxspz0Tij6zNcVnZWBMHkaDO1NA47YGNOpnRsfD7iFwBUcudKg-0gFITdhpGDnk2ale_EcpMlg/s1600/cerdos+5.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiWXZbp8PYBiEUG9UVPICxSN998TKlTsTBHVWFZAQbTZsQZkjzilRXYMckXAZ_FkC93D5bxspz0Tij6zNcVnZWBMHkaDO1NA47YGNOpnRsfD7iFwBUcudKg-0gFITdhpGDnk2ale_EcpMlg/s1600/cerdos+5.jpg" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
P. Brueghel el viejo, <i>Rosas para los cerdos</i> (1558)</div>
<div style="text-align: center;">
uno de los 12 paneles de <i>Proverbios flamencos </i>expuestos en Museum Mayer van den Bergh de Amberes.<br />
<i><br /></i>
<br />
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">El gabinete inglés de Lady Druny, una muestra de la afición por la emblemática europea a comienzos del siglo XVII, en uno de los paneles que cubren la estancia se muestra a un cerdo pisoteando rosas bajo el lema:<i> Odi profumum vulgus,</i> tomado de la Oda III de Horacio, y cuyo significado es el desprecio del hombre vulgar. La imagen deriva diréctamente del libro de Joachim Camerarius.</span></span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">Covarrubias dirige su emblema a toda esa gente que por muy diversos motivos logra escalar puestos sin merecerlos, especialmente en la Corte. Se trata de hombres necios o viciosos que la sociedad barroca tanto produjo como consecuencia de la profunda crisis de todo tipo en que se vivió. Francisco Santos, en el siglo XVII, al reflexionar sobre la naturaleza humana, pide al hombre que le perdone, porque, obligatoriamente </span><i><span style="font-size: large;">le he de comparar al puerco.</span></i></span>
</div>
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<i><br /></i></div>
</div>
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Lecturas:<br />
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<b>Juan de Dios Hernández Miñano</b>, <i>Emblemas Morales de Sebastián de Cobarrubias.</i> Universidad de Murcia 2015<br />
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<br />.Janhttp://www.blogger.com/profile/10112360698804083485noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-4945391151380854953.post-85202973425714190582016-03-06T23:48:00.000-08:002016-03-06T23:48:57.651-08:00El rostro reflejado<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj1MZ2kP99-Z976Vv8UdS1ODhsaa3xnxGvsn9mYxyYsTOqZj_FCe0drpDEBaItOnEkevnLwKiHXki47Ofbvx88AHCanpIJgaduCJ42AbfQd-ye03LYXdK-XMpQnKLe-TUzAOCHaYxs5DmhU/s1600/reflejo+1.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj1MZ2kP99-Z976Vv8UdS1ODhsaa3xnxGvsn9mYxyYsTOqZj_FCe0drpDEBaItOnEkevnLwKiHXki47Ofbvx88AHCanpIJgaduCJ42AbfQd-ye03LYXdK-XMpQnKLe-TUzAOCHaYxs5DmhU/s400/reflejo+1.jpg" width="287" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Krishna y Radha reflejados en un espejo, s. XIX.</div>
<div style="text-align: center;">
Tema recurrente en la miniatura krisnaita donde Radha advierte con sorpresa el rostro de su amado Krishna llegando de improviso junto al suyo. La escena debe interpretarse a la luz de la doctrina visnuita por la que el autoconocimiento de Rahda le lleva a descubrir en sí a la divinidad.<br />
<br />
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<div style="text-align: left;">
<span style="color: #ffe599;">Todos los fenómenos son el espejo en el que Dios se manifiesta:</span><br />
<span style="color: #ffe599;">O bien la luz de Dios es el espejo, y los fenómenos las imágenes (que se reflejan en él).</span><br />
<span style="color: #ffe599;">A los ojos del verdadero adepto de vista penetrante</span><br />
<span style="color: #ffe599;">Cada uno de estos espejos es el espejo del otro.</span><br />
<br />
<span style="color: #f1c232;"><b>Rûmî</b></span><br />
<br />
<br />
<span style="color: #ffe599;">"Llega al umbral... Entra y ve a su amada</span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #ffe599;">Levanta el velo de la Diosa Sais</span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #ffe599;">Y ve -milagro de milagros- a sí mismo."</span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #f1c232;"><br /></span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #f1c232;"><b>Novalis</b>, <i>Los discípulos en Sais </i></span></div>
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<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEglIdTAPKAfhMOOfYIER-TX89Fl_wBU901TEAkmilS4D941Po_RT31jDIZ2YBr9n4FGmQq3zahZadfNRi0Po4omQjEP6u4phwGPS3fpDFUrpXlKZF4I2iA12eFwfRUysfCHh-JmdSpraTtB/s1600/reflejo+7.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEglIdTAPKAfhMOOfYIER-TX89Fl_wBU901TEAkmilS4D941Po_RT31jDIZ2YBr9n4FGmQq3zahZadfNRi0Po4omQjEP6u4phwGPS3fpDFUrpXlKZF4I2iA12eFwfRUysfCHh-JmdSpraTtB/s400/reflejo+7.jpg" width="371" /></a></div>
Detalle del famoso grabado reallizado en 1652 por Rembrandt donde se representa la visión de Fausto. Adviértase que a la derecha de la esfera luminosa como representación teofánica, surge una mano señalando un espejo donde el mago verá el destello divino y su propio rostro reflejado.<br />
<br />
<br />
<i><b><br /></b></i>
<span style="color: #3d85c6;"><i><b><span style="font-size: large;">El rostro reflejado</span></b></i></span><br />
<span style="color: #3d85c6;"><span style="font-size: small;">por</span></span><br />
<span style="color: #3d85c6;"><span style="font-size: large;">Alessandro Grossato</span></span><br />
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<div style="text-align: left;">
<br /></div>
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<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">Aun hoy, cuando en Sri Lanka (Ceilán) consagran una imagen a Buda, o bien hacen presente en ella el principio espiritual que representa, el artista que la ha esculpido en la piedra debe finalmente proceder a "encender" las pulpilas en sus ojos. Dicha acción es considerada hasta tal punto de sagrada, que se prohibe al propio artista mirar directamente lo que hace. Para hacerlo debe pues, girándose, servirse de un espejo. Para comprender el sentido profundo de todo esto, basta con pensar en el mito griego de Narciso. Es poco conocido que éste se presta fundamentalmente a dos interpretaciones, una negativa y otra positiva, y ambas válidas y presentes desde el principio. La primera, con varios matices, que varían sobre todo en el paso de la hermenéutica grecorromana a la cristiana, es también la más conocida: Narciso es el prototipo del amor egoísta, solipsístico, estéril por definición, inexorablemente destinado a la locura y a la autodestrucción. </span></span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgquf3pzC0A4IbpU-xhqu1HHMg027f-WAUVajTcBSvj8NYHXkD-mc_noAQTw4iUyTMa_0pqg9FGI7lHBURdfUcSaNUxb7So0d_sTKz5LDtUHRe6YkjGEkeiQQHSzpv0PwcnmLfiqIv5mnHe/s1600/reflejo+4.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgquf3pzC0A4IbpU-xhqu1HHMg027f-WAUVajTcBSvj8NYHXkD-mc_noAQTw4iUyTMa_0pqg9FGI7lHBURdfUcSaNUxb7So0d_sTKz5LDtUHRe6YkjGEkeiQQHSzpv0PwcnmLfiqIv5mnHe/s400/reflejo+4.jpg" width="330" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Michelangelo Caravaggio, <i>Narciso</i> (1599)</div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">Por otra parte, el mito de Narciso no es más que una forma demediada del de Dioniso, su verdadero arquetipo, donde el dios del espejo y de la <i>máscara</i>, momentáneamente absorto en la admiración de su propia imagen reflejada, es sorprendido y descuartizado por los Titanes. Pero mientras el sacrificio divino es fecundo -de la sangre de Dioniso mezclada con las cenizas de los Titanes rápidamente hechas resplandecer por Zeus se origina en efecto el género humano-, el de Narciso es estéril, causado por un ínfimo apego a la existencia corpórea. </span></span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh-VmhOqi819StwxzW7KeLajIkEQchVyHfsBb4WOG0ErUAMwavG782EQQUiEkeD26_RJOHAvRG0e1KFo5DLIqB4Ijzmhaemh37RcgVWY0Z_5poGr1Lh6WtlU-_zXI0gejjLMaoqgtXKVZqX/s1600/reflejo+6.png" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh-VmhOqi819StwxzW7KeLajIkEQchVyHfsBb4WOG0ErUAMwavG782EQQUiEkeD26_RJOHAvRG0e1KFo5DLIqB4Ijzmhaemh37RcgVWY0Z_5poGr1Lh6WtlU-_zXI0gejjLMaoqgtXKVZqX/s400/reflejo+6.png" width="400" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Aurelio Monge,<i> Narciso </i>(fotografía)</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">Plotino sintetizará admirablemente todo esto, afirmando que "quien es prisionero de los cuerpos bellos y no se separa de ellos, se precipita, no ya con el cuerpo sino con el alma, en los abismos, oscuros y tristes para el espíritu, donde, ciego, permanecerá en el Hades y también allí, como aquí abajo, estará siempre en compañía de las sombras".</span></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">La clave de la otra y más elevada interpretación del mito, se encuentra en cambio en la propia naturaleza de Narciso, que no es un ser humano, sino el hijo del genio de un río y de una ninfa, y que por tanto es, también, de naturaleza psíquica, no corpórea. Lo cierto es que su cuerpo no fue hallado. Como en otros casos parecidos, él representa el alma individual y mortal, la <i>psiché</i> no permanente del ser humano. Cuando nació, el adivino Tiresias predijo que viviría hasta una edad avanzada sólo si no se conocía a sí mismo. "Conocerse a uno mismo", como se sabe, era precisamente la finalidad de los Misterios griegos, cuyo rito de inicación preveía entre otras cosas la visión de la propia muerte reflejada en un espejo o una palangana llena de agua. </span></span><br />
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<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiWm58YZe5Q1sPBVUq2C9mkNdVM0iznq7ivJzYvvSj88a2I4SmpK2JFU0TrTfV7BsVuVoIXfaMaAjOtZMzHfd3QsmSmVq6foSdgaY3zKrJ6uhlcyZKOqV47cTJ-YPzWvikdhP3_awZ5JoIZ/s1600/reflejo+5.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiWm58YZe5Q1sPBVUq2C9mkNdVM0iznq7ivJzYvvSj88a2I4SmpK2JFU0TrTfV7BsVuVoIXfaMaAjOtZMzHfd3QsmSmVq6foSdgaY3zKrJ6uhlcyZKOqV47cTJ-YPzWvikdhP3_awZ5JoIZ/s1600/reflejo+5.jpg" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
El joven que se inicia, asomado tras la vasija llena de agua que le ha traido su maestro Sileno, en lugar de su propio rostro, ve reflejada la máscara de Dioniso, que su ayudante sujeta encima de sus hombros. Detalle del fresco de la "Villa de los Misterios", s. I d. C, Pompeya.</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">Con este acto ritual debía descubrirse la propia identidad divina, anticipando simbólicamente la "muerte" de la propia alma, y quedando así nuevamente libre el<i> noùs</i>, el espíritu inmortal, comparado a Dionisio, cuya máscara con las órbitas vacías se hacía reflejar hábilmente por un celebrante en lugar del rostro del iniciante. Así pues, la misma situación y "visión" del artista singalés cuando "abre los ojos" de Buda. En el arquitrabe de muchos templos tanto hindúes como budistas de Nepal, dedicados a una u otra forma de la Diosa, hay un espejo cuadrangular, en lugar de la imagen reducida de la Diosa que debería encontrarse allí. El espejo está inclinado de modo que, quien entra, si mira hacia arriba poco antes de cruzar el umbral, verá su propia imagen reflejada, significando su potencial identidad con la Shakti suprema.</span></span></div>
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<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjPgjK43CCU6Cwi_J3JzKea95DrL2JX-vPYQ3SfOjwlBSgmPLh8ZrOWEAy_3xHdziP7lyApCrwfKEFpNCDgiqeGZ1aO0BrfyEvQkETXQdNiMG2kaKAZxuqoMYhqZO4tpCrJXL-ofG6kC8jW/s1600/reflejo+3.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjPgjK43CCU6Cwi_J3JzKea95DrL2JX-vPYQ3SfOjwlBSgmPLh8ZrOWEAy_3xHdziP7lyApCrwfKEFpNCDgiqeGZ1aO0BrfyEvQkETXQdNiMG2kaKAZxuqoMYhqZO4tpCrJXL-ofG6kC8jW/s1600/reflejo+3.jpg" /></a></div>
Selfie con el espejo del arquitrabe de un templo nepalí<br />
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Lecturas:</div>
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<div style="text-align: left;">
<b>Alessandro Grossato</b>,<i> El libro de los símbolos. Metamorfosis de los humano entre Oriente y Occidente</i>, Grijalbo 2000</div>
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Entradas relacionadas:<br />
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<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2010/07/buscando-isis.html">Buscando a Isis </a><br />
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<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjZMaXv6cMv4VmlyYIutbLVN4iK8mGV7g9ad-mAfWrzOhNUVRSt_r0HREhDWKFRLG9KiXtNcerTarFaIkGDBIbJgvAjpDlfF9xdZ6VQPmBugPsF0v0pGyBEFDS_A9s5VwzTo0PWDqRPz8OQ/s1600/reflejo+8.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjZMaXv6cMv4VmlyYIutbLVN4iK8mGV7g9ad-mAfWrzOhNUVRSt_r0HREhDWKFRLG9KiXtNcerTarFaIkGDBIbJgvAjpDlfF9xdZ6VQPmBugPsF0v0pGyBEFDS_A9s5VwzTo0PWDqRPz8OQ/s400/reflejo+8.jpg" width="291" /></a></div>
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<i>Splendor Solis</i></div>
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</div>
Janhttp://www.blogger.com/profile/10112360698804083485noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4945391151380854953.post-69399074661890776542016-02-25T01:32:00.000-08:002016-02-25T01:32:31.284-08:00Sayat Nova<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
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<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiYDauX9KrB12Y8gX2tZ97tXVI2HB5TOPbAAULkX6WsZuMlwLK5M390SJ6r7GZSuUO1C7yBfWWnn8KivTwHScGyTKPR2zJcr_W3CziLCsfHMtvUE73I1TIP6oayhE3YzMzzAnrq3K-jJo54/s1600/granadas+3.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiYDauX9KrB12Y8gX2tZ97tXVI2HB5TOPbAAULkX6WsZuMlwLK5M390SJ6r7GZSuUO1C7yBfWWnn8KivTwHScGyTKPR2zJcr_W3CziLCsfHMtvUE73I1TIP6oayhE3YzMzzAnrq3K-jJo54/s1600/granadas+3.jpg" /></a></div>
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La actriz Sofiko Chiaureli en el film <i>Sayat Nova </i>(1968)</div>
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<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<br /></div>
<span style="color: #ffd966;"><br /><span style="color: #ffe599;">"Su sede era el punto central de la tierra; su follaje era el lecho de la madre primigenia. Al corazón de su casa sagrada que extiende su sombra como bosque al que no ha penetrado nungún hombre; ahí (está el hogar de) la madre poderosa que cruza el cielo."</span></span><br />
<span style="color: #ffd966;"><br /></span>
<span style="color: #ffd966;"><b>De un poema escrito en una tablilla sumeria</b></span><br />
<br />
<br />
<span style="color: #ffe599;">"Hay películas que te entregan sus llaves en la mano. Otras no. Cuando
eso sucede, uno debe convertirse en su propio cerrajero”.</span><br />
<br />
<span style="color: #f1c232;"><b>Serge Daney</b>, Ciné Journal (1982)</span><br />
<br />
<br />
<span style="font-size: large;"><br /></span><span style="font-size: large;">Hace unos días vi </span><span style="font-size: large;">anunciado en el programa <i>La Cartellera</i> -un magazine de la televisión de Barcelona (BTV) sobre crítica de cine-, el estreno de la versión original restaurada del film de 1968 <i>Sayat Nova</i>. En cuanto vi los primeros planos quedé seducido por su belleza y supe que era una película que no me podía perder. Tras verla poco después en una sala donde la proyectaban pude comprobar que no estaba equivocado. Podríamos decir que sus imágenes, filmadas con cámara fija acompañadas con breves intertextos y música, participan de esa tradición por representar de forma enigmática composiciones con contenidos simbólicos que se han de saber descifrar. Muchas de sus escenas recuerdan a miniaturas de manuscritos medievales así como a "jeroglificos" alegóricos -tal como los presentaban los humanistas del Renacimiento en algunas de sus pinturas y grabados-, mostrándose ante el espectador en una sucesión de "cuadros vivientes". Cuidadosamente concebidos por la personal imaginación creativa de su director, son reelaborados los eternos temas del arte sacro y la poesía trovadoresca: las edades de la vida, Dios, el amor, el sexo, la muerte, el sacrificio... Un reto para el interesado en la iconografía que se proponga interpretar significados velados. Los escenarios son fantásticos, rodados la mayoría de ellos en monasterios de Armenia que cedieron también muchas de sus obras pictóricas y de orfebrería para una producción que, alejada de los convencionalismos narrativos, nos sumerge en una deslumbrante experiencia que calificaría de onírica. </span><br />
<span style="font-size: large;">Dejo a continuación la traducción al castellano de la crítica de la película emitida en catalán por BTV junto a una selección de imágenes.</span><br />
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<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEglMSu4psv2oIm84lmNW8aQyCh2w-fbG-Rxj0O0BI0d6q6BsyBHWKk6DDyNhr6_RxIk7UmbNbF_Oepo-Aj65JS3T5Xc4F6LfBjIjVq49QaYFwuX7edukwfwlwDrU6ZinzFq7bedbHiouPeM/s1600/granadas+8.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEglMSu4psv2oIm84lmNW8aQyCh2w-fbG-Rxj0O0BI0d6q6BsyBHWKk6DDyNhr6_RxIk7UmbNbF_Oepo-Aj65JS3T5Xc4F6LfBjIjVq49QaYFwuX7edukwfwlwDrU6ZinzFq7bedbHiouPeM/s400/granadas+8.jpg" width="366" /></a></div>
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<span style="color: #3d85c6;"><i><b><span style="font-size: large;">Sayat Nova</span></b></i></span></div>
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<span style="color: #3d85c6;">(crítica cinematográfica de BTV)</span></div>
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<span style="font-size: large;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">Después de un largo proceso de restauración, se estrena la versión fiel al montaje original y sin censura de <i>Sayat Nova </i>del director armenio Sergei Parajanov. A través de algunos instructivos cuadros vivientes se nos explica la vida del célebre poeta de Armenia llamado Sayat Nova. Primero lo vemos de niño, después como joven trovador en la corte del rey de Georgia, y finalmente como monje retirado en un monasterio.</span></span><br />
