Cuatro de los integrantes de Hesperion XXI. De iz. a der. Jordi Savall, Driss El Maloumi, Pedro Estevan y Dimitris Psonis.
De entre los conciertos programados por el Festival Internacional de Santander a los que he tenido el placer de asistir esta temporada, destaco el que tuvo lugar el pasado día 11 de este mes en la iglesia de San Pedro de la localidad cántabra de Tudanca, pueblo montañés cercano al lugar donde los últimos años suelo ir a veranear. Bajo el título de Del canto llano a las estampidas, el cuarteto formado por integrantes de la agrupación Hesperion XXI dirigido por Jordi Savall, ofrecieron a un público que llenaba a rebosar el bello recinto para la ocasión, un repertorio de música instrumental que sirvió para dar muestra de la riqueza y diversidad cultural del medievo europeo. Fue para mi un acontecimiento especial, pues hace ya tiempo que sigo la música que edita este grupo pero nunca antes había podido disfrutarla directamente en un escenario. Entre las piezas interpretadas se encontraban obras arabo-andaluzas, sefardíes, alguna composición de Alfonso X el Sabio, anónimos de Tradición Oriental, danza turca, entre otras ya clásicas del repertorio medieval como el Lamento de Tristán. En el programa de mano se anunciaba la participación de Jordi Savall con la Lira de arco, la viella y el rebab (a los que sumó la viola da gamba), Driss El Maloumi al laud (oud) y Pedro Esteban con la percusión, pero a última hora se sumó también Dimitri Psonis con el santur y el saz (algo que todos los espectadores agradecimos mucho con aplausos).
En unas notas del programa Jordi Savall escribe:
"Las estampidas son formas instrumentales de canción danzada que aparecen alrededor del siglo XII y que vienen a ser como la estela instrumental del canto llano vocal, aunque ya en el siglo X aparecen en el ámbito europeo las primeras representaciones de instrumentos pulsados y con arco en los manuscritos mozárabes de origen hispánico del Beato de Liébana (c. 920-930) y en diferentes manuscritos catalanes como la Biblia de Santa María de Ripoll.
En el siglo XIV se representaban ya en todas partes, como describe Juan Ruiz, el arcipreste de Hita en su famoso Libro de buen amor (c. 133o).
El mundo occidental, con la excusa de un progreso incierto, no ha sabido ni podido conservar gran cosa de su patrimonio organológico (instrumental) antiguo, aunque sí ha sabido preservar las obras más significativas de su patrimonio musical escrito gracias a la invención de la notación musical.
Cabe recordar que hasta la invención de la polifonía y la harmonía, en la Península Ibérica compartimos especialmente un lenguaje musical próximo -propio de la escritura monódica-, como consecuencia de más de siete siglos de coexistencia de las tres culturas fundamentales del mundo mediterráneo: la judía, la musulmana y la cristiana."
Desde hace más de treinta años Jordi Savall desarrolla una actividad musical como intérprete de viola da gamba y otros instrumentos de cuerda antiguos, pedagogo (algo que suele poner en práctica en sus conciertos por lo que pude ver), además de investigador y creador de nuevos proyectos, situándose en la escena internacional como uno de los principales generadores del interés actual despertado hacia la música antigua, demostrando que ésta no tiene por qué ser elitista, abriéndose a un público cada vez más joven y numeroso. Es fundador entre otras agrupaciones musicales de Hesperion XXI, nombre enraizado con Hesperia, que denominaba a las dos penínsulas más occidentales de Europa: la Itálica y la Ibérica. En griego antiguo, Hesperio significaba "originario de una de estas dos penínsulas" y también era el nombre que se daba al planeta Venus cuando aparecía de noche por Occidente.
En este vídeo vemos a Jordi Savall interpretando el mencionado Lamento de Tristán grabado en otro concierto:
El mundo occidental, con la excusa de un progreso incierto, no ha sabido ni podido conservar gran cosa de su patrimonio organológico (instrumental) antiguo, aunque sí ha sabido preservar las obras más significativas de su patrimonio musical escrito gracias a la invención de la notación musical.
Cabe recordar que hasta la invención de la polifonía y la harmonía, en la Península Ibérica compartimos especialmente un lenguaje musical próximo -propio de la escritura monódica-, como consecuencia de más de siete siglos de coexistencia de las tres culturas fundamentales del mundo mediterráneo: la judía, la musulmana y la cristiana."
Desde hace más de treinta años Jordi Savall desarrolla una actividad musical como intérprete de viola da gamba y otros instrumentos de cuerda antiguos, pedagogo (algo que suele poner en práctica en sus conciertos por lo que pude ver), además de investigador y creador de nuevos proyectos, situándose en la escena internacional como uno de los principales generadores del interés actual despertado hacia la música antigua, demostrando que ésta no tiene por qué ser elitista, abriéndose a un público cada vez más joven y numeroso. Es fundador entre otras agrupaciones musicales de Hesperion XXI, nombre enraizado con Hesperia, que denominaba a las dos penínsulas más occidentales de Europa: la Itálica y la Ibérica. En griego antiguo, Hesperio significaba "originario de una de estas dos penínsulas" y también era el nombre que se daba al planeta Venus cuando aparecía de noche por Occidente.
En este vídeo vemos a Jordi Savall interpretando el mencionado Lamento de Tristán grabado en otro concierto:
Y en este otro una grabación realizada en el Monasterio de Santes Creus de Tarragona en el año 2007 con algunos de los temas que aparecen en el disco Estampies & Danses Royales editado por Alia Vox. Una delicia, para dejarse enamorar... Espero que la disfrutéis:
http://www.youtube.com/watch?v=uqEEKp-bGyE
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Querido Jan, con esta entrada tu sitio ha terminado de embelesarme por completo. Por la música medieval, por la dulzura con la que lo narras, por los intérpretes que elegiste y por el lugar en el que sitúas esta pasión tuya: mi querida Cantabria. Allí nací y allí he estado estos días, escondida en mis montes de hayas y helechos,
ResponderEliminarUn abrazo.
Preciosa y acogedora tu tierra de origen, Iconos, en la que he hecho muchos amigos y de la que me siento un poco hijo adoptivo desde que la conocí hace ahora diez años, convirtiéndose en el lugar al que regreso todos los meses de agosto como mínimo un par de semanas. De las primeras cosas que hago cuando llego es ir a Comillas a informarme de los ciclos de conciertos. Este año ha sido de forma especial generoso con la música medieval. El ciclo "El cantar de las Culturas" programó actuaciones de grupos de primer nivel dentro del género. En la entrada hablo de Hesperión XXI en Tudanca, pero también son merecedores de los mejores elogios entre otros, agrupaciones reconocidas internacionálmente como Ensemble Organum que pusieron en escena una liturgia eucarística mozárabe, o Alia Mvsica que ofrecieron un concierto titulado "El alma lastimada. Mistica y música en la liturgia judeoespañola". En todos ellos se mostró un ánimo pedagógico muy de agradecer por los interesados en la cultura de la Edad Media. Estos y otros conciertos tuvieron como marco los bellos pueblos del idílico Valle del Nansa y Peñarrubia.
ResponderEliminar¿Así que has estado por allí? Quien sabe, a lo mejor nos cruzamos en alguna carretera !!
Siempre un placer encontrarte por aquí apreciada amiga.
Otro fuerte abrazo !
Jolín, por lo visto andabamos todos por las mismas carreteras. También nosotros por poco nos cruzamos.
ResponderEliminarJusto esos dias hicimos ruta por la Transmiera hasta Arija disfrutando del románico y del no tan románico. Por cierto, Arija es un lugar maravilloso, me encanto.
Y en cuanto a la musica Hespèrion, otra maravilla.
Tons
*
Todos cerquita... Ya decía yo que se respiraba una muy buena atmósfera! En octubre regresaré. Imposible perderme el otoño de sus bosques.
ResponderEliminarAbrazos!
Tú también por tierras cántabras Baruk? El románico por allí es excelente como ya sabes, y también lo "no tan románico" tal como dices. Ahora me viene a la cabeza por ejemplo el lechazo, el chuletón de ternera, el cocido montañés, los sobaos pasiegos, por decir algo...