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<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg2TFw9bRuuUGi9ojFR8fqYaV6CJNyqPoJafzMr27H6pRYCv_xasmhknXQnftewMU_2Ia-MgJoNH5KtsuP2By7pM8Ko_aG-W-pTPG_-DPVu34rf33lZ1-geB_KG7L_CGaGuwHS05m3Rq6ej/s1600/granadas+12.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg2TFw9bRuuUGi9ojFR8fqYaV6CJNyqPoJafzMr27H6pRYCv_xasmhknXQnftewMU_2Ia-MgJoNH5KtsuP2By7pM8Ko_aG-W-pTPG_-DPVu34rf33lZ1-geB_KG7L_CGaGuwHS05m3Rq6ej/s1600/granadas+12.jpg" /></a></div>
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">A lo largo de la historia del cine, existen innumerables ejemplos de películas victimas de la censura. Ésta es una, y marca un punto decisivo en la carrera de Seguey Parajanov. En 1966 recibe el encargo oficial para realizar una biografía filmada del poeta armenio más importante del siglo XVIII Sayat Nova, el máximo representante del arte trovadoresco. El director de <i>Los corceles de fuego</i>, no concibe una obra biográfica al uso. Su estilo es profundamente simbólico, lírico y alejado de convencionalismos narrativos. </span></span><br />
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<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg1PyIN7KffnIhdfnipoYe0S6tX-TyOOOyxSq_-z7GRw7SrwKUmDPxkdbURpngi7kE5BEsWDqCWCjlAyt8gbBJR_lygITSlhqVyCnRfKs4pYAQIR8jlMsOEPWRt53NorBaN2xVo6Pb_0-Vu/s1600/granadas+13.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="306" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg1PyIN7KffnIhdfnipoYe0S6tX-TyOOOyxSq_-z7GRw7SrwKUmDPxkdbURpngi7kE5BEsWDqCWCjlAyt8gbBJR_lygITSlhqVyCnRfKs4pYAQIR8jlMsOEPWRt53NorBaN2xVo6Pb_0-Vu/s400/granadas+13.jpg" width="400" /></a></div>
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<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">Parajanov concibe una pieza atípica afrontando una de las aportaciones más originales e incomprendidas del séptimo arte. La obra es un homenaje vibrante al patrimonio cultural caucasiano, pero no es bien recibida por el autoritario régimen de la Unión Soviética. Es considerada demasiado oscura, formalista, alegórica y demasiado erótica y espiritual. </span></span><br />
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<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgJxDZ29lguqroyfJhwtoMgNUU_tlxGJIENxmrv1cxMuNnPNPXH15jhJrgLMWgwO3SuPV3EwUcmWURHeFtg7I0oKsK6_LfDoVR188wU4GhRI9lQlUyrAI8uQ2j8s5Dwyhg8sF0tKbMcsXYa/s1600/granadas+11.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="296" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgJxDZ29lguqroyfJhwtoMgNUU_tlxGJIENxmrv1cxMuNnPNPXH15jhJrgLMWgwO3SuPV3EwUcmWURHeFtg7I0oKsK6_LfDoVR188wU4GhRI9lQlUyrAI8uQ2j8s5Dwyhg8sF0tKbMcsXYa/s400/granadas+11.jpg" width="400" /></a></div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;"><i>Sayat Nova</i> se acaba estrenando pero en contra de su autor, tiene cambios demasiado drásticos. El título acaba siendo<i> El color de la granada</i>, y se modifica el texto de los intertítulos. A pesar de que Parajanov rechaza cualquier intervención sobre su película, se le pide a otro cienasta que escriba nuevos intertítulos más narrativos, que cambie diversas secuencia para reordenar la cronología y se reduzca su duración. </span></span><br />
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<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiep4tAW9OSAhc6X0Hkjzay9XH10b3i_pu875J2NWVgWdkj7b7KYD9L57cgvCYInx7EkODvzBapXsWunzGmfAv6HKuft-MU7mdxovgJ25K54fzbsrYslOdRmyn1GI3SC7gytB4YIA80sRee/s1600/granadas+14.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="300" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiep4tAW9OSAhc6X0Hkjzay9XH10b3i_pu875J2NWVgWdkj7b7KYD9L57cgvCYInx7EkODvzBapXsWunzGmfAv6HKuft-MU7mdxovgJ25K54fzbsrYslOdRmyn1GI3SC7gytB4YIA80sRee/s400/granadas+14.jpg" width="400" /></a></div>
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<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">La versión que se estrena no es la censurada que conocíamos hasta ahora, es el montaje original restaurado en 2014 gracias a la colaboración entre la Cineteca de Bolonia y la Film Foundation de Martin Escorsese. En un momento en que se imponía el Neorrealismo Socialista, Parajanov se aleja de esta tendencia artística y decide narrar la historia sobre los momentos clave de la vida interna del poeta. </span></span><br />
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<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjl-S0V__2EJajhx-wtM_Kd3SiotVibtsTImwD29ordPKznu387Cq09XoZ9lNQbc7tfXcKOKA5J8UwLTNChTiCjtzvAU2W4j5jx136bBRVe0cviKGEgyTQK2BbHPhEkx-gxcj6_Ilwb4Xpo/s1600/granadas+16.png" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="298" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjl-S0V__2EJajhx-wtM_Kd3SiotVibtsTImwD29ordPKznu387Cq09XoZ9lNQbc7tfXcKOKA5J8UwLTNChTiCjtzvAU2W4j5jx136bBRVe0cviKGEgyTQK2BbHPhEkx-gxcj6_Ilwb4Xpo/s400/granadas+16.png" width="400" /></a></div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">Desde el principio el autor ya nos advierte de que no se trata de una narración lineal y verídica de Sayat Nova, lo que busca es mostrar sus sentimientos mediante unas imágenes de gran belleza y plasticidad con una fuerte carga simbólica e iconografía cristiana abundante. Reflexiona sobre la lucha entre lo divino y lo mundano, entre la vida y la muerte, y lo hace sin diálogos, solamente una voz en off recita puntualmente algunos versos. </span></span><br />
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<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgUBUt84xOLLjyllRLRD7v4fGzRRR5jViVY0G25NdrCDlWweJetSnFzaDWSKA7dsEE5mzoDYyo0c9OeMNrzMtE1I2VUV6Wv9itZJIANBM4i0uEwSXWOq2A-LXulV6gSVSU7qJZXenL2dHRH/s1600/granadas+17.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="300" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgUBUt84xOLLjyllRLRD7v4fGzRRR5jViVY0G25NdrCDlWweJetSnFzaDWSKA7dsEE5mzoDYyo0c9OeMNrzMtE1I2VUV6Wv9itZJIANBM4i0uEwSXWOq2A-LXulV6gSVSU7qJZXenL2dHRH/s400/granadas+17.jpg" width="400" /></a></div>
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<br />
<span style="font-size: large;"><span style="color: #9fc5e8;">El resultado es tan críptico como fascinante. A pesar de la frontalidad y el esteticismo de las representaciones, el universo que resulta es absolutamente sugeridor y poético. Un juego visual e intelectual que se podría resumir como la historia de amor imposible entre un poeta y una princesa, su musa.</span> </span><br />
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<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhwsT2u6Z7WyGPcGYlNRwhNWGu6HvbnSfyNubRCPiq_TzuZM4v2pbGRsXDU1u0n5QoKkcKNwh8qkQn_lotNhKf_oiIdYGfX4Z33iSkKi-92LGy9dt-uzyvhX90YhJe_0ESu7hiw2nYYc9_-/s1600/granadas+9.png" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="298" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhwsT2u6Z7WyGPcGYlNRwhNWGu6HvbnSfyNubRCPiq_TzuZM4v2pbGRsXDU1u0n5QoKkcKNwh8qkQn_lotNhKf_oiIdYGfX4Z33iSkKi-92LGy9dt-uzyvhX90YhJe_0ESu7hiw2nYYc9_-/s400/granadas+9.png" width="400" /></a></div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">Parajanov tuvo muchas difcultades para seguir haciendo cine, de hecho fue encarcelado en diferentes ocasiones por sus opiniones políticas y su homosexualidad. Fue injustamente tratado y olvidado. El estreno de esta versión restaurada es una ocasión para descubrir y disfrutar de una obra enorme que ha influido en muchos directores actuales y que seguro lo seguirá haciendo.</span></span><br />
<br />
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<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiXs6HOG4AtUSUxm6RSnpSo0VmHU6HpFdz2DkGB3G2no63d-lgbT6xDmZkM3UiAHODmX_0KfLKX78YCHvHkE5uT3EvyaMbh5j0PO3zrvKH71gm_EGBHQNO23PSNzNM6ygcGJpDWN6QaR6Pu/s1600/granadas+7.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="211" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiXs6HOG4AtUSUxm6RSnpSo0VmHU6HpFdz2DkGB3G2no63d-lgbT6xDmZkM3UiAHODmX_0KfLKX78YCHvHkE5uT3EvyaMbh5j0PO3zrvKH71gm_EGBHQNO23PSNzNM6ygcGJpDWN6QaR6Pu/s400/granadas+7.jpg" width="400" /></a></div>
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<br />
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Entradas relacionadas:<br />
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<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2010/11/matrimonio-sagrado.html">Matrimonio Sagrado</a><br />
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<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2012/08/el-desierto-y-las-ruinas.html">El Desierto y las Ruinas</a><br />
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<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgP9zJjGEP0jEvF1LqDHusSrnhBGytM_BTPNIgNmx6Oy9Nhw8yOt2NP65MahJJ6TVD-FkafMm-OXPj3UmpQZ1glFuvJMN9ypl7xEAfCI95NsH-zeXpEKaEbOZr9aF9FykvugtWGEXXj0RXM/s1600/granadas+1.png" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="235" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgP9zJjGEP0jEvF1LqDHusSrnhBGytM_BTPNIgNmx6Oy9Nhw8yOt2NP65MahJJ6TVD-FkafMm-OXPj3UmpQZ1glFuvJMN9ypl7xEAfCI95NsH-zeXpEKaEbOZr9aF9FykvugtWGEXXj0RXM/s320/granadas+1.png" width="320" /></a></div>
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.Janhttp://www.blogger.com/profile/10112360698804083485noreply@blogger.com5tag:blogger.com,1999:blog-4945391151380854953.post-54005323236952857722016-02-17T00:42:00.000-08:002016-02-17T00:44:14.959-08:00Avaricia<br />
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<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgACNVni0Q74dB_wS701UgrvaGAlY4AVkohSCsM__4m2-Gg5f7bJ3kKlDKZbLCxs-IHWe4YAA-T6ogD1tou377g00UqKl4y8xqBf8lD0hEoFEkokJiSEXkYZ_922kH6YIgW6a7jpo3C6uwX/s1600/avaricia+5.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgACNVni0Q74dB_wS701UgrvaGAlY4AVkohSCsM__4m2-Gg5f7bJ3kKlDKZbLCxs-IHWe4YAA-T6ogD1tou377g00UqKl4y8xqBf8lD0hEoFEkokJiSEXkYZ_922kH6YIgW6a7jpo3C6uwX/s640/avaricia+5.jpg" width="396" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
AVARICIA</div>
<div style="text-align: center;">
<i>"Como lobos voraces sedientos de la sangre de los corderos"</i></div>
<div style="text-align: center;">
Abraham Bosse, de la serie <i>"Los siete pecados capitales" </i>(1640)<br />
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<div style="text-align: left;">
<span style="font-size: large;">La Avaricia, considerada uno de los siete pecados capitales por el cristianismo, aparece en este grabado representada por un personaje de gesto altivo, ataviado con ropas elegantes junto a sacos de monedas y portando bolsas con más de éstas en sus manos. Es un señor de alta alcurnia con espada al cinto, quizás un administrador que se apropia indebidamente de dinero público, y que al autor de la obra le pudo parecer el más indicado para ilustrar ese pecado. A su izquierda, un lobo con un ave entre sus fauces y un cordero muerto bajo la pata se muestra como su <i>alter ego</i>. El epígrafe que aparece debajo comienza así: <i>"Como lobos voraces sedientos de la sangre de los corderos"</i>. Esta imagen de la escuela inglesa del siglo XVII, de igual forma podría ser válida para retratar mordázmente a esos personajes que actualmente protagonizan los casos de corrupción política en España, siendo noticia un día si y otro también en los medios de comunicación. Uno ya ha perdido la cuenta de alcaldes, consejeros, expresidentes de comunidades autonómicas y otros altos cargos - a los que hay que sumar miembros de la Casa Real- que están siendo procesados o condenados por apropiación del dinero público. </span><br />
<span style="font-size: large;">Los autores españoles de libros de emblemática del siglo XVII también dieron cuenta de esa lacra social en algunos de sus emblemas ilustrados, advirtiendo sobre sus consecuencias y la forma de prevenirla, aumentando su denuncia -como sucede en la España actual- en época de vacas flacas, pues el problema podía llegar a agudizar la inestabilidad social. </span></div>
<div style="text-align: left;">
<br />
<span style="font-size: large;">Tenemos por ejemplo de Saavedra Fajardo el emblema nº 53 de su <i>Empresas Políticas</i>, cuya pictura aparece encabezada con el mote<b> </b>CUSTODIUNT NON CARPUNT (Vigilan, no roban). En ella se representan dos hermas -aquellos pilares tallados en piedra normalmente con el busto del dios Hermes empleados para delimitar caminos y fronteras en la Antigüedad-, flanqueando la entrada de un jardín con parterres, setos, árboles y fuentes. </span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhCs_B8-q7p3Vu-mXcb2y6A9qfJ_yUtu__IXeo8XAv8VyPVXZTIRvhefJaHLWqwLWPMT5FgY369K2Bvh9QOs90bT6Qfdu0YagNCAvX3fbJpz7NWoQaWb_hGXq2OC0IVwq1xU8e_u9WLl4ux/s1600/avaricia+2.gif" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="335" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhCs_B8-q7p3Vu-mXcb2y6A9qfJ_yUtu__IXeo8XAv8VyPVXZTIRvhefJaHLWqwLWPMT5FgY369K2Bvh9QOs90bT6Qfdu0YagNCAvX3fbJpz7NWoQaWb_hGXq2OC0IVwq1xU8e_u9WLl4ux/s400/avaricia+2.gif" width="400" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Saavedra Fajardo, <i>Empresas políticas</i> (1642)</div>
<br />
<span style="font-size: large;">Para este autor, las hermas o estauas sin brazos presentes en los jardines de Roma, simbolizan la integridad de los ministros y magistrados, sobre todo de éstos últimos, pues tienen ojos para guardar sus flores y frutos -que aquí representarían al erario público-, pero carecen de manos para apropiarse de ellos. Se refiere también a que en Tebas se simbolizaba la integridad de los ministros con estatuas sin manos, significando con ello la ausencia de avaricia. Estando esta obra dirigida a la instrucción de monarcas, en la glosa que acompaña a la imagen -según el resumen de la Enciclopedia Akal- advierte que "<i>así deben ser los consejeros del rey, sin hambre de poder y abstemios de ambición, porque el deseo excesivo de riquezas puede redundar en la ruina del erario público y en el bienestar del pueblo. No puede ser bien gobernado un estado cuyos ministros o reyes sean avariciosos y codiciosos, pues siempre antepondrán su propio interés al de los súbditos. El único remedio a este repugnante vicio es que el príncipe avaricioso procure no manejar grandes sumas de dinero y que los ministros no tengan trato con la mercancía, que sus cargos no sean vendibles ni transferibles. Por último, es conveniente que dichos oficios sean desempeñados por hombres que no sean pobres (ya que la necesidad incita al soborno) y que tampoco tengan a su cargo una familia muy numerosa. En cualquier caso, aquellos que están muy atentos a engrandecerse y a fabricar fortuna son peligrosos en los cargos de gran reponsabilidad</i>".</span></div>
<div style="text-align: left;">
<br />
<span style="font-size: large;">En <i>Principe Perfecto</i> de Andrés Mendo, su emblema nº 6 con el mote IN AVARO PRINCIPES (contra los príncipes codiciosos), aparece con un personaje tumbado sobre una gran cantidad de dinero vestido a la romana con corona de laurel sujetando en la mano diestra un cetro. </span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjSAOUp6WMVs_WtVnJYjclGaOfS-YANXeW2KxM6WWIL5_9bH6luuOCynMTH0fNjt1zFn4jUHgnBkdthTkQIS1BXq9f3ZweNCRUUMlVv_ve_LHbd2ir8qXJQQmwPaYml8zw093Xp85wCnAud/s1600/avaricia+4.gif" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="287" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjSAOUp6WMVs_WtVnJYjclGaOfS-YANXeW2KxM6WWIL5_9bH6luuOCynMTH0fNjt1zFn4jUHgnBkdthTkQIS1BXq9f3ZweNCRUUMlVv_ve_LHbd2ir8qXJQQmwPaYml8zw093Xp85wCnAud/s400/avaricia+4.gif" width="400" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Andrés Mendo,<i> Príncipe Perfecto</i> (1682)</div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<br />
<span style="font-size: large;">Representa a Calígula, el emperador romano de pésima reputación según nuestro autor por su afán hacia las riquezas, advirtiendo al príncipe a quien va dirigida su obra contra la avaricia, <i>" ya que nadie vive más pobre que aquel al que nada le satisface,
deseando siempre los bienes ajenos para engordar las arcas propias</i>". La glosa que sigue a continuación es también una disertación moral para prevenirle contra la avaricia: " <i>La Avaricia es la raíz de todos los males y en ella se resumen todos
los pecados, de ahí que se considere el peor vicio en cualquier persona y
más aún si trata del gobernante. Está la historia repleta de reyes que
han abusado de sus poderes llevados por el afán de acumular riquezas a
costa de la pobreza y el malestar de sus vasallos o, incluso, profanando
los tesoros de la Iglesia, por lo que han sido duramente castigados por
la justicia divina. Por todo ello se le recomienda al príncipe que
sólo tome los fondos eclesiásticos en causas debidamente justificadas".</i></span><br />
<br />
<span style="font-size: large;">El último emblema que selecciono pertenece en esta ocasión a una obra dirigida a quienes tenían a su cargo los ovispados. Se trata del nº 21 de<i> Idea del Buen Pastor </i>de Nuñez de Cepeda, con el mote FRUCTUS AUT EXCIDIUM (Fruto o ruina), donde aparece ante un amplio paisaje un árbol frutal sin frutos. A la derecha surgen dos manos que empuñan un hacha cuyo filo se dirige hacia el tronco. A la izquierda una cesta vacía es sujetada por otra mano.</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhjhKVlMT-iD3MEQtuZyN4eWSFYzeQdOQS2kemQYCvKSHLtniOn3WYd7jgkm07cFENpPZaTEJ6UflbAOzLub5bqYFzcNFCwFOObD-5-2yG3TUYyIbXtEirXTr5NwCte-fc5WNsiffrYYZxB/s1600/avaricia+3.gif" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="368" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhjhKVlMT-iD3MEQtuZyN4eWSFYzeQdOQS2kemQYCvKSHLtniOn3WYd7jgkm07cFENpPZaTEJ6UflbAOzLub5bqYFzcNFCwFOObD-5-2yG3TUYyIbXtEirXTr5NwCte-fc5WNsiffrYYZxB/s400/avaricia+3.gif" width="400" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Nuñez de Cepeda, <i>Idea del Buen Pastor</i> (1642)</div>
<br /></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="font-size: large;">Aquí se hace una seria advertencia al prelado para que atienda las necesidades materiales de los fieles con los bienes que le sobran y evitar así la condenación eterna. De la misma manera, tal como se muestra en la imagen, el árbol que no ofrece fruto será cortado por el hacha y quemado en la hoguera. La glosa que la acompaña recomienda al obispo recoger para sí de las rentas sólo lo necesario, e invirtiendo lo demás en el bien de su iglesia:<i> " los bienes patrimoniales y hereditarios los repartirá entre los pobres.