ResponderEliminarQué suerte Iconos perderte en otoño por aquellos bosques. Yo hasta el próximo agosto no vuelvo, y una de las cosas que más disfruto es de la cercanía del litoral y de sus estupendas playas. También hago escapadas a los bosques de robles centenarios como los que se encuentran en el Parque Natural del Saja-Besaya. Cantabria tiene mucha magia!
Un abrazo a las dos, y si en alguna ocasión se produce un encuentro "magico" por allí (que he tenido unos cuantos con conocidos), será toda una alegría.
Y besos.
Una familia llena de gracia la Savall-Figueras. Se te agradece especialmente el enlace al Lamento de Tristán, donde el corazón cruje ronco. Una belleza.
ResponderEliminarSe os lee contentos de vuestros estíos y desde este lado se desea que esa sensación beatífica perdure.
No pierdo tu pista, Jan. Tu blog sigue siendo lectura nutritiva y honesta.
Un abrazo redondo como el laberinto de Chartres que estoy viendo mientras escribo el comentario.
Veda
Hola Veda,
ResponderEliminarse te echaba en falta por aquí, donde siempre es un honor recibir tu generosa sensibilidad y tus bellas palabras. Esta, tu casa, se felicita por el nuevo encuentro.
Sí que es cierto que la familia Savall-Figueras parece favorecida por la gracia. El padre la madre y la hija son grandes artistas. En el concierto también se habría agradecido la presencia de Montserrat Figueras, aportando la voz capaz de llevar las emociones a una dimensión que los instrumentos musicales quizá no llegan a alcanzar.
Gracias por tus deseos hacia los que aquí nos hemos reunido y hablado de nuestra coincidencia estival por el norte. Te envío los mejores para ti, a ese lado, el sur al que me une el arraigo familiar y al que también hay innumerables motivos para viajar.
Permíteme compartir unos versos que se cantaron en otro de los conciertos del ciclo a los que asistí, el que ofreció Alia Mvsica, pertenecientes a un canto festivo judío:
"Es un día honrado, es un día de goces,
pan y buen vino, carne y pescados,
los que en él están de luto se retirarán (del luto)
porque es un día de alegría y me alegraré".
Y con los que celebro este reencuentro con los amigos.
Otro redondo abrazo !
Jan
Cuando la noche se pone íntima, como decía el poeta (Federico), tengo la certeza de que siempre seré nómada. Así, en este caminar contínuo sin casa enraizada, el acogimiento de otras almas dan calor y alegría.
ResponderEliminarMuchas gracias por esos versos, que deseo proféticos para mí misma.
Hace algunas semanas en Cádiz se hizo un pequeño homenaje a Hannah Arendt. Todo el que quiso entró, bailó y se regocijó. Hubo música africana, hubo música hebrea, hubo un deseo de recuperar la identidad propia en la plaza pública.
Generoso anfitrión, déjame también compartir un poco:
http://www.youtube.com/watch?v=7C7o7AKWIf0&playnext=1&list=PL3ADCCEB9790A985F
Hasta tu próxima entrada!
Veda
Gracias Veda por compartir ese precioso tema.
ResponderEliminarSeguro que debisteis liar una buena en la toma de esa plaza pública. Que se repitan siempre con una alegre finalidad.
Hasta pronto !
Buscando un comentario sobre la actuación de Savall en San Pedro de Tudanca (qué íntimo fue) he llegado a este blog. Me parece muy trabajado, riguroso e inspirado, muchas felicidades. Yo también tengo uno sobre música,
ResponderEliminarhttp://paraenmusicarte.blogspot.com.es/
Espero que le guste, un saludo, y otra vez felicidades...
Hola Isabel,
ResponderEliminarme hace mucha ilusión que comente alguien que estuvo en el concierto de Tudanca. Soy un simple aficionado a quien le gusta la buena música, como la que he tenido ocasión de disfrutar en algunas de las propuestas programadas en los últimos años por el Festival Internacional de Santander. El próximo mes de agosto así espero volver a hacerlo, y quien sabe, a lo mejor también coincidimos en alguna otra actuación !
Muy amable por pasar y dejar un comentario. Pasaré a conocer tu blog sobre música. Te mando un abrazo!