Deberá ayudarles no sólo cuando se hallen en extrema necesidad y no
únicamente a los que le piden; si fuese necesario moderará el gasto
invertido en él y en su familia; huirá siempre de los gastos superfluos. La
salvación del prelado depende de su misericordia, de su limosna: si
excusa los gastos en él para gastar en los demás aumentará su caudal y
se grajeará gran aprecio". </i></span><br />
<br /></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="font-size: large;">Pero creo acertar al suponer que si en aquellos tiempos el miedo a la posible condenación eterna no fue suficiente para desanimar a muchos a apropiarse de los bienes públicos, tampoco lo será en nuestros días el endurecimiento de nuevas leyes. Y es que en algunas cosas la condición humana se muestra inalterable. </span><br />
<br />
<br />
<span style="font-size: large;"><span style="font-size: small;">Lecturas:</span></span><br />
<br />
<span style="font-size: large;"><span style="font-size: small;"><b>Antonio Bernat / John T. Cull</b>, <i>Enciclopedia Akal de Emblemas Ilustrados Españoles</i>. Akal 1999. </span></span></div>
<div style="text-align: left;">
<br />
<br />
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<br />
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<br />
.</div>
</div>
Janhttp://www.blogger.com/profile/10112360698804083485noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-4945391151380854953.post-87631217069963520912016-02-08T08:49:00.000-08:002016-02-08T08:49:27.987-08:00Cardiopatías amorosas<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg4A6WPk-fZ7Y5nKJQxvt7_9AYxKKQRUZaRqtrrWM5Gglhwj7guQzuuGWj-Dgsre2sLRKdElPJQA20bdPvpFsIjEqVAEJW_L9WT1knRmaEz3LOe9CVZhnE4WGidXU1xFWVQqE_oZf_SgqSD/s1600/corazon+9.gif" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="236" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg4A6WPk-fZ7Y5nKJQxvt7_9AYxKKQRUZaRqtrrWM5Gglhwj7guQzuuGWj-Dgsre2sLRKdElPJQA20bdPvpFsIjEqVAEJW_L9WT1knRmaEz3LOe9CVZhnE4WGidXU1xFWVQqE_oZf_SgqSD/s320/corazon+9.gif" width="320" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
<i><b>TOT SUNT IN AMORE DOLORES</b></i></div>
<div style="text-align: center;">
(Tantos dolores hay en el amor) </div>
<div style="text-align: center;">
Embl. 63 libro III de Sebastián Covarrubias, <i>Emblemas morales</i> (1610).</div>
<div style="text-align: center;">
La imagen de este emblema donde aparece Cupido avivando con un fuelle el fuego de un horno que quema un corazón atravesado por flechas, nos advierte sobre el amor que, inflamando el corazón, nos provoca infinidad de sufrimientos.</div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<span style="color: #ffe599;"><br /></span>
<span style="color: #ffe599;">"Con las lágrimas que de a millones yo derramo,</span><br />
<span style="color: #ffe599;">conviene que el dolor por los ojos gotee</span><br />
<span style="color: #ffe599;">desde el corazón, que en sí tiene fuego y yesca;</span><br />
<span style="color: #ffe599;">no sólo cual ya fue, sino paréceme que creciera.</span><br />
<span style="color: #ffe599;">¿Qué fuego no tuviera apagado y muerto</span><br />
<span style="color: #ffe599;">las ondas que los tristes ojos derraman para siempre?</span><br />
<span style="color: #ffe599;">Amor, aunque tarde me haya dado cuenta,</span><br />
<span style="color: #ffe599;">quiere que entre los contrarios yo me consuma".</span><br />
<span style="color: #f1c232;"><br /></span>
<span style="color: #f1c232;"><b>Francesco Petrarca</b>, <i>Quel fuoco</i></span><br />
<br />
<span style="font-size: large;"><br /></span>
<span style="font-size: large;"><br /></span>
<span style="font-size: large;">De la gran cantidad de imágenes referidas y comentadas por Inmaculada Rodríguez Moya en su estudio sobre la iconografía del corazón procedentes de manuscritos, cerámicas, relieves en marfil y emblemas impresos, selecciono aquellas dirigidas a exponer las pasiones y sufrimientos provocadas por el amor erótico.</span><br />
<br />
<br />
<br />
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #6fa8dc;"><b><i><span style="font-size: large;"> El corazón, receptáculo de las pasiones</span></i></b></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #6fa8dc;">(fragmentos)</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #6fa8dc;">por </span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #6fa8dc;"><span style="font-size: large;">Inmaculada Rodríguez Moya</span></span></div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">(...) En su carácter de amor pasional, encontramos la representación del corazón desde la Edad Media, más concretamente desde finales del siglo
XIII
y primeros años del
XIV
. Uno de los soportes en los que es habitual encontrar la referencia a la entrega del corazón como rendición amorosa es el de los objetos suntuarios realizados con materiales ricos, como maderas exóticas y marfiles. Un ejemplo son las placas de marfil que se colocaban en el dorso de los espejos, de las que se conservan varias realizadas en el siglo
XIV
en París, donde hubo una importante escuela en el primer cuarto del siglo dedicada a la talla de marfiles de temática profana. Muestran escenas del ideal del amor cortés basado en el
<i>Roman de la Rose</i>. Podemos citar dos interesantes ejemplos.</span></span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgGqMGTbZ26dX1EtXPecPJSUn-e7wnSdWkwI2qqx5jGSLNdHpbIRC-iey1ciHObHXd0kB7zoLfI1FBMs2QYkJpqnoAANYrzjzyxlKuPSUgQGGWLZOSzQDX4yxJlDlxVKwYd269PeiUvBXlm/s1600/corazon+13.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgGqMGTbZ26dX1EtXPecPJSUn-e7wnSdWkwI2qqx5jGSLNdHpbIRC-iey1ciHObHXd0kB7zoLfI1FBMs2QYkJpqnoAANYrzjzyxlKuPSUgQGGWLZOSzQDX4yxJlDlxVKwYd269PeiUvBXlm/s400/corazon+13.jpg" width="387" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Dorso de espejo en marfil s. XIV (Victoria an Albert Museum)</div>
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">El primero (1300-25, Victoria & Albert Museum, Londres) representa a un joven arrodillado que entrega su corazón, como si de una reliquia se tratase, a su enamorada, mientras esta le corona. Junto a ellos, un
valet
vestido con una capucha sujeta a dos caballos por las riendas, que vendría a simbolizar el ideal del amor cortés de refrenar y no consumar la pasión. La composición de la escena –que recuerda a la Adoración de los Magos a la Virgen– contribuye a enfatizar su lectura casta. De finales del siglo
XIV
y de autor anónimo francés es otra pieza que guarda el British Museum de Londres.</span></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">En ella se representa, en un marco cuadrifoliado, a una pareja en un jardín; el caballero ofrece su corazón a una dama, mientras otro personaje encapuchado parece vigilar que su pasión no se desborde. Dos cupidos sostienen un escudo de armas con una rosa. Rosas y tréboles de tres hojas adornan el marco de la escena.</span></span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgPahATAGauYZoVGLNOF5jYlFjMQrtYkHQHNz6hangA7KkDfRuZMgX2Y6lLYpX2U5rLOZrf1AAG9utS_PLzjA94_o52bRrtqBbcy8-BNB4BklKRayLnIO7mFublUVdhW0D3p4P8APqo0DCY/s1600/corazon+12.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgPahATAGauYZoVGLNOF5jYlFjMQrtYkHQHNz6hangA7KkDfRuZMgX2Y6lLYpX2U5rLOZrf1AAG9utS_PLzjA94_o52bRrtqBbcy8-BNB4BklKRayLnIO7mFublUVdhW0D3p4P8APqo0DCY/s400/corazon+12.jpg" width="370" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Dorso de espejo en marfil s. XIV (British Museum)</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">Otro soporte fundamental donde se representó la devoción amorosa a través del corazón fueron las piezas de los ajuares matrimoniales. Ejemplos particularmente frecuentes los encontramos en las vajillas de cerámica italianas de la zona de Urbino, en los talleres de Castel Durante o en Deruta (Perugia), en los siglos
XV
y
XVI
. Por ejemplo, un plato realizado en Deruta (1470-90, Victoria & Albert Museum, Londres) muestra el retrato idealizado de una mujer que porta sobre una copa un corazón atravesado por sendas flechas, como signo de su virtuosa devoción amorosa, ideal del amor renacentista, reforzada por la leyenda:
<i>El mio core e ferito p voe
</i>[Mi corazón está herido por ti].</span></span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgn9OQawegZ3W1pZXqFbL3UG7XiBenfTLLIgOQzWdL5JdhfyGay895Q2tcdu3mxetdMNX8SRg9vjfnrAlVrEjQH3eSLCSTJpB1hKX9eqwmBkliOw-PGAvrLdhgUnpuz432eJWNKEH2oPCYl/s1600/corazon+10.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="362" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgn9OQawegZ3W1pZXqFbL3UG7XiBenfTLLIgOQzWdL5JdhfyGay895Q2tcdu3mxetdMNX8SRg9vjfnrAlVrEjQH3eSLCSTJpB1hKX9eqwmBkliOw-PGAvrLdhgUnpuz432eJWNKEH2oPCYl/s400/corazon+10.jpg" width="400" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
<i>El mio core e ferito p voe</i></div>
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span>
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">Lo flanquean como símbolos de la fecundidad dos exuberantes frutas, que simbolizan las esperanzas puestas en el matrimonio. Orlan la pieza plumas de pavo real, asociadas a Juno, diosa del amor conyugal. Otro ejemplo, de hacia 1450, es un plato cerámico que representa a un perro portando un corazón en su boca; la inscripción central alude al premio por la fidelidad:
<i>Permerto de mia fe</i>
[Por el mérito de mi fe].</span></span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgmdw2S8tDE3e0qd9pkMtCikR5UtkFzkE03WGVyPdaGBh40TOpENgsbvT367G5C5A_EQ41BazdNMhHvqnKjuj33v_C903ulITCevnb8GlwcYjNWH4PdrB8uQLPcBUUQWiqSjWLGxOh9MZFt/s1600/corazon+11.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgmdw2S8tDE3e0qd9pkMtCikR5UtkFzkE03WGVyPdaGBh40TOpENgsbvT367G5C5A_EQ41BazdNMhHvqnKjuj33v_C903ulITCevnb8GlwcYjNWH4PdrB8uQLPcBUUQWiqSjWLGxOh9MZFt/s400/corazon+11.jpg" width="393" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
<i>"Permerto de mia fe" </i>inscrito<i> </i>en la filacteria sobre el perro con un corazón en la boca, a su alrededor imágenes jeroglíficas que ocultan un mensaje picante<i>.</i></div>
<div style="text-align: center;">
</div>
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">Un jeroglífico se inscriben en la orla:
IN
, llamas, árbol de moras, pera,
TE
, una partitura con el solfa, un racimo de uva con pámpanos en forma de S:<i>
In
fi
amma mor per te: si fa l’affare? Su, va!
</i> [Estoy ardiendo por ti: <i>¿tenemos un
affaire
?</i> ¡Vamos!].</span></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">Numerosos ejemplos encontramos también en los libros iluminados. La imagen más temprana que hemos localizado data de hacia 1260-70, en un códice de
<i>Le Roman de la Poire</i>
realizado en París (Bibliothèque Nationale de France [en adelante BNF], Ms fr. 1584, f. 41v), en el que un poeta intermediario entrega de rodillas el corazón de su señor a la dama.</span></span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgjLqyNNOQjAGNiF6jk6MT9Rgstco05Ab35U_BBYlfkCKK3bWlxoBqD_hr_hZZtiIXf6UmpO8AeQfgv3_Fng76xCVEo5vdJ5AXFR7cFxXkxhLcNTXlKyNOvZKh-D4rA2pHfaXj0SIPtijBr/s1600/corazon+1.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgjLqyNNOQjAGNiF6jk6MT9Rgstco05Ab35U_BBYlfkCKK3bWlxoBqD_hr_hZZtiIXf6UmpO8AeQfgv3_Fng76xCVEo5vdJ5AXFR7cFxXkxhLcNTXlKyNOvZKh-D4rA2pHfaXj0SIPtijBr/s400/corazon+1.jpg" width="328" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
<i> Le Roman de la Poire</i> f. 41</div>
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span>
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">En el manuscrito del cortesano Pierra Sala
<i>Emblèmes et devises d’amour </i>
(Lyon, h. 1500, British Library, Londres, Ms Stowe 955, ff. 5v-6r), escrito en tinta dorada para su amada Marguerite Bullioud e ilustrado con preciosas iluminaciones, encontramos una escena en la que Pierre introduce su corazón en una enorme Margarita, rodeado de pensamientos, como alusión a las sueños y meditaciones amorosas.</span></span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhsBTfIrV5Bh2YeTUCQ69NgnoNNOnxZRMeQR39nfPFzkKa3pUYKtqSvu9LOcuO6tf8NOA-uwXR2iN2mB4safXOoS-_lmw-y_ZIJV1yvMcYfvYM59BBDkPyJ1Y9CQ200XLX8-2u6qZlrupdE/s1600/corazon+2.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhsBTfIrV5Bh2YeTUCQ69NgnoNNOnxZRMeQR39nfPFzkKa3pUYKtqSvu9LOcuO6tf8NOA-uwXR2iN2mB4safXOoS-_lmw-y_ZIJV1yvMcYfvYM59BBDkPyJ1Y9CQ200XLX8-2u6qZlrupdE/s400/corazon+2.jpg" width="298" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Pierra Sala, <i>Emblèmes et devises d’amour </i>(1500)<i><br /></i></div>
<div style="text-align: left;">
<br /></div>
<br />
<table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: left; margin-right: 1em; text-align: left;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEis8UvVU2cCArp5WqW07dyvYw4axgpE1ySmNYUxtjNBQYVXMiLJTe_wbGP46jgTeLJA1ckxJi8kWtqjQsDUk41D5j6jrbSG8Jd7OLrRgwfM-0RRzLI__FnACieV01R842R-o76JWCP6D9Ej/s1600/corazon+3.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="200" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEis8UvVU2cCArp5WqW07dyvYw4axgpE1ySmNYUxtjNBQYVXMiLJTe_wbGP46jgTeLJA1ckxJi8kWtqjQsDUk41D5j6jrbSG8Jd7OLrRgwfM-0RRzLI__FnACieV01R842R-o76JWCP6D9Ej/s200/corazon+3.jpg" width="156" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Embèmes et devises d'amour</td></tr>
</tbody></table>
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">El libro, de pequeño tamaño, fue diseñado como un amuleto amoroso, con una arandela para que pudiera ser llevado en la cintura por la bella Margarita, que estaba casada en el momento de su ejecución y que no pudo unirse a Pierre hasta 1506. A menudo el corazón, al igual que es asociado con una copa, también se vincula con el sentido de la vista y con un cofre. De este modo, según las doctrinas medievales del amor, el caballero contempla la belleza de la dama, que pasa directamente de los ojos al corazón. A continuación este amor queda encerrado en el cofre de su corazón, lo que se simboliza con una llave cerrando el pecho, como por ejemplo en una iluminación de
<i>Le Roman de la Rose</i>
(British Library, Londres, Add. Ms 42133, f. 15) que muestra al dios del Amor cerrando el </span><span style="font-size: large;">corazón de un caballero.</span></span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiAWCk8xnNyi5qRAWs8ByO-btAiTPfOgSpuRn7xo6j4xvgvNr-60k7p1Ki2j4goZ9CdZFTPlkTWUwVv3pA8hj6Tv4xPCV3zKtFvLbQow0JTZXpj_glKZHQg_IKj2OQmp06Bzw_sqOiqILWi/s1600/corazon+14.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="355" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiAWCk8xnNyi5qRAWs8ByO-btAiTPfOgSpuRn7xo6j4xvgvNr-60k7p1Ki2j4goZ9CdZFTPlkTWUwVv3pA8hj6Tv4xPCV3zKtFvLbQow0JTZXpj_glKZHQg_IKj2OQmp06Bzw_sqOiqILWi/s400/corazon+14.jpg" width="400" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Roman de la rose Add. Ms 42133, f.15</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">Pero sin duda, el culmen de la lucha del corazón por conseguir el amor es un libro que escribió René de Anjou (Renato I de Nápoles), el
<i>Livre du cuer d’amours espris</i>
(1457, BNF, París). En él se describe cómo el Caballero Corazón debe librar varias batallas para conseguir el favor de su dama. La brutalidad de este amor se ilustra en un grabado de Baccio Baldini titulado
<i>La crueldad del amor</i>
(h. 1465-80, BM, Londres), en el que se representa a una pareja en un escenario campestre. Él está atado a un árbol y con gesto sufriente, mientras ella –elegantemente vestida– parece disfrutar extrayendo su corazón del pecho.</span></span><br />
<br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjr5BagQNaMJtBDzSYg2M5lRoPdb5NZYTJwKA7_JiOJiVEyt8NzU3SdCA1A8HwLJhgcA-3GClAi_6KB6JeFkcgMXUX82xGfLTUEyusGoYGSlvUl8UBBMOu3oG2Hg621pfevpRjlztDp45Eg/s1600/corazon+4.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjr5BagQNaMJtBDzSYg2M5lRoPdb5NZYTJwKA7_JiOJiVEyt8NzU3SdCA1A8HwLJhgcA-3GClAi_6KB6JeFkcgMXUX82xGfLTUEyusGoYGSlvUl8UBBMOu3oG2Hg621pfevpRjlztDp45Eg/s400/corazon+4.jpg" width="378" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Baccio Baldini, <i>La crueldad del amor</i></div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">Otra prueba de maldad es rallar el corazón y machacarlo en un mortero, como se escenifica en un cajita hecha en Basilea hacia 1430 (Historisches Museum, Basilea). Líneas arriba afirmamos que el corazón como receptáculo del alma podía simbolizar también la conciencia, los afectos y los movimientos del alma. En este sentido encontramos diversas representaciones en las que el corazón simboliza las pasiones humanas. Por ejemplo, en la serie de grabados de Georg Pencz, discípulo de Alberto Durero, titulada
<i>Los siete pecados capitales</i>
(h. 1541, BM, Londres), el corazón representa la corrupción del alma en la personificación de la Envidia, que se come su propio corazón; y la corrupción de las costumbres sexuales en la personificación de la Lujuria, con un corazón rasgado por una flecha ardiente.</span></span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiH-AFoOlC5tQhpIbfUF08HjmLUNNwiDCUtFqOGXQJnxFAp8gBOkednPH9kPLahKwSIGhu0LhEfoFODQ-sHxZGVakr7tgYjRejSl4qeJMnk0ehHXXVsvEVdBD-q-fUjE6g9CtxVnb9RzmyH/s1600/corazon+5.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiH-AFoOlC5tQhpIbfUF08HjmLUNNwiDCUtFqOGXQJnxFAp8gBOkednPH9kPLahKwSIGhu0LhEfoFODQ-sHxZGVakr7tgYjRejSl4qeJMnk0ehHXXVsvEVdBD-q-fUjE6g9CtxVnb9RzmyH/s400/corazon+5.jpg" width="253" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Georg Pencz, <i>La Lujuria</i></div>
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">Otra atribución iconográfica del corazón en este sentido es la del sentimiento de amistad, que podemos observar en el grabado<i>
Amicitia</i>
de Étienne Delaune (1550-83, BM, Londres). Pero sin duda, el movimiento del alma que representa por excelencia el corazón es el del amor, y en este sentido acompaña a la diosa Venus en alguna de sus representaciones de carácter satírico. Podríamos considerar una prefiguración de esta Venus la preciosa xilografía del maestro Caspar de Ratisbona titulada
<i>El poder de Frau Minne sobre el corazón de los hombres</i>
(1479, Berlín, Kupferstichkabinett), en la que hasta 18 corazones son aserrados, quemados, prensados, pisoteados, alanceados, etcétera, por la diosa alemana del amor.</span></span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiWoPG6aCjnA-w4gpBckBcORX81N10cd5-7JSSQQiiSnt1cr1hBwR1OMF4Nr29UG3Dr6hTdjVgSt0xsBwt4Cz6vtscH81vj-t3ufp_WKQE1gBRTJL0Hb-RM9g6rwCi9o3Wfr8hfKDuf4cQa/s1600/corazon+6.png" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiWoPG6aCjnA-w4gpBckBcORX81N10cd5-7JSSQQiiSnt1cr1hBwR1OMF4Nr29UG3Dr6hTdjVgSt0xsBwt4Cz6vtscH81vj-t3ufp_WKQE1gBRTJL0Hb-RM9g6rwCi9o3Wfr8hfKDuf4cQa/s400/corazon+6.png" width="326" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Caspar de Ratisbona,<i> </i></div>
<div style="text-align: center;">
<i>El poder de Frau Minne sobre el corazón de los hombres</i></div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">A partir del Renacimiento y con la recuperación de los dioses de la mitología griega y romana, la diosa Venus tendrá el máximo protagonismo en este sentido. El corazón no es habitualmente un atributo de Venus, si bien, como diosa del Amor encontramos un gran número de imágenes en las que porta un corazón inflamado, especialmente en el contexto de la Venus planetaria o astrológica, puesto que es bajo la influencia de este planeta que se produce la pasión. Así la encontramos en el siglo
XV
en las versiones iluminadas de la
<i>Epístola de Othea</i>
de Cristina de Pizán, donde Venus en el cielo, portando corazones, atiende a sus devotos que le ofrecen los suyos. Una de las figuraciones grabadas más tempranas se debe a Albrecht Altdorfer según Peregrino da Cesena, que representa a
Venus y dos cupidos
(1512-15, BM, Londres).</span></span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj_6LI3Py6b1n5HSuL61uOEVHkrpKQgjpLHp_WEJlmnqSRQgXrvK4QXPn6w3nXHs-hMgHFpXlpRV82aMEFnihg6b9dPL51uXXtBNklIvGdCo0fLUWVBsJBk_Hc1TJpVSsYRJCKfnYPJzviS/s1600/corazon+7.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj_6LI3Py6b1n5HSuL61uOEVHkrpKQgjpLHp_WEJlmnqSRQgXrvK4QXPn6w3nXHs-hMgHFpXlpRV82aMEFnihg6b9dPL51uXXtBNklIvGdCo0fLUWVBsJBk_Hc1TJpVSsYRJCKfnYPJzviS/s1600/corazon+7.jpg" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Albrecht Altdorfer,<i> Venus con dos cupidos</i></div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">Venus tiene en la mano derecha un corazón ardiente, y en la izquierda una cornucopia, mientras uno de los cupidos lleva un espejo y el otro aplasta un objeto. </span></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">(...) Otras series de grabados en los que figuran Ceres, Cupido y Venus muestran a la diosa acompañada de su hijo, de cornucopias y de parejas de amantes, como por ejemplo, un grabado de Delaune de la serie de
Los planetas
(1576, BM, Londres) y otro de Jan Saenredam según Hendrick Goltzius, de la serie
Ceres, Venus y Cupido
(1596, BM, Londres).</span></span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiV43arRPWUVw0H7sW8XeVUn3hUTkTbSuyuJoSGjlvZbJkE6UHlQowqutgSCukrnUqJIWTWgP2VNIxx5elMAOllaDAufPAK1o4j7-c_zSqA5J1Wy7ixv51Tl_LLedc5Cyx9flbl83BYBRsT/s1600/corazon+8.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiV43arRPWUVw0H7sW8XeVUn3hUTkTbSuyuJoSGjlvZbJkE6UHlQowqutgSCukrnUqJIWTWgP2VNIxx5elMAOllaDAufPAK1o4j7-c_zSqA5J1Wy7ixv51Tl_LLedc5Cyx9flbl83BYBRsT/s640/corazon+8.jpg" width="449" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Venus con corazón ardiente y Cupido, Jam Saenredam 1596</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">(...) El corazón es también un motivo de gran éxito en la literatura emblemática y en los repertorios simbólicos, donde las enseñanzas morales sobre el espíritu y los afectos son fundamentales.</span></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">(...) En
(1544), Guillaume La Perrière también tiene varios emblemas en los que el corazón es motivo: el más interesante es el nº LXXIX, donde un Cupido ciego aviva el fuego de un horno en el que arde un corazón, en lo que es un aviso sobre los peligros de Venus.</span></span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgG7qDmyGH0idK_ICPBxh8dD6KKtMdBSNfX2W0MKHkj1YHxCH9qEOdc0wGhlfXPWCza3Pl7P0MCMspyuimCeRh-rWo6PQ6fYQlljJ5ng0voRk1_p706Wg7xMrLgeSxw44lqRduFifIl_kkc/s1600/corazon+16.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgG7qDmyGH0idK_ICPBxh8dD6KKtMdBSNfX2W0MKHkj1YHxCH9qEOdc0wGhlfXPWCza3Pl7P0MCMspyuimCeRh-rWo6PQ6fYQlljJ5ng0voRk1_p706Wg7xMrLgeSxw44lqRduFifIl_kkc/s400/corazon+16.jpg" width="392" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Guillaume La Perrière, <i>Le Théâtre des bons engins </i>(1544)<i><br /></i></div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">(...) Joannes Sambucus, por su parte, emplea en sus
<i>Emblemas</i>
(1567) el corazón para hacer referencia a la<i>
Vera amicitia</i>
[Verdadera amistad] y en
<i>Malum interdum simili arcendum</i>
[El fuego con fuego se combate] al peligro de Venus como diosa húmeda y cálida a la vez; en<i>
Amor dubius</i>
[Amor dudoso] advierte de nuevo de los peligros de Cupido y Venus, y en
<i>Simul & semel</i>
[Al mismo tiempo y para siempre] aconseja que no separemos los sentimientos del cuerpo, pues Dios conectó corazón e hígado al crear al hombre.</span></span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhaWh1OdYzIU9fUDGPzpp_4z-yq8ZGi0-UaVfgVt9EQLewPD2zRQqZz6SEfoSzvTdU1WyG79TDXIfiJ0NU2veUNXMg7-JQsp-Rp41zzeCTzxh4nScveL7RKahyBdT7NGqey0S66nh159mjb/s1600/corazon+17.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="355" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhaWh1OdYzIU9fUDGPzpp_4z-yq8ZGi0-UaVfgVt9EQLewPD2zRQqZz6SEfoSzvTdU1WyG79TDXIfiJ0NU2veUNXMg7-JQsp-Rp41zzeCTzxh4nScveL7RKahyBdT7NGqey0S66nh159mjb/s400/corazon+17.jpg" width="400" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
<i>Malum interdum simili arcendum, </i>Joanne Sambucus</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">Por último, el<i>
Emblematum Liber</i>
de Jean Jacques Boissard (Frankfurt am Main, 1593) incluye preciosos emblemas grabados por Theodor de Bry donde el corazón es motivo protagonista. Por ejemplo, en el titulado
<i>Libertas vera est affectibus non servire</i>
[La verdadera libertad es no servir a las pasiones] se nos conmina a conquistar y esclavizar las pasiones del corazón para alcanzar la verdadera libertad, no sufrir ninguna servidumbre y disfrutar de la verdadera nobleza.</span></span><br />
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhcKx3VdFp_mvHVwV5IWO5SoPKOkt4fzUAGjKHc96kQJjsPLqKndQP1qjOXxBH2DqFOVRtw494l8S4gdBrsGpP97589UNjtaDo4aemD4le-wPK4hetMFkdRraP3LmfPWZi_wFRWM0etanSi/s1600/corazon+18.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="263" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhcKx3VdFp_mvHVwV5IWO5SoPKOkt4fzUAGjKHc96kQJjsPLqKndQP1qjOXxBH2DqFOVRtw494l8S4gdBrsGpP97589UNjtaDo4aemD4le-wPK4hetMFkdRraP3LmfPWZi_wFRWM0etanSi/s400/corazon+18.jpg" width="400" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
"La verdadera libertad es no servir a las pasiones".</div>
<div style="text-align: center;">
<br />
<br />
<br />
<div style="text-align: left;">
<br />
Lecturas:</div>
<div style="text-align: left;">
<br /></div>
<div style="text-align: left;">
<b>Víctor Mínguez e Inmaculada Rodríguez Moya</b> (directores), <i>Visiones de pasión y perversidad</i>. Fernando Villaverde edicones 2014</div>
<div style="text-align: left;">
<br /></div>
<div style="text-align: left;">
<b>Santiago Sebastián</b>,<i> La mejor emblemática amorosa del Barroco</i>. Sociedad de Cultura Valle Inclán 2001</div>
<div style="text-align: left;">
<br /></div>
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Entradas relacionadas:</div>
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<br /></div>
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<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2015/02/ancora-delfin-devenir-de-una-imagen.html">Áncora y delfín: devenir de una imagen simbólica </a></div>
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<br /></div>
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<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2015/04/la-envidia.html">La Envidia</a></div>
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<br /></div>
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<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2015/04/la-envidia.html">Mortis certitude</a></div>
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<br /></div>
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<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2015/04/la-envidia.html">La Esfinge renacentista</a></div>
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<br /></div>
<div style="text-align: left;">
<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2015/11/harpias.html">Harpías</a></div>
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<br /></div>
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.</div>
</div>
Janhttp://www.blogger.com/profile/10112360698804083485noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-4945391151380854953.post-2324133173494214022016-01-27T21:33:00.001-08:002016-01-27T21:33:23.442-08:00La realidad inventada<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiebFqhVGRVWy3E1AtEZYrCZg_aIsadpmOttGAr4GIDAZ2o9dUp5Lzou0s03CYy7CySWhHTN5FDh60dHTSVd2mLNA3rLKmUoF8_RDbD8hg7VnFL7olaTv9a1r_YkZz6p3McYgvOZzByAY7c/s1600/alice+4.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="306" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiebFqhVGRVWy3E1AtEZYrCZg_aIsadpmOttGAr4GIDAZ2o9dUp5Lzou0s03CYy7CySWhHTN5FDh60dHTSVd2mLNA3rLKmUoF8_RDbD8hg7VnFL7olaTv9a1r_YkZz6p3McYgvOZzByAY7c/s320/alice+4.jpg" width="320" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
El Gato de Cheshire en <i>Alicia en el País de las Maravillas </i>(Walt Disney)<i><br /></i></div>
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</div>
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</div>
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</div>
<div style="text-align: center;">
<br />
<br />
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #ffe599;">-“¿podrías decirme, por favor, qué camino debo seguir para salir de aquí?” El gato respondió: -“Esto depende en gran parte del sitio al que quieras llegar”, -“¡No me importa mucho el sitio...!” dijo Alicia. -“Entonces, tampoco importa mucho el camino que tomes”, dijo el Gato. -“…siempre que llegue a alguna parte”, añadió Alicia. - “Oh, siempre llegarás a alguna parte”, aseguró el Gato.</span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #f1c232;"><br /></span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #f1c232;"><b>Lewis Carroll</b>, <i>Alicia en el país de las maravillas</i></span><br />
<span style="color: #ffe599;"><br /></span>
<span style="color: #ffe599;"><br /></span>
<span style="color: #ffe599;">Nunca cesaremos de buscar y, sin embargo, la meta de todas nuestras búsquedas será retornar al punto de partida y conocer ese lugar por primera vez.</span><br />
<span style="color: #ffe599;"><br /></span>
<span style="color: #f1c232;"><b>T. S. Elliot</b>, <i>Little Gidding </i></span></div>
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<br />
<br /></div>
<div style="text-align: left;">
<br />
<span style="font-size: large;">En <i><b>La realidad inventada</b> </i>(Gedisa 2010), se reúnen una serie de ensayos escritos por investigadores de diferentes disciplinas como la literatura, la filosofía, la física, la bilogía, la psicología, en torno a la corriente de pensamiento conocida como constructivismo surgida a mediados del siglo XX. El pensamiento constructivista teoriza sobre la idea de que la realidad del observador es una construcción hasta cierto punto "inventada". Nunca podremos llegar a conocer la realidad de forma puramente objetiva, ya que siempre que observamos algo, los datos obtenidos de ello los ordenamos en nuestro propio marco teórico mental. De esta manera, el objeto o la realidad que está "fuera de nosotros" no puede ser captada de forma puramente imparcial, sino que de alguna forma es construida a partir de nuestras particulares percepciones, tanto sensoriales como conceptuales, ofreciendo solamente una aproximación a la verdad, que queda fuera de nuestro alcance. </span><br />
<span style="font-size: large;">En el epílogo de esta obra, escrita por el recopilador y autor de alguno de los ensayos <b>Paul Watzlawick</b>, se hace referencia a las paradojas compartidas por la ciencia y la mística, surgidas dentro del marco teórico que anula la separación entre sujeto y objeto. </span><br />
<br />
<span style="font-size: large;"><br /></span>
<br />
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;"><span style="font-size: large;"><i><b>La realidad inventada </b></i>(Epílogo)</span></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;"><span style="font-size: small;">(fragmentos)</span></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;"><span style="font-size: small;">por</span></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;"><span style="font-size: large;">Paul Watzlawick</span></span></div>
<br />
<br /></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="color: #6fa8dc;">(...) Para muchos el constructivismo no es más que otro nombre del nihilismo. Quien está convencido de que no se puede vivir sin un sentido definitivo en la vida no podrá ver en el constructivismo más que el precursor de la disgregación y el caos. Para esta persona la idea de que toda realidad es en última instancia una realidad inventada le deja aparentemente sólo una conclusión: el suicidio. "Tengo el deber de documentar mi incredulidad", dice el suicida Kirillov en <i>Demonios</i> de Dostoyevski. "Para mí no hay idea más elevada que la que Dios no existe. En favor mío habla toda la historia de la humanidad. Hasta ahora el hombre no ha hecho otra cosa que inventar a Dios para poder seguir viviendo sin darse muerte; era la historia universal hasta ahora."</span><br />
<span style="color: #6fa8dc;">El suicida busca el sentido de la vida, en determinado momento se convence que ese sentido no existe y se mata, no porque el mundo <i>como tal </i> se le revele indigno de vivirse, sino porque el mundo no satisface su <i>exigencia </i>de tener un sentido definitivo e inteligible. Con esa exigencia el suicida ha construido una realidad que no encaja y por eso naufraga la nave de su vida. Nada está más lejos del inventor de esta mortal realidad que la sabia discreción del rey de<i> Alicia en el país de las maravillas</i>, quien lee el poema del conejo blanco, no encuentra sentido en él y aliviado declara con un encogimiento de hombros: "Si esto no tiene sentido , el hecho nos ahorra una cantidad de trabajo pues entonces no necesitamos buscarlo". Esencialmente no dice otra cosa Wittenstein cuando en su <i>Tractatus logico-philosophicus</i> (párrafo 6521) escribe: "La solución del problema de la vida se entrevé al desaparecer dicho problema".</span><br />
<span style="color: #6fa8dc;">La contrapartida del suicida es el hombre que busca; la diferencia entre ambos es sin embargo insignificante. El suicida llega a la conclusión de que no existe lo que busca; en cambio, el buscador llega a la conclusión de que todavía no ha buscado en el lugar correcto. El suicida introduce el concepto de cero en la "ecuación" existencial; el otro introduce en ella el concepto del infinito; cualesquiera de esas búsquedas es autoinmunizante, en el sentido de Karl Popper, y por lo tanto no tiene fin. Son infinitos los posibles lugares "correctos" en que puede encontrarse lo buscado.</span><br />
<span style="color: #6fa8dc;">El cargo de nihilismo se reduce a sí mismo al absurdo al demostrar lo que quiere refutar, esto es, que el postulado de un sentido presupone el presunto descubrimiento de un mundo carente de sentido.</span><br />
<span style="color: #6fa8dc;">Sin embargo hasta ahora nada hemos dicho sobre la realidad que construye el propio constructivismo. En otras palabras, ¿qué experimentaría un hombre que estuviera resuelto a ver consecuentemente su mundo como su propia construcción? Ese hombre sería ante todo <i>tolerante</i>, como lo señaló Varela en su contribución a este libro. El que llega a comprender que su mundo es su propia invención debe acordar lo mismo a los mundos de sus semejantes. El que sabe que no puede saber la verdad sino que su visión de las cosas sólo puede <i>encajar</i> más o menos encontrará difícil atribuir a sus semejantes malignidad o locura y le resultará difícil asimismo persistir en el pensamiento primitivo y maniqueo de "Quien no está conmigo está contra mí". La idea de que nada sabemos mientras no sepamos que no conocemos nada de manera definitiva supone el respeto por las realidades inventadas de otros hombres. Sólo cuando esas otras realidades se hacen ellas mismas intolerantes, nuestro hombre -siempre según el sentido de Karl Popper- podría arrogarse el derecho de no tolerar la intolerancia.</span><br />
<span style="color: #6fa8dc;">Además el hombre se sentiría <i>responsable</i> en un sentido profundamente ético, resposable no sólo de los sueños y yerros sino también de un mundo consciente y de esas profecías suyas, creadores de realidades, que se realizan por obra de sí mismas. Para él ya no está abierto el cómodo camino de proyectar la propia culpa a las circunstancias y a otros seres humanos.</span><br />
<span style="color: #6fa8dc;">Esta responsabilidad plena significaría también su plena <i>libertad</i>. Quien tuviera plena conciencia de que es el inventor de su propia realidad conocería la posibilidad siempre presente de forjarla de otra manera. Sería pues, herético en el sentido original del término, es decir, alguien que sabe que puede elegir. Se encontraría en la situación en que se encuentra <i>El lobo estepario</i> al final de esta novela, se encontraría en el teatro mágico que le explica su psicopompo Pablo:</span><br />
<blockquote class="tr_bq">
<span style="color: #6fa8dc;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">Mi teatrito tiene tantas puertas de palcos como queráis, diez o cien mil puertas y detrás de cada una de ellas os esperan precisamente lo que buscáis. Es un lindo gavinete de imágenes, querido amigo, pero de nada le valdría recorrerlo tal como es usted. Se verá obstaculizado o enceguecido por lo que usted está acostumbrado a llamar su personalidad. Sin duda hace ya rato que ha adivinado usted que la superación del tiempo, la redención de la realidad o cualquiera que sea el nombre que usted dé a su anhelo, éste no significa otra cosa que el deseo de verse libre de su llamada personalidad. Ella es la prisión en la cual se encuentra usted y si entrara en el teatro tal como está, vería con los ojos de Harry, lo verá a través de los antiguos anteojos del lobo estepario.</span></blockquote>
<span style="color: #6fa8dc;"><br /></span>
<span style="color: #6fa8dc;">Pero en ese acto de quitarse los anteojos naufraga el lobo estepario que por eso es condenado al castigo de la vida eterna. Este vuelco de la significación de la vida y de la muerte es mucho más que un juego de palabras logrado. Los relatos de hombres que escaparon a la muerte por un pelo muestran siempre una especie de irrupción del individuo en una realidad que es mucho más real que todo cuanto vivió entonces y en la cual nunca es uno "más yo" que en ese momento. Cuando se derrumban todas las construcciones, cuando se ha quitado todos los anteojos, "retornamos al punto de partida y por primera vez comprendemos ese lugar".</span><br />
<span style="color: #6fa8dc;">El epiléptico Dostoyevski hace decir a su príncipe Mischkin en <i>El idiota</i> acerca del aura epiléctica (que se da un segundo antes del ataque): "En ese momento me parece comprender de alguna manera la significación de que <i>en adelante no habrá más tiempo</i>". Koestler, condenado a muerte, vive ese estado junto a la ventana de su celda de prisionero en Sevilla:</span><br />
<br />
<blockquote class="tr_bq">
<span style="color: #9fc5e8;">Entonces tuve la sensación de que me deslizaba de espaldas por un río de paz y pasaba bajo puentes de silencio. No venía de ninguna parte ni era arrastrado a ninguna parte. Luego desapareció el río y también yo. El yo había dejado de existir en mí. (...) Cuando digo que "el yo había dejado de existir en mí" me refiero a una vivencia bien concreta que es tan difícil de expresar en palabras como las sensaciones que despierta en nosotros un concierto de piano, pero que es tan real -no, mucho más real que la realidad. En efecto, su característica más importante es la de que semejante estado es mucho más real que cualquier otra cosa vivida antes.</span></blockquote>
<span style="color: #6fa8dc;"><br /></span>
<span style="color: #6fa8dc;">Innumerables soldados deben haber vivido algo semejante en el frente. Robert Musil, cuyo personaje, el estudiante Törless -como ya dijimos- pide en vano a su profesor de matemática que le explique el significado de la cantidad imaginaria <i>i</i>, parece haber vivido una experiencia semejante que describió en su relato <i>Der Fliegerofeit</i> aparentemente sin haberse dado cuenta que aquí estaba la respuestaa la pregunta de Törles:</span><br />
<span style="color: #6fa8dc;"><br /></span>
<br />
<blockquote class="tr_bq">
<span style="color: #9fc5e8;">(El silbido de la flecha al caer) era un sonido tenue, sutil, cantarino, como cuando se hace sonar el borde de una copa de cristal; pero aquello tenía algo de irreal; nunca has oído semejante cosa, me dije. Y ese sonido estaba enderezado a mí; yo estaba en relación con ese sonido y no tenía ni la menor duda de que algo decisivo estaba apunto de ocurrirme. Ninguno de mis pensamientos era de la clase de aquellos que uno tiene en los momentos en los que se despide de la vida, sino que todo cuanto experimentaba se proyectaba al futuro; y tengo que decir sencillamente que tenía la seguridad de que en el próximo minuto sentiría la proximidad de Dios en mi cuerpo. El corazón me latía amplia y serenamente, y ni por un fragmento de segundo estuve espantado; no me faltaba la partícula de tiempo más íntima en mi vida. En ese momento me invadió un sentimiento de cálida gratitud y creo que se me puso encarnado todo el cuerpo. Si alguien hubiera dicho entonces que Dios había llegado a mi cuerpo, no me habría reído. Pero tampoco lo habría creído.</span></blockquote>
<span style="color: #6fa8dc;"><br /></span>
<span style="color: #6fa8dc;">Sin embargo todas estas citas antológicas y posibles paralelos, todas esta descripciones vagas y subjetivas del instante último suenan como algo exaltado y "místico" en el mal sentido de esta palabra. Y sin embargo no se les puede negar, por índole, el caracter místico, puesto que en estos ejemplos evidentemente se anula la división de sujeto y objeto, aunque sólo sea por unos segundos. El problema está sólo en descubrir esos momentos. Los llamados místicos o bien guardan silencio -como recomienda Wittgenstein- o bien se ven obligados a recurrir al lenguaje de las grandes imágenes religiosas, mitológicas, filosóficas de su época. Pero así quedan a la vez prisioneros de la realidad construida mediante tales imágenes. Con la incomparable sencillez de su estilo Lao-Tsé expresa este dilema en las primeras palabras de su <i>Tao Te King</i>: "El sentido que podemos forjar no es el sentido eterno." Quien es capaz de escribir semejante afirmación conoce la relatividad y el origen subjetivo de todo sentido y de todo nombre. Sabe que todo acto de atribuir sentido y significación y todo acto de nombrar crean una realidad bien determinada. Pero para llegar a este grado de saber tiene que, por así decirlo, haberse comprendido en flagrante acto de invención de una realidad. En otras palabras, tiene que descubrir cómo creó primero un mundo "a su imagen", sin tener conciencia del acto de su creación, y vivir luego dicha realidad como el mundo "exterior e independiente de él" -precisamente el mundo de los objetos-, de cuyo modo de ser él mismo se construyó autorreferencia. Esta búsqueda es inevitable y su sin sentido se torna significativo. Debe recorrer el camino errado para que éste se revele como camino errado. Wittgenstein debe de haber pensado en algo parecido cuando escribió:</span><br />
<span style="color: #6fa8dc;"><br /></span>
<br />
<blockquote class="tr_bq">
<span style="color: #9fc5e8;">Mis enunciaciones son de tal condición que aquel que me comprende termina por considerarlas desatinadas cuando las recorre, cuando pasa por ellas y se eleva por encima de ellas. (Por así decirlo, debe tirar las escalera depués de haber subido por ella.) (9, Párrafo 6.54)</span></blockquote>
<span style="color: #6fa8dc;"><br /></span>
<span style="color: #6fa8dc;">Comprendemos ahora que la pregunta alrededor de la cual gira este epílogo ("¿Qué realidad construye el propio constructivismo?") está en el fondo mal formulada y además que también era necesario tropezar con tal error para que este se revelara como tal. El constructivismo no crea ni "explica" ninguna realidad "exterior" sino que revela que no existe un interior ni un exterior, un mundo de objetos que se encuntre frente a un sujeto. El constructivismo, más bien, muestra que no existe separación de sujeto y objeto (sobre cuyo supuesto se construyen infinidad de "realidades"), que la división del mundo en opuestos está forjada por el sujeto viviente y que las paradojas abren el camino que conduce a la <i>autonomía</i>.</span><br />
<span style="color: #6fa8dc;">Como esta ideas ya han sido expresadas por prominentes figuras en un lenguaje riguroso, citaremos aquí a manera de perspectiva panorámica algunas de esas manifestaciones. En su libro <i>Mind and Matter</i> escribió Schrödinger ya en el año 1958:</span><br />
<span style="color: #6fa8dc;"><br /></span>
<br />
<blockquote class="tr_bq">
<span style="color: #9fc5e8;">La razón por la cual nuestro yo, que siente, percibe y piensa, no puede encontrarse en ninguna parte de nuestra imagen científica del mundo puede expresarse en nueve palabras: porque el yo mismo es esa imagen del mundo. El yo es idéntico al todo y, por lo tanto, no puede estar contenido en él como parte.</span></blockquote>
<span style="color: #6fa8dc;"><br /></span>
<span style="color: #6fa8dc;">Estas palabras suenan como algo casi místico, pero piénsese que proceden de la pluma de un prominente físico que por sus investigaciones alcanzó el premio Nobel. (...)</span><br />
<br />
<br />
<br />
Lecturas:<br />
<br />
<b>Paul Watzlawick y otros</b>, <i>La realidad inventada</i>. Gedisa 2010.<br />
<br />
<br />
<br />.</div>
<div id="stcpDiv" style="left: -1988px; position: absolute; top: -1999px;">
Mi realidad es simplemente diferente a la tuya”.</div>
<div id="stcpDiv" style="left: -1988px; position: absolute; top: -1999px;">
“¡No
estoy loco! Mi realidad es simplemente diferente a la tuya”. - See more
at:
http://culturacolectiva.com/frases-alicia-pais-maravillas-huir-realidad/#sthash.WaylZ3qo.dpuf</div>
</div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
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Janhttp://www.blogger.com/profile/10112360698804083485noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-4945391151380854953.post-1448015837210386472016-01-18T00:14:00.000-08:002016-01-18T00:14:51.946-08:00Profecías autocumplidas<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhPUtk1iLA31yL_XrzyKGlMdU9AhMsk0ZCVOZv6T6TVnJ2mKhtIjj9VmoDp6e90pLQjoLCbBjDAewP1geaRpjREPRmbLt_-hFDqXdaPz-t3heJHg7lQecA_auzSMLoXWOxUbEno5GHVwf5-/s1600/hipersticion+8.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="298" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhPUtk1iLA31yL_XrzyKGlMdU9AhMsk0ZCVOZv6T6TVnJ2mKhtIjj9VmoDp6e90pLQjoLCbBjDAewP1geaRpjREPRmbLt_-hFDqXdaPz-t3heJHg7lQecA_auzSMLoXWOxUbEno5GHVwf5-/s400/hipersticion+8.jpg" width="400" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
M. C. Escher, <i>Vínculo de unión</i>, 1956</div>
<br />
<span style="color: #ffe599;"><br /></span>
<span style="color: #ffe599;">"A menudo la profecía es la causa principal del acontecimiento profetizado".</span><br />
<br />
<span style="color: #f1c232;"><b>Thomas Hobbes</b>, <i>Behemoth</i></span><br />
<br />
<br />
<span style="color: #ffe599;">"Hasta tal punto estamos desligados de la vida, que hasta sentimos aversión hacia la auténtica ‘vida viva’ y no soportamos que nadie nos la recuerde. Hemos llegado al extremo de tomarla por un trabajo, como si de un servicio se tratara, y en nuestro fuero interno nos persuadimos de que es mucho mejor vivir conforme a los libros. ¿Y qué andamos escarbando frecuentemente por ahí, de qué nos encaprichamos, y qué es lo que pedimos? No lo sabemos ni nosotros mismos. (...) <span class="fullpost"><span class="fullpost"> ¡Ni siquiera sabemos en qué consisten las cosas
vivas, ni qué es lo vivo, ni qué nombre tiene! ¡Déjennos solos y sin
libros, y al momento nos extraviaremos, nos perderemos, no sabremos qué
hacer, ni dónde dirigirnos; qué amar y qué odiar, qué respetar y qué
despreciar!</span> ". </span></span><br />
<br />
<span style="color: #f1c232;"><b>Fiodor Dostoievski</b>, <i>Memorias del subsuelo</i></span><br />
<br />
<br />
<br />
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;"><b><i><span style="font-size: large;">Profecías que se autocumplen</span></i></b></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;">(fragmentos)</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;">por</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #3d85c6;"><span style="font-size: large;">Paul Watzlawick</span></span></div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">Una profecía que se autocumple es una suposición o predicción que, por la sola razón de haberse hecho, convierte en realidad el suceso supuesto, esperado o profetizado y de esta manera confirma su propia "exactitud". Por ejemplo, si alguien por alguna razón supone que se le desprecia, se comportará precisamente por eso de modo desconfiado, insoportable, hipersensible que suscitará en los demás el propio desdén del cual el sujeto estaba convencido y que queda así "probado". Por bien conocido y corriente que sea este mecanismo, en su base hay circunstancias que de algún modo forman parte de nuestro pensamiento cotidiano y que tiene profunda y vasta significación en la imagen de la realidad que nos forjamos.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">En el pensamiento causal tradicional el suceso B se considera en general como el efecto de un suceso anterior, la causa (A), que naturalmente a su vez tenía sus propias causas, así como la aparicón de B determina luego por su parte sucesos que son efecto de B. En la secuencia A - B, A es por consiguiente la causa y B su efecto. La causalidad es <i>lineal</i> y B sigue a A en un curso temporal. En este modelo de causalidad, B no puede tener ningún efecto en A pues eso supondría una inversión del flujo del tiempo: el presente (B) debería ejercer un efecto sobre el pasado (A).</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">En el ejemplo siguiente las cosas ocurren de manera diferente: en marzo de 1979 los periódicos de California comenzaron a publicar sensacionales noticias sobre una inminente reducción en el suministro de gasolina. Los automovilistas californianos se precipitaron a los surtidores para llenar sus tanques. El hecho de haberse llenado doce millones de tanques de gasolina (que en aquél momento estaban vacíos en un promedio de un 75%) agotó las enormes reservas, y de la noche a la mañana provocó la pronosticada escasez de combustible; por otro lado, a causa de mantener llenos lo más posible los tanques de los automóviles (en lugar de llevarlos casi vacíos como hasta ese momento), se formaron largas colas de vehículos y la gente se pasaba horas esperando ante los surtidores; así aumentó el pánico. Luego, cuando los ánimos se calmaron, se comprobó que el suminstro y distribución de gasolina en el estado de California no había disiminuido de ninguna manera.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">Aquí fracasa el pensamiento causal tradicional. La escasez nunca se habría producido si los medios de difusión no lo hubieran pronosticado. En otras palabras, un hecho todavía no producido (es decir, futuro) determinó efectos en el presente (los automovilistas que se precipitaban a los surtidores), efectos que a su vez hicieron que cobrara realidad el hecho pronosticado. En este sentido, aquí el futuro -y no el pasado- determinó pues el presente.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">A esta afirmación se podría objetar en primer lugar que lo ocurrido no es ni sorprendente ni desconocido. ¿Acaso casi todas las decisiones humanas no están en su mayor parte condicionadas (o por lo menos deberían estarlo) por estimaciones de sus propios efectos, de sus ventajas y peligros? ¿Acaso el futuro no influye así siempre en el presente? Por sensatas que parezcan estas preguntas en sí mismas, resultan sin embargo falsamente planteadas en este contexto. Quienquiera que trata, basándose en su experiencia anterior, de estimar los efectos futuros de una decisión tiene normalmente en miras el mejor resultado posible. La acción en cuestión procura entonces calcular el futuro y posteriormente se revelará verdadera o falsa, correcta o incorrecta, pero no tiene por qué ejercer influencia alguna en el curso de las cosas. En cambio, un acto que es resultado de una profecia que se autocumple crea primero las condiciones para que se dé el suceso esperado y en este sentido crea precisamente una realidad que no se habría dado sin aquél. Dicho acto no es pues ni verdadero ni falso; sencillamente crea una situación y con ella su propia "verdad". (...)</span><br />
<br />
<table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: left; margin-right: 1em; text-align: left;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg4Rd7VaWLXU_Qsos3lOwxPf_CGE-pZO_KP9a-XAbNS0Lr3ZkVr4GMytSGJp54afoXMOxBog5tdyxNL6Lf7pe7n1wyM899YFo8TktAIrnZw98NM4u1PuP5t2f3cfjgabNxPI7wSGNE1uRtn/s1600/hipersticion+3.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg4Rd7VaWLXU_Qsos3lOwxPf_CGE-pZO_KP9a-XAbNS0Lr3ZkVr4GMytSGJp54afoXMOxBog5tdyxNL6Lf7pe7n1wyM899YFo8TktAIrnZw98NM4u1PuP5t2f3cfjgabNxPI7wSGNE1uRtn/s320/hipersticion+3.jpg" width="250" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">G. Moreau, <i>Edipo y la esfinge </i>(1864)</td></tr>
</tbody></table>
<span style="color: #9fc5e8;">El oraculo había profetizado a Edipo que daría muerte a su padre y que se casaría con su madre. Sobrecogido de horror por esa predicción que él indudablemente toma por cierta, Edipo procura protegerse del fatal infortunio, pero precisamente las medidas de precaución que toma lo conducen inevitblemente a la realización de la profecía. Como se sabe, Freud utilizó este mito como metáfora para designar la innata atracción incestuosa que tiene todo niño por el padre del sexo opuesto y el consiguiente miedo de que el padre del mismo sexo lo castigue por ello; Freud veía en esta situación primaria, el conflicto de Edipo, la causa principal de ulteriores desarreglos neuróticos. En su autobiografía recientemente publicada, el filósofo Karl Popper se refiere a una profecía autocumplidora, que él ya había descrito veinte años atrás y que había llamado el efecto Edipo:</span><br />
<span style="color: #cfe2f3;"><br /></span>
<span style="color: #cfe2f3;">Una idea que traté en <i>Elend des Historizismus</i> era la de la influencia de una predicción sobre el suceso pronosticado. Llamé a este fenómeno "efecto de Edipo" porque la predicción del oráculo desempeñó un papel extremadamente importante en la serie de sucesos que condujeron a la realización de la profecía. (Al mismo tiempo era una indirecta dirigida a los psicoanalistas, que se mostraban singularmente ciegos a este interesante hecho, aunque el propio Freud había admitido que los sueños de los pacientes a menudo se ajustaban notablemente bien a la teorías particulares de sus analistas; Freud los llamó sueños de complaciencia".)</span><br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">También aquí tenemos la inversión de causa y efecto, de pasado y futuro, sólo que de un modo más crítico y terminante puesto que, como se sabe, el psicoanálisis se atiene a una teoría de la conducta humana que postula una causalidad lineal según la cual el pasado determina el presente. Y Popper vuelve a llamar la atención sobre la importancia de esta inversión cuando después dice:</span><br />
<br />
<span style="color: #cfe2f3;">Durante mucho tiempo creía que la existencia de efecto de Edipo distinguía las ciencias sociales de las ciencias de la naturaleza. Pero aun en la biología, y hasta en la biología molecular, las espectativas a menudo desempeñan su papel: ayudan a que se produzca lo que se esperaba.</span><br />
<span style="color: #6fa8dc;"><br /></span>
<span style="color: #6fa8dc;"><br /></span>
<span style="color: #6fa8dc;">Podríamos reunir gran profusión de citas semejantes que se refieren al efecto de factores "tan poco científicos" como las meras expectativas y suposiciones en la ciencia... y este libro está concebido como una contribución de tal tipo. Séanos lícito recordar a este respecto por ejemplo una observación que hizo Einstein en una conversación con Heisenberg: "En una teoría es imposible aceptar sólo magnitudes observables. Es más bien la teoría la que decide lo que se puede observar". En 1959 Heinsenberg hasta llegó a escribir: "...y deberíamos recordar que lo que observamos no es la naturaleza misma, sino la naturaleza impuesta por nuestra manera de plantear nuestra preguntas". Y aun más radical es el teórico de la ciencia Feyerabend: "Las que guían la investigación son las suposiciones, no conservadoras, sino anticipatorias".</span><br />
<span style="color: #6fa8dc;">Algunas de las investigaciones más seguras y elegentes de profecías que se autocumplen en la esfera de la comunicación humana está vinculada con el nombre del psicólogo Robert Rosenthal de la Universidad de Harvard. Citemos aquí sobre todo su libro de tan acertado título<i> Pygmalión in the Classrom</i>, en el cual el autor comunica los resultados de sus experimentos llamados <i>Oak-School</i>. Se trata de una escuela de dieciocho maestras y más de seiscientos cincuenta alumnos: La profecía que se autocumple se introdujo en el cuerpo docente del modo siguiente: antes de comenzar el año escolar los alumnos deberían ser sometidos a un test de inteligencia y se comunicó a las maestras que, según el test, había un 20% de alumnos que durante al año escolar harían rápidos progresos y tendrían un rendimiento por encima del término medio. Después de la administración del test de inteligencia pero antes de que las maestras entraran por primera vez en contacto con sus nuevos alumnos, se entregaron a las maestras los nombres de aquellos alumnos (en verdad la lista de esos nombres se confeccionó eligiéndolos por entero al azar) de quienes podría esperarse con seguridad un desempeño extraordinario según los tests. De esta manera, la diferencia entre estos alumnos y los demás chicos estaba solamente en la cabeza de la maestra; al terminar el año escolar se repitió el mismo test de inteligencia administrado a todos los alumnos, y<i> efectivamente</i> resultaron cocientes de inteligencia superiores al término medio en aquellos alumnos "especiales"; además el informe del cuerpo docente señalaba que esos niños aventajaban a sus condiscípulos también en conducta, en curiosidad intelectual, en simpatía, etc...</span><br />
<span style="color: #6fa8dc;">San Agustín agradecía a Dios por no ser responsable de sus sueños. A nosotros nos falta ese consuelo. El experimento de Rosenthal es sólo un ejemplo, aunque particularmente claro, de los profundos y determinates efectos de nuestras espectativas, prejuicios, supersticiones y deseos -es decir, construcciones puramente mentales a menudo desprovistas de todo aquello de efectividad- sobre nuestros semejantes, y también es un ejemplo de las dudas que estos descubrimientos pueden suscitar sobre la cómoda suposición del sobresaliente papel que desempeñan las predisposiones heredadas e innatas.</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiVH05LbMBXOARioB71fxMwOPGaJNzgje70WOmHEIobi_6kfjUHqrnBqgLX_CYfzA2CsKHU5HQrjplHOwVFSDtLZhS8K9byca5R4rvu52CQRX2teXQ-9_j2orfpwOQEm6FfYAggVosDSkBM/s1600/hipersticion+5.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiVH05LbMBXOARioB71fxMwOPGaJNzgje70WOmHEIobi_6kfjUHqrnBqgLX_CYfzA2CsKHU5HQrjplHOwVFSDtLZhS8K9byca5R4rvu52CQRX2teXQ-9_j2orfpwOQEm6FfYAggVosDSkBM/s400/hipersticion+5.jpg" width="282" /></a></div>
<br />
<br />
<span style="color: #6fa8dc;">Porque lo cierto es que estas construcciones pueden tener efectos no sólo positivos sino también negativos. Somos responsables no sólo de nuestros sueños sino también resposables de la realidad que engendra nuestros pensamientos y esperanzas.(...)</span><br />
<span style="color: #6fa8dc;"><br /></span>
<span style="color: #6fa8dc;">Ciertamente desde hace tiempo se conocen diagnósticos "mágicos" en el cabal sentido de la palabra. En un trabajo ya clásico, <i>Voodoo Death</i>, el fisiólogo norteamericano Walter Cannon describe una cantidad de casos de muertes misteriosas repentinas difíciles de explicar científicamente; se trata de muertes por maldiciones, hechizos o por la trasgresión de un tabú que entraña la muerte. Un curandero maldice a un indio brasileño y éste es incapaz de defenderse de sus reacciones emocionales a esta sentencia de muerte, de manera que muere una horas después. Un joven cazador africano abate y como sin saberlo determinada gallina silvestre relacionada con un tabú. Cuando se da cuenta de su crimen cae en desesperación y muere a las veinticuatro horas. Un curandero de los bosques australianos apunta con un hueso provisto de fuerzas mágicas a un hombre. Persuadido de que nada podrá salvarlo de la muerte, el hombre cae en un letargo y se prepara para morir. A último momento lo salvan los otros miembros de la tribu que obligan al curandero a levantar el hechizo.</span><br />
<span style="color: #6fa8dc;">Cannon llegó al convencimiento de que en el caso de la muerte<i> vudú</i> se trata de un fenómeno</span><br />
<br />
<span style="color: #cfe2f3;">que es característico del hombre primitivo, de hombres tan primitivos, tan supersticiosos y tan ignorantes que ellos mismos se consideran desorientados forasteros de un mundo hostil. En lugar de saber, esos hombres tienen fructíferas e ilimitadas fantasías que animan su ambiente con toda clase de malos espíritus, los cuales son capaces de influir irremisiblemente en la existencia de los hombres.</span><br />
<br />
<span style="color: #6fa8dc;">En el momento en que Cannon escribía estas líneas, centenares de millares de hombres en modo alguno supersticiosos o ignorantes eran confundidas víctimas en un mundo inconcebiblemente hostil. Desde el fantasmal y oscuro mundo de los campos de concentración, Viktor Frankl nos cuenta un fenómeno que corresponde al de la muerte <i>vudú</i>:</span><br />
<br />
<span style="color: #cfe2f3;">Quien ya no cree en un futuro, quien ya no cree más en su futuro está perdido en el campo de concentración. Cuando pierde la creencia en el futuro, pierde el sostén espiritual y entonces se derrumba interiormente y sufre una decadencia tanto corporal como psíquica. Esto ocurre las más de las veces de una manera repentina, en la forma de una especie de crisis cuyo modo de manifestarse es familiar a los moradores del campo más o menos experimentados... Generalmente las cosas ocurrían así: un día el prisionero permanecía tendido en la barraca, de la cual no se movía ni para vestirse, ni para ir al cuarto de baño, ni para acudir al lugar donde eran convocados los presos. Ya nada hacía efecto en él, nada lo asustaba tampoco;... en vano se le ruega, se lo amenaza, se lo golpea: el hombre sencillamente permanece acostado...</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhg0-GuLb_kqB1uhV8385NWfP18yRQbXGMFuqqyUrE_7TxKxnqXr0HOQoTiY0GDKytKAIOGZsw2MJJNG9ty24y8l1iGVkodEiu-Hzz9qCEiy6z7vSWIV-VWi_sg_MVBLFX_MsiDZa0f114Z/s1600/hipersticion+6.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="232" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhg0-GuLb_kqB1uhV8385NWfP18yRQbXGMFuqqyUrE_7TxKxnqXr0HOQoTiY0GDKytKAIOGZsw2MJJNG9ty24y8l1iGVkodEiu-Hzz9qCEiy6z7vSWIV-VWi_sg_MVBLFX_MsiDZa0f114Z/s320/hipersticion+6.jpg" width="320" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Campo de concentración de Auschwitz</div>
<br />
<br />
<span style="color: #6fa8dc;">Un compañero de prisión de Frankl perdió su voluntad de vivir cuando no se realizó una predicción que había tenido en un sueño y que de esta manera tuvo un autocumplimiento negativo:</span><br />
<br />
<span style="color: #cfe2f3;">"Mira, doctor, me gustaría contarte algo. Hace poco tuve un sueño notable. Una voz me dijo que podía desear algo... y que sólo debía decir lo que me gustaría saber pues ella respondería a todas mis preguntas. ¿Y sabes lo que le pregunté? Que quisiera saber cuándo terminaría la guerra para mí. Es decir, quería saber cuándo seríamos liberados de este campo y tendrían término nuestros sufrimientos... Y en voz baja y misteriosa me susurró: "El 30 de marzo".</span><br />
<br />
<span style="color: #6fa8dc;">Pero cuando llegó el día anunciado por la profecía y los aliados estaban todavía muy lejos del campo, todo tomó para el compañero de sufrimientos de Frankl, el prisionero F., un curso fatal:</span><br />
<br />
<span style="color: #cfe2f3;">El 29 de marzo F. se enfermó súbitamente con fiebre alta. El 30 de marzo -es decir, el día en que según la profecía terminaría la guerra y también los sufrimientos "para él"-, F. comenzó a delirar gravemente y terminó por perder el conocimiento... El 31 de marzo murió. Había muerto de fiebre tifoidea.</span><br />
<br />
<span style="color: #6fa8dc;">Para Frankl resultó claro que su camarada F. habá muerto a causa de su
profundo desengaño al comprobar que no se realizaba la esperada
liberación y esto hizo que de pronto se redujeran las defensas de su
organismo contra la ya latente infección de una fiebre tifoidea. Se le
paralizaron su fe en el futuro y su voluntad de vivir de modo que su
organismo sucumbió a la enfermedad... y así vino a confirmarse lo que le
dijera la voz de su sueño. (...)</span><br />
<span style="color: #6fa8dc;"><br /></span>
<span style="color: #6fa8dc;">Pero basta de ejemplos. Las profecías que se autocumplen son, pues, fenómenos que no sólo sacuden las bases de nuestra concepción personal de la realidad, sino que hasta pueden poner en tela de juicio la imagen del mundo de la ciencia. Todas comparten la capacidad evidente de crear una realidad y suscitar determinada creencia en el "ser así" de las cosas, una creencia que puede ser tanto una superstición como una teoría científica aparentemente rigurosa derivada de la observación objetiva. Pero, mientras hasta hace poco aún era posible rechazar sin más ni más la noción de las profecías que se autocumplen y considerarlas anticientíficas o atribuirlas a deficiente adaptación a la realidad de ciertos cerebros confundidos o románticos, esta cómoda posición hoy ya no es posible.</span><br />
<span style="color: #6fa8dc;">Lo que todo esto signifca todavía no puede evaluarse adecuadamente. El descubrimiento de que nosotros mismos construimos nuestra realidad equivale a una expulsión del paraíso del presunto "ser así" del mundo, del cual empero sólo nos sentimos responsables en muy limitada medida. Pero ahora estamos ante la posibilidad de asumir plena responsabilidad por nosotros mismos además ante la responsabilidad de inventar y elaborar realidades para otros.</span><br />
<span style="color: #6fa8dc;">Y aquí está el peligro. Los acontecimientos del constructivismo han posibilitado la elaboración deseable en alto grado de nuevas y eficaces formas terpéuticas, pero presenta también la posibilidad de que se abuse de ellas. La promoción y la propaganda son dos ejemplos particularmente feos. Ambas procuran bastante conscientemente suscitar actitudes, suposiciones, prejuicios, etc. cuya realización parece luego natural y lógica. En efecto, gracias a este lavado de cerebro se verá el mundo "así" y por lo tanto el mundo<i> es así</i>. En la novela <i>Mil novecientos ochenta y cuatro </i>este lenguaje de la propaganda, creador de realidades, se llama Newspeak, y Orwell explica que ese lenguaje "hace imposible todas las otras formas de pensar".</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi9enZEgpmKZZnoM7fTMMl69gdwjqtoGDtm5tky2Dh3Q0qfRA_Zk8EGj25MwMwxTUy57CBfle3_zmgoja1EBe7QrMsSj_oVb8dlsF-w3wL9SsQE0Nb55gjwZT1LyifpnfEokdYdWrziUzLM/s1600/hipersticion+4.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="231" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi9enZEgpmKZZnoM7fTMMl69gdwjqtoGDtm5tky2Dh3Q0qfRA_Zk8EGj25MwMwxTUy57CBfle3_zmgoja1EBe7QrMsSj_oVb8dlsF-w3wL9SsQE0Nb55gjwZT1LyifpnfEokdYdWrziUzLM/s400/hipersticion+4.jpg" width="400" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Fotograma del film <i>1984</i> de Michael Radford (1984)</div>
<span style="color: #6fa8dc;"><br /></span>
<span style="color: #6fa8dc;">En un comentario acerca de un conjunto de ensayos recientemente publicados en Londres sobre la censura de la Republica Popular de Polonia, Daniel Weiss escribe lo siguiente sobre la magia del lenguaje:</span><br />
<span style="color: #cfe2f3;"><br /></span>
<span style="color: #cfe2f3;">Considérese, por ejemplo, la característica profusión de adjetivos en el "nuevo lenguaje": todo desarrollo ya es "dinámico", toda sesión plenaria del Partido es "histórica", toda masa es "trabajadora". El sobrio teórico de la información no puede ver en esta inflación de epítetos vacíos de sentido y automatismos más que una redundancia. Al ser escuchada repetidamente, esta mecánica cobra empero el carácter de conjuro: la palabra hablada ya no es más portadora de información sino que sirve para fines mágicos.</span><br />
<br />
<span style="color: #6fa8dc;">En definitiva, entonces el mundo <i>es así</i>. Cómo se hace esto es algo que ya sabía Joseph Goebbels cuando, por ejemplo, el 25 de marzo de 1933 dio instrucciones a los directores de la radio alemana:</span><br />
<br />
<span style="color: #cfe2f3;">Este es el secreto de la propaganda: aquel a quien va dirigida la propaganda debe quedar saturado de las ideas de la propaganda sin que advierta que es penetrado por ellas. Desde luego, la propaganda tiene un propósito, pero ese propósito tiene que ser ocultado tan inteligente y virtuosamente que aquel a quien se refiere este propoósito no lo advierta en modo alguno.</span><br />
<br />
<span style="color: #6fa8dc;">En esta necesidad de ocultar el propósito está empero la posibilidad de superarlo. Como ya vimos, la realidad inventada llega a ser realidad "verdadera" sólo cuando se cree en el invento. Cuando falta el elemento de la creencia, del ciego convencimiento, dicha realidad es ineficaz. Con la mejor comprensión de la naturaleza de las profecías que se autocumplen aumenta nuestra capacidad de trascenderlas. La profecía de la cual sabemos que es solo una profecía, ya no puede autocumplirse. Siempre está la posibilidad de elegir otra cosa y la posibilidad de infringirla. Que nosotros veamos y aprovechemos la posibilidad es ciertamente harina de otro costal. Importante es aquí una comprobación que procede de un dominio aparentemente muy alejado, la teoría matemática de los juegos. Ya en sus <i>Observaciones sobre los fundamentos de la matemática</i>, Wittgenstein llamaba la atención sobre el hecho de que en ciertos juegos se puede ganar con un sencillo ardid. Apenas alguien nos hace notar la existencia de este ardid, no necesitamos seguir jugando ingenuamente (y perdiendo). Basándose en estas consideraciones, el teórico del juego Howard formula su <i>axioma existencialista</i> según el cual aquel "que cobra conciencia de una teoría relativa a su conducta ya no está más sometido a ella, sino que tiene la libertad de pasar por encima de ella. En otro pasaje este autor declara:</span><br />
<br />
<span style="color: #cfe2f3;">Al tomar una decisión consciente siempre tiene uno la libertad de infringir su anterior teoría relativa a su propia conducta. Se podría decir también que uno siempre puede "trascender" esa teoría. Este supuesto parece enteramente realista. Dentro del marco de las teorías de las ciencias sociales, creemos, por ejemplo, que la teoría marxista por lo menos en parte naufragó porque ciertos miembros de la clase dominante que adquirieron conciencia de la teoría comprendieron que era de su mejor interés infringirla.</span><br />
<br />
<span style="color: #6fa8dc;">Y casi cien años antes de Howard el hombre de la resistencia de Dostoyevski escribe en sus <i>Memorias del subsuelo</i>:</span><br />
<br />
<span style="color: #cfe2f3;">En realidad, si alguna vez se llegase a descubrir la fórmula de todos nuestros deseos y caprichos, una fórmula que explicara además sus causas, leyes que los rigen, forma en que se desarrollan, fines a que en tal y tal caso propenden y así sucesivamente hasta hallar una verdadera fórmula matemática, entonces sí que podría ocurrir que el hombre dejase de desear y hasta seguro que eso sucedería. ¿Qué placer habría en desear por orden ajena? Y, además, ¿por qué habría de transformarse el hombre en trompeta de órgano o algo por el estilo?</span><br />
<br />
<span style="color: #6fa8dc;">Pero, aun si alcanzáramos esa matetización de nuestra vida, en modo alguno se comprendería la complejidad de nuestra existencia. La más hermosa teoría es impotente frente a la antiteoría; el cumplimiento de las más correcta profecía puede destruirse si conocemos de antemano el resultado. Para Dostoyevsky la esencia del ser humano es mucho más:</span><br />
<span style="color: #6fa8dc;">Sólo que también el argumento del hombre del subsuelo podría ser una profecía que se autocumple.</span><br />
<br />
<br />
<br />
Lecturas:<br />
<br />
<b>Paul Watzlawick y otros</b>, <i>La realidad inventada.</i> Editorial Gedisa 2010<br />
<br />
<br />
Hay un cuento de Gabriel García Marquez titulado <i>"Algo muy grabe va a suceder en este pueblo"</i> que suele utilizarse como modelo ficticio para ejemplificar la profecia autocumplida. Puede leerse <a href="http://www.ciudadseva.com/textos/cuentos/esp/ggm/algo_muy_grave_va_a_suceder.htm">AQUÍ </a><br />
<br />
<br />
Entradas relacionadas:<br />
<br />
<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2014/10/el-lado-oscuro-de-la-mente.html">El lado oscuro dela mente</a><br />
<br />
<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2014/09/la-mente-creadora.html">La mente creadora</a><br />
<br />
<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2011/08/inteligencia-libre.html">Inteligencia libre</a><br />
<br />
<br />
. Janhttp://www.blogger.com/profile/10112360698804083485noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-4945391151380854953.post-19484435991475802482016-01-08T00:35:00.000-08:002016-01-08T05:33:53.664-08:00Sucumbir a la belleza<br />
<span style="font-size: 130%;">La enigmática pintura <i>Venus y Cupido</i> realizada en 1540 por el veneciano Lorenzo Lotto, contiene todos los ingredientes representativos del manierismo italiano. Dentro de este estilo artistico de las postrimerías del Renacimiento, surgieron composiciones con alegorías moralizantes altamente rebuscadas, cuya artificiosidad en ocasiones han sido consideradas como extravagantes. Arte dirigido a un público erudito y elitista de los ambientes cortesanos a quienes se invitaba, como en un juego, a intentar desentrañar el mensaje oculto poniendo a prueba su ingenio. La difícil lectura de estas obra ha tenido como resultado que las interpretaciones de muchas de ellas por parte de los investigadores revelen significados diferentes. La que a continuación se propone sobre la pintura de Lotto, descubre la clave de su sentido final en un elemento aparentemente insignificante que, después de un recorrido por otras obras de arte, revelará en la conclusión de su estudio.</span><br />
<br />
<i><br /></i>
<br />
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #6fa8dc;"><b><span style="font-size: large;">(Lorenzo Lotto) <i>De amore</i></span></b></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #6fa8dc;"><span style="font-size: small;">por</span></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #6fa8dc;"><span style="font-size: large;">Jesús María de Zárate</span></span></div>
<br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhlEsTu7mGXvE-QMvK7k7z2NW0LKcM125FNirF2JrsSy1InTdl0zk5Xd5JllQCCOyTko8oB249Y4Q4Zr3kS_WtDuRyqT1FEx-KyPCax58NWLtJUU8k-LsFYsuxAMayTEuiRjnhnODOlQb1Y/s1600/lluvia+dorada+3.png" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="264" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhlEsTu7mGXvE-QMvK7k7z2NW0LKcM125FNirF2JrsSy1InTdl0zk5Xd5JllQCCOyTko8oB249Y4Q4Zr3kS_WtDuRyqT1FEx-KyPCax58NWLtJUU8k-LsFYsuxAMayTEuiRjnhnODOlQb1Y/s320/lluvia+dorada+3.png" width="320" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Lorenzo Lotto, <i>Venus y Cupido</i> (1540)<br />
<br /></div>
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">Pintura de difícil estudio iconográfico es la titulada<i> Venus y Cupido</i> que hacia 1540 realizara Lorenzo Lotto establecido en la ciudad de Venecia y que se conserva en el Metropolitan Museum of Art de New York gracias a la donación de Mrs. Charles Wrightsman en 1986. Pirovano comenta la pintura en su descripción considerando sorprendentes los elementos que la configuran, lo que entiende como dificultosa simbología: «de las rosas deshojadas a la serpiente, desde el bastoncillo a la caracola, de la hiedra hasta el cupido que irrespetuoso orina a través de la corona de mirto que se mantiene por el incienso que arde, compone un verdadero y propio epitalamio de explicitas alusiones sexuales, alegre y bienaventurado, invención alegre hasta lo grotesco, una vez mas contracorriente, casi irreverente» (2002:120). Y es así, pues son variados los elementos semánticos que el artista nos ofrece. Observamos nuevamente la corona de mirto en la figura de Cupido que ya consideramos como «corona nupcial».</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi8-smOEc_IDjlRMvDt1Qiomo2M-OecHHXTxcS2vhNYurjNzY08sDBHOw76Uhal0z9YHKVg49wgibPL-tTR_x_4N_4sBk0oHTlL47qRsINvonat00h90ykMj-nGp6L3Mrw6nkmd3gPTpr7g/s1600/lluvia+dorada+3.png" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi8-smOEc_IDjlRMvDt1Qiomo2M-OecHHXTxcS2vhNYurjNzY08sDBHOw76Uhal0z9YHKVg49wgibPL-tTR_x_4N_4sBk0oHTlL47qRsINvonat00h90ykMj-nGp6L3Mrw6nkmd3gPTpr7g/s640/lluvia+dorada+3.png" width="404" /></a></div>
<br />
<span style="color: #9fc5e8;"> Cupido, coronado, se encuentra orinando. La micción se dirige hacia el sexo
de Venus. Un detalle llama la atención: otra
corona de mirto sostiene en su mano a la
vez que Venus la toma mediante un lazo.
Con ello se establece la idea que vamos comentando sobre la unión amorosa, unión
que se manifiesta, por otra parte, entre el
sexo de ambos a través de la orina de Cupido, aspecto de complicada lectura y que
quizás pudiera responder a la llamada «lluvia dorada», es decir, cierto tipo de fetichismo donde la orina se convierte en motivo
de placer y satisfacción sexual. Se trataría
de la urofilia.</span><br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgWWC8D5JLXYu7UhqTiVhyNG4fY2ZsJxgTdEYDwA5d3m1uqDBRsfh54C2VGcc-3t6L-s7JU9cTRaTC0jku3-i8BJLCV-P2WFC4xorfjJUvY-n9dMDekhYmCEZwjc5AY-BLSJvLV48AoX4pg/s1600/lluvia+dorada+2.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgWWC8D5JLXYu7UhqTiVhyNG4fY2ZsJxgTdEYDwA5d3m1uqDBRsfh54C2VGcc-3t6L-s7JU9cTRaTC0jku3-i8BJLCV-P2WFC4xorfjJUvY-n9dMDekhYmCEZwjc5AY-BLSJvLV48AoX4pg/s640/lluvia+dorada+2.jpg" width="304" /></a></div>
<span style="color: #9fc5e8;">No obstante, Cupido orinando
tiene precedentes iconográficos tales como
el caso de la plancha abierta por Alaert du
Hamel (imagen izquierda) donde esta acción, también protagonizada por Cupido, se dispone junto a unos
amantes y rodeado de cepas con abundantes racimos, imagen de la fecundidad. Con el mismo propósito se observa
un Cupido orinando en el argumento de Tiziano sobre la
<i>Bacanal de los Andrios</i>
conservada en el Museo del Prado y en Francesco
Albiani y su
<i>Flora con putti</i>
en referencia a
la abundancia y fecundidad primaveral
(Roma, Galleria Nazionale D’Arte Antica Di
Palazzo Barberini).</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgn7lQmqdMyp1mj33omhWFTEpdTbttZ3cZylmltVSAuTmEe3ae6Ob-gusqzo9qnMgTWcu8DeDgq5y5a1LeWaSdhNJ0Pzy-CF3vl9rdXPgoeEVEurSKuoklEp7www5sr-EFJ_DrEdaUa6_Yb/s1600/lluvia+dorada+5.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="181" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgn7lQmqdMyp1mj33omhWFTEpdTbttZ3cZylmltVSAuTmEe3ae6Ob-gusqzo9qnMgTWcu8DeDgq5y5a1LeWaSdhNJ0Pzy-CF3vl9rdXPgoeEVEurSKuoklEp7www5sr-EFJ_DrEdaUa6_Yb/s320/lluvia+dorada+5.jpg" width="320" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Tiziano, <i>Bacanal de los Andrios</i>,1523 (detalle)</div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<span style="color: #9fc5e8;">Estas relaciones semánticas que establecemos no resultan extrañas. Se ha explicado
por parte de Lucia Impelluso que la pintura
responde a unos esponsales, aspecto a no
desdeñar si seguimos las fuentes antiguas.
Pirovano precisa sobre la composición, siguiendo a Christiansen, que posiblemente
se trata de un regalo matrimonial.</span><br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<span style="color: #9fc5e8;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi2uoeQ7Y9FiCTn1GU1B7Iab553wIBUZ2-vlitACz6UplzGjB6sGKyMFrCVJ24UOHoEykhgWPEGNblHKG0zxre9RNkuGAzO880bdopjZQD4dafjKJBLLBG0gfUtk2HCWmF-qElLAkuZUQ86/s1600/lluvia+dorada+8.jpg" imageanchor="1" style="clear: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em;"><img border="0" height="200" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi2uoeQ7Y9FiCTn1GU1B7Iab553wIBUZ2-vlitACz6UplzGjB6sGKyMFrCVJ24UOHoEykhgWPEGNblHKG0zxre9RNkuGAzO880bdopjZQD4dafjKJBLLBG0gfUtk2HCWmF-qElLAkuZUQ86/s200/lluvia+dorada+8.jpg" width="145" /></a></span></div>
<span style="color: #9fc5e8;">Siguiendo en los detalles (ver imagen derecha), por el árbol al que se une
la hiedra se puede entender tal consideración pero en un sentido muy concreto. Los
tratadistas en emblemas consideran, por la
unión de la hiedra y el árbol, entre otros
conceptos, la muerte, pues aquella ocasiona
su final.</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"> Juan de Horozco relaciona la hiedra con
la mala mujer, la prostituta, que procura la
destrucción del hombre: «[...] a la comparación con la yedra ninguna cosa puede ser en
el mundo más propia, pues todos ven de la
manera que gasta la virtud, y consume del
todo a cualquier árbol que se deja acompañar de ella, por grande y crecido que sea»
(l. III, emb. XIV).</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgrWlVlcF5nsJahD6JSndjl7djGcS8wSywCFVdQKJBTdzWek2ZfgD3ZAdW8tlOBTlbf8T0t5pMff4U2y5teQYevwoOXgyZfP4Sk4xgDyStFjQN_soSou-ZGGY5o0pyOuS5WoG8aLI3aBH2g/s1600/lluvia+dorada+7.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgrWlVlcF5nsJahD6JSndjl7djGcS8wSywCFVdQKJBTdzWek2ZfgD3ZAdW8tlOBTlbf8T0t5pMff4U2y5teQYevwoOXgyZfP4Sk4xgDyStFjQN_soSou-ZGGY5o0pyOuS5WoG8aLI3aBH2g/s400/lluvia+dorada+7.jpg" width="312" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Andrea Mantegna, <i>Sansón y Dalila </i>(s. XV)</div>
<br />
<table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: left; margin-right: 1em; text-align: left;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjSKJ-t9EBnYH_T6D6FmzJQItHWPtqHVewc7BOpBjXZ8vctVn83WuRGlKchH3qGqn0BpYjOK-XaelY-hSG-E0R9BZVkkG1APzOttckiKzBaNNTtKNZc0GHY9NglZYeP6wNDPqwC_MuDsb88/s1600/lluvia+dorada+7.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="185" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjSKJ-t9EBnYH_T6D6FmzJQItHWPtqHVewc7BOpBjXZ8vctVn83WuRGlKchH3qGqn0BpYjOK-XaelY-hSG-E0R9BZVkkG1APzOttckiKzBaNNTtKNZc0GHY9NglZYeP6wNDPqwC_MuDsb88/s200/lluvia+dorada+7.jpg" width="200" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Detalle de <i>Sansón y Dalila</i></td></tr>
</tbody></table>
<span style="color: #9fc5e8;">Mantegna dispone el árbol con la cepa para explicar similar intención, leemos en el tronco: «FOEMINA /
DIABOLO TRIBUS / ASSIBUS EST / MALA
PEIOR» [Una mala mujer es tres veces peor
que el diablo]. En consecuencia, esta composición puede ser entendida como imagen del enamorado, pero de un enamorado
muy distinto que desea, como veremos,
«morir de amor». (...)</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">En la pintura se manifiestan otros elementos que nos invitan a detenernos. Venus
parece presentar un leve pronunciamiento
de su vientre, un embarazo. El escarabajo y
la serpiente que se disponen en la composición se pueden relacionar con este asunto.</span><br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<span style="color: #9fc5e8;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjw4-NZAa6oBAaHmQZhdFcMOn1uWQUsDhjmW9XD24xWFwZlfdYxvrJsWhjC7oMpBY9HDcryx2m9mfJPiszeXVxkjwKONZLeyrAxK5ivtiWLNdK4L7-hxcUwkbs-CMBKHfMDxiJVeaNeUrjS/s1600/lluvia+dorada+9.jpg" imageanchor="1" style="clear: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em;"><img border="0" height="138" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjw4-NZAa6oBAaHmQZhdFcMOn1uWQUsDhjmW9XD24xWFwZlfdYxvrJsWhjC7oMpBY9HDcryx2m9mfJPiszeXVxkjwKONZLeyrAxK5ivtiWLNdK4L7-hxcUwkbs-CMBKHfMDxiJVeaNeUrjS/s200/lluvia+dorada+9.jpg" width="200" /></a></span></div>
<span style="color: #9fc5e8;"> El ofidio explica la fecundidad ya que penetra en la tierra; también la eterna juventud
por sus cambios de piel, es decir, una perpetua edad de oro en el amor. (...)</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi8gOhMFSzOWGhYzuEPBhnFybQx4L3wG_DGKUmdC8PuBrYY6OB1s6i4aSgJIyzuWie34v-iYQIu8X6e1YMWGgjOhoRCTr-HrdMMLsR-xkqDzVjRtJy5HOHm-henXAOI8Nph5vOl9H8eX-gj/s1600/lluvia+dorada+10.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="146" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi8gOhMFSzOWGhYzuEPBhnFybQx4L3wG_DGKUmdC8PuBrYY6OB1s6i4aSgJIyzuWie34v-iYQIu8X6e1YMWGgjOhoRCTr-HrdMMLsR-xkqDzVjRtJy5HOHm-henXAOI8Nph5vOl9H8eX-gj/s200/lluvia+dorada+10.jpg" width="200" /></a></div>
<span style="color: #9fc5e8;">El escarabajo se dispone bajo el pétalo
de la rosa (imagen izquierda). Por el coleóptero se puede precisar la imagen del varón, del unigénito y,
por lo mismo, entender el fruto de la unión que entre los esposos se espera, es decir, el
primer nacimiento y, como no era extraño
en la época, se deseaba fuera varón. Horapolo nos dice: «Cuando quieren representar
unigénito, nacimiento, padre, universo o
varón, pintan un escarabajo [...] unigénito
porque el animal nace de sí mismo... varón
porque no tienen género femenino» (1991:
68).
Volvemos otra vez a Eliano por cuanto en él podemos encontrar otros sentidos a
la figuración que vamos considerando. El
tratadista nos habla del escarabajo para precisar: «Si alguien derrama perfume sobre
escarabajos, que son animales malolientes,
éstos no pueden soportar la fragancia, sino
que mueren» (I,38). En su libro IV añade:
«Se mata a un escarabajo echándole encima
rosas» (IV,18).</span><br />
<span style="color: #9fc5e8;">Picinelli, en su
Mundus Symbolicus,
recoge
esta idea en su tratado para decirnos que así
como la paloma disfruta y toma fuerzas con
la suavidad del perfume de las rosas, para el
escarabajo aquel se convierte en arma mortífera y por esto, señala, lo pintaron cerca
de una rosa con el mote
«Suavis effugat odor»
[lo ahuyenta el olor suave] (VII,IX).</span><br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<span style="color: #9fc5e8;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiwyEwWyMjwEv3dCynLJRItsMuFSLDdh4UQgT8w6qQJIIvTBiJ9eZ1vjCUkMSZxC2j1C_2JElANBuklcwbxM4ZPQVevsTOhwTpsFVl9kjzDbN4xPoMDxlLwD2K8DKnf7Pr_3cbRMOgSpnXy/s1600/lluvia+dorada+1.jpg" imageanchor="1" style="clear: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiwyEwWyMjwEv3dCynLJRItsMuFSLDdh4UQgT8w6qQJIIvTBiJ9eZ1vjCUkMSZxC2j1C_2JElANBuklcwbxM4ZPQVevsTOhwTpsFVl9kjzDbN4xPoMDxlLwD2K8DKnf7Pr_3cbRMOgSpnXy/s1600/lluvia+dorada+1.jpg" /></a></span></div>
<span style="color: #9fc5e8;">Con
anterioridad, en las Divisas de Claudio Paradine (Lyon 1551), se presenta al escarabajo muerto en el centro de una rosa con
el mote
«Turpibus exitium»
[repugnante destrucción] (imagen derecha), señalando así a quienes
viven solamente para la lujuria (1567: 228).
La estampa de Joris Hoefnagel de 1598 en la
que observamos a un putto con la calavera
en su mano junto a unas rosas, habla de la
vida y la muerte, de lo pasajero y efímero
de la existencia; rodeando este tipo iconográfico de la emblemática se dan cita una
secuencia de animales, entre ellos el escarabajo huyendo de la rosa.</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjkZscTc67l5BIKQ72fPPpr7AKOiZWTA-SZCod2VIBxZPo5KWAGf6WZeaZSkPNVwA5JVCxEK0Rc9dZvOQzHJECFvJvDSktK5v1qV3qXHENIPz9_qY9JQdPqzl6jazD4Tea_hbdUcp2yktMn/s1600/lluvia+dorada+6.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="282" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjkZscTc67l5BIKQ72fPPpr7AKOiZWTA-SZCod2VIBxZPo5KWAGf6WZeaZSkPNVwA5JVCxEK0Rc9dZvOQzHJECFvJvDSktK5v1qV3qXHENIPz9_qY9JQdPqzl6jazD4Tea_hbdUcp2yktMn/s400/lluvia+dorada+6.jpg" width="400" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Joris Hoefnagel, <i>Alegoría de la vida y de la muerte</i> (1598)</div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;">Esta composición fue muy repetida en
la literatura emblemática como apreciamos
en los ejemplos de Whitney (
<i>A Choice of
Emblemes</i>,
Leiden, 1586), también Joachim
Camerarius (
<i>Symbolurum et Emblematum</i>
.
III. 1597) y Sebastián de Covarrubias, entre
otros, pues en su
Tesoro de la lengua castellana
(1610), señala: «el escarabajo en medio de
una rosa significa la virtud del varón enervada y atenuada por los deleites: así por el
olor de la rosa cae repentinamente muerto
este animalillo al suelo».
No hemos de olvidar que la rosa es la
flor de Venus. Ripa propone la corona de
rosas como alegoría del
Encanto
ya que es
la flor de Afrodita. En su comentario sobre
el Juicio de París nos dice que tanto Minerva como Juno se pusieron la citada corona de rosas y se vieron bellas, pero cuando
descansó en la cabeza de Venus quedaron
asombradas de tanta hermosura, añade:</span><br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">«[...] la rosa, por el encanto que posee, es
reina de las flores, adorno de la tierra, esplendor de las plantas y florido ojo que inspira amor y concilia las delicias de Venus
entre los amantes» (Encanto).</span><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEitEAhgxtWlCvPSnwFp0ysW_Md8-haRK9QJ5TyLM0NulFuht0QrmpQ6W3UoJjfg4QCjw2hhvtlXJ2dS20JC1bLK4sGjdjg4wcRkIDHXmsyX1Z8x6w7YYAa3Kha3HdmQqiwLi7R2Jek97a0F/s1600/lluvia+dorada+11.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEitEAhgxtWlCvPSnwFp0ysW_Md8-haRK9QJ5TyLM0NulFuht0QrmpQ6W3UoJjfg4QCjw2hhvtlXJ2dS20JC1bLK4sGjdjg4wcRkIDHXmsyX1Z8x6w7YYAa3Kha3HdmQqiwLi7R2Jek97a0F/s400/lluvia+dorada+11.jpg" width="330" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Dante Gabriel Rossetti, <i>Venus Verticordia </i>("la que transforma los corazones") 1868</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">Así, la rosa, junto al mirto, se convierte
en el tradicional atributo de Venus pues resume la suprema belleza. Es por lo tanto la
rosa expresión de Venus, imagen de la belleza y del amor; toma su precedente en la
Antigüedad clásica como lo observamos en
Ovidio (Fastos
IV, 138). A modo de ejemplo
podemos reparar en el citado texto
Imágenes
de Filostrato.</span><br />
<br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgWjoBZiImOhcBtzhtnAki6SQckpGbiaaTrWKbxuyZICxiIasJqQmAarc7xhRVIWKv5Hm-ZkoGZ4DmL7voWfMikOyxwpTJ_DUt7Mdrht0ZpNO0_5IblQZSYRG3B2Yt_SgBxVCfLXgLAQqnI/s1600/books_005.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgWjoBZiImOhcBtzhtnAki6SQckpGbiaaTrWKbxuyZICxiIasJqQmAarc7xhRVIWKv5Hm-ZkoGZ4DmL7voWfMikOyxwpTJ_DUt7Mdrht0ZpNO0_5IblQZSYRG3B2Yt_SgBxVCfLXgLAQqnI/s320/books_005.jpg" width="296" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Baco y Ariadna en un grabado del siglo XVII inspirado en el texto cásico "Imágenes..." de Filostrato.</div>
<br />
<br />
<span style="color: #9fc5e8;">El tratadista, considerando el
amor entre Baco y Ariadna, nos dice: «[...]
aquí, Dionisio sólo está representado por su
amor [...] Dioniso se ha echado encima un
manto de púrpura y ha puesto rosas en su
cabellos para acercarse a Ariadna, ebrio de
amor, como dice el poeta de Teos de quienes
han sido vencidos por la pasión amorosa»
(I,15).
En consecuencia, que el pétalo de rosa
repose sobre el escarabajo se ajusta a la lectura propuesta por Eliano y explica el sentido final de la pintura: morir ante el oloroso
perfume del amor, sucumbir a la belleza.</span><br />
<br />
<br />
Lecturas:<br />
<br />
<b>Jesús María de Zárate</b>, Lorenzo Lotto. <i>De amore</i>. <b>IMAGO</b>. Revista de emblemática y cultura visual (nº 5, 2013) pp. 47-69<br />
<br />
<br />
Entradas relacionadas:<br />
<br />
<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2011/04/anatomia-de-la-lujuria.html">Anatomía de la Lujuria </a><br />
<br />
<br />
.Janhttp://www.blogger.com/profile/10112360698804083485noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-4945391151380854953.post-56997848553521487712015-12-27T21:41:00.000-08:002015-12-27T21:41:26.179-08:00¿Qué nos dicen las piedras?<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjJJycFKKgyTK8kjmZrTU4e4H_FEbJYXyW2ofxmX4CT0t15ZDMKXIW8HXiWKS5PJv2PmKyFoI6aqJZ27afwALKi6hJMPP6nG2qLPfs5w_stB2kF7bocH_h5dl_roKreawb1pPQJsDpIPWb1/s1600/piedras+1.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="295" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjJJycFKKgyTK8kjmZrTU4e4H_FEbJYXyW2ofxmX4CT0t15ZDMKXIW8HXiWKS5PJv2PmKyFoI6aqJZ27afwALKi6hJMPP6nG2qLPfs5w_stB2kF7bocH_h5dl_roKreawb1pPQJsDpIPWb1/s400/piedras+1.jpg" width="400" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Joaquín Reyes,<i> "Realidad a la piedra", </i>2013</div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<br />
<span style="color: #ffe599;">Las piedras -por excelencia las piedras duras-, continúan hablando a los que quieren oírlas. Hablan a cada cual un lenguaje a su medida.</span><br />
<br />
<span style="color: #f1c232;"><b>André Breton</b>, <i>La lengua de las piedras</i></span> <br />
<br />
<br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi0F5G24cVFTCx4Q0jnpZyIIFZzU1eYlSnOFcrck6IhvpSh0N93DGc9U8oJCJHoWR-grZ3KzXqhBU371ciTG2ELBHbA_IAPOJ-0yOjVhA7tG4IrSSp4FPj_IZe0H56XRj8sx-URRko_x8Oo/s1600/joaquin.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="200" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi0F5G24cVFTCx4Q0jnpZyIIFZzU1eYlSnOFcrck6IhvpSh0N93DGc9U8oJCJHoWR-grZ3KzXqhBU371ciTG2ELBHbA_IAPOJ-0yOjVhA7tG4IrSSp4FPj_IZe0H56XRj8sx-URRko_x8Oo/s200/joaquin.jpg" width="180" /></a></div>
<span style="font-size: large;">Joaquín Reyes, guionista y actor en delirantes programas televisivos como "Muchachada Nuy", "Museo Coconut" y "Viaje a Lilifor" tiene también una faceta como humorista gráfico que ha dado como resultado algunos títulos publicados entre los que encontramos <i>"Realidad a la piedra</i>", del que dejaré aquí algunas de sus viñetas. </span><br />
<span style="font-size: large;">Como dijera el ideólogo del surrealismo André Breton, las piedras -al igual que todo lo que forma parte de la naturaleza y nuestro entorno podríamos añadir- hablan a cada cual en función de la particular capacidad que tenga para
oirlas. En el caso del autor que nos ocupa, todo lo que le dicen las piedras no es captado por su sentido del oído, sino por su imaginativo sentido del humor. Es desde esa particular clave -saludable para observar la realidad del mundo y la propia de tanto en tanto- con la que Fragmentalia se despide por este año, enviando así mismo los mejores deseos para el 2016 a todos sus lectores y amigos. </span><br />
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div style="text-align: center;">
<br />
<span style="color: #f1c232;"><b><i><span style="font-size: large;">Realidad a la piedra</span></i></b></span><br />
<span style="color: #f1c232;">(selección de viñetas)</span><br />
<span style="color: #f1c232;">por</span><br />
<span style="color: #f1c232;"><span style="font-size: large;">Joaquín Reyes</span></span><br />
<br />
<br /></div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhvouhmrlgZcPc6TK82TjMBHd3HCJnze38mL4-uU9iQAt6SpXtYcS1xkAxqJd473eKztG78zV-ZoFId0MwjEbvkJzKinBzROTq4piKFTtgJIWShyEH8gjxmfg9Jb3MZziPfTSA6VpAQEbwe/s1600/piedras+2.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhvouhmrlgZcPc6TK82TjMBHd3HCJnze38mL4-uU9iQAt6SpXtYcS1xkAxqJd473eKztG78zV-ZoFId0MwjEbvkJzKinBzROTq4piKFTtgJIWShyEH8gjxmfg9Jb3MZziPfTSA6VpAQEbwe/s400/piedras+2.jpg" width="370" /></a></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg_A8v6NrYGudo5xxksdxyZh5Cp286uk3tz56vdiwGjbeSlv6_dsavtbulieQMNIj8DGk7sAWdEFDpJSi3xnc2-SdiGtP-9chZppcr8dY0BfyUKTohksVn-2meOQHGbvqVD-ZMbH5EhXjfL/s1600/piedras+3.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg_A8v6NrYGudo5xxksdxyZh5Cp286uk3tz56vdiwGjbeSlv6_dsavtbulieQMNIj8DGk7sAWdEFDpJSi3xnc2-SdiGtP-9chZppcr8dY0BfyUKTohksVn-2meOQHGbvqVD-ZMbH5EhXjfL/s400/piedras+3.jpg" width="331" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhoyGteZx3AMPaBxkh_1ZBOWIivQDt6kxjcp-ag7N7BkqaLsxMDCVuEJEjt6cpSZN9bLtFGUui7VB_l35NNU67K0LG7gO-SRQ7eImguwe0t028rhBpU8eA4e5rUXhsnupSHYiXcZqTTmiUT/s1600/piedras+5.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhoyGteZx3AMPaBxkh_1ZBOWIivQDt6kxjcp-ag7N7BkqaLsxMDCVuEJEjt6cpSZN9bLtFGUui7VB_l35NNU67K0LG7gO-SRQ7eImguwe0t028rhBpU8eA4e5rUXhsnupSHYiXcZqTTmiUT/s400/piedras+5.jpg" width="392" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgTbDuCbe_bL03MiK8-BbQhlm_yO49oEptuqMWODgIdj3pBIhtHPop7cxfjvheG0_iFPMHX4XpYzGVpNT9Z4_nDxlO9KxSZX8bY0THfQdVc_9hf977F8lySuxQtRriof11IKYHjY8Afxwqj/s1600/piedras+6.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgTbDuCbe_bL03MiK8-BbQhlm_yO49oEptuqMWODgIdj3pBIhtHPop7cxfjvheG0_iFPMHX4XpYzGVpNT9Z4_nDxlO9KxSZX8bY0THfQdVc_9hf977F8lySuxQtRriof11IKYHjY8Afxwqj/s400/piedras+6.jpg" width="400" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjuenYVavxBuoe-AWX0u65_lpiyFNX0_xFLuoUQN6goXs4zLdKxrRIL5IUyeG9poxbVu6bKtBUXk8ru5Z3KHAZD4adXmWTKA78HRFpbaIQxOFjOVs8JwSb9-ekNy4F1tGFp7ymHd0fFAOiT/s1600/piedras+7.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjuenYVavxBuoe-AWX0u65_lpiyFNX0_xFLuoUQN6goXs4zLdKxrRIL5IUyeG9poxbVu6bKtBUXk8ru5Z3KHAZD4adXmWTKA78HRFpbaIQxOFjOVs8JwSb9-ekNy4F1tGFp7ymHd0fFAOiT/s400/piedras+7.jpg" width="347" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjDaBMRoePxKUf0MhMGlpbWzg8Ap292AVSrDjgr7oDFy5MOK4IA_HBJiM1svf-7jSHjuACalTpFLtcOx_bha7fxWXgSINeaLek9OqvJ-qBGuJSib5Y24ApGQIKzsuCiJhqDUp3APdv22LPM/s1600/piedras+8.JPG" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjDaBMRoePxKUf0MhMGlpbWzg8Ap292AVSrDjgr7oDFy5MOK4IA_HBJiM1svf-7jSHjuACalTpFLtcOx_bha7fxWXgSINeaLek9OqvJ-qBGuJSib5Y24ApGQIKzsuCiJhqDUp3APdv22LPM/s400/piedras+8.JPG" width="300" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhfyM8XznrKIsGXWxDACkSIlVltvM-KFGgxSlotx1DZvtRsE_mOFDyuNKZbh_kG_C5-w80gKMQCe4twd-dirQqeXI7zcn95eErCfAYnPnmS_9f72HSdOwsflLA5hlDExUsYsbrcY2_F20pE/s1600/piedras+9.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhfyM8XznrKIsGXWxDACkSIlVltvM-KFGgxSlotx1DZvtRsE_mOFDyuNKZbh_kG_C5-w80gKMQCe4twd-dirQqeXI7zcn95eErCfAYnPnmS_9f72HSdOwsflLA5hlDExUsYsbrcY2_F20pE/s400/piedras+9.jpg" width="343" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiJ6-a2sRc3_D5YpOVMzgqIT51KCw6KaADUyf9GNDWuC592zqcQG4IXPKvY57a6zPamc8zt1z0DGHxo2tueBvla0H_SHV616cS9SsL9bjriLpTiYBYTQxVx26065TpoCa8UEa7uL5YV9ApK/s1600/piedras+10.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiJ6-a2sRc3_D5YpOVMzgqIT51KCw6KaADUyf9GNDWuC592zqcQG4IXPKvY57a6zPamc8zt1z0DGHxo2tueBvla0H_SHV616cS9SsL9bjriLpTiYBYTQxVx26065TpoCa8UEa7uL5YV9ApK/s400/piedras+10.jpg" width="367" /></a></div>
<br />
<div style="text-align: center;">
</div>
<br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjqeu85WkXPOYiMK7rnk8Zc4lFZjCdLxzYqXq4EecCAm_G5cjnfwFIaAonxIPXNbAvDV_fsQyvvRtsFZuA1jubCas2YPZ_PFjyUSW3QqRDltQWbJgUpTNNs_qY2FnhSAwuvMHJkjTsqEFfj/s1600/piedras+11.png" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="241" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjqeu85WkXPOYiMK7rnk8Zc4lFZjCdLxzYqXq4EecCAm_G5cjnfwFIaAonxIPXNbAvDV_fsQyvvRtsFZuA1jubCas2YPZ_PFjyUSW3QqRDltQWbJgUpTNNs_qY2FnhSAwuvMHJkjTsqEFfj/s400/piedras+11.png" width="400" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjZi9x51raQrxtNPIJJQ3U2EtvxVAT2_6FDDrEmW-0SRFe9xNRz5kZVw1P-8HMYIwJu83Ea3NPdaMeCvUwG2REAPxovENoluU_Vbdr0VuCibIFqwG3iz8RKug_ZINwgJzCMU0r4BlJCs01V/s1600/piedras+4.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjZi9x51raQrxtNPIJJQ3U2EtvxVAT2_6FDDrEmW-0SRFe9xNRz5kZVw1P-8HMYIwJu83Ea3NPdaMeCvUwG2REAPxovENoluU_Vbdr0VuCibIFqwG3iz8RKug_ZINwgJzCMU0r4BlJCs01V/s400/piedras+4.jpg" width="298" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div style="text-align: left;">
Lecturas: </div>
<div style="text-align: left;">
<b><br /></b></div>
<div style="text-align: left;">
<b>Joaquín Reyes</b>, <i>Realidad a la piedra</i>, Random House Mondadori 2013<br />
<br />
<br />
Entradas relacionadas:<br />
<br />
<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2011/10/hablan-las-piedras.html">Hablan las Piedras </a><br />
<br />
.<br />
<br /></div>
Janhttp://www.blogger.com/profile/10112360698804083485noreply@blogger.com6tag:blogger.com,1999:blog-4945391151380854953.post-72071883566808945212015-12-16T23:18:00.000-08:002015-12-16T23:18:23.765-08:00El poder de los sultanes<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgSpk85nUKnhy3ruk10jd1jATRoe_cTC_rWKP14E6cWbtyfjSpCdcwO0mRqv9_cKRyQQAB9NmIEOd1ODGHYidhwL-GBpaZyAciVlkwVYawjBtXSy7-TV_pZcUDNGh3Dt9nQiVzEs62XPufV/s1600/biblia+6.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgSpk85nUKnhy3ruk10jd1jATRoe_cTC_rWKP14E6cWbtyfjSpCdcwO0mRqv9_cKRyQQAB9NmIEOd1ODGHYidhwL-GBpaZyAciVlkwVYawjBtXSy7-TV_pZcUDNGh3Dt9nQiVzEs62XPufV/s1600/biblia+6.jpg" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
El sultán otomano Mehmed IV escoltado por dos jenízaros</div>
<br />
<br />
<span style="color: #ffe599;">"Eran particularmente imponentes las procesiones celebradas en ocasión de la circuncisión del joven príncipe. El muftí iba a la cabeza del desfile, sentado en un alto tabernáculo a lomos de un camello, e iba leyendo un Corán que llevaba en la mano; (...) Tras impartir sus bendiciones, hacer votos, prodigar felicitaciones y formular auspicios, el muftí descendía de lo alto de su acastillada cabalgadura para ir a colocar sus ofrendas a los pies del soberano mientras todos se postraban ante el Gran Turco, Representante de Dios en la Tierra, Sombra de Alá, Hermano del Sol y de la Luna, Rey de Reyes, Señor de las Coronas, Amo de este tiempo y Pavón del Mundo".</span><br />
<br />
<span style="color: #f1c232;"><b>Gianni Guadalupi</b>, <i>Otomanos en Palacio.</i></span><br />
<br />
<br />
<br />
<br />
<span style="font-size: large;">Un interesante y bello manuscrito del siglo XVII alojado en la Biblioteca Nacional de Austria despierta mi curiosidad bibliófila. En el se da cuenta de la tradición en la corte otomana de atribuir un origen ilustre y mítico a sus monarcas a través de tablas genealógicas, algo común en la propaganda ideológica y política tanto en realezas orientales como occidentales dirigida a legitimar su poder. La autoría del texto de esta obra titulada </span><span style="font-size: large;"><span style="font-size: small;"><span style="font-size: large;"><i>Subhat-al-ahbar</i> (árbol genealógico), es atribuida al derviche Mahûd ibn Ramadân, los retratos miniados y motivos decorativos fueron pintados por Hasan de Estambul.</span></span></span><br />
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<span style="color: #6fa8dc;"><br /></span>
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<span style="color: #6fa8dc;"><b><i><span style="font-size: large;">Mahmûd ibn Ramadân, árbol genealógico</span></i></b></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #6fa8dc;">por</span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #6fa8dc;"><span style="font-size: large;">Solveig Rumpf-Dorner</span></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="color: #6fa8dc;">(Biblioteca Nacional de Austria)</span></div>
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<table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: left; margin-right: 1em; text-align: left;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjcWDgH1vgHiPJaKTg0cKzA8AMS1qMbY1SjJ070LmMYzoSGsgRXqN4TyA_NtFm5tZOvxeVQ2l6K4yXC3_Qoeoq0BbCOjRW7rDXiou1E7ogCFg6LMFbsZjOAwN-2z2rLANqzhD6-SkZZ8iQf/s1600/biblia+5.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjcWDgH1vgHiPJaKTg0cKzA8AMS1qMbY1SjJ070LmMYzoSGsgRXqN4TyA_NtFm5tZOvxeVQ2l6K4yXC3_Qoeoq0BbCOjRW7rDXiou1E7ogCFg6LMFbsZjOAwN-2z2rLANqzhD6-SkZZ8iQf/s640/biblia+5.jpg" width="174" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><br />
<span class="UFICommentBody">Orhan, Murad I, Bayezid I y Mehmed I</span></td></tr>
</tbody></table>
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">Al igual que muchos potentados europeos de la Antigüedad, la Edad Media y la Edad Moderna, los otomanos intentaron demostrar mediante tablas genealógicas que su dinastía descendía de nobles y de renombrados señores o que tenía incluso un origen divino para fundamentar (y legitimar) así su derecho al poder. Según la leyenda, el mítico príncipe Oghuz, imperioso señor de los oguzos, descendía en línea directa de Jafet, hijo de Noé, y a su vez Ertugral, padre del primer sultán otomano y patriarca de la tribu turca, pertenecía al pueblo de los oguzos. Con ello quedaba demostrado que la casa de Osmán era de ilustre alcurnia, comparable al menos con la de otros clanes como el de los descendientes de Gengis Khan.</span></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">De esta forma surgió una larga serie de tablas genealógicas, algunas de ellas en forma de libro y otras en forma de rollo, que, partiendo de Adán y Eva, no sólo recogían el origen familiar de los sultanes turcos, sino también el de muchos otros linajes árabes, persas y turcos. Muchas de esas tablas genealógicas no están iluminadas y "sólo" presentan medallones de texto con los nombres, en su mayoría bellamente caligrafiados; otras están decoradas con miniaturas de los miembros más importantes de la familia, como es el caso de este magnífico manuscrito del siglo XVII.</span></span><br />
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">Entre los personajes protagonistas se cuentan los patriarcas y los profetas del Antiguo Testamento, así como otras figuras del Nuevo Testamento, de los que el Corán dice: "(Abraham) recibió de nosotros a Isaac y a Jacob, y ambos fueron guiados por nosotros, como antes dirigimos a Noé y a sus descendientes, a David, Salomón, Job, José, Moisés y Aarón;... y también a Zacarías, Juan, Jesús, Elías, todos ellos hombres justos... Ésta es la mano de Alá, con la que Él guía a los siervos que le agradan" (Sura 6, 85-89).</span></span><br />
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<div style="text-align: center;">
Mahoma con el rostro cubierto por un velo</div>
<span style="font-size: large;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">En este árbol genealógico otomano se recogen miniaturas y medallones con los nombres de todos esos seres "bíblicos", así como imágenes de Mahoma, el ultimo y mayor profeta del Islam, a quien se representa tradicionalmente con velo, e incluso de Alejandro Magno, héroe legendario que también está mencionado en el Corán (fol. 8r). Los textos narran las leyendas de los personajes míticos o las biografías de los personajes históricos.</span></span><br />
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<div style="text-align: center;">
Arriba Adán y Eva; debajo a la izquierda Abb al Harith, quien según la leyenda islámica era hijo suyo, y debajo de él Gayumard, patriarca de la renombrada dinastía persa. A la derecha Abel; debajo Caín. En los medallones del centro se menciona a Set y a todos los descendientes.</div>
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<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">El manuscrito sólo contiene la representación de una mujer en una miniatura de Eva (imagen de arriba). La figura de María, como se conoce en otros árboles genealógicos otomanos (Biblioteca Nacional de Austria, cod. A. F. 17), no tiene cabida aquí, si bien el códice le reserva un pequeño medallón junto a la miniatura de Jesús, con la inscripción "Jesus, el hijo de María" (imagen de abajo). Otros medallones dorados contienen los nombres de las hijas del profeta Mahoma.</span></span><br />
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<div style="text-align: center;">
A la izquierda Alejandro Magno y Jesús; a la derecha, Zacarías y Juan el Bautista</div>
<span style="color: #9fc5e8;"><br /></span>
<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">La forma de representación de las distintas figuras sigue determinados modelos de los profetas con resplandecientes nimbos dorados, Mahoma y sus descendientes directos con turbante verde, los reyes persas por lo general como guerreros con guardabrazos y armas (fol. 5r), y Caín el fratricida caracterizado como adorador del fuego. Los tipos y los atributos de los personajes "bíblicos" presentan además ciertos paralelismos con las caracterizaciones cristianas habituales: Jesús con barba, cabello largo, una sencilla túnica y un libro en las manos; Noé tiene un atril con un Corán ante sí y al fondo se ve el Arca.</span></span><br />
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<div style="text-align: center;">
Noé leyendo el Corán (fol. 5 r.)</div>
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<span style="color: #9fc5e8;"><span style="font-size: large;">Este árbol genealógico se encargó seguramente al derviche Mahmûd ibn Ramadân, quien lo dedicó al sultán Suleimán el magnífico (m. 1566). En esta copia se llega hasta el monarca Mehmet IV (derrocado en 1687). Las últimas páginas del manuscrito muestran de dos a cuatro medallones grandes cada una con retratos de sultanes otomanos, en la última hoja, escondidad a los pies del trono del sultán Mehmet IV, aparece la firma del artista: Hasan de Estambul.</span></span><br />
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<span style="font-size: large;"><span style="font-size: small;">Datos del manuscrito:</span></span><br />
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<span style="font-size: large;"><span style="font-size: small;">EXTENSIÓN: 17 hojas de papel oriental.</span></span><br />
<span style="font-size: large;"><span style="font-size: small;">TAMAÑO: 300 x 185 mm.</span></span><br />
<span style="font-size: large;"><span style="font-size: small;">ECUADERNACIÓN: turca del siglo XVII en piel de cabra marrón con medallón gofrado en oro.</span></span><br />
<span style="font-size: large;"><span style="font-size: small;">AUTOR: Mahmûd ibn Ramadán (siglo XVI)</span></span><br />
<span style="font-size: large;"><span style="font-size: small;">MATERIAS: Subhat-al-ahbar (árbol genealógico)</span></span><br />
<span style="font-size: large;"><span style="font-size: small;">IDIOMA: turco.</span></span><br />
<span style="font-size: large;"><span style="font-size: small;">MINIATURISTA: Hasan al-Istanbuli (siglo XVII).</span></span><br />
<span style="font-size: large;"><span style="font-size: small;">ORNAMENTACIÓN: títulos en viñetas, 102 miniaturas con retratos, medallones de nombres, fondo con motivos florales en dorado, orlas, motivos caligráficos, representaciones de animales y plantas a página entera.</span></span><br />
<span style="font-size: large;"><span style="font-size: small;">PROPIETARIOS ANTERIORES: el manuscrito llegó a manos del prícipe Eugenio de Saboya (1663-1736) en calidad de botín de las guerras turcas; desde 1737 está documentado en la Biblioteca de la corte.</span></span><br />
<span style="font-size: large;"><span style="font-size: small;">SIGNATURA: Viena, ÖNB, cod. A. F. 50. </span> </span><br />
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<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgUKg1Q4UnnOhH7mxAX80DUxKGGj-VOwtCQk0dFiGX_QHRBtim2ZKStvpDNdhnWs6DQnC7ADstrOOd_Yh6_xoDQTqCujazs0lG4A0AQQry9k1kjCyDAtu6FaXMldNRnog4ZRrgJVdzQrmmc/s1600/P1000924.JPG" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgUKg1Q4UnnOhH7mxAX80DUxKGGj-VOwtCQk0dFiGX_QHRBtim2ZKStvpDNdhnWs6DQnC7ADstrOOd_Yh6_xoDQTqCujazs0lG4A0AQQry9k1kjCyDAtu6FaXMldNRnog4ZRrgJVdzQrmmc/s1600/P1000924.JPG" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
Caín como adorador del fuego (detalle del Fol. 4v)</div>
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Lecturas:<br />
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Varios autores, <i>Las Bíblias más bellas</i>. Taschen 25 aniversario<br />
<br />
<b>Gianni Guadalupi</b>, <i>Otomanos en Palacio</i>, Revista FMR edición española pags. 84-96 <br />
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Otras entradas sobre manuscritos:<br />
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<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2011/11/la-hagada-de-barcelona.html">La Hagadá de Barcelona </a><br />
<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2013/06/imagenes-del-apocalipsis.html"><br /></a>
<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2013/06/imagenes-del-apocalipsis.html">Imágenes del Apocalipsis</a><br />
<br />
<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2014/01/laberintos-literarios.html">Laberintos literarios</a><br />
<br />
<a href="http://barzaj-jan.blogspot.com.es/2015/04/opicinus-de-canistris-y-la-pulsion.html">Opicinus de Calistris y la pulsión creativa</a><br />
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